Es la hora en que relego al tactosubir por tu espalda sin usar un cayado.Debajo de tu piel te domesticascomo una fiera entregada a las rimas.Subo hasta los bordes de tu cuelloa través de tus blandos lineamientos.Y todo en ti es amor vibrantecomo sueles volverte cada tarde.Y si bajo a la frontera de tu espaldame besas con tu boca nacarada.Y estamos sedientos sobre sábanas verdessin titubear del fuego que nos mueve. 

He aquí un punto de llegadaadonde vine vestido de palabras.Traía acentos en valijasy algunas que otras rimas silenciosas.Traía el brillo de unos astrosy algunos pedacitos de asteróides.Traía mi molécula y mi átomoy el dulzor del pomelo en mis pómulos.Y entre mis dedos sin destrezastracé una cordillera de caminospara llegar en la luz de unos versosa dejar como ofrenda una corta carrera.Y entre las cosas impuras y divinashe cantado a aciertos y desaciertos.Ahora llego a estos puertos de albay son mucho más fuertes los bríos que me empujan.Y desde este punto de llegadacomienzo a transitar hacia otros arrecifes...Y no creo que haya nada que lo impidasino la muerte de ardores sudorosos.Por demás sigo mis vías solitariasy según mis fuerzas trabajo contra el tiempo 

Mientras me hablabas y yo te miraba, se detuvo el tiempo en medio instante: el amor me llamaba y yo le obedecía. Mientras me susurrabas y yo te amaba, se alzaron los sentimientos, mandó tu voz, el cielo se hizo visible en tus ojos, y yo pronuncié el querer en tus labios.

Lágrimas con emociones,llenas de ti y de mí,llenando surcos de pasión,aclarando tristezasy llenando melancolías, lágrimas para quererte,y secarlas con sentimientos.

Quiero el claroscuro de tu sombray los componentes de tus formas eróticas.Quiero tu arremetida de agua dulcesobre este pecho que hoy te conmemora.Quiero de ti tus manos principescasy tu silueta de duna dilatada.Quiero tus manos recubiertascon mis aminoácidos y mis moléculas.Y quiero para mí la última graciade componer contigo una mirada.Y de mis íjares me darás un hijomientras la luna nos cela sin motivo. 

Eres para mí en el nocturnoenredadera que gime en emolientes.Cabellera dorada que vuela y me derrota.Rosa blanca donde caen mis instintos.Cruzada por los mares planetariostu boca de mareos me somete a vahídos.Sales recortada desde un faro de brumaa darme tus racimos de absolución completa.Y mientras se vacían las bahías efímerastu cuerpo me recorre con tu sabor a savia. 

Tengo prohibido el Paraíso                        si no entro contigo.La más dulce de todas las manzanas                        es la que de ti nace.Eres para mí cielo en la tierra                       y yo milito en todas tus sentencias.Tu esencia para mi es aroma nuevo                       en que me muevo recibiendo piedades.Cuando corres hacia mí tus valles tiemblan                        y son fértiles tus valles y planetas.Eres aquella que al hombre glorifica                        mientras la tarde muere con sus enigmas. 

La luz es bendita y se levantasobre las cúpulas de las sacristías.Sus manos hacen arquitecturasque vuelven palpables a las aristas.Se desparrama encima de las velassubiendo por todos los tramos del incienso.La luz crea pasillos en las sombrase ilumina las sienes con sus eternidades.Traspasa los cristales de efeméridey hace notoria la risa de los niños.La luz esculpe los cuerpos en el díay quebranta la noche encima de una antorcha.

A mi tacto de agua se relaja tu cuerpoque siempre es brasa viva cuando toma distancia.Desde mis dedos llueven caricias en levanteque llegan a atenuar el Simún de tu vientre.Creo una ventisca entre tus lentos senosy desde allí te inundo con mis besos eternos.Y entre los bastidores de la noche estrelladacabalgamos los dos: Cuerpos al alba. 

