• Eduardo Fabio Asis
Eduardo Fabio Asis
-
-
  • País: Argentina
 
Que penaque dure tan poco el besoque dure tanto la muerte.Que penaque todas las flores se marchitenaunque las primaveras fuesen eternas.Que penaque alguna vez se apague el solpero quizá entonces, brillen nuestros versos.Que penasaber que debo morir, aunque no quieroque hermoso, si alguien, después de muerto, me leyera.
Yo te pido perdón, Dios mío, por construirme una imagen tuyatan rotundamente distintatan enteramente distantede Vos mismo.Yo te pido perdón, Dios mío,por darte vuelta la caraen el rostro cansado de mis hermanos cansadosde tantas injusticias, algunas de la cualesyo mismo he causado.Yo te pido perdón, Dios mío,porque mientras te pido perdón,me olvido que soy otro más de los oprimidosy que mi deber sagradoes liberarme junto a mis hermanos, donde Habitas.Yo te pido perdón, Dios mío,porque te ignoro en los que todavía pasan hambrey mi oración esquizofrénicase eleva al cielo en incienso inútily no aterriza en olorcito a comida en los platos vacíos.Yo te pido perdón, Dios mío,porque gasto palabras pero no gasto un cobrepara paliar el infierno artificial de la miseriaesa que hemos construido los humanossacrílegamente en tu nombre.Yo te pido perdón, Dios mío,por esta navidad que pasó y por todasdonde se tira la champaña y los fuegos artificialesy nos burlamos de Vos que Habitastan cerca nuestro, en el hermano hambriento y desamparado.Yo te pido perdón, Dios mío,por pedirte perdón y no mover un dedo por Vos.-
La mujer hermosa que me dejó por un millonarioEl millonario asqueroso que somete a sus obrerosLa mujer hermosa que alguna vez fue mi hembraEl obrero estúpido que se deja robar por el millonarioLa mujer hermosa que sabía todos mis poemasEl poema zurdo que nunca convenció a nadieLa mujer hermosa que vendió a buen precio su vaginaEl aroma de esa vagina que todavía me enamoraLa mujer hermosa que se disfraza de fiel a su maridoEl marido de cualquier mujer, que siempre es un cornudoLa mujer hermosa que no puedo olvidarTodo eso... la puta esa y el cornudo aquely yo como boludo... esperando en vano, la revolución.   
Otro que no soy yosonríe por mi propia bocacamina con mis mismos piesy habla siempre desde mi verdadera voz.Él le hace el amor a mi mujercon mi cuerpo entero y la destrozay la vuelve a construir.Tampoco logra conquistar la poesíapero él está cansado y quiere abandonaryo no.
El otro y yo
Autor: Eduardo Fabio Asis  542 Lecturas
+++++
Ningún poeta encontró el nortepero de tanto contemplar la brújulase les volvió norte la mirada.                       Cuando digo pan, los hornos se ríense burlan y maltratanmi palabra poética, mi palabra escasa. Del otro lado del poema, habita el hambrepero de fuego y trigo sabrosoa veces... a veces...   se hace pan mi esperanza.
Pan poesía
Autor: Eduardo Fabio Asis  775 Lecturas
+++++
Para un aprendiz de escritor, para un balbuceador profesional de poquedades, para un emisario de la nada que busca el oído de ninguno...  susurrar un escrito cualquiera es un acto estúpido de magia mayor.-A ello me avoco brevemente, en esta segunda parte, que si la primera salió como el culo, no puede ser menos.-Lego a todo aquel que me lea, la alta erudición que nunca tuve, la perfecta forma escrita que jamás logré, y la alegría que ahora me embarga.-No esperes a mañana para escupir mi tumba.  Estoy tácito como sujeto de este escrito aberrante.  Tus insultos, tu admirable desprecio, los necesito, para saber que al menos, en la reprobación, estoy escribiendo. Hay algo, solamente una cosa importante, que me gustaría decir, y no se hacerlo bien, aunque lo intento. Bástame decirte por ahora, una cosa:   es un lugar común de nuestros días, afirmar que Dios no existe.   Te puedo asegurar que tengo la constancia plena de su existencia y por eso escribo.   Doy testimonio que una vez miré que caía una estrella,   corrí a la Biblia y leí...     "Yo veía a Satanás caer como una estrella, antes que el mundo existiera"...  Jesús, el Cristo.-Desde entonces... no supe que hacer, no supe otra cosa que hacer para lograr transmitir la experiencia...  con palabras. Y ya lo ven, apenas si puedo balbucear este escrito torpe. Pero es verdad, y me consuelo saber que no miento.
