• Jose Miguel Saavedra Garcia
Jose Miguel Saavedra Garc
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El Invitado. Por: Miguel Saavedra.   Personajes: José. Director. Betsy. Recepcionista. Soe.                                 Esta escena se realiza en un teatro, ya está todo listo para la puesta en escena, el director quiere ir a la televisión, al programa de las dos, a promocionar la obra de teatro. Director- Necesito que vayas al canal cultural, a sacar cita en el programa de las dos, para darle promoción a la obra de teatro. José- ¡Esta bien! Director- También pasa a la agencia de Publicidad, por las lonas que mande hacer. José- Sí. Director- Fíjate que no tengan errores, las fechas de las funciones. José- Yo me fijo. Director- Porque la última vez que mande hacer unas lonas, las fechas estaban mal. José- No se preocupe. Director- ¿Cuándo vas a ir? José- ¡Si quiere ahorita mismo! Director- ¡Anda ve! Esta escena se realiza en el canal cultural, en la recepción de éste. José- (Entra). ¡Buenas tardes! Recepcionista- ¿Qué se te ofrece? José- Vengo a preguntar si me podrían invitar al programa de las dos, para darle promoción a una obra de teatro. Recepcionista- ¡Claro!, ¿Cuándo es el estreno? José- De este domingo, al que sigue. Recepcionista- ¡Oh!, Te podemos invitar el miércoles, de la próxima semana. José- ¡Perfecto! Recepcionista- Llega veinte minutos antes, de que empiece el programa. José- ¡Está bien! Recepcionista- Trae un cartel para que lo enseñen en la entrevista. José- Sí, yo traigo uno, ¡nos vemos! (Se retira). Recepcionista- Que te vaya bien, ¡te esperamos! Apagón. Esta escena se realiza en el canal cultural, es el día de la invitación al programa, José está en la recepción. Recepcionista- ¡Hola, José! José- ¡Hola! Recepcionista- Espérate un rato, en lo que llega Betsy. José- ¿Quién es Betsy? Recepcionista- La conductora, ella te va a entrevistar. José- ¡Ah! Recepcionista- ¡Mira, ahí viene! Betsy entra. Betsy- ¡Buenas tardes! Recepcionista- Este es el muchacho de la obra de teatro. Betsy- ¡Oh!, Nosotros te vamos a hablar, vas a ser la segunda entrevista. José- ¡Está bien!, ¡Gracias! Esta escena se lleva a cabo en el estudio de televisión. Betsy- Si ustedes quieren ir al teatro, les tenemos una opción, (A José). Dinos José de tu puesta en escena. José- ¡Gracias por la invitación!, este domingo vayan al estreno de “El cazador de fantasmas”, de Miguel Saavedra. Betsy- ¿De qué trata esta obra? José- Se trata de un actor que se muere, pero no les cuento más, mejor vayan a verla. Betsy- Bien amigos, les hizo José una invitación, para que vayan al teatro, a la puesta en escena, “El cazador de fantasmas”, ¡Yo voy a ir! José- ¡Te esperamos Betsy! Betsy- ¿En qué teatro va a ser la obra? José- En el “Teatro del deportivo”. Betsy- Ahora nuestro siguiente invitado, nos va a cantar con su guitarra, canciones de su inspiración. José sale del estudio, se despide a señas y se dirige a la recepción, Betsy y el cantante hacen mutis. José- ¡Gracias! Recepcionista- De nada, estamos para servirte. José- Estaba viendo que invitan a artistas. Recepcionista- Sí, ¿Por qué? José- Porque me gustaría saber, si me podrían invitar, para dar un recital. Recepcionista- ¿Tú? José- ¡Sí, yo! Recepcionista- Nada más porque se trata de ti, que eres actor, te vamos a invitar. José- ¿Cuándo? Recepcionista- Ya tienes los poemas memorizados. José- Todavía no, pero para la próxima semana, los tendría listos. Recepcionista- Cuando tengas el número preparado, regresa para que te invitemos. Apagón. Esta escena se realiza en el canal de televisión también, en la recepción, José tiene el número preparado. José- ¡Buenos días! Recepcionista- ¡Hola!, ¿Cómo estás? José- Bien, ya les traigo el número preparado. Recepcionista- ¡Ah, sí!, déjame preguntarle a Betsy, cuando te podría invitar. José- ¡Claro!, (la recepcionista busca a Betsy para preguntarle, después de un momento regresa). Recepcionista- Oye, me dijo que vinieras el martes, un poco antes de las dos, vas a ser de los primeros invitados. José- ¡Gracias!, nos vemos el martes. Recepcionista- ¡Está bien! Esta escena se realiza en el estudio de televisión, unos momentos antes de entrar al aire, es el día de la invitación de José al programa. Betsy- ¿Cuántos poemas vas a recitar? José- Dos. Betsy- ¿Los vas a leer? José- No, los traigo memorizados. Betsy- ¡Ah, bueno!, ponte el micrófono, porque ya vamos a entrar al aire. (Entran al aire). Ya estamos de regreso con nuestro amigo José, que nos va a recitar unos poemas, (A José), dinos José que nos vas a recitar. José- Un poema que escribí y otro de un poeta conocido. Betsy- Muy bien, comienza. Apagón. Esta escena se realiza en el corte, después del recital. José- ¡Gracias por invitarme! Betsy- De nada, ¡Te quedaron muy bien! José- A ver cuando me vuelves a invitar. Betsy- Yo te hablo por teléfono, ya tenemos tus datos. José- Nos vemos. (Sale del estudio). Esta escena se realiza en el teatro, después del estreno de la puesta en escena. Director- Les quedo muy bien, ¡Felicidades! José- ¡Gracias! Director- Ahorita que cerremos el teatro vamos a ir a cenar con el maestro de cultura. José- Yo no voy, estoy muy cansado. Director- ¡¿Y eso?! José- Aparte mañana tengo que trabajar. Director- Está bien. José- ¿Cuándo nos vamos a volver a ver? Director- Los cité este miércoles, para ver lo de una nueva obra de teatro. José- ¡Nos vemos el miércoles! Director- ¡Que te vaya bien! Esta escena se realiza en el periódico, donde trabaja José, su compañero Soe está platicando con él. Soe- Y cuéntame, ¿Cómo te ha ido en el teatro? José- Bien. Soe- Yo estoy escribiendo un artículo acerca de teatro para niños. José- ¡Ah, sí! Soe- Te ves algo cansado últimamente. José- Sí, lo que pasa es que he estado muy ocupado. Soe- ¿Por qué?, ¿Qué has hecho? José- He ido a la televisión, a recitar poemas y termino cansadísimo. Soe- Debe ser, porque el periódico, luego el teatro y la televisión, es mucho trabajo, te recomiendo que dejes algo. José- Tienes razón, ya no voy a ir a los recitales de la televisión, para no cansarme tanto. Soe- Es una buena decisión, hay tiempo para todo. José- ¡Así, es! FIN.    
Amor Vampiro. Por: Miguel Saavedra.   Bety está arreglándolo todo, puesto que hoy va a salir en una obra de teatro, revisa que todo esté completo, el maquillaje, se cerciora de guardar el libreto en la maletita, donde llevará el vestuario, son las cuatro en punto, la función es a las seis, el teatro queda cerca de donde ella vive, entonces se sube al auto y se dirige a éste. Bety ha llegado, en el teatro está una compañera que acaba de llegar también, tenía la llave y abrió, el director se la dio, hablan acerca de la función en la que actuarán, en eso llega otro compañero, poco después el director; Al llegar todos, lo preparan todo para que la función comience y se haga un buen trabajo, como las pasadas funciones. Ya van a dar las seis, todos tienen el vestuario y maquillaje, los muebles ya están en el escenario, la función está por comenzar. Ha terminado la función, el público aplaudió, señal que les gustó mucho la obra de teatro, todos en el camerino están felices, porque todo resultó exitosamente, Tomás les da abrazo a todos y les dice que felicidades por una obra más, se acerca a Bety, la abraza y le da un beso. Tomás es un actor que acaba de entrar a la compañía de teatro, una amiga lo invitó a trabajar en ésta, la amiga es amiga de Bety también, y ella le presentó a Tomás, después se hicieron novios, llevan poco tiempo con ésta relación, Bety está convencida de que Tomás es un buen muchacho y que puede cambiar su forma de ser, él es un poco desastroso, pero buena persona, eso es lo que opina Bety de él. Tomás y Bety se van al cine, a tomar un café, raras veces van a antros a bailar, ella vive con sus papás todavía, y él vive solo, él aparte del teatro tiene otro trabajo y con eso se mantiene, sus padres le permiten vivir solo, ellos no saben que es una persona desastrosa. Ya han pasado varios meses y la temporada en dos meses se acabará, están ensayando una obra de teatro nueva para la próxima temporada. A Bety no le gusta la actitud de Tomás, pero ella está convencida que él cambiará. Los meses han pasado y la nueva temporada ha empezado, el director tiene un poco de problemas con Tomás, porque él es una persona difícil y voluble, fuera de eso las funciones de teatro no tienen problema. Tomás parece ser cada vez más difícil, nadie los soporta, el director le ha dicho que en cuanto se acabe la temporada, él estará fuera de la compañía, porque su actitud es inaguantable, Bety por su parte cree que Tomás cambiará, está convencida que así será. Han empezado con la lectura de libretos de la nueva temporada, el director le ha dicho a Tomás que ya no quiere que trabaje con ellos, porque su actitud es insoportable. Se va de la compañía, se despide de todos y todos le dicen que cambie. Tomás llama a Bety por su celular a los pocos días después que el director lo corrió, le dijo a Bety que quería hablar con ella, se quedaron de ver en un café. Bety está esperando a Tomás en el café donde se quedaron de ver, al fin llega, la saluda, le da un beso y le dice, que lo estuvo pensando bien y que se quiere ir de la ciudad, a encontrar nuevos aires, que si lo quiere acompañar. Ella le dice que no sabe lo que dice, que es algo muy precipitado, que lo tiene que pensar, que no sabe si podrá porque sus padres, tal vez no le den permiso de irse con él, porque son un poco tradicionales. El le dice que hable con sus padres, que seguramente ellos aceptarán, ella se muestra un poco desinteresada por decirle a sus papás, pero les dirá que quiere empezar una nueva vida con Tomás, aunque sabe que no querrán, Bety habla con sus padres acerca de irse con Tomás, pero ellos no aceptan, le dicen que lo piense bien, que Tomás se está precipitando en tomar decisiones, que tal vez no es una buena idea. Bety lo comprende pero insiste un poco, sus padres le dicen que no quieren que ella se vaya. Bety le dice a Tomás que sus padres no le permitieron que se fuera a vivir con él, también le dijo que tendría que dejar la compañía de teatro, que si tal vez hablara con el director, él le diera una nueva oportunidad de volver a la compañía; Pero Tomás le dice que no, que las cosas no pueden cambiar, que irse a buscar nuevos aires es lo mejor, entonces él le propone que ella se vaya con él, aunque no le den permiso, que deje el teatro y empiece una nueva vida, ella finalmente acepta irse sin el permiso de sus padres. Todo está arreglado para irse, solo falta que Bety deje una carta dirigida a sus padres, diciéndoles que se va, que no se preocupen y que todo estará bien, que los quiere y recordará siempre. Bety deja la carta sobre la mesa de noche de su recámara, ella espera que no se enojen sus padres, Tomás y Bety empiezan una nueva vida. Los días han pasado y los padres de Bety no saben nada de ella, han hablado con los padres de Tomás, pero ellos ignoran si ella se fue con él, los padres de Tomás acordaron preguntarle a él acerca de ella. Tomás le dijo a Bety que sus padres preguntaron por ella y que él les dijo que no sabía nada de ella, Bety se muestra angustiada por las acciones que ha hecho, pero no le importa porque ella piensa que todo estará bien. La nueva vida de Bety y Tomás ha comenzado, ellos están buscando una compañía de teatro, en la localidad a la que se mudaron y un trabajo. Los meses han pasado, Bety y Tomás encontraron una compañía de teatro local, poco después de llegar a la nueva ciudad donde se establecieron, se acomodaron en la temporada que estaban presentando, el director les dio un papel rápido, porque no tenía actores, también encontraron trabajo, ella en una agencia de publicidad y él de maestro en una escuela. Todo está bien, Tomás sigue con su misma actitud desastrosa, Bety vive angustiada por haber abandonado a sus padres, pero fuera de eso todo es normal, de lunes a viernes en la tarde van al teatro a ensayos y los domingos son las presentaciones. Tomás es cada vez más indeseable, Bety no lo puede soportar más, se han disgustado por pequeñeces; Están a punto de comer, cuando suena el teléfono, es una compañera del teatro, quiere hablar con Tomás, Bety se lo comunica. Tomás habla por teléfono con Adriana, hablan poco, de cosas acerca del teatro y de cosas sin importancia, cuelga el teléfono y Bety le pregunta que para qué le habla, como si no supiera las actividades del teatro, Tomás le dice que no se moleste, que es simplemente una amiga; Tomás le comenta acerca de lo bien que trabaja en el escenario Adriana, Bety opina sin importarle nada de eso, ella se pone a pensar que Tomás la está engañando con Adriana. Bety está en una cafetería a la hora de la comida, de su trabajo, hoy saldrá a las seis P.M., ella se está tomando un café en lo que una de las muchachas del café le dice, -Oiga, salió en el periódico de hoy-, a ella le extraña, de momento pensó que serían sus padres, con un llamado de un extraviado en el periódico, Bety le dice a la muchacha que le muestre el periódico. Bety y algunos compañeros del teatro