Jan 25, 2023 Sep 11, 2022 May 23, 2021 May 14, 2020 Apr 27, 2020 Apr 26, 2020 Apr 09, 2020 Mar 29, 2020 Mar 01, 2020 Feb 28, 2020 Nov 19, 2019 Oct 15, 2019 Oct 12, 2019 Sep 23, 2019 Sep 18, 2019 Apr 13, 2019 Oct 29, 2018 Oct 19, 2018 Oct 18, 2018 << Inicio < Ant.
[1]
2
3
4
5
6
...
128
Próx. >
Fin >> |
Las lejanas montañas te ocultan de mí,Mientras se me enciman las cercanasSi yo tuviera un pesado martilloPara aplastar las montañas cercanas.Si yo tuviera alas como un pájaroPara volar sobre aquellas más lejanas. Hubo algún tiempo escondidoen la memoria infinitadonde una mujer bonitainauguró nuestro ombligocoronada de sentidonos hizo saber amadosniño suyo y deseadonos llamó con nombre nuevopero rompimos el huevoy quedamos desmadrados. He decidido callar. No por miedo a la palabra, sino por amor al silencio. Intenté las letras para elevar las alturas o para hundir el abismo. Pero nunca mi vuelo superó la superficie. A nadie debiera importar que en el intento gasté las alas que no tengo. Pero hay tantas cosas que no importan, y siguen siendo hermosas. Estoy en paz conmigo, no me vas a extrañar. No me recuerdes, ni siquiera un poco, porque el olvido es sabio y en ese territorio la vida es más fácil. Cuídate mucho… y te ordeno implacablemente que seas feliz. Por si te interesa, me dedicaré a la poesía del futuro, esa a la que nunca me atreví. Es demasiado intensa mi derrota actual, necesito un escape, una coartada, una tabla de salvación que todavía no tengo. Todo lo que pueda escribir, no lo entenderá la gente de este curioso año del dos mil diez. ¿para qué publicar entonces?.... Y no olvides, tu único deber vital, es olvidarme. Una puerta se clausuró ya para siempre. Acaso la puerta, igual que yo, nunca existió. Tenía el corazón alegre. Como si terminara de besar al mismo Dios en la boca. Como si le hubiese sido dado presenciar el Big Bang sin quemarse con el fueguito el dedo. Como si hubiese escuchado que el Papa remataría las opulentas antiguallas y las donase todas a los pobres del mundo. Como si acabase de escuchar que Estados Unidos inicia su propio desarme. Tenía el corazón alegre. Como si ella existiera, como si ella lo amara, y sin embargo, estaba solo, solo, solo…. y lo único que tenía, era el corazón alegre, en un mundo triste, demasiado triste y demasiado distinto… a su corazón alegre. Nadie lo sabe en tus ojos oscuros vive mi luz Siento nacer cuando me miras fuerte un no se qué Quiero vivir tu mirada de mar naufragio azul Quiero sumergirme de nuevo en el mismo río, y seguir siendo yo mismo. Y el río también. Saber que las aguas que corren, aparentemente se escapan, pero quedan para siempre en mi. Renuncio a la superstición del tiempo, al ultraje del movimiento, al sabor amargo de aquello que se va. Hubo un niño llamado Heráclito que no nació. Y otro, Parménides, detestó la Filosofía. Yo soy Parménides, el otro, un impostor. Algunos poetas, se han resignado pronto, a no ser nada. Denominan poemas, a sus escaramuzas sin alma, sin enemigos a la vista, sin aliados de acero. Coquetean con las palabras, que otros les inventaron. Y se sienten contentos, como peces en su charco. Cuando dicen…”jazmín”… no estalla en sus almas, ni el blanco aroma, ni el misterio hondo, ni la soledad en calma. Dicen “jazmín” como dicen veneno, suegra, tirano o espantapájaros. No se crea que los estoy juzgando, que soy un buen cristiano, prefiero, simplemente, matarlos.- Ellos ignoran la torpeza esencial que tiene toda palabra. Y la nombran en vano, y consideran una hazaña el maltrato. No se dan cuenta que la misión del poeta, es precisamente, conjurar esa torpeza y volverla comida para los que tienen hambre. No se nombra la voz “revolución”, simplemente, a la revolución se la hace, sabiendo que ella comienza, exactamente, cuando comienza a pronunciarse. Algunos poetas no saben el arma que lleva el lenguaje, y yo soy uno más de algunos, soy el que no sabe. Por eso amigos, me voy, me llega el turno, de matarme. No tatúo burbujas de jabón para que se pierdan en el cielo en un instante. Escribo poemas livianos para conmover a la niña que en las orillas habita. Es la niña de tus ojos, que me leen, con lupa genial mi arrebato genital. ( y nunca rozo siquiera tu mejilla) Es la convicción mía que escribo creyendo que escribo con mis ojos en el telescopio. (y nunca descubro cráteres en la luna) Ya me perdí. No sé que cosa debía decir. No sé que cosa, era el poema que quería y no salió. No sé que cosa, en el universo… se desvaneció. GloriaGloria a Dios que es el amory en la tierra paz a los hombresque luchan por la justicia.Te alabamos,porque luchamos para que nuestros niñoshambrientos coman.Te glorificamos,porque queremos destruir yalos instrumentos de tortura.Te damos gracias,porque hay hombres que dan su vidaen la revolución.Te damos gracias Señor,porque no sos un Dios espectador,sino un Dios hecho hombreque padece el padecimiento de los hombres.Te damos gracias Señor,Tú que nos arrancas del egoísmoimpulsándonos a luchar contra la explotación,ten piedad de nosotros.Tú que estás con el padreviviendo la plenitud del amor,ten piedad de nosotros.Tú que estás donde vamos a estar todos,ten piedad de nosotros.Señor Dios, cordero de Dios,que sigues desangrándote,en los hacheros de Norte,desangrándote.En los mineros Bolivianos,desangrándote.En las favelas del morro,desangrándote.En el frío de los pobres,desangrándote.La carne del torturado,desangrándote.Señor.Porque Tú solo eres el Santo;Señor.Tú solo eres el amor.Señor.Tú sólo el totalmente otro.El que rescata para siempre la creatividadhumana.En unión con el padrefuente de la vida, de la energía, del amor.Amén, para siempre, Amén.CredoViva Dios,que crea al hombre creador.Viva Dios,que todo lo hizo bien.Y viva Jesús, su único hijonuestro hermano y Señor,que fue concebidopor obra y gracia del Espíritu Santo.La humilde María, lo parió en un establo.Padeció mucho bajo Poncio Pilatosporque su causa era la de los pobres.Lo clavaron en una cruzy murió con la muerte de los bandidosy bajó a lo hondo del hombre.Resucitó,volvió a la viday se puso la piel del hombre nuevo.Resucitó,subió a la viday está junto al padre que todo lo puedeporque es el amor.Volverá,y todos los hombres se presentarán ante él,y al atardecer de la vida, serán juzgados en el amor.Creo en el Espíritu Santoque es la fuerza de Dios, el amor de Cristo,la inspiración creadora.Creo en la iglesia de todos,Que es santa porque es de Dios.En la comunión de los hombresque hacen la verdad porque aman.Creo en el perdón de los pecados.Creo en el perdón de los insensibles,de los tibios y prudentes.Creo en perdón de los indiferentes,de los que traicionan el amor.Creo en el surgimientodel hombre nuevo,del hombre lleno de Dios.Creo en la expansión de la vida plena...Para siempre, amén. "Ya que van a arder eternamente en el infierno... ¿por qué nos privan del deleite de verlos arder unos instantes en la hoguera de la tierra? dice.... In Péctore... el Obispo. Resulta en el tema del matrimonio igualitario, que los jerarcas católicos, sólo en este tema pasan a ser… “ilegales”, “contraculturales”, “pasan a la clandestinidad, pero abierta”… Ya está en vigencia la ley. Los jerarcas católicos argentinos, esta vez, siguen opuestos, con los tapones de punta, en contra de la ley.