Sospecho una palabra en el extremo norte de tu silencio.   No es tequieromuchoytenecesitotanto sino algomuchomás..   Sospecho que esa palabra es el eco míonorteando mi sur mudo.
Sospecha y duda
Autor: Eduardo Fabio Asis  511 Lecturas
+++++
Quiero amarrarte sólo mía y liberarte toda sin dueños.   Quiero en tu hueco húmedo sembrar una paloma oscura para cosechar el vuelo.   Quiero gastar los caminos para inventarme un pie con tu forma de ala sin nombre.   Quiero quererte, aunque por ahora, no lo entiendas.   
Soñé un mundo perfecto.     Hermoso como Eva Duarte siendo Presidenta de la Argentina y su cobarde marido,   cosas de sueños,   era sólo eso el marido, sin cargo alguno para hacer maldades.     Soñé un mundo perfecto.     El Papa trasladaba su sede a alguna ciudad de Biafra algo confuso, quizás era  de Sierra Leona, no sé bien. El Vaticano se destinaba como museo para la tercera edad, creo.     Soñé un mundo perfecto.   Nueva York lucía con un parque de diversiones gigante en la antigua city de Wall Street.    El capitalismo no se conservaba siquiera como museo.-   Soñé un mundo perfecto.   Tan perfecto, que yo…     no existía en él…
Algunas personas, con ignorancia excusable, piensan que los escritores de Internet, comenzaron a aparecer, con lógica impecable, junto a la Internet. El sentido común, no siempre es el mejor consejero del pensamiento.  Hay una orden de escritores internautas,  que precede en muchos siglos a la aparición de la Internet.  La primer prueba de ello,  es el llamado “mensaje en la botella”.  Pero si nos remontamos a sus aspectos religiosos, antes de la “primer” prueba,  existe otra,  “las tablas de la ley” en piedra, dada a Moisés.-    En cuanto al soporte técnico,  se trata de auténticos mensajes virtuales.-  Todavía no existía…    electricidad, computadoras, Internet…   pero ya ven, ya existía la virtualidad y por tanto,  escritores dedicados a ella,  sean solitarios arrojando al mar un mensaje,  sea,  si me lo permiten, el mismo Dios arrojando al mundo…     algo que alguien, aunque sean ángeles, debieron escribir… o esculpir en piedra.-  De modo pues, que salvo que la historia de la humanidad, religión incluida, sea una colección de inverosimilitudes, algo de cierto hay … en la existencia de escritores virtuales.   Sean estos, reales o imaginarios, claro. Hasta aquí el aspecto probatorio. Digamos.   Más allá del mismo, arriesgo una sospecha, o si quieren suavizar el término, una hipótesis.  Es muy probable que los escritores virtuales de todas las culturas y de todos los tiempos,  estuvieran unidos a un hilo conductor invisible, aunque ellos no lo supieran.  En apoyo de mi propuesta,  quiero decirles que…     el universo mental de un zulú…  escribiendo en solitario…   o de un egipcio antiguo…     o de un esquimal…   sorprendentemente…   es muy probable que tuviesen una íntima conexión…     una unión no tangible…   lo que hoy diríamos, una comunidad virtual.   Y esas personas,  en el aparente caos solitario,  formaban parte, creo, de una comunicación espiritual plena…  de una orden…     mítica.   Si no me aventuro en vano y si esto no es tan fantástico como parece…      pudiera ocurrir que en idiomas antiguos ya en desuso…      una parte del padrenuestro… haya sido pronunciado en Huarpe, y la continuación, por ejemplo, en Arameo.  No nos sintamos tan perplejos de que estas cosas hayan ocurrido en la realidad… al menos, virtual.    Saludos cordiales.         