salieron en el periódico, hicieron una noticia de la última presentación; Bety le pregunta al director acerca del acontecimiento, y él le dice que sí, que fue la prensa a la pasada función, Bety está emocionada porque salió en el periódico, cree que así tendrá más admiradores. El padre de Bety tiene un par de clases en la universidad, ésta tiene un campus en la ciudad donde Bety reside actualmente, en ésta universidad hay un sobre, que tiene que ser enviado a la universidad donde trabaja el padre de Bety, el mensajero se irá en carro hasta la otra universidad, en el carro hay un periódico del día donde salió Bety y sus compañeros del teatro. El mensajero ha llegado a la universidad, entregó el sobre en la rectoría y se encontró al padre de Bety, se saludan y el padre le dice que lo lleve a su casa, porque el carro lo tenía su esposa, el mensajero le dice que sí, se suben al carro y el padre de Bety ve el periódico y ve la foto de su hija con sus compañeros de teatro. Bety tiene que ir con un publicista de su trabajo a tomar unas fotos, para un anuncio en una revista que hacen en la agencia; El se llama Benjamín y es muy misterioso, Bety tomó fotos de un negocio, tienen que ir a otro, Benjamín es simpático y ha empezado una amistad con Bety, ella piensa en Tomás, pero también piensa en su amiga del teatro, que le llama a casa para saludarlo. El padre de Bety le enseña a su esposa el periódico donde sale Bety, ella se siente muy feliz de volver a saber de su hija, estaba segura que nada malo le había pasado, ellos se quedan con la esperanza que les llamará pronto y que todo está bien. Tomás está en el teatro platicando con Adriana, su amiga y compañera del teatro, Bety está por llegar de la agencia de publicidad, a las 4:30 es el ensayo. Tomás platica con Adriana acerca de la temporada, de sus gustos musicales; No pudieron más y se dieron un beso en la boca, Bety está llegando y ve todo. Bety no sabe qué decir, de la mejor manera se fue de la compañía de teatro y de la casa donde vivía con Tomás, se mudó con una amiga de la agencia de publicidad, está muy confundida, se cambió a otra compañía de teatro, Benjamín visita mucho a Susana, su compañera y amiga de la agencia. Bety se ha dado cuenta de lo amigable que es Benjamín, le cae muy bien, Susana le dijo que Benjamín le preguntó si tenía novio. Eso la ha hecho pensar que podría empezar una nueva relación con él. Bety y Benjamín ahora son novios, él tomó la decisión de preguntarle a Bety si quería ser su novia, un día al salir del trabajo; Ella aceptó. Han ido al cine y han ido a una cafetería cerca del trabajo, se entienden bien. Benjamín le dijo a Bety que quería hablar con ella, ella le dijo que estaba bien, le dijo que se vieran en una cafetería a las 4:00 pm, ese fin de semana, le dijo que era algo muy importante. Ellos se han encontrado en la cafetería, el llegó con unas flores, a ella le encantaron, la hora de hablar había llegado, Bety le pregunta que de qué quería hablar y él le dice que no sabe como lo tomará, que es algo muy serio, ella le dijo que le dijera, sin rodeos y él con un poco de nerviosismo le dice que él es un vampiro. Bety al oír lo que dijo Benjamín, se sintió impactada, no supo que decir, por un momento pensó que él estaba bromeando, pero Benjamín le dijo que no era broma, ella está muy confundida por la noticia. Bety ama a Benjamín, pero ahora que sabe que él es un vampiro, ella no sabe si lo podrá querer igual, porque no es una persona como todos, pero ella lo intentará y lo seguirá queriendo como si nada hubiera pasado, al menos eso piensa.  Bety ha seguido con el noviazgo, también ha seguido trabajando, piensa que debe hablar con su mamá para decirle donde está y las cosas que le han sucedido, ella le hablará por teléfono, a la hora de la comida. Los padres de Bety se alegraron mucho al saber de su hija, se les quitó un gran peso de encima, Bety le dice a su mamá que la visite a la casa donde ella vive, aunque sea unos días, ella acepta. La madre de Bety al fin se volvió a encontrar con ella, están muy felices, Bety le cuenta de la nueva relación que tiene con Benjamín, pero no sabe como decirle que es vampiro. Bety le presenta a Benjamín a su mamá, los tres se fueron a comer comida china, la madre de Bety le dice que la va a extrañar, al otro día se irá, ellos pasaron un rato agradable, aunque la madre de Bety no dejó de pensar en lo enigmático que es Benjamín. El tiempo ha pasado, Bety es una mujer que lo tiene todo, sobre todo el amor de Benjamín, sin embargo ella tiene preguntas que le quiere hacer, estas preguntas son acerca de su vida de vampiro. Bety le ha preguntado que si él toma sangre humana, él le ha dicho que sí, pero de personas que son criminales y de gente que merece morir. Bety está de acuerdo con Benjamín, en su manera de obtener la sangre para poder vivir, ella lo sigue mucho, el es muy cariñoso y toca muy bien instrumentos musicales, ella canta un poco, lo que sabe hacer bien es actuar, ellos son felices. Bety empieza sentirse diferente, poco a poco ella se está interesando por convertirse en vampira, para ser como Benjamín. Ella se siente sola porque su relación con él no es como la de las parejas normales, Bety le insiste a Benjamín que la convierta en vampira. El no sabe qué hacer, no quiere hacerle daño, porque dice que ser vampiro es muy doloroso, que se podría arrepentir. Bety está decidida al cambio, tiene planeado no decirle nada a nadie y vivir con ese secreto, Benjamín le dice que en verdad lo piense. Ellos están muy enamorados, su único problema es que Benjamín es vampiro, a ella de verdad no le gustaría convertirse en vampira, entonces le dice a Benjamín, que ella estará con él siempre, sin ser vampira, él le dice que está bien. Y así llevaron la relación, Bety lo esperaba en su casa y él después de beber sangre de criminales, llegaba para estar con ella y siempre fueron felices y nunca dejaron de amarse.                                            FIN.  
El alma en pena. Por: Miguel Saavedra.   CAPITULO 1. Los Fernández se están cambiando de casa, se han ido de la ciudad de México, ahora vivirán en La Paz, Baja California Sur, todo fue porque al señor Fernández le cambiaron el puesto, que tenía en la ciudad de México por el de la compañía de La Paz, él trabaja en una agencia de publicidad y sus colegas le han dicho que en La Paz, le irá mejor con la agencia y por eso y por cambiar de aires, se mudó a esa ciudad. La familia Fernández está integrada por cinco personas, el señor Fernández, la esposa, Juan, Raquel y Susanita, también tienen un gatito al cual quieren mucho, lo tienen desde que estaba pequeño, las hijas van a extrañar a sus compañeras de escuela y Juan va a extrañar sus entrenamientos en el gimnasio. Todos están preparándolo todo para adaptarse a su nueva vida. La señora Fernández ha estado muy ocupada con las tareas de la nueva casa, todo parece estar bien. Los Fernández finalmente se han adaptado a su nuevo hogar, los hijos a la escuela han empezado a ir, al Señor Fernández, le ha gustado la nueva empresa, la Señora Fernández, los espera para comer todas las tardes. Juan se ha inscrito en un gimnasio que queda a unas cuadras de su casa, las hermanitas son muy juguetonas, juegan mucho en el jardín con el gato. Una tarde, salieron al jardín Susanita y Raquel y vieron que al gatito, le habían mordido una patita, ellas se preocuparon mucho y pensaron que cual perro mordió al gato, casi todos los vecinos tienen un perro de mascota, pero hay un vecino que saca a su mascota a caminar, es un señor muy misterioso; ciertamente no saben que mascota fue, pero el gato tenía una patita mordida. Es la hora de dormir, todos ya están durmiendo, el Señor Fernández mañana tiene que trabajar y se va a levantar temprano, de pronto oye un ruido, enseguida salieron de su recámara para ver qué pasaba, todos los cuadros que tenían colgados, así como los retratos del librero, estaban quebrados y en el piso y las telas de los cuadros estaban desgarradas. Todos se preguntaban qué pasaría y están muy asustados por lo ocurrido, ellos creen que tal vez tembló y eso tiró los cuadros y retratos, todo ha vuelto a la normalidad, aparentemente; con el miedo de lo ocurrido, todos vuelven a la cama a dormir, para amanecer descansados para el trabajo y la escuela. Todo ha sido normal en el día, en la escuela, una compañera de Susanita le dijo que en la casa donde ella vive, hay fantasmas, pero ella piensa que su compañera estaba bromeando. En las tardes el vecino de la esquina, saca a pasear a su perro, es el señor misterioso, su perro es muy bravo, dan miedo, no se sabe si es casado o no, aunque una muchacha lo visita mucho. La Señora Fernández, le ha preguntado a Susanita acerca de su compañera, que le dijo que la casa tenía fantasmas y ella le dijo que es una compañera muy amigable, pero que no sabe a qué se refería. La Señora Fernández le dijo que le preguntara por qué decía que tenía fantasmas la casa. Otra vez se sintió la presencia de algo en casa, esta vez, era la silueta de una niña, ésta lloraba, todo sucedió en la noche, cuando todos estaban listos para irse a dormir, la niña fantasma estaba en uno de los cuartos, tenía la luz apagada y con la luz de la luna que entraba por la ventana, se veía la silueta; prendieron la luz y el fantasma desapareció. Todos están muy espantados, nadie encuentra una explicación, y no saben qué hacer, el Señor Fernández le va a hablar a un amigo que es vidente y tiene poderes especiales, a ver si les ayuda a solucionar el problema de fantasmas en casa. La Señora Fernández estaba esta mañana en casa, haciendo labores del hogar, ella estaba en el jardín, regando las plantas, en eso pasó la muchacha amiga del vecino misterioso, estaba caminando con el perro, la Señora Fernández le dijo buenos días y ella no le contestó el saludo, simplemente siguió caminando, sin decir una sola palabra, la Señora Fernández no supo que pensar, lo único que pensó fue que la muchacha y el vecino son un poco difíciles y no socializan. La Señora Fernández no le dio importancia a lo que acaba de pasar, ella siguió regando y contemplando sus plantas, en lo que la puerta de la entrada se azotó, se percató de que no había aire, se le hizo de lo más extraño y eso le hizo recordar los acontecimientos inexplicables que han sucedido en su casa hasta el momento. La Señora Fernández está en su cuarto con el Señor Fernández, ha sido un día de mucho trabajo, ella le dice a él que es en serio lo de su amigo el vidente, porque han seguido pasando cosas extrañas sin explicación aparente, por eso la Señora Fernández está convencida de hablar con el amigo del Señor Fernández y les ayude a encontrar una solución, a lo mejor un embrujo o algo que él les dijera haría que los fantasmas se fueran de su casa, el Señor Fernández le dice a su esposa que no se preocupe, que va a hablar con su amigo. El amigo del Señor Fernández, va a ir a visitarlos, quiere saber por qué los fantasmas se aparecen y cómo deshacerse de ellos; ha llegado a casa de los Fernández, la Señora Fernández le cuenta los acontecimientos inexplicables que han sucedido en casa, él mira a los alrededores y puede darse cuenta que son almas en pena, buscando justicia, el vidente les explica a los Señores Fernández, que los fantasmas están esperando a que se haga justicia, puesto que fueron asesinados, entonces les dice que investiguen si han habido asesinatos en la casa o que si han habido inquilinos delincuentes. La Señora Fernández le dice al vidente que investigarán lo que ha sucedido en esa casa hasta ahora, le agradece y le dice que si lo vuelven a necesitar, que por favor les ayude, el vidente les dice que sí, que había que prepararlo todo para ahuyentar a los fantasmas, que todo estaba bien. Hoy es cumpleaños de Susanita, la familia Fernández tiene planeado hacerle un pastel esta tarde, la Señora Fernández quiere llevarla al centro comercial para comprarle un regalo, Susanita quiere una muñeca, al llegar al centro comercial, la niña ve a su compañera que dice que en su casa hay fantasmas, se saludan, ella le dice a su mamá que esa era la compañera que le dijo de los fantasmas en casa. La señora Fernández enseguida le preguntó a su mamá, acerca de eso, le pidió que le explicara por qué decía su hija que en su casa habían fantasmas, la mamá le contestó que era algo un poco serio, que se vieran en un lugar para tomar un café y hablar, entonces se pusieron de acuerdo para verse y tomar un café, al otro día en la cafetería del centro comercial; La señora Fernández está muy nerviosa, porque no sabe qué le va a decir. Raquel le insiste a Juan que le enseñe a jugar fut-bol y él le dice que está bien, ella nada más quería pasar un rato divertido porque estaba un poco aburrida. Juan estaba de portero y Raquel trataba de meter gol, él le regresa el balón pero a ella se le va hasta la calle, en eso iba pasando el vecino misterioso con su perro, recoge el balón y se los quita, él y su perro se van hacia su casa, Juan y Raquel no saben qué hacer, ellos se prometieron no decirle a nadie lo ocurrido.            