- Siempre obedecieron todas las leyes, siempre fueron “buenos ciudadanos”, además de ser jerarcas de la monarquía católica, claro. No se opusieron, ¡al contrario!, a la obediencia debida, al punto final, al indulto. No se opusieron, ¡al contrario! a la modita esa de “achicar el Estado”… privatización de empresas que dejaron de dar de comer a tantos y tantas. En eso eran … “legales”… Ahora… que la ley reconoce una realidad anterior a la ley, ahora… que la ley amplía derechos sin quitarle derechos a nadie…, ahora que el Estado legitima el amor entre dos hombres, o entre dos mujeres… precisamente ahora… ellos, siguen “ciegos” al signo de los tiempos, pero no están para nada “mudos” como lo estuvieron antes. Discurren, provocan, convocan, atizan las brasas del fuego donde quieren que ardan, como antes, los inocentes, que esta vez, son los homosexuales que se atreven a vivir en pareja… estable, legal. Si tuvieran el poder que antes tuvieron… ¡ay! … salvarían las almas de los homosexuales, varones y mujeres, en una inmensa y espléndida “hoguera”. Pero no pueden. Se conforman con discurrir, provocar, convocar…. y … salpicar con la lengua, la ausencia del fuego… ¡chicos obispos… podéis maldecir la ley, pero… no podéis prenderle fuego a los homosexuales! la historia, a pesar de todo… es inexorable… ¡terminó la edad media! ¿será un ardid del maligno? Hay un poeta que no es de piedra ni de aire, se llama cemento como sólido material de ciudades nuevas otros se ofenden, no es amable al extremo, ni demasiado cordial, ni excesivamente cariñoso en sus comentarios cemento, para ser exacto, es cemento con algo de él, anhelaría construirme una casa. Donde se pueda leer poesía de la buena, donde se critique sin temor a herirle el ego a alguien, donde cada uno diga lo suyo, pudiendo decirlo cada vez mejor, en fin, donde vivan los poetas. También, los que son distintos a él. Creyente Yo creo en Dios verdadero autor de todos los bienes y creo al hombre conviene con su corazón sincero entregarse por entero al Señor que lo ama tanto dejando en Él los quebrantos y gozando de su amor como hijos del mismo Diosconvertirnos en sus santos! Ateo No encuentro que exista un dios ni refugio para el pobre cuando necesita un cobre otros le inventan un sol que en realidad no brilló bien pintado de colores hace olvidar los dolores opio para la poblada que siempre sigue explotada con aquellos falsos dioses Creyente Se puede ganar lo mismo la libertad que añoramos si nos sentimos hermanos hijos del amor divino que hay en el mundo cretinos es algo que bien sabemos pero confiamos con celo derrotar al enemigo armados de fe y cariño ¡implorándolo a los cielos! Ateo No me venga con mentiras de algún amigo invisible para mi es un inservible su dios de mucha pamplina que se inventan moralinas en su nombre, por desgracia cruzadas y gran falacia contra las artes y ciencias y llenaron de violencia ¡el papado es toda mafia! Creyente Verdadera es su denuncia de tanto crimen horrible pero aplique su calibre a quienes a Dios pronuncian sin vivir como lo anuncian la virtud del Padre Bueno otros santos consiguieron transmitir a Cristo cierto resucitado de muertos ¡y nos guía desde el cielo! Sabemos que algo saboreamos otro reino cuyo rey es un esclavo, clavado, para mi. Que el mundo está mareado, indefectible, ¿acaso la tierra no gira sobre si misma, según dicen, y yo la veo quieta? Vocación de ignorancia en nuestra mirada quizás por eso no te miré en el cuerpo roto por la injusticia, en el cuerpo de los oprimidos y te dejé allí sin liberarte otro cristo que yo no resucité. Barro sin espíritu, humano sin divinidad, titilar sin estrella fui yo… para mi hermano Dios, que quedó esclavo, clavado como si no existiera yo. Nadie murmuró su nombre cuando el amanecer le dolía en la mirada. Un sol desangrado, como siempre mordía su pupila. En el recuerdo oscuro del paraíso el cuello de una mujer lo invitaba al beso. Aquel paraíso rojo que la piel esconde en torrentes de gota a gota. El cuello de una mujer crece en su deseo en sus dientes y en su alma que nunca muere, como Yo. No te engañes. Adorarás este poema. No te engañes. Trae un símbolo distinto una atroz diferencia bella. Hay mil lobos violando en la arena el reflejo de la luna ebria. Borracha de poesía, vuélvete luna por un instante. Soy los mil lobos de tu deseo. Me voy conmigo a otra parteya no me asusta ni menos me asisteel no ser … con su nada y su tampocome voy conmigo a otra parte que no es parte, es todoy todo reclama que el ser es ser y el no ser es impensableme voy conmigo a otra parte es como decir que siempre estoy llegandono me rectan tus curvasni mi aguijón socaba tu hendidurate he querido como quiere al alba el sol primero del díay me pagas así , tan noche, tan noche oscura, que enciendo un fósforopara quemarte! y me pregunto… ¿para qué amarte? Ella era mariposa alguna noche oscura jugaba entre rosas vestida de hermosura como una buena diosa su religión muy dura conjuraba en las cosas su escondida ternura lanzaba presurosa su honda divinura rompiendo la tramposa soberana cordura y en sed maravillosa bebía mi estatura sonriéndome jocosa en todas mis locuras. Las cinco palabras: botija, carburador, veneno, veteado y vertir.Aportadas para el desafío por Marcelo Sosa Guridi. El alma poética Tu alma no cabe en la botija estrecha del psicoanálisis. En tu mente estás carburando ¿cómo cambiar el mundo, si el mismo cambio, en mi mente no encaja? Sé que han vertido veneno en algún rincón tuyo que ni te importa ni sabes. Lo has transmutado en combustible para tu vuelo de ave para tu fuego inapagable. Me maravillo del color de tu alma, a veces negro, a veces dorado, así, veteado. Y en esa veta indagaré hasta que sea mío… nuestro… de todos… el oro de la poesía, que estás horadando. De alguna herida antigua, cuyo nombre no se nació esta flor distinta. No cabe en ningún jardín, pero es pequeña como la fe. Afirmo que nadie la amó jamás, pero toda afirmación es siempre sospechosa. Existe esta flor, cuyas pruebas no tengo o acaso, alguna vez destruí. Se que cuando la ilumina el sol, se torna oscura como el dolor. Y se enciende en la noche, como última esperanza en el pensamiento suicida. De ser ciertos mis dichos, este poema torpe transmitirá… su aroma, su forma exacta, su color Y serás testigo. Testigo de una flor. Nadie lo sabeen tus ojos oscurosvive mi luz Siento nacercuando me miras fuerteun no se qué Quiero vivirtu mirada de marnaufragio azul Una flor sin coroladescarnada y solaextraña la vida un vuelo sin alasabstracta llamaemula pájaros instante sin tiempopleno y fecundosueña el poema Hubo un hecho cruel, en extremo repudiable que yo perpetré, y me fue en vida perdonado. Abandoné a un amigo, cuando más me necesitaba y lo dejé muy solitario, en la cama solitaria de un hospital. Él estaba solo de soledad absoluta yo acompañado, quizás sin saberlo, de la sombra invertida de su soledad. Después de curarse, me perdonó con una sonrisa imborrable yo todavía, quizás, no logro perdonarme. Y los dientes que su risa buena me mostró aún se clavan en mi alma, ruin y malvada. Esa herida, que me causo, sigo siendo yo. El niño hace preguntas cortas, que los mayores no contestan, con sus respuestas largas. ¿qué había antes de que hubiera algo? ¿por qué existe algo y no la nada? ¿quién inventó la muerte? ¿qué hay del otro lado de la vida? algunos niños, de noventa años, ya saben que no saben, y cuestionan su no saber como quien está pariendo un monstruo lúcido o un dios borracho. Ya no quiero escribir palabras de fuego sobre aguas heridas. Confieso no ser poeta sino un aprendiz de todo, conocedor de nada. Confieso haber estado tanto tiempo condenado a la mentira exiliado de la belleza desterrado de la poesía. Soy tan