  Soy cómplice del pan escaso en boca de los inocentes. Culpable del hambre en el África y del derroche de Occidente. Soy quien quiere ser un poeta sin saber amar a la gente.
Siempre algo se nos escapacorre desenfrenado o pasa muy lentamentepero nuestra mirada absurdajamás puede aprehenderlo.Ese algo, suspiro de un ángel furioso,nos trae todas las primaverasen una flor invisible.Que ese algo no seaesta amistad huérfana que me abre el pechoy desde mi corazón te reclama.Vamos,  ¡derrota la cobardía!, muéstramecon el rígido odio del demonio cuando está muriendo,muéstrame...   no sea la timidez tu derrotero...muéstrame...   que a pesar mío, me estas queriendo.  
Herido de inmensidadun grano de trigomuere.Del otro lado del hambrelate el panvive.Y las serpientes trazan caminosen el mismísimocieloherido
Humus diminuto
Autor: Eduardo Fabio Asis  509 Lecturas
+++++
A veces puedodescubrir en tu calmamis propios rasgos. A veces quieroatrapar tu presenciaen soledad. A veces mueroy jamás me ha ocurridoresucitar.
  No me exijas ninguna explicación.¡Te quiero!, simplemente,murciélago rosado.Y para socavarte de dudas el alma,te confieso, que te quiero desde el momento mismo que te engendraron.Podrás seguir tranquilotu aparente vuelo en círculo viciosopor la noche blanquecina.Conozco tu especie,más aún,te conozco a vos.Se muy bien la espiral que trazasy confío que tu destinoes luminoso. Aunque vos, claro, no lo sepas aún.
Cuando nos roben la lunaalgunos estarán mirando la tierra. En el incendio actual de la Grecia milenariaquieren corromper el fuego con papel pintado. Arduos alumnos de Pitágorasdigan No, no me fallen. Que aquí,  en el año uno, en Buenos Airesnos apagaron con agua poco santa. Que allí,  en el año diez, en Atenaslucirá la antorcha hasta su destino último.  Y desde las cenizas del capitalismo derrotadovencerá esta vez, el hombre y la mujer.   Y será fiesta eterna el OlimpoHelenos y Huarpescelebrando.
Quiero morir un poco pero no lo suficiente, quiero vivir demasiado pero siempre es poco,   del otro lado del jardín encontraré el prototipo de las flores ¿para qué la rosa que se marchita si conozco su nombre imperecedero?   no me vengan con mentiras se vive cuando se hace cuando se hace la vida toda entera, poesía.     y lo demás es cuento.
Hoy me duele esa tristeza tuya, tan triste, tan tuya, que yo y solamente yo, imprimí en vos.   Me siento como Judas, cinco minutos antes de ahorcarse. Y el poema no me redime, y no me redime tampoco el perdón.   Del mal que te he causado, no quiero dar explicación. Otros pensarán que es leve, se reirían de mi, y lo que es peor, de vos.   Olvídame niña, como los árboles olvidan el invierno, y que retoñe en tu cara, otra vez, tu sonrisa como una flor.  
Es muy fácil, el boliche mío no vende, no tengo clientela, y eso que estoy regalando la mercadería.  Regalo letras, y se presentan a buscarlas, a lo sumo,  tres o cuatro amigas y amigos,  cuando yo creía abastecer a las multitudes.   Claro que estoy contento, de esas pequeñas almas grandes, que acuden a leerme, claro que se los agradezco, y más aún, por sus comentarios y críticas. Pero estoy enojado, y no acostumbro a esconder mis sentimientos, ni a llamarlos buenos o malos. Estoy enojado porque me leen muy pocos, así de simple. No me vengan que se escribe sólo para uno mismo.  