El videojuego. Por: Miguel Saavedra. Arturo está en su casa y se aburre porque ya terminó su tarea y le gustaría ir al negocio de videojuegos, que está en el centro comercial de por su casa, no tiene dinero y está esperando a su mamá, para que le dé e ir a jugar. A él le gusta un videojuego que hay en ese negocio, se tiene que comer una moneda por cada mundo, los mundos son cada vez más difíciles y nunca ha llegado al mundo de las seis monedas, a lo más que ha llegado a sido al mundo de las cinco monedas, una vez nada más lo ha logrado, algunas veces se ha comido las monedas del quinto mundo y varias veces las del cuarto, lo anterior es fácil, pero lo que le frustra a Arturo, es que hay mundos de siete, ocho y hasta nueve monedas y nunca ha logrado llegar, más allá del mundo de las seis monedas. Lo bueno fue que cuando llegó al mundo seis, se pudo comer las monedas, él piensa que se frustraría mucho si no lo hubiera logrado. El niño ha llegado al mundo siete y no se pudo comer las monedas, eso hizo sentir mal a Arturo y no sabe qué hacer, piensa que se va a morir, en eso oye el despertador y se despierta, el niño estaba feliz porque era un sueño, lo del mundo de las siete monedas.
El hombre del libro robado. Por: Miguel Saavedra.   Personajes: Manuel. Juan. Muchacho del café. Yadira.                               Esta escena inicia en un café de la ciudad, Manuel entra a éste para pedir un café doble, Manuel es escritor de obras de teatro. Juan está sentado en una de las mesitas del café, él está en la computadora y tiene una arracada en la oreja izquierda, Manuel recordó una de sus obras de teatro porque Juan se parecía a uno de los personajes de ésta. Manuel- (Al muchacho del café). Me dais un expreso doble, por favor. Muchacho del café- Sí, enseguida. Manuel voltea a ver a Juan una vez más y mira su arracada, Juan responde su mirada con otra mirada. Manuel- (Al muchacho del café). También me podríais regalar un vasito con agua. Muchacho del café- Sí, claro. El muchacho del café le da el expreso y el vaso con agua, Manuel se sienta en la mesita de junto y espera a que se le enfríe el café. Juan está escribiendo en la computadora y lo ve, él también lo estaba mirando, Juan saca un cigarrillo de la cajetilla que está en su mesa y sale del café a fumarlo. Manuel lo ve por la ventana y decide salir a preguntarle algo. Manuel- (Sale y se acerca a él). ¡Hola, Señor!, ¿Qué hace por aquí? Juan- Estoy fumando un cigarrillo, ¿Qué se os ofrece? Manuel- Nada en especial, simplemente quería deciros que yo soy escritor de obras de teatro y usted me recordó a un personaje que escribí, lo digo por la arracada y por lo apuesto. Juan- ¡Soy como un personaje!, ¡Qué divertido! Manuel- Sí, Señor, ¡Es divertido!, y dime, ¿A qué te dedicas? Juan- Soy maestro de estudios Latinoamericanos. Manuel- ¡Qué bien! Juan- ¿Y usted? Manuel- Yo soy escritor de teatro y actor. Juan- ¡Qué interesante!, yo he ido varias veces al teatro. Manuel- A ver si un día vas a ver a mi compañía, estamos presentando una obra clásica. Juan- Está bien, y dime, de que trata la obra del personaje al que me parezco. Manuel- Se trata de un muchacho que le dijo a otro muchacho acerca de un libro robado. Juan- ¡Ah!, Si os parece me gustaría leerla. Manuel- ¡Claro! Juan- ¿Dónde queda tu teatro?, tal vez lo conozco. Manuel- Es el teatro que está en el deportivo. Juan- ¡Si, ya se cual es! Manuel- Te espero. Juan- ¡Ahí estaré! Esta escena se realiza en el teatro donde trabaja Manuel, no ha llegado nadie, entra Juan al teatro y lo ve sentado en una silla en el escenario. Juan- ¡Hola, Señor!, ¿Cómo está? Manuel- ¡Muy bien, oye, se me olvidó preguntaros cómo os llamáis. Juan- Me llamo Juan, ¿Y, usted? Manuel- Yo me llamo Manuel. Juan- ¡Qué bien!, os he venido a visitar esperando que halláis traído vuestra historia que me dijisteis. Manuel- Sí, la tengo en el camerino, ¡Pásale! Juan- ¡Sí, claro!, tengo tiempo. Juan se mete al escenario. Manuel- Entra al escenario, deciros, ¿alguna vez has actuado? Juan- Sí, cuando iba en la primaria, en un festival, en la secundaria y una vez hice un performance. Manuel- ¡Ah, Qué bien!, ¿Y alguna vez has actuado cosas de hombres? Juan- ¿A qué te refieres? Manuel- Sí, cosas de hombres, de dar besos y abrazos. Juan- (Tímido). Pocas veces. Manuel- ¿Qué te parece si actuamos? Juan- ¡Está bien! Manuel- Acércate, abrázame. Juan- (Se acerca y lo abraza). ¿Así? Manuel- Sí, ahora bésame. Juan le da un beso. Juan- (Se escucha ruido). ¡Creo que viene alguien! Manuel- Sí, debe ser algún actor. Yadira- (Entra). ¡Hola!, ¿No ha llegado nadie? Manuel- No, Yadira, nada más estamos mi amigo y yo. Juan- Que por cierto ya me iba, (A Manuel), Oye Manuel, luego te veo, a ver si la semana que entra os vengo a visitar otra vez. Manuel- Sí, Juan, serás bienvenido, te espero. Juan- ¡Está bien!, (Sale). Yadira- ¡Se me hizo un poco tarde!, ¿Y los demás? Manuel- No han llegado, se les hizo un poco tarde también. Yadira- ¡Una disculpa Manuel, por mi retraso! Manuel- No te preocupes.   FIN.