imposible como la idea de Dios, en la mente humana. ya no quiero escribir que no puedo escribir y lo sigo haciendo el naufrago soy de un mar que no existe y sin embargo sigo escribiendo y me he salvado, sin darme cuenta. Ya no te regalo la alegría de volar sobre los árboles y arrancarle de un beso la virginidad a la luna. El diablo se ha suicidado y en sus palabras últimas, dijo tu nombre, de mar anclado en una gota que resbala. Yo te quería con el amor de los cornudos, con la soledad de los pajeros, con los atavismos de pueblos olvidados. Te quise como el perdedor único en una noche derrotada. Soy como los ningunos, como un eterno conspirador de la desgracia. Pero te quise, y eso fue bastante. ¿qué importa que mi amor no pueda? Esto que soy, después de todo, es lo que adoras: ¡la nada! Yo no sé por qué, Buenos Aires quiere, que la ame tanto. Confieso que me convocan, ciertas carnes humanas, que fatigan sus calles. Pero más se enciende mi deseo, en el alma de la ciudad. La siento como un tango mudo, que solo yo escuchase. Toda la bronca y la nostalgia, convertidas en música libertaria. Hay una revolución dormida, que despertará inexorable. Y el mundo no será igual, cuando se sacuda la bosta, los políticos mentirosos, los empresarios ladrones, los artistas comerciantes, esa ciudad que es mi esperanza, Buenos Aires. Nadie olvidará, la falta de lo necesario en los inocentes, ni la falta de vergüenza de los culpables. Todo eso ocurrirá cuando se cumpla su nombre y sean buenos los aires. Y vuelvas a ser, ciudad, hermana de tus hermanos, los oprimidos del mundo, que te necesitan y aman. Yo batía el azúcar dentro de la taza como quien está buscando en el fondo oscuro la palabra Apreté los dientes dentro de la boca como quien no la encuentra todavía la palabra Y me quedé callado con un silencio distinto a todos los silencios y te fuiste como si nada, te fuiste y me dolió mucho sobre todo pagar los dos cafés, yo solo, solito…solo. Una vez fui niño, en una casa sin biblioteca cuando no existía Internet. Entonces se encendía mi abuela justo en el momento en que se apagaba el sol. Con palabras idénticas a la noche anterior, mi abuela contaba el cuento de Genoveva del Brabante, y el de Guarino, tu propio nombre Mezquino, y cada noche, el cuento igual, era distinto. Entonces no sabía por qué, ahora tampoco. Pero estoy en condiciones de afirmar que en mi mente infantil Genoveva era una noche una santa, otra una malvada y otras… era simplemente, mi mujer. Guarino, curiosamente, también. El registro civil te ha dado, un nombre de hombreel registro civil te ha condenadomujer sin nombreno crecen tus pechos como las otras muchachasni hay hueco en tu piernadonde penetre el deseo de los machoste humillaron vistiéndote con un sleep o boxermujer hermosa, cuya ropa interior, te viste el almay la naturaleza te niega un hijo en tus entrañasy la sociedad te dice hombre, ¡oh mujer!, en cuerpo equivocado¿adónde irás a mostrar la delicia de tus uñas pintadas?y… ¿por qué el ropero es cada vez más estrecho, y más amplio tu anhelo de cruzar la calle?No grites ni calles. Habla pausada, sobre tus sueños que son también, derechosni de plantas ni de animales, de humanos iguales.Y tu deseo de pájaro imposible alzándose del fuegoquemará el cielo falso, y haremos de la tierra, el cielo verdadero.Serás una diosa, no dudes de ello. Y el registro civil, te inscribirá mujerreina mía, de una estirpe por largos siglos, ignorada. La pobreza ya afecta a 115 millones de personas de los 27 países de la Unión Europea, o sea, casi el 25 % de su población, y amenaza a otros 150 millones de habitantes. En España la tasa de desempleo llega al 22.8 %. Grecia e Italia se encuentran bajo intervención blanca, gobernados por primeros ministros escogidos por el FMI. Irlanda y Portugal están insolventes. En Bélgica y en el Reino Unido las manifestaciones callejeras confirman que “se acabó la fiesta”.| FREI BETTO.*
Ahora el Banco Central de la Unión Europea quiere nombrar para cada país en crisis un interventor para controlar el presupuesto. Es la oficialización de la dictadura económica. El Reino Unido y la República Checa votaron en contra. Pero los demás 25 países lo aprobaron. Queda por saber si Grecia, el primero en la lista de la dictadura económica, va a aceptar abrir la mano de su soberanía y entregar sus cuentas a un control externo.
La actual crisis internacional es mucho más profunda. No se resume en la turbulencia financiera. Está en crisis un paradigma civilizatorio centrado en la creencia de que puede haber crecimiento económico ilimitado en un planeta de recursos infinitos… Dicho paradigma identifica felicidad con riqueza, bienestar con acumulación de bienes materiales, progreso con consumismo. Todas las dimensiones de la vida —la nuestra y la del planeta— sufren hoy un acelerado proceso de mercantilización. El capitalismo es el reino del deseo infinito atascado en la paradoja de establecerse en un planeta finito, con recursos naturales limitados y una restringida capacidad poblacional.
La lógica de la acumulación es más autoritaria que todos los sistemas dictatoriales conocidos a lo largo de la historia, pues ignora la diversidad cultural, la biodiversidad, y comete el grave error de dividir la humanidad entre los que tienen acceso a los últimos avances de la tecnociencia, en especial de la biotecnología y la nanotecnología, y los que no lo tienen. De ahí su aspecto más nefasto: la acumulación o posesión de la riqueza en manos de unos pocos se hace posible gracias a la desposesión y exclusión de muchos.
La cuestión no es saber si el capitalismo saldrá o no de la enfermería de Davos en condiciones de sobrevivencia, aunque se vea obligado a tomar medicinas cada vez más amargas, como suprimir la democracia y cambiar el voto popular por las agencias de verificación económica, y los políticos por ejecutivos financieros, como sucede ahora en Grecia y en Italia. La cuestión es saber si la humanidad, como civilización, sobrevivirá al colapso de un sistema que asocia ciudadanía con posesiones y civilización con paradigma consumista anglosajón.
Estamos en vísperas de Rio+20. Y nadie desconoce que esta casa que habitamos —el planeta Tierra— sufre alteraciones climáticas sorprendentes. Hace frío en verano y calor en invierno. Las aguas están contaminadas, los bosques devastados, los alimentos envenenados por agrotóxicos y pesticidas. El resultado: sequías, inundaciones, pérdida de la diversidad genética, suelos desertificados… Hay consenso entre la comunidad científica de que el efecto estufa, y por tanto el calentamiento global, es consecuencia de la acción deletérea del ser humano.
Todos los esfuerzos para proteger la vida en el planeta han fracasado hasta ahora. En Durban (Sudáfrica), en diciembre del 2011, lo máximo que se pudo avanzar fue la creación de un grupo de trabajo para negociar un nuevo acuerdo de reducción del efecto estufa… ¡para ser aprobado en el 2015 y puesto en práctica en el 2020! El Departamento de Energía de los EE.UU. calculó que, en el 2010, fueron emitidas 564 millones de toneladas de gases de calentamiento global, o sea, un 6% más que el año anterior.
¿Por qué no se consigue avanzar? Pues porque lo impide la lógica mercantil. Basta decir que los países del G-8 proponen, no salvar la vida humana y la del planeta, sino crear un mercado internacional de carbono o energía sucia, de modo que los países desarrollados puedan comprar cuotas de polución no aprovechadas por los países pobres o en desarrollo.