A mi eso me parece una masturbación sin eyaculación final, o una película porno sin que se muestren genitales, o una religión sin crear culpas gratuitas, o para ser menos obsceno,  y más literario, me parece un gran libro escrito en caracteres comunes, para que lo lean los ciegos.- Si he de escribir sólo para mi mismo,  pues entonces, no publico y se acabó. Esa es la cuestión.  Me suena a engaño autoinfligido, contentarme con que dije lo mío, cuando sé que nadie o muy pocos lo han leído. Debido a estas circunstancias,  que no son de dominio público, porque jamás hubo público para mis intentos literarios,  he decidido…    ¡seguir escribiendo y publicando siempre!   …pero a quienes no me lean, a partir de este momento, los mando a las putas librerías que le sacan la plata a cambio de basura. Los mando a los autores consagrados que se hicieron millonarios, con fama y poder, a costa de reproducir sutilmente el sistema absurdo del capitalismo imperante.  Los mando a los lugares comunes disimulados de snobismo y los mando a la cháchara infame de robarle ideas a los clásicos y mal traducirlas para los ignorantes.  En definitiva, y en esto quiero ser simple y al mismo tiempo profundo:   los mando a la puta madre que los parió, es decir, a la cultura imperante.   De mi no esperen nada, o esperen cualquier otra cosa que no sea, seguir mintiendo que no estoy triste, enojado, cansado y decepcionado…   de ser uno de los escritores menos leídos de la literatura universal.   
De dónde viene este dolor antiguo,mezcla de rabia sin causa,decir gritando lo que no aprendí a susurrar.No por gastar mi piel, lo sé, desnudaré mis huesos.Ni el ave que vuela tus sueños, será mío, lo sé.Ahora debiera cambiarle los pañales,al hijo que llamaríamos “nuestro”,y ya ves, apenas intento este poema.
Otros escriben como almas prístinas que derraman sus delicias. Yo escribo como el culo.  Así me lo hizo saber, alguna vez, cierto adversario ocasional.  No lo tomé como ofensa sino como elogio sutil.  ¿Hay algo más hermoso que un culo?  Pero ascendiendo al corazón, al mío, debo decir que no escribo como debo. No alcanzo a escribir como un perro astuto que liberara su lobo antiguo… y puesto en dos patas, hiciera el amor a la luna. Lo mío es otra cosa. Escribo como quien realiza un secreto exorcismo, para conquistar…     nunca sabré si un corazón… o quizás… el culo, de quien me lea.-  Y en esa faena,  yo entrego lo que se y me invento lo que desconozco,  pero lo hago de buena fe…      con la alegría de los niños que descubren un juego…    aunque lo mío, acaso, sea perder.  Hace bastante que derrocho ciertos retazos de poesía en Internet.  Y estoy totalmente convencido que nunca escribí bien, y sin embargo,  ¡qué cosas curiosas tiene la vida!,  me siento feliz…     feliz de mi obra, feliz de mis escasos pero excelentes lectores.   Ya lo ven,  Alfonsina Storni, Ernest Hemingway, Horacio Quiroga, Leopoldo Lugones, Cesar Pavese, Alejandra Pizarnick, Guy de Maupassant y tantos más…     escribían mejor que yo, y sin embargo, ya lo ven,  ellos se suicidaron, yo decido vivir. 
No hay un lugar en el mundo que no sea hermoso. Una higuera, un viejo arado enmohecido, un cañaveral simplemente la tierra seca y sedienta. Todo, todo es hermoso en la vida, y no hay geografía que no entrañe si bien se la mira, algo de sagrado, o si quieren, de mágico. Yo no sé por qué me ocurren estas cosas justo ahora, exactamente ahora, que creo no estar enamorado. Y soy pobre, y no tengo más que el fruto de mis manos, y mis manos se cansan, a veces, y también yo. Pero siento una alegría intensa, un íntimo regocijo, en esta soledad tan sola, que sin embargo, ya ven, me lleva a dialogar con todos.  Y me expreso, en este escrito, con la algarabía de un hijo, que veinte años después de su muerte, otra vez,  besa la frente de su madre…     que siempre vuelve. Si, he de confesarlo,  mi casa es el mundo, y mi madre, son aquellos que al leerme…    me regalan un momento, un pedacito de su frente.