CAPITULO 2. La señora Fernández, está esperando a la mamá de la compañerita de Susana, está muy nerviosa porque no sabe qué le va a decir. Finalmente llega la mamá de la compañera, se presentan, la señora Fernández se llama Blanca y la mamá de la compañera se llama Yesica, Blanca va sin rodeos y le pregunta a Yesica por qué dice su hija que en su casa hay fantasmas. Ella le contesta que lo que pasaba era que hubo unos asesinatos y las víctimas vivían en su casa, que todos piensan que el asesino fue un vecino, pero que no están seguros de nada, Blanca le pregunta que cuál vecino y por qué los mató y Yesica le dijo que el vecino y las víctimas eran amigos, que el vecino una vez se enfermó y se fue a pasar unos días con ellos, mientras se curaba, ellos lo cuidaban, le dijo que un día, el día de los homicidios, el vecino ya estaba en su casa y que por eso no supieron si él había sido el asesino, que porque nadie vio nada, pero como ellos lo cuidaban, se sospechaba que era él.  La señora Fernández, no sabía que decir a lo que le decía Yesica, ella pensó que seguramente era el vecino del perro bravo, no le preguntó, pero ella cree que es él, que tal vez por eso se ve tan misterioso, no quiere asegurar nada. El señor Fernández, quedó de verse con su amigo el vidente, le dijo que lo visitara para ver qué pasaba en su casa, después de saber de las almas en pena, él ha llegado y todos le explican los acontecimientos extraños que han presenciado, ya es un poco noche, el amigo vidente al pasar por la recámara vio a una mujer sentada de espaldas en una mecedora y junto a una niña, estaban llorando, el vidente les habla y la mujer le dice, -él la mató- y le enseña una foto donde sale el vecino misterioso. La señora y el señor Fernández están en su recamara, todos están en la cama, para mañana estar bien descansados y los hijos se vallan a la escuela, él a trabajar y la señora Fernández va a ir al supermercado. Ellos platican acerca de lo que le dijo Yesica a Blanca y de lo que hizo el vidente en casa de los Fernández, no quieren asegurar nada, puesto que el vecino misterioso aunque sea una persona muy huraña, no quiere decir que se trate de la misma persona, aunque lo consideran, no saben qué hacer, entonces al señor Fernández se le ocurre la idea de ver de qué forma puede hablar con los fantasmas y decirles que se alejen, que ya no los molesten más, porque piensa que pueden ser fantasmas amigables, que son almas buscando justicia simplemente. Blanca le pregunta que podrían hacer, él le dice que tal vez una sesión con los espíritus. El señor Fernández, habla nuevamente con su amigo el vidente, para preguntarle que podrían hacer para comunicarse con los espíritus y pedirles que se alejen, él le dice que con una tabla ouija, que él tenía una, que la podría llevar a su casa y que cuando se veían. El amigo vidente está en casa del señor Fernández, trae consigo la tabla ouija, los señores y el amigo se sientan formando un triángulo y el vidente realiza un cuestionario para que se lo respondiera el fantasma de la mecedora, también le preguntó cosas a la niña que vieron, lo que pudieron saber es que el vecino misterioso fue el asesino de esas dos personas, que ellas lo consideraban un buen amigo, pero un día en un arranque de locura que él tuvo, las mató, que está loco y se llamaba Jacinto. La señora Fernández está impresionadísima de lo que les dijo la tabla, porque Yesica le dijo que el vecino se llamaba Jacinto, por eso no sabe si creer o no, piensa que quizá nada es cierto y que están calumniando a un vecino que no tiene nada que ver con lo que ocurre en casa. El señor y la señora Fernández van a ir al cine, ellos pasaron por casa de Jacinto, él estaba estacionando su carro, Blanca y el señor Fernández lo vieron y él lo quiso saludar pero Blanca le dijo, que no lo saludara, que no lo viera porque se podría dar cuenta que lo observan y de las cosas que saben de él, ellos se siguieron de frente hacia el cine.  Jacinto llegó un poco tarde esta mañana al trabajo, él trabaja en una estación de radio, es parte del equipo de producción de un programa que pasan en la mañana en la ciudad, el programa salió al aire sin mayores problemas, pero ese retraso y otros detalles hacen que en su trabajo, las cosas se vuelvan difíciles, porque llega tarde, es un poco irresponsable y se desespera mucho, nadie le puede decir nada porque le molesta. Todo está bien, con un poco de dificultades por parte de Jacinto, pero no parece haber mayor problema. El amigo vidente hizo varios hechizos en casa de los Fernández, para alejar a los fantasmas, porque piensa que con esos hechizos, seguramente los espíritus se alejarán, la señora y el señor Fernández están convencidos de que así será, también esperan que todo vuelva a la normalidad. Jacinto ha tenido problemas en su trabajo, todos opinan que algo le está pasando, creen que se está volviendo loco, por ser tan difícil con los demás, sus compañeros han observado un cambio desfavorable de su comportamiento, ellos están convencidos que necesita ayuda psicológica, pero no saben cómo decírselo porque él es una persona muy voluble y violenta y no saben cómo reaccionaría si alguien le sugiriera que fuera a visitar a un psicólogo o psiquiatra. En casa de los Fernández siguen pasando cosas extrañas, de nada sirvieron los embrujos que hizo el amigo vidente, no saben qué hacer. Jacinto piensa que tiene una vida normal, su comportamiento es cada vez más inaceptable, todos piensan que va por mal camino, pero él cree que todo está bien y que nada está fuera de lo normal. El cuatrimestre va a empezar en la universidad que está por la casa de Jacinto, le han hablado por teléfono para saber si aceptaría una clase y contratarle, él aceptó, tiene que ir a firmar el contrato, es la clase de producción de radio. Jacinto ha empezado el cuatrimestre, todos están un poco inconformes con su clase, porque dicen que no la prepara bien, siempre da una clase suficiente, los alumnos lo han calificado y reprobó, por eso la psicóloga de la universidad lo citó para hablar con él; lo han despedido y tuvieron que contratar a otro maestro para que terminara el cuatrimestre. En casa de los Fernández los fantasmas parecen ser parte de la familia, están en todo momento y hacen cosas, los Fernández creen que si le hablan a la policía y les explican lo que les dijo el vidente, los podrían ayudar, pero el señor Fernández después opinó que la policía no lo haría porque es un problema con fantasmas y ellos pensarían que los Fernández están locos, porque no creerían la historia de los fantasmas, porque todos piensan que los fantasmas no existen. Blanca se quedó de ver con una amiga de la secundaria que vive en La Paz, se puso de acuerdo con ella después de años de no verla, otra amiga le dio el número de teléfono y le habló para verse en un café, se han vuelto a ver después de tantos años, están muy emocionadas porque se volvieron a ver, lo único que estaba mal es que Blanca estaba muy nerviosa, muy distante, por el problema de los fantasmas, su amiga le dijo que fuera al doctor para que le recetara medicamento para los nervios, Blanca no sabe que hacer.            
El rey del castillo negro. Por: Miguel Saavedra. El reino del castillo negro tendrá una fiesta, van a celebrar el cumpleaños del príncipe, él vive en el castillo con su madre, la Reina, su padre, el rey murió hace poco, tuvo un accidente, él era paracaidista y la última vez que saltó del avión, su paracaídas no abrió y cayó en el terreno de un bosque, cuando todos fueron a rescatarlo, él estaba indiscutiblemente muerto; Después de eso la reina del castillo negro y su hijo el príncipe se hacen cargo del reino. Los preparativos para la fiesta ya están casi listos, el príncipe ha invitado a sus amigos, él quiere que sea un cumpleaños como cualquier cumpleaños, con pastel y regalos, el príncipe del castillo negro espera que lleguen todos sus invitados a la fiesta; las invitaciones eran dobles, por eso el príncipe cree que sus amigos llegarán con más amigos y la fiesta será más divertida. Al fin están todos en la fiesta, están pasando un rato muy agradable, el príncipe ha platicado con todos sus amigo, ha bailado un poco, en eso se le acerca un amigo y le dice que le quiere presentar a una amiga, él le dice que está bien, que lo esperaría en la barra de las bebidas. La fiesta era de disfraces, el príncipe estaba disfrazado de momia, él estaba en la barra cuando llegó su amigo, un príncipe del reino vecino, con su amiga la Princesa Norma, ella estaba disfrazada de fantasma, el príncipe del Castillo Negro y ella se pusieron a bailar, se cayeron muy bien. El príncipe y la princesa han hecho una bonita amistad, la fiesta fue muy divertida, la princesa Norma le dejó su número de teléfono, el príncipe le dijo que le llamaría, para que fueran a una galería, ella le dijo que esperaría su llamada. El príncipe del castillo negro le preguntó a su amigo acerca de la princesa Norma, él le contestó que era una amiga que conocía hace años, que la conoce desde la primaria, que más que nada la conoce como compañera de escuela, también le dijo que era muy amigable y que ha salido a fiestas con ella pocas veces. La Princesa Norma está esperando al príncipe del castillo negro, en la galería donde se quedaron de ver; el príncipe ha llegado, se saludan y se ponen a platicar, él le pregunta a la princesa que donde estudió, en dónde vive, que países ha conocido, entre otras cosas. La princesa es abogada y vive en un castillo vecino, le dijo que estuvo de vacaciones en Cancún como un mes, que sus padres tenían un tiempo compartido y se fue a disfrutar las playas, porque se le acabó su contrato en un bufete jurídico, donde trabajaba y quiso descansar un poco. El Príncipe del castillo negro es administrador de empresas, es el encargado de las cuentas de los negocios del castillo, él se llama Eleodoro, a él le gusta ir a exposiciones de arte, a los centros culturales y a conciertos, todo indica que la Princesa Norma y el príncipe Eleodoro han simpatizado y han empezado una bonita amistad. Norma y Eleodoro frecuentemente van al cine, a veces se quedan de ver en un café, les gusta mucho pasarla juntos, el príncipe piensa que la princesa es una amiga excepcional y piensa decirle que si quiere ser su novia. Eleodoro le dijo a Norma que la quería ver en un café de la ciudad, al cual han ido varias veces; quería hablar con ella, después de un par de horas se encontraron en ese lugar, él llevaba un regalo, era para ella, le entregó el regalo y también le preguntó si quería ser su novia, ella se puso un poco nerviosa, no sabía que decirle, lo único que le pudo decir fue que lo iba a pensar, el príncipe le dijo que estaba bien; fueron al cine y después a sus hogares. Eleodoro espera la respuesta de Norma, el cree que la relación será muy divertida, que van a hacer bonita pareja, él no sabe nada de algunas cosas de ella, pero eso no le importa pues cree que Norma es una princesa respetable y buena. Los días han pasado y tal parece que a Norma no le importó responder la pregunta del príncipe, todo indica que él debe ir a buscar una amiga en algún lugar, porque se aburre mucho y por eso busca una compañía, todo está listo para que el príncipe valla a la ciudad a algún lugar de interés y encuentre a la mujer de su vida, al menos eso piensa. El príncipe del castillo negro está en el centro cultural de la ciudad, casualmente había una inauguración de una exposición de pintura muy buena, él conoce al pintor, nada más de vista. El príncipe estaba viendo la exposición, en eso se encuentra a su amigo, el que le presentó a la princesa Norma, en la fiesta que hizo. Arturo, su amigo, le preguntó que si había visto a Norma y él le dijo que no, que últimamente no ha sabido nada de ella, Arturo le dijo que ha hablado con ella un par de veces, Eleodoro le cuenta los planes que tiene para con Norma, él se ilusiona puesto que dos amigos podrían ser novios. Arturo le dijo a Eleodoro que no se preocupe, que seguramente ella le hablará, que simplemente necesita tiempo para decidir y darle una respuesta. Arturo le ha hablado por teléfono a Norma para saludarla, ella le ha dicho que le salió un trabajo y que por eso ha estado muy ocupada, él le comenta a ella que Eleodoro ha estado esperando a que ella le hable, la princesa le dice que tenía pensado hablarle para darle una respuesta, porque le dijo que si quería ser su novia y que ya lo había pensado y que le iba a decir que sí. Él le habló de otras cosas sin importancia y se despidieron y colgaron el teléfono. La princesa Norma es una abogada exitosa, pero necesita protección, necesita de una guardaespaldas, ella está convencida que si contrata a una doble, sus problemas de seguridad se resolverán, Norma empieza a buscar la forma de encontrar a una mujer que se parezca a ella, tanto, que piensen que es ella, entonces se registró en una red social, buscando a la mujer que la imitaría en todo. Eleodoro ha estado muy distraído últimamente, nada más piensa en la princesa Norma, él cree que pronto ella le llamará con una respuesta definitiva, él ha marcado a su casa pero no la ha encontrado, las veces que ha marcado le han dicho que está en el trabajo; no sabe qué hacer, todo está reservado para ella. Norma ha recibido un mensaje de una muchacha que dice que es muy parecida a ella, ha visto la foto y sí, se parecen mucho, Norma citó a la muchacha para conocerla. Ellas se han conocido, se citaron en un café, ella se parece mucho a Norma, hasta en la forma de vestir. Norma le ha dicho que necesita que se haga pasar por ella con el príncipe Eleodoro y empiecen un noviazgo. Norma quiere divertirse un poco con el príncipe del castillo negro. La doble de Norma le ha hablado por teléfono al príncipe Eleodoro, lo citó en un café de la ciudad, ella le ha dicho que sí acepta ser su novia, Eleodoro no se da cuenta que la muchacha que está al teléfono es una doble, ella imita muy bien la voz de Norma, la relación ha empezado. La doble de Norma y el príncipe del castillo negro se encuentran en el café, la doble es muy parecida a Norma, tanto, que el príncipe no se da cuenta que es ella. Pasan un rato agradable y parecen muy contentos con la relación que empezaron. Eleodoro llama a Arturo por teléfono para darle la noticia de que Norma y él ahora son novios, él le dice al príncipe del castillo negro que felicidades, que seguramente no se arrepentirá, Eleodoro invita a comer a Arturo, también invitará a la supuesta Norma. Eleodoro, Arturo y la otra Norma se quedaron de ver en el centro cultural para ver una inauguración de una exposición, Arturo al ver a la otra Norma se da cuenta que no es la Norma que él conoce, pero no le dice nada a Eleodoro, todo pasa como si fuera ella, disfrutaron de la exposición y del ambigú de ésta, pensaban ir después al cine pero era un poco tarde y tenían que trabajar al otro día. Todo era normal aparentemente, se despidieron y Arturo pensó en hablarle a Norma para pedirle explicaciones, sin mayores indiscreciones. Arturo llama a Norma, le dice que quiere hablar con ella, que no le puede decir por teléfono, entonces se quedaron de ver en casa de Norma; él ha llegado y la mira cuidadosamente, ella le dice que ya sabe de lo quiere hablar y él le pregunto que quién era esa persona que se parecía tanto a ella, que por que le hizo creer a Eleodoro que era ella, Norma le dice que hizo eso por amor a otro hombre. Arturo no sabe qué decir, lo que ha hecho Norma es algo muy serio, pero él es su amigo y le dijo que sea lo que sea estará con ella, que solucione el problema, que él la iba a ayudar, ella le dice a él que es un buen amigo. Norma le explica por qué engañó a Eleodoro, ella le dice que él es muy buena gente, muy amistoso y cariñoso, pero que sus sentimientos hacia él no son los de una novia, sino los de una amiga simplemente, pero ella dice que por no hacerlo sentir mal, por eso lo engaña haciéndole creer que ella es la doble. Arturo no sabe que pensar, pero está seguro que Norma es una chica buena, que se arrepiente y que quiere arreglar el problema. Arturo le dice a Norma que le explique cómo le hizo para encontrar a alguien que se parece tanto a ella y ella le dijo que la buscó por medio de una red social y que cuando la conoció le explicó el plan, aparte hipnotizaron a Eleodoro para que perfectamente estuviera convencido que la doble era Norma. Arturo se vuelve cómplice de la mentira de Norma y Eleodoro sigue siendo su víctima, todo es perfecto en la relación falsa, él y la Norma falsa llevan un noviazgo muy divertido y feliz. Ha pasado el tiempo y Eleodoro sigue hipnotizado y enamorado de la otra Norma, eso le está doliendo emocionalmente a la verdadera Norma y se empieza a arrepentir, no sabe qué hacer, siente que se está volviendo loca por lo que hizo, le gustaría arreglar el problema, pero no sabe cómo, ella está desesperada y triste. Norma no puede más y le habla por teléfono a Arturo, lo citó en un café para hablar con él, han llegado al café y ella le dice que no puede más con lo que hizo, entonces le dice que le ayude a solucionar el problema, Arturo le dice que sí y él le pregunta que quién es el chico del que está enamorada, ella le dice muy tímida que el chico es él. Arturo se ha sorprendido con lo que le ha dicho Norma, también se ha emocionado, él no sabía que ella estaba enamorada de él, también Arturo sentía algo por ella, pero no se había fijado tanto en ella, era simplemente una amiga, él después de la sorpresa le sonríe a Norma y la besa, ellos han empezado una relación. Arturo estuvo pensando en todo lo que ha vivido últimamente con Norma, el piensa mucho acerca de encontrar alguna manera de solucionar el problema, en el que está metida su novia, él cree que ella es buena a pesar de todo. Norma y Arturo han ideado un plan para salirse del problema con Eleodoro, van a hacerle creer que la doble de Norma y ella son todavía la misma persona y terminar la relación con Eleodoro, porque lo había pensado bien y se dio cuenta que no lo quería, que al que quería era a Arturo. Norma le explica a Eleodoro sus sentimientos sin contarle el secreto de que también hubo una doble, él entendió y aceptó los sentimientos que ella tenía por Arturo y sin problema le dijo que estaba bien, que empezara su nuevo noviazgo con él. FIN.    