¿Y qué dice la ONU? Nada, porque no consigue librarse de la prisión ideológica de la lógica del mercado. Propone, por tanto, a Rio+20 una falacia llamada “Economía Verde”. Cree que la salida reside en mecanismos de mercado y soluciones tecnológicas, sin alterar las relaciones de poder, sin reducir la desigualdad social ni crear un mundo ambientalmente sustentable en el que todos tengan derecho al bienestar.
Los dueños y grandes beneficiarios del sistema capitalista -el 10 % de la población mundial- acaparan el 84 % de la riqueza global y mantienen el dogma de la inmaculada concepción de que basta con limar los dientes al tiburón para que deje de ser agresivo…
La intuyo mujer suelta en mundo prisionero. Y no quiero nombrarla porque el nombre es una señal de propiedad que sobre los hijos inventan sus padres. (El nombre de las personas es marca de hierro candente que sobre vacas y caballos imprimen sus dueños) Ella no es como todas y todos. Ella es novilla sin amos, yegua de ninguno. (La comparación no es degradante, porque ya se sabe que los animales son superiores, nunca arrojaron la bomba atómica sobre Hiroshima) Se trata simplemente de una mujer libre en un mundo cautivo y yo quiero encadenar esa mujer a este poema, para liberar el mundo. Nadie le ponga un nombre. Que los nombres quedan prohibidos. Porque el destino de esa mujer, quiero que ande suelto, aunque se llame Cristina. No me duelas mi esperanza de mirarme algún poema que te conjure las penas y te alcance la bonanza la estrella curiosa danza en noche salvaje bella ¡tu puedes danzar con ella! si este verso te alcanza Si sales de tu coraza y te olvidas de querellas tu cara será risueña y el corazón se te ensancha Léeme con mucha gana porque mis letras son buenas para arrancarte completas las amarguras del alma Había algo que quiso Dios crear y se olvidó algo más inmenso que el mar y más tenue que una hoja de otoño al caer. Era algo entre la mujer y la muerte, con todo el encanto de aquella, con toda la ferocidad de ésta. O viceversa. Algo, que quiso Dios crear, y ahora lo recuerda alegre, a través de los poetas. Solicité a Verano Brisas que leyera dos intentos poéticos míos. Con alegría y asombro, recibí un mensaje privado suyo, y como verán, me autorizó a publicarlo, si yo quería. No es muy frecuente recibir ... en pocas palabras, opiniones claras y sinceras. Se comparta o no su apreciación, me parece útil ponerla a disposición de los amigos textaleros. Las reproduzco textualmente: Apreciado Eduardo: Leí los dos poemas y preferí comentártelos por este medio, y no en público. Claro que si deseas estos comentarios en el portal, basta que los tomes de aquí, pues no tengo objeción. Me parece que no están mal hechos y tienen cierta gracia, pero conozco tus capacidades y espero más de ti. Te sales demasiado fácilmente del asunto y no los desarrollas hasta el final. Quizás si los dejas reposar un tiempo, puedes luego reeditarlos, cuando encuentres la manera de trabajarlos mejor, y parte sin novedad. Muchos textos tardan años para que se den por terminados, y así como algunos salen de un tirón y quedan excelentes, otros necesitan mucho trabajo para corregirlos. Nunca te afanes demasiado cuando estés creando, porque el artista no trabaja contra el tiempo sino para él. Una sugerencia con amistad y respeto: Jamás te engolosines con las alabanzas, pues aunque algunas son de buena fe, otras llevan la adulación y el veneno en sus entrañas. Eso sin contar con la ignorancia generalizada en la mayoría de las personas, y una superficialidad y ligereza que dan tristeza. Suerte y pulso, querido Eduardo. Un abrazo de Verano. En una evaluación de conocimientos generales, se le preguntó a los alumnos, ¿quién es Ángela Merkel? y uno contestó: "la esposa actual de Hitler". Yo nunca supe si el alumno era demasiado bruto o demasiado inteligente. La historia de nuestros días lo dirá. Yo quiero que la vieja europa, esclavista, imperial y violenta... irrevocablemente muera. Pero quiero que se salven los europeos inocentes, no los otros. ¿sucederá al derecho, es decir, por izquierda, o será al revés, es decir, por derecha? Quiero rezar, pero no en latín, en español, mejor dicho, quisiera rezar en Huarpe pero no sé el idioma. A los huarpes los mataron a todos, los europeos, de España. Antes, les dieron una bendición en latín. Dios perdona, la historia no. He muerto balcón, mujer, por decisión arquitectónica tuya, por el egoísmo, exquisito y atroz, de tu delirio, que negó la calentura, por el afán de riquezas. En ese lugar extraño que me construiste miro la calle, desde lo alto, vacía y a mi espalda, el resto de tu casa, con vos y tu flamante marido. Intuyo un sótano, tuyo, tuyo, que me dice que nunca serás mía mía. Sótano que acaso contenga una llave, de alguna puerta olvidada de nuestra lujuria. Y ni hablar de tu cocina intacta, donde nunca freiremos huevos juntos. Ni del baño, donde no te puedo espiar por la cerradura, cuando llueve oro desde tu cueva. No soy tan serio, para mencionar tu alcoba, donde sábanas limpias, ¡qué asco! son la mortaja exacta de tu deseo, y el babero breve, de tu dueño. Mujer, mujer, pobre mujer, desamparada para siempre de mi infierno, viviendo en el paraíso de ese banquero. Mujer alhaja, mujer desempleo, mujer caída de las bolsas, y con la bombacha puesta. Pobre de vos, sin mi. Pobre de vos, tan rica y tan casta, como has quedado. Ya no me tienes, ni te tengo, pero sigues teniendo esa parte mía, que te acompaña y duele. Alguna vez me dijiste, que soy como Buenos Aires, porque sobresale mi obelisco. Vos sos como Roma, en tu coliseo, mataste a los gladiadores y dejaste vivo… al Papa… que te llena de palabras bellas, pero no te penetra. ¿ Qué vas a hacer con el horno cuando se llene de fuego?... yo estoy como el mismo Perón muerto, con las manos cortadas, de tanto acariciar, en mi caso, al mismísimo obelisco… si supieras, sin vos, lo pequeño que ha quedado. Mujer, puta hermosa por decisión unánime de la naturaleza, hembra de muchas orgías, y de fantasías siniestras… ¿por qué te cruzaste a la derecha? y me mataste balcón, en la arquitectura de tu anhelo. Vuelve a la casa que tiene por techo al cielo, por piso la tierra y … por único cimiento… tu calentura, la mía, la nuestra. Me apasionan los poemas inciertos que intento para no ser más el mismo y disfruto de excelentes momentos cuando me entrego todo a lo que escribo. Ahora este sonetito nuevo me rescata de oscuros abismos si redactarlo me cuesta un huevo bien vale trabajar por un amigo. Me convierto uno con cada sílaba y me redimo de antiguos dolores mientras voy lográndola, la rimada. Mi ser se puebla de bellos colores y vuelvo a ver a la niña que amaba en el paraíso de los amores. Babacar Sall... poeta de Senegal: Abraham Lincoln reunió mi ser bastardo y disperso y desde entonces arrojé mis muletas para estirar las piernas arrojé la venda de mis ojos para ver la faz del Mundo mi corazón se reabrió para amar la tierra entera. Pero hace tanto tiempo que mi alma, en el centro de las estrellas ha dejado en la tierra su viejo sueño de Paz y por el eco de nuestros huéspedes del reino de Adán la paz en la tierra sigue siendo un sueño la esclavitud abolida el hombre inventó otra esclavitud la del dinero, las armas y el poder y su corazón que Dios riega para amar a todos los hombres bate a golpes de fusil de bombas y misiles. «Cuando seáis capaces de hacer de dos