Cuando duermo,  el mundo sigue al lado mío,  ignorando el ritmo de mi corazón. Y aquel río que no conozco canta, quizás, mi nombre mezclado, sabrosamente, con el tuyo   Cuando duermo, fluye invisible y tiránica la sabia por los árboles.   Cuando duermo algunas cosas pierdo, otras, las voy a buscar. Sin embargo duermo, como quien puede olvidarse un poco, del mundo, del río, del árbol.   Pero aun así no puedo olvidarme de vos y de esa parte tuya que soy yo.
Cuando duermo
Autor: Eduardo Fabio Asis  1017 Lecturas
Un frasco viejo de perfume contiene un antiguo “te amo” encerrado   y la higuera rasgada por el tiempo sigue diciendo…    “cuídame”, por favor…  “estoy abandonada”   el clavo herrumbrado que encontré en la calle me cuenta que aún es acero,  y puede servir de algo.   una cámara de fotos,  de esas que venían antes, sabe  que miró la alegría … y el dolor,  de algunos viajes.   Mi computadora, activa y solemne, quiere que escriba en ella, un poema mejor que el actual.   El crucifijo,  parece sostener la pared con su ternura débil, y emite el silencio amoroso de Dios.   Y el mate con su bombilla, que ahora estoy disfrutando, imprime en mi boca el beso, que nunca me dio la persona deseada.   Todas las cosas, tienen un lenguaje, que nuestro oído atento, puede escuchar.
Tengo la certeza de nunca haber dicho lo que quería decir. Y a veces, quizás, lo dije bellamente. ¿pero qué es la belleza que no rescata la verdad del pozo inmundo donde la hemos ocultado?  ¿qué es?  sino una cómplice y una miserable?   En vano pretendí alumbrar con mis palabras la oscuridad. A lo oscuro, amigos, debí nombrarlo con mi voz negra y punto. Que los niños de este mundo se están cagando de hambre, algunos, o se están preparando para cagarlos de hambre a otros, otros. Esa es la cuestión. Allí el futuro, empezó, lamentablemente ahora. Y nunca pude decirlo y nunca supe decirlo y nunca quise decirlo...  como un poeta puedesabe...     y no me equivoco al unir la palabreja, que poeta sólo es el que así, todo junto, puedesabe... sí puedesabe...   desentrañar de la aparente belleza la tremenda mentira puta que esconde. Los niños de hoy, en cuanto a los niños que nosotros conocemos, son los verdugos de los niños de hoy que no conocemos. Ellos...  los desconocidos,  los miserables, los que no tienen que comer, los que nunca conocemos...   ellos...    serán en días más...  torturados por ellos...   los niños que hoy vemos...   empiezan a imitar de nosotros, sus iguales, esa costumbre de hacerse los boludos...  frente al crimen, frente a la miseria... frente al pecado estructural de la pobreza.-  Tengo la certeza, otra vez, de no hacerme entender. Pero por lo menos, esta vez, lo intenté.  
Cuando los niños dialogan entre sí,  en su aparente sinrazón, en sus visibles torpezas, están en realidad urdiendo un plan de vastísimas consecuencias, cuyo destino conciente es dominar a las masas...  de adultos, claro, y someterlos a sus designios. Lo que acabo de revelar, quizás muchos no lo crean, pero será tarde cuando se den cuenta que efectivamente es así.  Con el tiempo, ya lo verán, los niños dominarán el mundo.  Pequeños zorros y pequeñísimas y astutas brujas,  como decimos habitualmente, niños y niñas,  muy pronto, amigos, nos guste o no, dominarán el mundo.  Y nosotros...  ¡merecido castigo!  estaremos donde tendremos que estar...   en geriátricos y tumbas.  Puedo asegurarles que lo QUE digo es infalible, auténtico y ...    ¿se dan cuenta, amigos , que es verdad?    