EL EXPLORADOR DEFENSOR. Por: Miguel Saavedra.   Personajes: Laura. Agustín. Tomás. Explorador. Extraterrestre explorador. Mensajero.                             El explorador está en una nave espacial, llama al mensajero por la radio para avisar que va a hacer una escala en La Tierra. Explorador- Llamando al mensajero, ¿Me copias? Mensajero- Sí, te copio, ¿Qué se te ofrece? Explorador- Nada más para avisarles que voy a hacer una escala en el planeta Tierra, porque tengo que recargar mi batería y en ese planeta también hay electricidad. Mensajero- Sí, está bien, nada más aterriza en un área que no esté tan visible, para que los habitantes de ese planeta no se vallan a espantar. La nave espacial ha aterrizado en La Tierra, en un área boscosa. Explorador- Ya llegamos al planeta Tierra, ahora vamos a buscar una compañía de electricidad. Extraterrestre explorador- Sí, Explorador, como usted diga. El Explorador y el Extraterrestre explorador van caminando por la calle, buscando la compañía de electricidad. Extraterrestre explorador- ¿Dónde estará la compañía de electricidad? Explorador- No sé, la busqué en el mapa táctil y no la veo. En la calle donde están caminando el Explorador y el Extraterrestre explorador hay una pareja peleando. Laura- Ya no te quiero, ¿No lo entiendes? Agustín- Tu nada más eres mía y de nadie más. Laura- No me puedes tener por la fuerza. Agustín- ¿Qué no entiendes que te amo? Laura- Pero tu amor es un amor enfermizo, lo mejor será que te alejes. Agustín- ¡Eso nunca!, (El hombre intenta besarla). El Explorador y el Extraterrestre explorador presenciaron toda la discusión, mientras estaban escondidos detrás de unos árboles, para que la pareja no los vieran. Laura- ¡Aléjate! Agustín- Sí, ya me voy, pero volveré por ti, aunque tú no me lo permitas. (Se aleja). Laura- (Lo ve alejarse), (Marca un número en su celular). ¡Amor, sí, hola!, quería hablar contigo, mi exnovio al fin se ha alejado, ¿Dónde te puedo ver?, estoy en la calle de la zapatería. (Llega su nuevo novio). Tomás- ¡Amor, que gusto verte! Laura- ¡Igualmente!, (Se abrazan y se quieren dar un beso y llega otra vez Agustín). Agustín- ¡Laura!, ¿Quién es este tipo? Laura- Es mi nuevo novio, ¡Nosotros ya hemos terminado! Agustín- ¡Claro que no, tu eres mía!, (Detiene a Tomás, lo sube a un carro y lo secuestra). Laura- (Llora y grita) Agustín, ¿A dónde lo llevas?, ¡Qué horror! Agustín- ¡Lo voy a eliminar!, (Se desaparece el carro). Laura- (Llora). ¿!Qué voy a hacer!? Explorador- (Sale del árbol). ¡Oye, no llores! Laura- Pero, ¿Por qué no voy a llorar?, ¡secuestraron a mi novio! Explorador- Nosotros te vamos a ayudar a encontrarlo, tenemos radares táctiles. Laura- ¡Ay ojala!, ustedes no conocen a Agustín, él es policía y abusa de su poder. Extraterrestre explorador- Eso no importa, nosotros encontraremos a tu novio. (Saca un radar móvil). ¡Está cerca de aquí!, en una casa blanca. Laura- Sí, ya sé dónde es, esa casa es de uno de sus compañeros, podemos llegar caminando. Explorador- ¡Sí, vamos! Laura, el Explorador y el Extraterrestre explorador llegaron a la casa blanca. Explorador- (Toca). ¡Abra!, venimos por Tomás. Agustín- ¡Largo!, Aquí no hay nadie con ese nombre. Laura- Agustín, abre, no hagas las cosas más difíciles. Agustín- ¡Ah!, ¡tenías que ser tú!, (Abre), y éstos, (A Explorador y a Extraterrestre explorador), ¿Quiénes son? Laura- Son unos amigos, venimos por Tomás, estamos seguros que lo tienes encerrado aquí. Agustín- Sí, aquí está, pero no se lo van a llevar. Extraterrestre explorador- ¡Déjalo salir!, o de lo contrario. Agustín- ¿O de lo contrario qué? (Saca un arma). Laura- (Grita), ¡Vámonos, corran! Laura, el Explorador y el Extraterrestre explorador, huyen rápidamente. Agustín- ¡Y no los quiero volver a ver por aquí!, ¡Nunca!, (Cierra la puerta). Laura, el Explorador y el Extraterrestre explorador están otra vez en la calle de la zapatería. Laura- ¿Qué vamos a hacer? Extraterrestre explorador- Hay que hacer un plan para rescatar a tu novio. Laura- ¿Pero, qué podemos hacer? Extraterrestre explorador- No sé, déjame pensar. Explorador- ¡Ya sé!, vamos a hipnotizar a Agustín. Laura- ¿A hipnotizar?, ¿Qué es eso? Explorador- Sí, vamos a manipular la mente de Agustín, para que nos devuelva a tu novio. Laura- ¿Y cómo hacen eso? Explorador- Tenemos acceso al cerero humano en nuestras computadoras y podemos manipular su mente. Laura- ¡Qué bien! Explorador- Ahora vamos a manipular la mente de Agustín, para que nos devuelva a tu novio. Extraterrestre explorador- (Escribe una contraseña en la computadora que tiene el explorador). Con ésta contraseña entraremos en la mente de Agustín y lo manipularemos. Laura- ¡Bien! Explorador- Agustín ahora está hipnotizado, vamos a la casa donde está tu novio. Laura- (Triste), Pero él nos dijo que no volviéramos. Explorador- Descuida, como ahora está hipnotizado, imposiblemente nos cerrará la puerta. Laura- Si ustedes lo dicen, ¡Vamos por mi novio! Laura, el Explorador y el Extraterrestre explorador están de nuevo en la casa blanca. Extraterrestre explorador- ¡Agustín, abre! Agustín- (Él está hipnotizado). Como tú digas Extraterrestre explorador. (Abre). Explorador- Devuélvenos al novio de Laura. Agustín- Sí, Explorador, como tú digas. (Va por el novio de Laura). Laura- (Llega Tomás). ¡Tomás, qué alegría! Tomás-  ¡Sí, Laura, que gusto volver a verte! Laura- ¡Vámonos! Explorador- Pero antes avisaré a la policía que Agustín secuestró a tu novio. Tomás- ¡Vámonos!, (Todos se van). Explorador-  Ya hemos rescatado a tu novio, ahora vamos a la compañía de electricidad otra vez, por más electricidad. Extraterrestre explorador- ¡Sí, vamos! Laura- Vayan ustedes, nosotros pensamos ir a otro lado. Explorador- Bueno, hasta siempre. Tomás- Hasta siempre y gracias. FIN.  
La llamada perdida.   Una grabación perfecta para un ensayo, una imagen de Dios, con alegría, dándole color a los escenarios de Mayo, diciéndote lo que el monje nunca te contaría.   Una vida perfecta no volvió a hablar, simplemente recuerdos y una sensación tolerable,   provocada por cuentos después de cantar, ese loco artista ahora está estable y espera jamás volverse a espantar.   Siente que nada está mal al despertar, nada lo hace sentir siempre culpable, lo único que espera es oír y recordar.       Miguel Saavedra.
El vecino embrujado.   Las miradas se pierden entre las ventanas, todos piensan cosas malas de é, simplemente el vecino se pinta las canas, de la barba para estar impreso en papel.   Una mujer de la casa de junto, adivina su suerte con amuletos, estos dicen que debe estar muerto, porque todos no están contentos.   Una pena dolorosa el vecino carga, nadie lo sabía después de la adivinación, se divierte y algunas veces canta.   Tal vez olvida su vida amarga, cuando canta esa canción, porque lo miran y no se espanta.     Miguel Saavedra.
Aire.   El aire que te dice todo, asegurándote que ya no hay más, aunque pienses de otro modo, te das cuenta que ahí estarás.   Aire de todos tus tiempos, te dijo que no te preocupes, nada más fueron algunos cuerpos y ningún amor es para que culpes.   Nadie tiene la culpa del aire, ahí está y no te dice nada, aparentemente todo está bien.   Todo se detiene como el aire, al soplar te dice lo que pasa y te das cuenta que te dice quién.     Miguel Saavedra.
Aire.
Autor: Jose Miguel Saavedra Garcia  230 Lecturas
No te desesperes.   Todo está al revés y en otras partes, las miradas se pierden entre los espacios, se piensa que es una colección de artes, el actor se pone joyas con zafiros y diamantes.   Las cosas en otras partes son regalos, de gente que no está bien y no cambia, es necesario esos regalos contarlos, eso toma tiempo, más que un día.   No te enfermes de la mente por desesperarte, los regalos que viste en desorden, son obstáculos, porque eres feliz.   Siempre habrá alguien que le gustará contarte, Dónde estarán los regalos en desorden y también siempre habrá un aprendiz.    