cosas una, y de configurar lo interior con lo exterior, y lo exterior con lo interior, y lo de arriba con lo de abajo, y de reducir a la unidad lo masculino y lo femenino, de manera que el macho deje de ser macho y la hembra hembra; cuando hagáis ojos de un solo ojo y una mano en lugar de una mano y un pie en lugar de un pie y una imagen en lugar de una imagen, entonces podréis entrar [en el Reino]». Si un cristiano de nuestra época no se avergüenza fuertemente de llamarse cristiano, o se trata de un ignorante o se trata de un perverso. Cruzadas, Inquisición, Quema de brujas, Persecución, Quema de libros, Apoyo luterano al Capitalismo naciente, Guerras, Vaticano, Pedofilia encubierta, Opus Dei, Apoyo a dictaduras. ¿alguien que no sea un mentiroso puede justificar tamañas injusticias practicadas en el nombre de Dios, precisamente, de su Hijo clavado a un madero? ¿alguien puede considerar que estos frutos podridos provengan del Cristo Verdadero? Sin embargo, en el nombre de Jesús fueron y son perpetrados. Yo no solamente me asusto y avergüenzo de profesar el mismo credo que ellos dicen profesar, y de ningún modo, quiero ser parte o solidario de sus crímenes inmundos. Me alegro de creer el credo, me alegra de no creer en los que dicen creer en él, y sostienen con sus vidas la opresión, la injusticia y todos los engaños de mantenerse fieles al poder, e infieles a poder hacer. Si la creencia no se transmuta en creancias, es no solamente vana, sino además hipócrita, sucia y descarada. Estoy orgulloso de Cristo, solamente de Cristo Jesús, y estoy avergonzado de sus supuestos seguidores, de los cristianos en el mundo. No de todos, sino precisamente de quienes más poder han tenido y tienen para guiar a las comunidades. Adoro la cruz de Cristo, odio a quienes la besan mientras pisan a los otros cristos, sus hermanos. Adoro a Cristo crucificado, y lo hago adorando a quienes los supuestos cristianos han crucificado, a los que piensan distinto, a los que se les niegan sus derechos, a los oprimidos, casi siempre, por los mismo cristianos, y más precisamente por los que se la dan de más ortodoxos, de más fieles, de más puros. Alguien dijo una vez, “ me agrada el cristianismo, pero no me agradan los cristianos”, yo suscribo esa afirmación. Para mi, no ha existido en la historia de la humanidad, grupos más nocivos, más perversos, más crueles y despiadados que los que se proclaman a sí mismos seguidores de Jesús el Cristo. La esencia de la vida, bien comprendida, es una extraña paradoja. El más maravillosamente bueno de los hombres que pisó nuestro planeta, es Jesús, que para mi es también Dios, pero los más despiadados de los humanos, son precisamente, quienes se dicen sus seguidores.- A mis amigos ateos les pido perdón por ser cristiano, alguna vez quise apartarme de la gran prostituta que envenena la tierra, de la Iglesia Católica Romana, pero un conjunto de revelaciones me hizo saber que debía mantenerme en ella, pero de ningún modo, pienso yo, callar o ser solidario de sus crímenes. Otra parte de la Iglesia, creo, es santa de veras, es la que emana de Jesús el Cristo, y lo demás debe ser lúcidamente repudiado. He puesto en palabras lo que siento, con todo el ánimo de ofender a quienes ofenden con el poder, con la prepotencia y con las organizaciones bien montadas de la opresión, a los más débiles. Siento que mi deber, es el mismo deber de los que siendo o no cristianos, luchan junto a los débiles por su liberación. Y lo demás, no es sólo cuento, es maldad y debe ser denunciada… Hay instantes en que reconozco mi instinto,y vuelo sobre el tiempo, pesadillas de un demente arropándose en el miedo. Así los viajes son refugios para medir la sangre,o días en que se esparce el hastío flotando en parcelas imperfectasdel alma. Sin embargo percibo los primeros designios:esa mano hechizando al único hombre que miro su espejo,la mesa abandonada por el arrebato de la enajenación del hambre,y el cuerpo destrozado para que la victoria reconozca su propio límite. Cuando lo líquido de mi piel escapa, el pálido inventarioal que acudo en sitios como éste,me enardece,porque suena un humo triste ente los dedos,y fatigosamente lloro como repitiendo frases ajenas, sin destino ni perduración. Con los rastros de mi última sonrisa me concedo la tentación de ser otro. Guillermo Capece Bálsamo infalible y económicoQue cuesta lo que cada quien elijaEntre el polvo de este lugar y el mas cósmicoCuando no tener idea es una idea fija ...Rey de reyes que perdieron su tronoPor ser esclavos de su excesiva conquistaSi yo otra vez me auto coronoProclamo a viva voz que soy artista !..y no por consensos mayoritariosSino por como quien se decreta libreAsí que ya no hay critica que asuste...Pues cuando uno pasa de calvariosGana autoridad para determinar el calibreDel disparo que apunta a que el resto le guste.... Maravilladacon la mirada de un niño de puebloal saborear el misterio del eclipse Dejando dividido el resquebrajado tiempo de las mil esperasal saquear mi boca besada en el desorden Lila, su extraño nombre abreviado en el resplandor de un deseo,maquillada de estrella erranteen el carnaval de las heridascreyéndose mareafingiéndose fuegotornándose magiatornándose verboen el alucinado latir de la esperanza... Si pudieras resumirel eco de tu presenciaentre los destellos de un torrentevaciado en mis lágrimas...si pudieras resumir con tu vozla mudez de los pájarosque se abandonaron al cielo,seguramente arrancaríasel núcleo de mi falso nombrey lo harías viajar por el huracán de la palabra Si tan sólo lanzaras una bengalasobre la herrumbre de mi pechocuando los cristales y la vigiliase retratan de antiguas heridas...si pudieras llegar hasta aquícuando la madrugada arde en mis ojos y me pesa el ayer,seguramente una luz erizaráel desesperado pelaje de las sombrasiluminándolo todo dentro de mí Si pudieras florecermeen la prodigiosa nochecon cerrar tus párpadosy darme el signo de tu frente,seguramente emigraría mi pielhacia los lindes del sueño...... sueño brotado de la nada y la piedraconfundiendo en azar al destinotransformado en vos misma Sueño que si perpetuaras en vosla silueta de las gotaspara ungirte y ser lluviaseguramente la verdad beberácon tu boca en mi boca,su único milagro. Verde Federico:yo hubiera querido estar en el momento de los gritos,o de los silencios heroicos;en el momento de las espadas,cuando caíste en tu agua bajo lluvia,mientras los cerdos, enamorados de las banderas subterráneas,tomaban el sol de mediodía. (La soledad de las últimas habitaciones mortifican la memoria.Hay ventanas abiertas, y quedarán así en el invierno.Es raro,pero caen ahora hojas marchitasy me gustaría jugar con ellas.) Verde Federico:desparramo tus gitanos en la mesa,donde con Miguel y Manolo tomamos la sopa de la noche.Tu vestido queda ajado por los toros de la vida,y ni siquiera Nueva York te salva, Federico,porque estás próximo a morir,a caer bajo las balas levantadas a velocidad de la muerte,quizá por el mismo gitano moreno que en tu verso montaba a caballoy era el jinete más audaz de toda Andalucía. Duermescon una palabra entre los labios,con un ramo de hielo en cada mano,bajo las calles empedradas de "pájaros" nocturnos.Al fondo de la tumba llevas,una porción de magia, de manzanas de fiebre,de sábanas de lino. El viento te saluda,las tierras de Granada borran tu contorno,tu sonrisa mira los espejos de la vida.Y se refleja. Guillermo Capece Para un aprendiz de escritor, para un balbuceador profesional de poquedades, para un emisario de la nada que busca el oído de ninguno... susurrar un escrito cualquiera es un acto estúpido de magia mayor.