No hay un ser humanopor ruin o malsanoa quien no debamosagradecer algo.A Jorge Videlamonstruoso tiranomuchas gracias le doypues me ha enseñadoa odiarlo de veras.Y cuando al fin mueradetrás de las rejasperdonaré sin olvidosal triste asesino.QEPD
La gata oscurapasea por el techosu soledad. Fiel al encantomenea en cuatro patas¡no ser mujer! Libre de miedosalta sobre mi sueñoesfumándose.
    Primero:   está en contra de la naturaleza.   ¿acaso los homosexuales son seres artificiales? ¿acaso los homosexuales no comen y duermen, no respiran y cantan, no sueñan y se bañan, no mueren como morirán algún día los homofóbicos?   Segundo: está prohibido por la biblia.   ¿se tomaron el trabajo de leer el interesante aporte en contrario del padre John Mc Neil, amparado por el superior jesuita en olor de santidad, padre Arrupe, y expulsado por el lamentable cardenal Ratzinger (vivo, en olor de error permanente)?   ¿saben lo que dijo el mismísimo Rey David ante la muerte de su amigo Jonatan?   ¿saben que Jesús nunca se refirió a la homosexualidad?   ¿saben que San Pablo es el único que condena, pero no a los “afeminados”, como se tradujo erróneamente,  sino a los que practicaban culto a divinidades extrañas?   ¿leyeron al ex sacerdote John Mc Neill sobre las traducciones alteradas del texto paulino?   Tercero:   afectará a los niños.   ¿no es mejor que los niños, desde muy pequeños, conozcan la verdad, y sepan que hay personas diferentes, antes que mentirles?   ¿por qué estafar a la infancia, y hacerles creer que todos somos iguales?   La lista continúa, pero muchos prefieren el placer de condenar a los demás, y la satisfacción de mantenerse en sus prejuicios.  La homofobia, es un pecado, la homosexualidad, no.
Ahora te pienso,  abuelo alto como un árbol solitario y en la corteza tallar mi nombre para que otros reconozcan que soy tu nieto inderogable.       Eras un turco más que vendía peines en las calles de largas cabelleras en el antiguo Buenos Aires.   Pero no eras un turco, como decían, sino un sirio y no vendías peines, sino la alegría de mirarse en el espejo con la cabeza prolija.   Supe de vos que enamorabas mujeres hermosas, solteras y casadas,  gozosas y frígidas,  y alguna vez , me engendraste un padre, en mi abuela siciliana.     Ahora te pienso, abuelo y no puedo aceptar que cuando yo nací había sido arrancado, tu árbol, y mi vida retoñaba desde tu ausencia, desabuelado.    
Digan de mi lo que quieran. Mejor. Sigan sin decir nada.     Pero les prohíbo terminantemente sospecharque habito el mismo mundo de ustedes.     Antes de eso, llevo mi dedo índice a la sien y me disparo.     Ordeno ser peor, jamás, ser igual a vos.
Había escrito algunas palabras ciegas, para enseñar el camino a los videntes.  Unos mamarrachos con ínfulas de poema,  algún comentario más inútil que yo mismo, y otro tipo de disparates con aire poético.  Quería ser escritor, la puta madre.  Y no hice más que molestarme mucho, para no molestar a nadie.  Mi obra no mereció ni siquiera, un insulto grave.  Nadie en el mundo me odió, un poco, al menos.  Esa es la prueba irrefutable, en un mundo opresivo, que no fui un libertario, ni siquiera, en ciernes. Soy repetidor de las palabras que otros inventaron, para explotar con sus privilegios, la norma eterna que eternamente nos señala…  “somos todos diferentes, por eso, somos iguales”….    y sin embargo, carajo, siendo tan simple,  cuesta tanto…
Aúlla el hambre de tanto lobo y nunca nadie mordió a la luna. así la noche,  mece en su alma, secretos de sangre que no es.   Como no imaginarme otro, en este cielo negro, en esta ciudad vacía mi canto de sol y de pueblo mudo deshabita quien soy.   Después de tanto,  jamás de todo, he despertado vivo, en la mitad de mi muerte.