Los cantantes del carnaval. Por: Miguel Saavedra.   Todo está listo, para que hoy en el carnaval, canten Roberto Landa y Ana Lara, a Manuel le gustaría ir, pero está enfermo del corazón, el doctor le ha indicado que no haga esfuerzos, por un tiempo, porque éste se le podría lastimar aún más. Manuel está en su casa, fue al casino un rato, a jugar bingo, no ganó nada, se regresó y está guardando reposo, todo está bien, no sabía quién iba a cantar en el carnaval esa noche, a él le gustaba ir a ver a los artistas, que presentaban su espectáculo en la festividad, él está pensando en tantas cosas en lo que guarda reposo, en eso escucha la canción de Roberto y Ana apenas, a lo lejos y no sabe si es el concierto, que se oye hasta su casa, como un susurro o es un vecino, que puso la canción en su consola, no sabe si es Ana, la del concierto o es otra cantante, a Manuel se le ocurrió la idea, de ponerse loción y abrir la ventana, para que tal vez el olor de éste, les llegaría y se darían cuenta que los saludó. El después de la loción y la ventana, se volvió a recostar y pensaba si era una grabación de algún vecino, o el concierto, hasta que se quedó dormido, Manuel entre sueños seguía pensando en lo ocurrido, hasta que amaneció. FIN.
Obscuridad.   Cuando ves la obscuridad, es tu casa, el lugar que no tiene salida, cuando tu condena para vivir la verdad de la mentira.   Hay un momento obscuro, del que te escapas y parece que no te puedes escapar, porque esperas ver el pequeño brillo de la luz.   Pensaste que era ceguera, pero te has dado cuenta, que no eran tus bellos ojos, era el escenario de la oscuridad.   Miguel Saavedra.
La mano que tocó el hombro de ella.   La mano tocó el hombro y no me saludó, ella, deliberadamente.   Se dio cuenta, que le toqué el hombro.     Miguel Saavedra.  
El mal actor. Por: Miguel Saavedra.   Personajes. Mónica. Wenceslao. Tomás. Marco. Patricia. Miguel.                               Esta escena se lleva a cabo en el escenario de un teatro. Mónica- Wenceslao, ¿Trajiste los lentes? Wenceslao- Sí, aquí los traigo. (Se los muestra). Mónica- Qué bien, ya nos falta menos utilería, la obra de teatro se ve que va a ser un éxito. Wenceslao- Sí, ojalá. Mónica- ¿Y los demás? Wenceslao- No han llegado. Mónica- Había alguien en el camerino. Wenceslao- A sí, es Janet. Mónica- Le voy a preguntar una cosa. Wenceslao- Marco está llegando muy tarde. Mónica- Sí, yo sé. Wenceslao- Es un buen actor, pero siempre llega tarde. Mónica- Estoy de acuerdo contigo. Llega Tomás. Tomás- ¡Hola!, ¿Cómo están? Mónica- Bien. Wenceslao- Memorizaste tus diálogos. Tomás- Sí, ya podemos ensayar sin os libretos. Wenceslao- A ver. Tomás- ¿Y los demás? Mónica- Falta Raquel y Marco. Tomás- Vamos a esperarlos. Mónica- Está bien. Wenceslao- Hay que poner el escenario de la obra. Mónica- Espérate a que lleguen los demás, para que les ayude Marco. Wenceslao- Bueno. Tomás- Ojalá no llegue tan tarde. Mónica- Seguramente se interesará por la obra de teatro, cuando vea avances. Tomás- No creo que no le importe actuar. Wenceslao- Se le ve. Mónica- Mientras llega voy a ir a la bodega, a ver unas cosas, que me dijo Manuel que buscara. Tomás- Está bien. Mónica- Acompáñame. (Tomás la acompaña). Entra Marco. Wenceslao- Oigan, ya llegó Marco. Tomás- Te estábamos esperando. Marco- ¡Gracias!, vamos a ensayar. Mónica- Sí, hay que poner el escenario. Marco- Les ayudo, ¡Vamos! Tomás- ¿Repasaron sus libretos? Wenceslao- Sí. Marco- Yo también. Apagón. Esta escena se realiza en el mismo escenario, del mismo teatro. Tomás- Ya llegamos todos, falta Marco, como siempre. Mónica- Sí, nunca está a tiempo. Wenceslao- Vamos a esperarlo, no ha de tardar en llegar. Mónica- ¡Claro!, vamos a esperarlo. Tomás- ¿Memorizaron bien? Wenceslao- Yo sí. Mónica- Y yo también. Wenceslao- Vamos a ensayar sin Marco. Mónica- No, hay que esperarlo, porque participa mucho en el libreto. Wenceslao- Pero podemos tomarnos el libreto y que alguien diga sus diálogos. Mónica- Mira ahí viene. Marco- ¡Hola, todos! Tomás- ¡Volviste a llegar tarde! Marco- ¡Una disculpa a todos! Tomás- No está Patricia. Mónica- Me dijo que iba a llegar un poco tarde, porque tenía examen. Tomás- Está bien, podemos empezar sin Patricia, ella dice sus diálogos después. Mónica- Sí, empecemos. Marco- No memoricé todos mis diálogos, nada más los del primer acto. Mónica- No te preocupes, vamos a ensayarlo. Marco- ¡Ah, Qué bien!, ¿Qué vas a hacer después del ensayo? Mónica- Nada, me voy a ir a mi casa. Marco- Te invito un café. Mónica- ¡Claro!, con gusto acepto la invitación. Tomás- Platiquen después, vamos a empezar. Wenceslao- Deberíamos ponernos los vestuarios, para estar más familiarizados con la obra. Tomás- No nos dijo nada Miguel. Wenceslao- A mí me dijo que eran tres escenarios. Tomás- ¿Va a venir hoy? Wenceslao- No, hasta mañana. Tomás- Entonces hay que repasar el libreto nada más y mañana que venga, que nos diga lo del vestuario. Marco- Sí, vamos a hacer eso nada más. Mónica- No perdamos tiempo. Patricia- Empiecen. Apagón.   Esta escena se realiza en el mismo teatro, Miguel está en éste, esperándolos con los vestuarios. Miguel- ¡Apúrense, vamos a ensayar! Mónica- Ya vamos Miguel. Wenceslao- (Entra). ¡Ya estoy listo!, ¿Cómo se ve el personaje con éste vestuario? Miguel- ¡Bien! Tomás- (Entra). Miguel hay que ensayar. Miguel- Nada más falta que se apuren las muchachas. Tomás- ¡Mónica!, ¡Patricia, apúrense!, oye Miguel, no ha llegado Marco. Miguel- ¡Como siempre!, ¡No ha llegado! Tomás- Deberías hablar con él y decirle que no llegue tarde. Miguel- ¡Ahorita que llegue le voy a decir! Mónica- (Entra con el vestuario del personaje). ¿Qué dicen de mi amigo Marco? Tomás- Que vamos a hablar con él porque siempre llega tarde. Mónica- No se preocupen, ¡No ha de tardar!, siempre ha estado presente, en los ensayos, un poco tarde, pero siempre ha estado ahí. Miguel- Tienes razón, estamos haciendo una tempestad en un vaso de agua. Tomás- ¡Miren!, ¡Ahí viene! FIN.
Dar la vida al deseo.   Yo pensaba que era fácil, pero no me daba cuenta, que amar a alguien, es igual que dar la vida a los deseos del Diablo.   Amo tanto, que algunas veces no sé, si podría sobrellevar esto, definitivamente no me gusta vivir de esta forma, contigo, cómo desearía ser perfecto, pero lo precioso no se olvida.   Miguel Saavedra.
EL CANTANTE DE LA OBSCURIDAD.   Una voz hermosa para unos ensayos, dando vida en un escenario obscuro. El cantante lo prepara todo atentamente, para dirigir su voz a los oídos entre las sombras. Nada es importante en ese espectáculo macabro, excepto esa voz hermosa del personaje.   Miguel Saavedra.
La editorial de México. Por: Miguel Saavedra.   Personajes: Esteban. Arturo. Miguel.                                     Esta escena se realiza en un “Centro Cultural”, Arturo es maestro de un taller de “Composición Literaria”, él está con un colega. Esteban- Arturo, ¿Qué haces? Arturo- Estoy revisando una convocatoria, para un concurso de poesía. Esteban- ¿Trabajas en una editorial? Arturo- Sí. Esteban- No sabía, yo tengo un amigo que escribe libros y está buscando una editorial, para que le publiquen un libro. Arturo- ¡Ah, sí! Esteban- Te lo voy a recomendar, para que le publiques su libro. Arturo- ¡Claro!, cuando quieras. Esteban- Déjame hablar con él, a ver qué me dice. Arturo- Sí, no te preocupes. Esteban- ¿Los escritores necesitan tener mucha experiencia? Arturo- Deben saber escribir. Esteban- Lo que pasa es que se recibió, de la carrera de literatura, hace unos años apenas. Arturo- ¡Qué bien! Esteban- No tiene tanta experiencia. Ha participado en concursos de cuento y narrativa y ha ganado premios. Arturo- Habla con él y dile que vaya a la editorial, para que leamos sus trabajos. Esteban- Está bien, yo le digo. Arturo- Ahora, si no te importa, tengo que seguir revisando la convocatoria. Esteban- Sí, disculpa. Apagón.   Esta escena se realiza en el mismo “Centro Cultural”, Miguel está en éste, porque va a ver una exposición, él es el amigo de la publicación del libro. Esteban- ¡Hola, Miguel!, ¡Qué tal! Miguel- ¡Esteban!, ¿Cómo estás? Esteban- ¡Bien amigo!, oye que crees. Miguel- ¿Qué? Esteban- Hablé con un colega acerca de que quieres publicar un libro. Miguel- ¿Ah, sí? Esteban- Lo que pasa es que él trabaja en una editorial. Miguel- ¡Qué bien!, ¿Y qué te dijo? Esteban- Me dijo que fueras, para que leyeran tu trabajo y te lo publiquen. Miguel- ¿A dónde? Esteban- A la editorial que está por el teatro del deportivo. Miguel- ¡Ya sé dónde!, ¡Gracias! Esteban- ¡De nada Miguel, suerte! Esta escena se realiza en el mismo “Centro Cultural”, Miguel ya ha ido a preguntar, a la editorial, acerca de su libro. Esteban- Miguel, ¡Oye! Miguel- Mande. Esteban- ¿Cómo te fue en la editorial? Miguel- ¡Ni me digas! Esteban- ¿Qué pasó? Miguel- Es que tu amigo de la editorial, me cae mal, mejor dicho, yo le caigo mal. Esteban- ¡No sabía!, ¡Qué pena amigo!, ¡Disculpa! Miguel- No te preocupes. Esteban- ¿Y ahora qué vas a hacer? Miguel- Estuve buscando en el internet una editorial. Esteban- ¿Y qué tal? Miguel- Me encontré una editorial, me contrataron y nada más falta que dé el dinero, de una inversión. Esteban- No sabía que tenías que invertir, para que te publiquen tus libros. Miguel- Eso fue todo, amigo. Esteban- Cuando tengas los libros, me regalas uno. Miguel- ¡Claro!, ¡Con gusto! FIN.      
El libro del bazar.   Un domingo más en ese bazar, buscaba libros de su gran pasión. Al estudiante no le gusta cantar, toda su vida es una actuación.   El libro que compró era robado, no lo sabía hasta que lo leyó, seguramente el dueño era despistado, al menos eso todo el tiempo creyó.   Cada página encerraba un sueño, le hacía sufrir hacerlo realidad, ese libro le pertenecía a otro.   A lo mejor lo dejó como un empeño, éste era un objeto de gran calidad, el propietario dice, -no lo encuentro-.     Miguel Saavedra.