-A ello me avoco brevemente, en esta segunda parte, que si la primera salió como el culo, no puede ser menos.-Lego a todo aquel que me lea, la alta erudición que nunca tuve, la perfecta forma escrita que jamás logré, y la alegría que ahora me embarga.-No esperes a mañana para escupir mi tumba. Estoy tácito como sujeto de este escrito aberrante. Tus insultos, tu admirable desprecio, los necesito, para saber que al menos, en la reprobación, estoy escribiendo. Hay algo, solamente una cosa importante, que me gustaría decir, y no se hacerlo bien, aunque lo intento. Bástame decirte por ahora, una cosa: es un lugar común de nuestros días, afirmar que Dios no existe. Te puedo asegurar que tengo la constancia plena de su existencia y por eso escribo. Doy testimonio que una vez miré que caía una estrella, corrí a la Biblia y leí... "Yo veía a Satanás caer como una estrella, antes que el mundo existiera"... Jesús, el Cristo.-Desde entonces... no supe que hacer, no supe otra cosa que hacer para lograr transmitir la experiencia... con palabras. Y ya lo ven, apenas si puedo balbucear este escrito torpe. Pero es verdad, y me consuelo saber que no miento. Alguien que me salve.Que me quite la angustia de no poseerme.Que me enseñe que los muros pesan más que las pobres palomasque vuelan en su alto.Quiero que mi soledad me conteste por vez primerapara quién estoy.Yo, que fui el francotirador inasiblesoy ahora el eco lejano de lo que fui.Me inundan las máscaras, el olor de los moribundos,el terror de encontrarme con ellos bebiendode la misma copa ácida su vino.Si vinieron a matarme, que me maten ya.Pero que no me hagan tragar el humo vacíoque siempre llevan en su rostro.Los odio porque una vez los amé.Teñidos de mariposas venían a tracionarme.Usurpaban cada hueco de mi corazón.No sé si quiero que alguien me salve.Los músicos con sus cántigas dirán el resto. Yo soy el que espera. Guillermo Capece Soy el camino de mí mismo y la desolación que se abraza a su senda,y tiembla, y borra las huellas para que no me persigan. Estoy vacío de esos animales etruscos que me regaló la partidade unos ojos girando al viento. No puedo confiar en los sueños porque alguien les pone un asesino dentro. Me acuno cuando no me veo pues la vergüenza tiene el ropaje largode los locos. Hoy es domingo, y he estado todo el día ausente. Guillermo Capece IYa oscureció la tierra.Difícil es tener tu boca apretada.Tu estatura cerca de mi rostro.Sí, yo se. Es difícil.Se le caen a uno las montañas.Los lagos se hacen charcos diminutos.Todo es difícil.Compartir la sonrisa con vos.O este barco que nos quitan.¡A partir! ¡A partir!¿Pero cómo?Si nuestras plantas penetran en recodos de clausura.Alguien saldrá a gritarnos nuevamente.Debemos tener cuidado. Salvarnos. Pero ahora fumemos en silencio. IIEn qué quedó esa idea transparente,ese cuerpo sobre el que juramos tantas cosas sencillas.Una ilimitada ausencia marcó las señasde tus grandes ojos.Quedarse solo y recordar al otro díalas sombras de los pumas,las desoladas bestias persiguiéndose,hundiéndose conmigo como una gran casa de celos,sumergiéndose,perdiéndose conmigo.Arriba de los cielos, más arriba,la mitad de tu cuerpo fulguraba.Quienes somos, sino aquello que fuimos,sino el pasado de iguales invasiones,de iguales lejanías. Guillermo Capece Querido hijo: Te pongo estas líneas para que sepas que te escribo. Así que si recibes esta carta es porque te llegó, si no, avísame y te la mando de nuevo. Te escribo despacio porque sé que no puedes leer deprisa. El otro día tu padre leyó que según las encuestas que la mayoría de los accidentes ocurren a un kilómetro de casa, así que nos hemos mudado más lejos. La casa es preciosa; tiene una lavadora que no estoy segura si funciona o no. Ayer metí ropa, tiré de la cadena y no he vuelto a ver la ropa desde entonces, pero bueno... El tiempo aquí no es tan malo; la semana pasada sólo llovió 2 veces. La primera vez durante 3 días y la segunda durante 4. Con respecto a la chaqueta que querías, tu tío Pepe dijo que si la mandábamos con los botones puestos pesaría demasiado y el envío sería muy caro, así que le quitamos los botones y los pusimos en el bolsillo. Al fin enterramos a tu abuelo; encontramos su cuerpo con lo de la mudanza. Estaba en el armario desde el día en que nos ganó jugando al escondite. Te cuento que el otro día hubo una explosión por el gas de la cocina y tu padre y yo salimos disparados por el aire cayendo fuera de la casa; ¡qué emoción!, Era la primera vez que tu padre y yo salíamos juntos en muchos años. El médico vino a la casa para ver si estabamos bien y me puso un tubito de vidrio en la boca. Me dijo que no la abriera por 10 minutos y tu padre ofreció comprarle el tubito. Hablando de tu padre, ¡qué orgullo!, te cuento que tiene nuevo trabajo y es superior a 500 personas, ya que está sobre ellos. Lo contrataron de cortacésped en el cementerio. Tu hermana Julia, la que se casó con su marido, por fin dio a luz, pero como todavía no sé de qué sexo es, no te sé decir si eres tío o tía. Si el bebe es una niña, tu hermana va a nombrarla como yo. Se nos va a hacer muy raro llamar a su hija "Mamá". Tu padre le preguntó a tu hermana Pilar que si estaba embarazada, ella le dijo que sí, de 5 meses ya; pero ahí tu padre le preguntó que si ella estaba segura que era de ella. Dijo que sí. Moza de hierro tu hermana Pilar, qué orgullo, de tal palo tal astilla. Por cierto, que tu primo Paco se casó y resulta que le reza todas las noches a la esposa, porque es virgen. A quien nunca hemos visto más por acá es al tío Venancio, el que murió el año pasado. Tu perro Puky nos tiene preocupados, se empeña en perseguir a los coches que están parados. Aunque peor es lo de tu hermano Juancho. Cerró el coche y dejó las llaves adentro. Tuvo que ir hasta la casa por el duplicado para poder sacarnos a todos del coche. Bueno hijo, no te pongo mi dirección en la carta, porque no la sé. Resulta que la última familia de gallegos que vivió por aquí se llevó los números para no tener que cambiar de domicilio. Si ves a Doña Remedios, dale saludos de mi parte; y si no la ves, mejor no le digas nada. Tu madre que te quiere. Josefa. P.D. Te iba a mandar 100 euros, pero resulta que ya cerré el sobre. ¿Y ahora que hago con esta soledad?¡Herrumbrarme!¿Gastarme a muerte en versos que no riman?Rimarme con las sombras del silencioPara que los demonios del tormento¡me sonrían!¿y cómo se vive en esta eternidad?¡un minutoQue se burla cual si fuese una centuria!Azules fracturados se destiñen,Diamantes que en mis manos de derriten¡por mi culpa!¿Do yace lo feliz, lo que antes era?¡AgonizaTras la pérgola falsaria de la duda!Y camina en la arena y se quema,Y camina en el desierto a la espera¡de la lluvia!¿Qué importa el mañana y su promesa?¡nada importa!La fuerte necedad de esta locuraNo acepta la soberbia de las rosas,Ya es mía la cadencia de estas horas¡también tuya!Danzaran las ganas que no duermen¡ni de noche!Con el humo del pucho que desgarro,llegarás, moraras aquí en mi pechoPorque yo así lo exijo, así lo quiero¡porque te amo!CEMENTO.