Críptico Uno
Autor: Eduardo Fabio Asis  690 Lecturas
Yo desprecio la jauría inhumana que desoye mis ladridos sin precio y me ningunean los que son necios cuando regalo poemas de mi alma   me desconocen porque les da gana ignorarme con claro menosprecio y devaluar mi obra a menos de un tercio humillando mi deseo de fama   ¿Qué importa que en sus corazones ciegos no alumbre mi literatura plena? yo seguiré alimentando talentos   mientras pienso para que nadie lea el soneto entrañable de mi anhelo igual lo logro tras dura faena.
Estoy sorprendido porque en la palabra alegría, cabe la alegría. Y se desborda y crece…  como un racimo de uvas bajo el sol de Enero…    y canta en la boca su vocación de vino…   estoy sorprendido, y no salgo de mi asombro.  A veces, aunque no lo creas, en la palabra amor se dice el amor,  y cuando se nombra esperanza, en la pared más dura, se abre una hendija. Por allí se mira, exactamente, la estrella que lleva tu nombre. Estoy sorprendido,  y no quiero resignar esto al silencio, porque la lluvia incesante cae y cae…  sobre mi recóndito desierto…  y crece…  ah! si…     un jardín infinito en cada letra.- Yo no soy digno de pronunciar la palabra, y ya lo ven, lo mismo lo hago.  Horadando el sentido, que a veces se me escapa, montado en los sonidos, voy diciendo palabras. Y estoy más sorprendido aún, porque aunque parezca mentira, quizás, alguien me escucha.¿Y quién dijo que soy aquél que alguna vez pobló tu oído?  Parece mentira, pero es verdad, como que Dios existe, que tú estás ahí y yo aquí, y sin embargo, por el milagro de la palabra…   somos uno…   tú y yo.  
  Yo habité aquel poema tuyo otros, en cambio, sólo lo leyeron. ¿Qué importa si debo morir algún día? Yo habité aquel poema tuyo y nunca te diste cuenta de ello. Con mis alas desnudas pisé tu territorio del cielo y como sentía mucho frío me vestí con tu pluma caliente. Ya mi único nido será volar volar hacia otros poemas volar, quizás, para siempre.
De caricias hondas sobre mi almaque nunca llegarontengo el cuerpo cansadoy bajo la sombradel árbol infinitopresiento tiritar de frío al sol.Mañana será otro díay otra mujer convocará mi canto.Mientras tantome une ese misterio de saberla nacidanacida y calladacomo este mismo llanto.
Poema apurado
Autor: Eduardo Fabio Asis  865 Lecturas
++++
Sólo es verdadero el solcuando la noche es más oscura.Allí las tinieblas enciendentu lado más creativoy desde esa luz giran contentostus mejores sueñosy tus derrotas peores.Es imposible haber vividosin antes crear el sol.Vivir con la lumbre prestadapor regalo gracioso del universoes nunca haber vivido nada.Nunca es más auténtico el amorque cuando creemos que no existe.
Paradojita
Autor: Eduardo Fabio Asis  810 Lecturas
+++++
Nadie leyó sus palabrasteñidas de tanta nostalgiaque fueron cincelando,  acero afiladopara clavarse en algún almay comunicar, alegría o rabia.Nadie leyó sus palabraspero las escribía como quien concibedesde la nada de la nadaalgún universo errante.Nadie leyó sus palabrasni siquiera algún desconocidode una esquina distante.Y sin embargo ese ser era un poetay nunca lo supo nadie.
Poeta ignorado
Autor: Eduardo Fabio Asis  328 Lecturas
++++
A veces, los otros, están contentosy lucen una sonrisa exquisitaque justifica el universo.En sus bocas abiertas como un espejomiramos a través de ellos, nuestra alegría sin miedo.Pero otras, los otros, también llorany una lágrima suyabrota de nosotros mismospor los ojos de los otros.Lástima enorme, que muchas veces los otros,ríen en si mismos, lloran en si mismosy entonces los otros son simplemente los otrosy nosotros...   nos quedamostan solostan sin reírtan sin llorartan sin otros para nosotros.