Vienen con la mañana las palabras ligerasy me suben como yedras deseosas.Pero no quiero sino mirar al aireque construye y levanta las alas de los pájaros.Los arbustos amanecieron sensitivos y parecen hechos de un alambre nuevo.Hay rosas que se tejen en mis porosy clavellinas que agarran mis zapatos.Al final soy yo con la naturalezaviendo hilarse los elementos impetuosos.La mariposa se mece en su aleteoy se posa sobre el pico del canario.El agua es cantarina en los riachuelosy desborda las piedras esmaltadas.Más yo no cedo al acoso de los versospues por primera vez la vida me domina. 

La mujer que duerme a mi ladotraza en su sueño un nuevo día.Todo lo ve cubierto de cameliasy piensa en lo bueno de la extinción del hambre.Salen carcajadas de su boca de lumbresi repasa a los payasos de su infancia:Se ha encadenado al sueño de los mansosque respiran en un mar de quimeras. Pero la guerra asecha sus sentiresy se acerca borrando población y palúdicos.Entonces ella fruñe el entrecejoy se mueve como una suave campana.El olor del café colado la despiertay vuelve en sí en la mañana sensitiva.Desayunamos panecillos y cerezasmientras la vida en sus saltos nos retoma. 

He aquí la soledad del mundola que traspuso horizontes para no ser hallada.Se encuentra apilada como leñosy distante de incendios y fogatas.Aún acarrea pesos tristesy algunas cuantas vetas perfumadas.Más su corteza sigue siendo sólidacomo si de un barniz eterno se tratase.La golpeo con mi hacha de añosy la hacino para hacer una cabaña.Esta será morada a mis instintosy guarida que el dolor ya no visite.Aquí fabricaré amplias ventanaspara que Saturno venga a darme su soláz.La savia de las flores me será de alimentoy nunca más me echaré a ser triste. 

Hoy me desperté pensando que ya no te quería Por la mañana me envisto de dulces sonrisas fingidas Me envuelvo de mascaras y canciones alegres Maquillo mis tristezas con caricias y besos Me interno en el mundo en busca de sangre Que sofoque la sed del sufrir y calme las heridas Me enfrasco en una vida ocupada y arriesgada Con besos y caricias extrañas busco cobijo Entre cigarrillos y humo apaciguo el reloj Evado los disparos certeros que da la nostalgia Cazando entre la gente unas gotas de vino bueno Que calme el fuego que desgarra mis venas Oculto la mirada de quien busca profanarle Y regalo poesías a doncellas sin velo Disfruto la vida al paso del vuelo… No importa que el mañana muera luego… Pero cuando tu recuerdo me alcanza Se derrumba mi espectáculo y orgullo Las rodillas se me desploman a cada segundo Triste y desahuciado me enredo en cobijas ajenas Pero algo falta, algo que solo tu magia crea En cada cuello busco el aroma de tu cabello En cada risa la tonada de tu alegría Pero es solo el alcohol que juega conmigo En mi embriagues busco tu voz en la noche Tus ojos en el cielo y tu sonrisa en la luna Pero solo me estrello en un muro de lamento Me vence el cansancio con tu nombre acariciando mis labios Y al día siguiente despierto pensando que ya no te quiero…

Son gríses las ruinas en este fin de año:Grises como el descampado en el que acampan.Alguien dejó allí su silueta de siglosposando una mano que desprendía aromas.Yo las veo derruídas al borde del sigiloy me parece ver las danzas que bailaran.Es un sitio de recuerdos soterradosdonde se palpa espíritu aún en el destrozo.Aquí se vieron batallas anhelantesy el enemigo les enterró su espada.El torrente de agua se vistió de sangre.La mujer de hojarasca falleció entre sus hojas.Y los niños suspiraron por la leche maternaantes de ser comidos por la flama.Pero la flor de lis perfuma los escombrosy muestra que la vida se labra su camino.