-PROTEGIDOS DERECHOS DE AUTORCódigo: 1004266112209 Julia no sabía decidirse entre la terrina de quesos o el crepe relleno. Eso de entrada, pero como primer plato no estaba segura de pedir la trucha en dos salsas o el lomo con duxelle de champiniones. Después de todo, lo que más le interesaba en ese saloncito paquete, era jugar un poco y ver los colores de los platos servidos por mozos lánguidos, en uno de los cuales le pareció ver al muchacho de La Cantábrica en ese sueño que no había olvidado.-No será la primera vez que me asome a un espejo y vea las huellas de mi rostro- ironizó para sí mirándose al espejo donde también se reflejaba la figura de Sergio.Él la había invitado a almorzar para decirle ¿qué?. Si el barco se hundía -se dijo- ¿él querrá salvarlo? ¿Por qué no levantarme y dejarlo solo? ¿Para qué acepté la invitación?Sergio estaba distraído. Ella se apuró a pedir y el mozo anotó con diligencia pero con cierta rigidez. Esto la divirtió. Luego el muchacho anotó lo que Sergio le dictaba.-Me llamo Fabio- dijo el mozo- estoy a sus órdenes; que tengan un agradable almuerzo.Y, mientras el mozo se iba, ella volvió a jugar otra vez con el espejo en la pared: los ojos tristes de Julia; los labios quietos de Julia como si recién terminaran de crecer."Aquí pronto se instalará una mueca y no lo podré evitar", pensó. En el espejo se miraba las manos y el busto, pequeño pero todavía erguido."Pronto esto se terminará. Seré vieja," se dijo.Y añadió para sus adentro:"Estos juegos comienzan divertidos y terminan crueles." "¿Por qué tener esta visión partida de la vida?"Porque ella también amaba el sol que entraba, y los colores de la comida que ahora le servían, y estaba segura de que también podía amar al muchacho de chaleco negro, algo desgarbado pero de manos finas, que a cada momento quería ser cortés.Lo miró sin disimulo y él se dejó observar. Luego volvió a mirar en el espejo y lo vió reflejado sirviéndole el vino.Mientras le ofrecía el primer plato le pareció que las manos del muchacho danzaban sobre la mesa.-Me entristece el campo a la hora del crepúsculo- dijo ella antes de que Sergio le preguntara por qué lo decía.-Cuando era chica me daba miedo ir al circo- dijo sin oírlo - un caballo se volvió rabioso, ¿sabés?,y saltó de la pista a los palcos.-El caballo se volvió rabioso o loco -repitió- ¿nunca supiste de un animal loco?Él le tomó la mano e hizo un esfuerzo para escucharla pues en realidad estaba pensando que todas las mujeres tenían algo de estúpidas.Ella se levantó para ir al baño con la idea del caballo rabioso y en Sergio, tan lejano.Pasó por la pequeña salita vacía dispuesta para que los clientes jugaran al billar que le pareció de un amarillo intenso, y vió al mozo, apurado, pero atenta a ella. Julia sabía que auque él no lamirara decididamente, había despertado su interés.Cuando salió del baño lo vió otra vez, y un ardor le subió al pecho."Dios mío" -pensó- "no poder amarlo ahora sería un castigo."Al pasar por la salita de billares entró. Se ocultó en el momento que el muchacho pasaba nuevamente. Esta vez la miró. Ella lo llamó y le pidió café. Cuando regresó con el pedido la vió recostada contra la pared, y no pareció asombrarse. Estaba acostumbrado a las trangresiones de algunas clientas, y por eso fue que no le acercó el café sino que lo dejó sobre la mesa de billar y cerró el cortinado. Se quedó frente a ella. Julia vio que el cuerpo de él se recortaba frente a la luz, y lo abrazó humedeciéndole la cara con los labios. Las manos del muchacho resbalaron sobre el vestido de ella, y lo subió de a poco, mientras la llevaba hacia la mesa de billar. Comenzaron casi en silencio, con pequeños quejidos de ella, y el silencio de él.Pronto Julia sintió la sensación dentro del pecho que el caballo loco del circo repetía la escena del asalto hacia el público. Creyó que su corazón galopaba hacia la libertad.Más tarde,mientras arreglaba su maquillaje, se sintió poderosamente libre. Rápidamente busco dólares en su bolso y los dejó debajo de la tacita de café. Fabio que la observaba, rechazó el gesto.Tuvieron un breve dialogo:-Soy de Mendoza, tengo viñales, no necesito dinero- dijo el hombre ya fuera de su máscara de mozo.-¿Y por qué trabajás de mozo? -preguntó al instante Julia.-Soy el dueño del restorán, y a veces me entretengo en atender las mesas sólo para conocer mujeres como vos.Julia no supo si eso era un halago, y no respondió.-Tengo una cadena de restoranes en sociedad en Mendoza, y otro en Puerto Madero- dijo el muchacho algo desgarbado pero con cierto orgullo.-No sé qué pensarás de mí- susurró Julia.-Cuando uno hace estas cosas no piensa nada más que en el placer instantáneo -respondió seguro.Y se fue dejándole una sonrisa.Sin embargo ella sintió que esa rápida aventura no era ni mas ni menos que una mariposa detenida en mitad de su corazón, pero dispuesta a volar en cualquier momento, por ejemplo en cuanto Sergio la mirase y le indicara la comida.-Se enfrió el lomo.Ella balbuceó una disculpa dispuesta a no dejar volar esa mariposa. Iba a pasar la lengua por el interior de la copa de vino por segunda vez, cuando la orden de él la detuvo:-No hagas eso.-Eso es lo que me interesa hacer en este momento. Lo quiero hacer.-A veces parecés una chiquilina caprichosa. Mejor comete el lomo. Es un plato muy caro -y Sergio enlazó los ojos de ella con una dura mirada.-No lo quiero, está frío- protestó ella mientras apoyaba su lengua en el cristal de la copa.-Comete el lomo -repitió él. Con un soneto vengo a enamorartecon este cuarteto abro y me dirijo,ojalá que no salga tan prolijo,que digno de ti, logre encantarte. En este cuarteto el alma se me parte,no obstante yo sigo y no transijo,te lo juro ante un sacro crucifijo,que a Petrarca le robaré su arte. En el primer terceto me acomodopara decir que ya no habrá ni modo,porque olvidarte, vida, yo no puedo. Y en este terceto digo, aunque duela,pues tu desdén me da dolor de muela y transido de amor, asi me quedo. Te vi corriendo en el trivial caminoquebrado el corazón de horror y miedo, te vi los párpados cansados, tristes…y a tu dolor escribiendo.Lluvia derramóse en tu piel de polvo cual ósculo de agua en el desierto,una lágrima miraba entre las gotas…y tus párpados cayeron.Tu alma sufre las caricias muertasde aquellos que no están ya en tu sendero,gime un zorzal en tu voz dormida…gime por ellos.La estepa que morabas, agoníade ave remontando el turbio cielo,caló en la gris arena de tu alma…llantos, espectros.Impío ardor que ulcera el alma gotas de vida en la arteria del tormento,alejóse la huella de tu infancia hermosay de tus sueños.Aurora de la vida en la dulce primaveramarchóse hacia el crepúsculo imperfecto, Colgada la ilusión al sol poniente de tu invierno.Y semblantes que fumígenas deambulan,¡cuál estrofas en papiros sempiternos!remojábanse en las lágrimas copiosasde tus recuerdos. Bordeando el precipicio de las penas,líado en la garganta todo anhelo, soledades, añoranzas y suspiros…por quienes se fueron.Trocóse en mi la infausta intemperie, con sales de tu mengua en el siniestro,tu vista atormentada impenetrable…a mis silencios.Besos estallantes, por tu faz de diosa,de mi oráculo infernal se desprendieron,¡coro bruno y arisco que reclama!tus oídos sedientos.Garfios rojos en la mar se mezclan,azules que reencarnan púrpuras y negros,el sepia ha fenecido ante tu mármol…como yo lo ordeno.¿cuántas veces el grito del osario,reclama tu pasión con tono austero?