Seguir al autor

Sigue los pasos de este autor siendo notificado de todas sus publicaciones.
Lecturas Totales272710
Textos Publicados514
Total de Comentarios recibidos2685
Visitas al perfil70056
Amigos117

Seguidores

12 Seguidores
felicidad
Jose Mondragon
Jesus Dante Vega
esmeralda
Daniel Solamente
Guadalupe Mendoza
Cristian Medel
Senior
anaid
Lola
Alma Andrea (Alma V)
Elektra

Amigos

117 amigo(s)
JUNTALETRAS
victor salmeron
Micaela
El...vi...ra
Oscar Ruano
ALEJANDRA OÑATE
Daih
maria del ...
lorena rioseco palacios
Mariana de Jesús
jesus.bardon.11
Veronica Molina Diaz
German Karel Hanisch
Eduardo Cle Vicente
Marcelo Ignacio Mendiburu
un sentimiento
javier castillo esteban
Q
Battaglia
Nhaum Alejhandro Ohrozco
ALFREDO MENDIOLA
antonia
lourdes aquino
Enrique González Matas
marlyn ruiz
La chica del dragón tatuado
daniel desantodomingo
Deborah Gomez Archetti
Olga
Exu
Michelle
Esther Cohen
José Gregorio Cova Cordero
giovanna robinson rangel
Maximiliano Rodriguez Vecino
IIrma Esther Pavon
Giovanni Hernando Rodiguez Laverde
Gustavo Adolfo Vaca Narvaja
Paga Nini
Miriam Argintxona
YSA SOTO
Les Liébana
john jairo toro gonzalez
Amputando sueños
Luis Antonio Aranda Gallegos
David Moreno Fliess
Ana Belen Codd
jainer genes guzman
ayinray c.p
Singer
BRISA_
Betsabe
Marcelo Sosa Guridi
Juan Carlos Calderón Pasco
Alan Estefan
AMADOR
Enrique Dintrans A:
Gustavo Adolfo Baracaldo Valero
amelia
mariela ramia
Turmalina
Amberian
MARINO SANTANA ROSARIO
carolis
Alexandra_sol
Caranndor
Santiago Herrera
Durazno sangrando
Héctor Restrepo Martínez
Johel Delacroix
Rolando Perez
Oscar Franco
Marìa Vallejo D.-
luis josé
José Luis Marrero
Francisco Perez
alma
Hoz Leudnadez
Jesus Eduardo Lopez Ortega
Luis Alcides Aguilar
Dayana
Ya me fui (That's all, folks!)
Mastromoro
Daniel Florentino López
María José Schiavi
Oscar David Gomez Del Valle
michum
XX
Eli
Ligia
María de la Paz Reyes de Langella
Darth Klauss Demon
Jorge Dossi
Edgar Omar Neyra
María Ester Rinaldi
Carol Love
pablo Laudín
Serena-SilviaMonica Alfano
nydia
Guillermo Capece
 
Eduardo Fabio Asis

Información de Contacto

Argentina
-
-

Amigos

Las conexiones de Eduardo Fabio Asis

  JUNTALETRAS
  victor benitez
  MMicaela
  Siemprelvira
  oscarruano
  alhejax
  Daih
 
  Lorena Rioseco Palacios
  Mariana de Jesus
 
<< Inicio < Ant. [1] 2 3 4 5 6 ... 12 Próx. > Fin >>