Las regalías. Por: Miguel Saavedra.   Personajes. Miguel. Arturo. Muchacha del café. Muchacho de la editorial. Gustavo.                                 Esta escena se realiza en una cafetería, Miguel está revisando su correo electrónico en su Tablet. Miguel- Me da un café expreso por favor. Muchacha del café- ¿Doble? Miguel- Sí, por favor. Muchacha del café- Van a ser $38.00 pesos. Miguel paga y se sienta en una mesa del café, ve en su Tablet que le llegó un correo. (Llega un amigo, el amigo se llama Arturo). Arturo- ¡Hola, Miguel!, ¿Cómo está? Miguel- ¡Bien!, ¿Y tú? Arturo- Bien, también, ¿Qué haces? Miguel- Estoy revisando mi correo, para ver si me escribieron de la editorial. Arturo- ¡Ah, sí!, del libro que escribiste. Miguel- Sí, lo que pasa es que les pregunté, si el libro lo iban a vender en la Ciudad de México, nada más. Arturo- ¿Y te contestaron? Miguel- Sí, y me dijeron que sí, que el libro lo van a vender en la Ciudad de México nada más. Arturo- ¡Oh!, ¿Y por qué querías saber dónde iban a vender el libro? Miguel- Para saber de dónde son los lectores. Arturo- No importa de dónde sean, lo importante es que lean tus historias. Miguel- Tienes razón. Arturo- Lo que deberías hacer, es buscar otra editorial, que tenga más difusión. Miguel- ¡Que buena idea me has dado! Arturo- Yo conozco a un amigo, que su hermano trabaja en una editorial. Miguel- ¿Con más difusión? Arturo- Sí, con más difusión. Miguel- A ver cuándo me lo presentas, para decirle de mis trabajos. Arturo- No te preocupes, nada más déjame localizarlo. Miguel- ¡Gracias!, está bien. Apagón. Esta escena se realiza en casa de Miguel, él está en su cuarto, Arturo le habla por teléfono. Miguel- (Suena el teléfono y contesta). ¡Bueno! Arturo- ¡Hola, Miguel!, ¿Cómo estás? Miguel- Bien, ¿Qué pasó? Arturo- Nada, te hablo para decirte lo del amigo del hermano. Miguel- ¿El de la editorial? Arturo- Sí, el mismo. Miguel- ¿Qué te dijo? Arturo- Me dijo que fueras a la editorial, para que hables con él. Miguel- ¡Gracias!, ¿Cuál es la dirección? Arturo- Está al lado del “Teatro de la Ciudad”, ahí pregunta. Miguel- Está bien, ¡Muchísimas gracias! Arturo- De nada, para que estamos los amigos. (Cuelga). Apagón. Esta escena se realiza en la editorial, Miguel ha llegado a ésta. Miguel- ¡Buenos días!, ¿Dónde puedo localizar a Gustavo? Muchacho de la editorial- ¿Quién lo busca? Miguel- Soy un amigo de Arturo, un amigo de su hermano. Muchacho de la editorial- Ahorita le hablo. Miguel- ¡Gracias! Entra Gustavo. Gustavo- Me dijo el muchacho que me estabas buscando, ¿Qué se te ofrece? Miguel- ¡Hola!, soy amigo de tu hermano, lo que pasa es que me dijo que viniera, a la editorial, para que te mostrara unos textos. Gustavo- ¿Tú los escribiste? Miguel- Sí, y me gustaría que los revisen para ver si los pueden publicar. Gustavo- ¡Claro!, mándamelos por correo electrónico. Miguel- ¡Está bien!, Para que también me digas cuánto hay que invertir. Gustavo- No hay que invertir, es la publicación y unos libros de uso personal, para el autor, sin regalías. Miguel- ¿Cómo que sin regalías? Gustavo- Sí, la publicación no te la cobramos, pero no te damos regalías. Miguel- Ya veo, a que correo electrónico les mando los textos. Gustavo- A éste, (Le da una tarjeta de presentación). Miguel- ¡Estamos en contacto! Gustavo- ¡Está bien! Apagón. Esta escena se realiza en la misma cafetería, de la primera escena, Miguel está tomándose un café. Arturo- ¡Hola, Migue!, ¿Qué me cuentas? Miguel- Pues aquí, tomándome un café. Arturo- ¡A gusto!, oye cuéntame que pasó con lo de tu libro. Miguel- ¿Cuál? Arturo- El de la publicación en México nada más. Miguel- ¡Ah, sí!, ya lo están imprimiendo. Arturo- ¿En la editorial que te dije? Miguel- No, en la de México, lo que pasa es que no iba a percibir ingresos económicos. Arturo- ¡Oh!, y por eso publicaste tu libro en la editorial de la capital. Miguel- Sí. Arturo- Muy bien, ¡Felicidades! Miguel- ¡Gracias! Apagón. Esta escena se realiza en el cuarto de Miguel, ha pasado el tiempo después de la publicación de su libro. Voz en off- Miguel buscó en el internet, si había algún cartel de la obra de teatro, que escribió y publicó en México, encontró resultados de carteles y vio uno que anunciaba su trabajo, eso a él lo hizo sentir bien. FIN.
 Guardaespaldas.   Una cita en espera, pero segura, o al menos eso siempre piensa ella, que está en la escena más obscura, porque dice él que es muy bella.   A ese guardaespaldas le gustaban las fiestas y en una de esas fiestas la conoció, sentía que era tan hermosa, mientras, el seguridad de gran valentía se enamoró.   Deja un compromiso todas las veces, de volver sin ningún problema y amar, pero nadie sabe cuál será la suerte.   Porque nunca sabe uno a quien conoce y tal vez nunca los vuelven a encontrar, todos los días de su vida hasta la muerte.       Miguel Saavedra.
El actor del horror. (3ª. Parte). Acto III. Esta escena se realiza en el escenario de un teatro, en el cual Jaime Rey trabajaba, en éste está Arturo y sus compañeros. Arturo- Los he reunido a todos aquí, para que pensemos que vamos a hacer, después del fallecimiento de Jaime. Leo- Pobre, quien diría que perdería la vida en un accidente automovilístico. Arlet- Sí, él era un excelente director y actor. Leo- Ni hablar, la vida sigue. Arturo- Por eso quiero saber, que piensan de todo esto. Leo- Yo, pienso seguir en el grupo. Arlet- También yo. Arturo- Hay que continuar nosotros, con el proyecto de la puesta en escena que tenía Jaime. Leo- Eso es lo que estaba pensando, decirle al maestro de Cultura, que queremos continuar en el grupo de teatro, por nuestra cuenta. Arturo- Que buena idea tuviste, hay que decirle. Arlet- Y buscar nuevos actores, porque todos se salieron. Arturo- ¿Cómo que se salieron? Arlet- Sí, nadie va a regresar porque se murió el maestro, nada más Leo y yo, nos interesamos por venir a ver qué pasaba. Arturo- No hay que preocuparnos, podemos poner una obra nueva, un muchacho quiere integrarse al grupo. Leo- ¿Sí? Arturo- Si, se llama Luis. Leo- ¡Qué bien!, ahora seremos cuatro. Arturo- Miren, ahí viene Luis. Luis entra. Luis- ¡Buenas tardes! Arturo- Pásale. Luis- ¡Ya llegué! Arturo- Bienvenido, mira, tenemos planes de poner una obra de teatro, nosotros por nuestra cuenta. Luis- Sí, supe que se murió Jaime Rey. Arturo- ¡Así es!, pero bueno, basta de tristezas y vamos a trabajar. Luis- ¿Qué obra de teatro piensan poner? Arturo- Estaba pensando que podríamos montar la obra del libro, de la presentación del otro día. Luis- La obra de suspenso que escribió Martín Contreras. Arturo- La misma. Luis- Pero somos cuatro y en la obra se necesitan nueve actores. Arturo- Eso es lo que te quería decir, que vallas al malecón a invitar gente para que se integren al grupo. Leo- Yo te acompaño. Luis- ¡Claro! Arlet- En lo que nosotros hablamos con el organizador de cultura, para que nos sigan prestando el teatro. Leo- (A Luis). Pero antes, dinos algo. Luis- ¿Qué quieren que les diga? Leo- ¿Has estudiado teatro? Luis- Sí, tomé un taller de teatro una vez. Leo- ¡Ah, sí! Luis- También he hecho teatro, pero como me cambié de casa, por eso ya no actúo en la compañía donde trabajaba. Leo- Ya veo, ¿Dónde vivías? Luis- En Monterrey. Leo- Supongo que has de extrañar a tus compañeros. Luis- Un poco, no los conocí mucho. Leo- A ver cómo te va con nosotros. Luis- Me decía la maestra Susana, que hacen teatro del horror. Leo- Así es Luis. Luis- A mí me gusta hacer mucho ese tipo de trabajos, lo que pasa es que también soy comunicólogo. Leo- ¡Oh!, ahorita nos vamos a ir un poco lento, porque no sé si sepas, pero se murió el director de teatro. Luis- Sí, me enteré cuando fue la presentación del libro, de Martín Contreras. Arturo- Nosotros vamos a hacernos cargo de la compañía, ahora yo voy a ser el director. Luis- ¡Ah! Arturo- Por eso queremos conseguir más actores, que se integren al grupo, porque se salieron los que estaban, por el fallecimiento del director. Luis- ¿Cuándo vamos a ir al malecón a buscar gente? Leo- Mañana, después que haga unas invitaciones, para que se integren al grupo. Luis- Está bien. Leo- Ahorita estamos esperando, a que llegue el sobrino de Jaime, porque iba a ver lo de las luces. Luis- ¿Qué tienen las luces? Leo- Las va a cambiar, por unas nuevas. Arturo- También queremos poner unas mamparas, para cambiar el escenario, para que nos ayudes. Arlet- Yo pensaba que tenías más experiencia. Luis- No, no he actuado tanto. Arlet- ¿Por qué? Luis- Porque también me dedico, a la comunicación audiovisual. Arlet- Seguramente no te será difícil comenzar en el grupo. Luis- Ojalá. Arlet- Porque a veces a gente viene y como no saben actuación bien, no se pueden integrar. Luis- Espero les guste mi participación. Arlet- Se ve que sí. FIN.  