¡mas yo robe tu pose del olimpopara mi imperio!Pues yo acaté la orden de la mística,y en tu regia luz ardí al son violento,en la flama, que echa luz y no se apaga,de tus plectros.Serena brisa danzando en las praderasbálsamo que alivia las heridas del guerrero¡la calma sosegada y mi refugio!tras el viento.Venerable efigie en el santuario mío,silueta de esta fe que hoy profesodestellando tus azules refulgentes entre el incienso.Menguando la quimera y el destinoel signo de la suerte hemos impuesto,¡la hormona exasperada también canta! en mi deseo.Tertulia montaraz entre las pielesque unidas revelaron los misterios,¡coito y desayuno en la montaña!¡amor malevo!.CEMENTO.-Protegidos derechos de autor.Código: 1002185547676 En la rama erizada y prudentearrastrando su honor busca amparoy entreteje un capullo mierderoa donde esconder su pudor de gusano;pero al beso, rigor de la púaque la espina le clava en los labiosse derrama en los suelos, cual lágrima,y sirve tan solo de abono a los pastos.Sacrificio mordaz que le impidesacudirse la culpa en las manos,porque dobla rodillas, rompe alascuando siente el tonelaje del pasado;no se tapan los huecos del almacon la imbécil sanción de un contrato:allí suelen pudrirse ya infectoslos cadáveres de sueños muy soñados.La vergüenza apostada en sus sienesle conmueve el talante de pánico,mas si vibra el deseo escondido¡le arrancar gemidos, deseos mojados!Pero cae, fenece, despiertaen la ruin soledad de su páramoy no puede secarse las lágrimasyaciendo a la sombra brutal de sus pánicos.Alla va, como un beso perdidoaleteando con rumbo extraviado,del sopor de algún muro invisibleal bello dolor de algún muro bastardo;del tenaz e impiadoso supliciode la marcha fugaz de los años,de las ganas, del semen y el flujoal rigor de tener que cumplir lo pactado.De la obtusa caricia en la frente,que bordada de lineas y encantosaun protege el cosmos sublimedo estallan mil versos por cada calvario,¡de esa simple caricia apagadadonde no hay humedades mojando al procaz sentimiento pechandopor ver como bailan querubes y diablos!Del romántico sitio perdidodonde no hay ni mentiras ni engaños,al blasón de lo obvio y lo lícitodo solo se ensueña hasta el canto del gallo,de la mísera etapa marcadapor las leyes del mundo tiránicoa los vuelos azules y libresque buscan descanso en un pecho, abrazados.De la tumba llamada esperanza,esa forma sutil de maltrato,a la horrenda certeza del tiempoque trae la muerte entre risa y sarcasmo,¿donde vas a dejar que los huesosse transformen en piedra y en barro?:¿mariposas que viven de sueñoso gusanos que realizan lo soñado? CEMENTO.- -Buenos días, papá- y era la tercera vez que lo repetía-; buenos días, papá-volvía a decir.Entonces saltaba de su cama, recorría el flaco pasillo, y se internaba en el baño.La ducha, el agua fría, no le daba la grata euforia que necesitaba. Entonces trataba de secarse con la amplia tohalla, y se envolvia en ella imaginando que era el maharajá de Kapurtala, y mientras orinaba en el bidet, pensaba en cómo pasar ese día,vigésimo de diciembre.Ese diciembre que le calcinaba los huesos, porque se presentaba caluroso y húmedo como ninguno, y ya podía ver que lo había jodido bastante al pelarle la espalda el sábado anterior,en la pileta de Ricardo.Volvió a tener ganas de orinar, pero eran ganas nada más, porque al enfrentarse con el bidet,un chorrito indeciso se asomó por su pijita. Se la metió dentro del calzoncillo, se miró al espejo, se hizo alguna íntima pregunta que no contestó, y salió para atravesar otra vez el pasillo.-Buenos días, papá- dijo esta vez con voz más firme. Y siguió hasta la cocina:el mate,el café,el té, el vino. EL VINO. El vino era lo que conformaba su paladar aquella mañana de diciembre. Y mientras saboreaba su aspereza, se le ocurrió pensar en el viejo, en la navidad que ya llegaba,en lo llagado de su espalda, en Leticia, (en la costosa Leticia) que todavía se negaba a todo, y por último en él. Aquí se sirvió otro vaso de vino. ¿Quién era él?Sí.Le gustaba vestir bien.Andar por el centro mostrando exactamente lo que se debe, y lo que no se debe dejarlo para Leticia (cuando se decidiera), o para Ricardo, siempre que mediara un golpe de teléfono. Y mientras tanto, ¿qué?. Ir al bowling, caminar hasta el puerto, o tomar sol en Saint Tropez,y soñar con ese viaje a Río en Carnavales que le había prometido Ricardo.Después... su vida estaba ocupada con tantos sueños...; quería navegar, irse, tal vez a Europa. Pero no por el hecho de conocer Europa. París, Roma,Milán, eran sin duda lindos lugares. Pero no era eso loque realmente importaba. El hecho substancial era viajar en barco; sí, en barco..., a semejanza de esos barcos que mamá le hacía a los ocho años, doblando con ternura la hoja de diario y dejándolo reposar en la bañera. Creía que el fondo del mar era blanco, y que las fuerzas de las olas tenían, exactamente, el ritmo que le fijaban sus pequeñas manos.Pero ahora había pasado tanto tiempo... -Buenos días, papá- dijo esta vez con bronca, mientras servía hasta el borde otro vaso de vino. -Buenos días, papá- gritó mientras pensaba decir cálidamente -queriendo deshacerse de ese raro remolino de angustia- buenos días, mamá... cómo estás hoy?, buena y linda como siempre, mamá; mi mamá. Aquí traje el papel para los barcos. Pero la memoria de las tardes encerradas en el baño, viendo viajar ilustres barcos a los que mamá bautizaba con extraños nombres, no conseguía atenuar la tristeza grande que sentía,ni su gastada melancolía actual. Él era un hombre simple, gozador delas cosas sencillas, amante de la naturaleza, leal para los amigos...; pero había cosas en lo íntimo de su vida que no entendía.No estaba claro para él por qué al pasar por la habitación del viejo debía saludarlo, siendo que siempre dormía, o, en el mejor de los casos, leía el diario, y no le contestaba. Jamás le contestaba, y había llegado a pensar que el viejo estaba sordo. Pero no. Algo golpeaba en su cabeza, y en el sentido literal de la palabra. Algo se doblaba y rompía cuando saludaba al viejo. No era importante que no lo oyera, o que lo oyera y no le contestara. Entonces,¿qué era lo que en rigor lo perturbaba? Aquella mañana lo había descubierto. Lo había descubierto en la cocina, mientras llenaba otra vez el vaso de vino. El lugar vacío al lado de la cama que ocupaba el viejo era la clave: el lugar que ocupaba mamá en vida. -Buenos días, papá- dijo esta vez entre sollozos.-Buenos días, hijo- dijo el padre apareciendo en el marco de la puerta.Y él se entregó a sus brazos y lo abrazaba, lo abrazaba, mientras pensaba en viajes lejanos y múltiples, en viajes claros y magníficos.-Buenos días,papá- y lo miró a los ojos llorando plenamente. -Buenos días, hijo- dijo el viejo casi con miedo, sin entender, -buenos días, hijo. Si el corazón se secacomo fruto abandonado en tiierra,si los sentimientos se hacen piedra,si todo es desierto y arena yertaen los espacios vacíos del alma...¿en qué quedará tu vida? El dolor no es suficiente excusapara dejar los campos sin siembra. Es preciso alimentar la luz de la lámpara vertiendo en ella el aceite que la sostenga.La lámpara del corazón necesita el aceite de la esperanza,el aliento de la ilusiónpara que arda su llamaen medio de las tinieblas amargas. E.G.M.
|
Lecturas Totales | 270959 | Textos Publicados | 514 | Total de Comentarios recibidos | 2685 | Visitas al perfil | 69574 | Amigos | 117 |
|
Eduardo Fabio Asis
María Ester Rinaldi
Te dejo un cálido abrazo.