EL CAZADOR DE FANTASMAS. (2ª. Parte). ACTO II. Todo el segundo acto también tiene lugar en el mismo escenario, Beatriz ha llegado para empezar el ensayo. Beatriz- (Entra). No ha llegado nadie, los voy a esperar. (Abre su libreto y lo repasa). Alejandro- (Entra). Beatriz, ¡Buenas tardes! Beatriz- Buenas tardes, ¿Cómo estás?, ¿Repasaste tus diálogos? Alejandro- Sí, estuve repasando en mi casa, ayer en la noche, ¿y tú? Beatriz- También estuve haciendo lo mismo, pero en la mañana. Alejandro- ¡Qué bien!, ¿Y ya te sabes nuestra parte? (La mira a los ojos). Beatriz- Más o menos. (Ella corresponde a la mirada). Alejandro- Lee tus diálogos para que ensayemos. Beatriz- ¡Claro! (Ella hojea el libreto, buscando los diálogos con él). Alejandro- Sabes qué, no han llegado, lo mejor es que los esperemos. Beatriz- Tienes razón. (Cierra el libreto). Oye Alejandro, ¿Tienes hambre?, vamos a comprar una rebanada de pizza. Alejandro- No gracias, yo ya comí. Beatriz- Ya comiste, entonces luego voy, lo que pasa es que no quiero comer sola. Entra Carla. Carla- ¡Hola Alejandro!, ¡Buenas tardes Beatriz!, ¿Cómo están? Alejandro- Bien, ¿Y tú? Carla- Muy bien, acabo de salir de una clase de la maestría. Alejandro- ¿Una maestría?, ¡Qué interesante!, ¿La estás dando?, o ¿Estás tomando clase? Carla- Estoy tomándola, ésta clase es muy laboriosa, tenemos que hacer muchas encuestas. Alejandro- ¡Ah, sí!, ¿Qué estás estudiando? Carla- Estoy estudiando Publicidad. Alejandro- ¡Qué bien!, oye, ¿Repasaste tu libreto? Carla- Sí, estuve memorizando antes de entrar a la clase. Alejandro- ¡Bien!, nada más tenemos que esperar a que lleguen los demás. Carla- Traje unas galletas, ¿No gustan? (Saca unas galletas de su mochila y las pone en la mesa del escenario.) Alejandro- No, gracias, no he comido y no me gusta comer el postre antes. Beatriz- (Observa a Alejandro). ¿Carla, repasaste tus diálogos? Carla- Sí, ya casi me los sé todos, y tú ya te los sabes, vamos a ensayar nuestra parte, ahora vuelvo, voy al camerino. (Sale). Alejandro-  Beatriz, vamos a ensayar. Beatriz- No, prefiero esperar a que lleguen todos. Alejandro- Está bien, también te invito un café. Beatriz- (Asombrada porque Alejandro mintió acerca de que ya había comido). ¡Claro, cuando gustes! Alejandro- Que te parece si después del ensayo, vamos al café de aquí a la vuelta. Beatriz- Un rato nada más, porque tengo que trabajar mañana en la mañana. Alejandro- ¡Sí, está muy bien! Beatriz- Y cuéntame, ¿Qué haces en tus ratos libres? Alejandro- Hago ejercicio y me gusta ir al cine, a ver películas de terror y suspenso. Beatriz- ¡Que divertido!, a mí también me gusta hacer ejercicio, tengo un pequeño gimnasio en mi casa. Alejandro- ¡Que diversión tienes también!, yo voy al gimnasio que está a dos cuadras de mi casa y el cine está en el centro comercial, que también queda por mi casa. Beatriz- Por lo visto los dos entretenimientos están cerca de tu casa. Alejandro- Así es, y ¿A ti te gusta el cine? Beatriz- No, me gusta más el teatro y las exposiciones de arte, somos unos artistas, por eso siempre estamos en contacto con las artes. Alejandro- Tienes toda la razón. Marco Antonio entra. Marco Antonio- ¡Hola compañeros!, ya llegué, el camión no se fue tan lento hoy. Beatriz- ¡Qué bien Marco!, te estábamos esperando para empezar a ensayar. Marco Antonio- Por cierto, me encontré ayer al maestro y me dijo que hoy llegará más tarde, que ensayemos. Beatriz- A sí, y ¿Dónde te lo encontraste? Marco Antonio- En el centro comercial que queda por mi casa. Carla- (Entra). ¡Hola Marco!, ¡Qué bueno que ya llegaste! Beatriz- Marco nos acaba de decir, que el director va a llegar hoy un poco tarde, que empecemos a ensayar. Carla- Esta bien. Beatriz- Pero primero, acompáñame por una rebanada de pizza, tengo un poco de hambre. Carla- Vamos, (A los compañeros), ahorita regresamos. Marco Antonio- Sí, aquí los esperamos. Carla y Beatriz salen. Alejandro- Compañero, ¿Estudiaste tus diálogos? Marco Antonio- Sí, ¿Y tú? Alejandro- Sí, ya casi los tengo memorizados. Marco Antonio- Vamos a ensayar. Alejandro- El maestro va a llegar un poco tarde. Marco Antonio- ¡A mí el maestro me tiene sin cuidado!, vamos a ensayar, ¡No seas irresponsable! Alejandro- ¡Sabes qué!, ¡No me digas! Marco Antonio- No voy a discutir. (Se dispone a irse). Alejandro- Oye, ¿A dónde vas? Marco Antonio- No te importa. (Sale). Laura- (Entra). Alejandro, por lo visto todos están retrasados, excepto tú y Marco Antonio, él, ¿A dónde iba? Alejandro- Se enojó y se fue, me dijo que no me importaba. Laura- Déjalo, Marco es muy voluble, oye, ¿Ya conseguiste los dulces? Alejandro- Sí, ya los conseguí, son un poco grandes. Laura- Recuerda que los chupas después de la comida y no antes; como están envenenados, quieres tomar agua, pero no hay y tomas vino, ésta es la botella, (se la muestra), para que la llenes de soda roja y se vea que es vino. Alejandro- ¡Está bien, gracias! (Llega el Director). Director- ¡Hola niños!, se me hizo un poco tarde. Alejandro- ¡Buenas tardes señor director! Director- ¿Listos para ensayar? Alejandro- Carla y Beatriz fueron por una pizza. Laura- Maestra, ¿Qué cree?, Marco Antonio se peleó con Alejandro y se fue. Director- ¡Cómo que se fue!, y, ¿A dónde? Laura- No sé, cuando yo llegué, él se fue y no nos dijo a dónde. Director- Hay que hablarle, ¿Saben su número? Entran Carla y Beatriz. Carla- Ya regresamos. Director- Niñas, ¿Cuál es el número de Marco Antonio, para hablarle y empezar el ensayo? Beatriz- Lo vimos en la fuente del parque de enfrente. Director- ¡Llámale!, dile que tenemos que ensayar. Beatriz- Lo que pasa es que nos dijo que se peleó con Alejandro. Director- Sí, ya me dijo Laura. Por favor regresa al parque y dile que venga a ensayar. Beatriz- Sí, Señor Director. Carla- Te acompaño. Beatriz- Vamos rápido, para ensayar pronto.    
EL CAZADOR DE FANTASMAS. (3ª. Parte). ACTO III. Este acto también se lleva a cabo en el escenario del primer y segundo acto. Director- Muchachos, los he citado a todos hoy para hablar de lo ocurrido. Laura- ¡Qué bien maestro!, lo que sucedió fue algo muy difícil de aceptar. Carla- Lo mejor será que averigüemos si Alejandro va a seguir en la compañía. Marco Antonio- Al principio me fastidiaba, pero después lo empecé a estimar. Beatriz- No entendemos por qué no, llegó a la función. Director- Tal vez se enfermó, no hay que precipitarse, fue una cancelación simplemente. Carla- ¿Por qué no llegó a actuar?, no nos dijo nada. Directores- ¿Y ustedes no le conocieron algún problema?, a lo mejor se fue de borracho. Beatriz- No creo Señor Director, él siempre fue muy responsable, pero también era muy raro, no sé qué pensar. Laura- Yo tampoco, Alejandro mentía y era muy extraño, como bien dice Elizabeth. Beatriz- (Asombrada). No sé qué pensar, de verdad. Marco Antonio- Si quieren puedo ir a su casa a preguntar por él, ya arreglaron mi carro. Laura- ¡Acabas de tener una excelente idea!, anda ve a buscarlo. Director- Bueno niños, ni modo. Carla- Ya sé quién nos podrá sacar de dudas, acerca del paradero de Alejandro. Director- ¿Quién niña?, ¡Habla! Carla- Jaime, el muchacho de la librería, me dijo que él estudiaba actuación con él. Director- Haberlo dicho antes Carlita, llámale, dile por favor, que quiero hablar con él, que se trata de Alejandro y explícale nuestro problema, tal vez se decida a tomar su papel. Carla- Sí Maestro, voy a buscarlo. (Sale). Laura- Maestro, ¿Ha estado usted en una situación como ésta antes? Director- Sí hija, hace varios años, me pasó lo mismo con un actor. Laura- ¿Y por qué no llegó? Director- Porque lo asaltaron y lo mataron. Todos lo esperamos, el día de esa función y nunca llegó, después de eso lo buscamos y nos dijo su esposa que lo habían matado. Laura- Pobre, seguramente ustedes lo lamentaron, ¿El, era buen actor? Director- Sí, Laurita, él era muy buen actor, era muy atlético, hacía pesas. Laura- ¡Qué mala suerte tuvo!, ¡Pobre colega! Director- Y tú niña, piensa en algún amigo o en alguien, que quiera hacer el papel de cazador de fantasmas, porque yo creo que Alejandro ya no va a regresar. Laura- No creo, era muy responsable. Beatriz- También hay que pensar que no llegó, porque no le importaba trabajar con nosotros. Director- Todo puede ser. Beatriz- Marco Antonio al principio era igual, cuando lo conocimos era un poco desinteresado. Laura- Al principio, pero con el paso del tiempo, se volvió muy dedicado, por eso acepté ser su novia, cuando me lo propuso. Beatriz- Que difícil es para un actor, desaprovechar una oportunidad. Director- Y no nada más los actores, todos debemos aprovechar de la mejor manera las oportunidades de la vida. Entran Jaime y Carla. Carla- Maestro, aquí está Jaime, el muchacho de la librería que conoce a Alejandro. Jaime- Conocía, porque según me informaron, Alejandro se suicidó. Carla- ¡Cómo que se suicidó!, ¿Cómo sabes?, ¿Cuándo pasó eso?, ¡No sabía! Jaime- Hace como tres años, cuando estudiábamos actuación, él se suicidó, porque no pasó un examen de actuación. Director- ¡Dios mío!, a ver, cuéntame más detalladamente, lo que le ocurrió a ese niño, seguramente lo confunde porque Alejandro, hace unos días, estuvo con nosotros y yo no lo vi muerto para nada. Jaime- Lo mismo pensaba yo, creo que mi compañero de actuación es un fantasma. Carla- ¡No puede ser que trabajábamos con un fantasma!, ¡Qué miedo! Jaime- Yo me enteré de la desgracia días después de que lo reprobaron, el representó una escena de la obra “Cazador de fantasmas”, precisamente y la maestra lo reprobó. Carla- ¿Cuál escena? Jaime- La escena donde se envenena con los dulces. Carla- ¡Qué impresión! Jaime- Su medre me dijo, que se murió envenenado por unos dulces, tal vez estaba representando la misma escena, pero en su cuarto y en la vida real, porque seguramente estaba muy frustrado por reprobar. Carla. ¡Seguramente! Director- Yo opino que eso de que Alejandro es un fantasma, es puro cuento, seguramente tu compañero y Alejandro son muy parecidos y no son la misma persona. Jaime- No lo creo Señor Director, le voy a explicar por qué, hace unos días, me lo encontré en la entrada del teatro y lo saludé, él me saludó también y le pregunté acerca del rumor de que estaba muerto, él no supo que decir, con pretextos se fue y no me dijo nada. Director- ¡Qué extraño!, jamás podría creer, que estábamos tratando con un fantasma. Jaime- Yo tengo el recorte del periódico, donde dice, que Alejandro se suicidó, por eso se me hizo extraño volverlo a ver, porque yo lo creía muerto y como usted, yo también pensé que se trataba de dos personas muy parecidas. Director- Esperemos para saber qué pasó con él. He pensado que debo buscar a alguien más responsable, para que trabaje con nosotros, no es posible que falte un actor, cuando hay función. Laura- ¡Sí maestro!, tiene usted toda la razón, su ausencia nos hizo pasar un mal momento. Director- Por eso te quiero preguntar, si quieres hacer el papel que hacía Alejandro. Jaime- ¡De verdad!, me encantaría, pero tengo que organizarme con los horarios, porque trabajo en la librería diario. Director- ¿Pero trabajas medio tiempo o tiempo completo? Jaime- Trabajo medio tiempo, tengo un compañero de trabajo, él estudia y le cambian los horarios de sus clases, me puedo poner de acuerdo con él y ensayar con ustedes. Director- No vayas a faltar los domingos, que son los días de las funciones. Jaime- No Señor Director, no se preocupe, nada más falta, que me ponga de acuerdo con mi compañero. Director- Está bien, (A Laura), Laura, trae un libreto de los que están en la bodega, para que lo lea y empiece a memorizar. Laura- Sí, Señor Director. Director- Lee y memoriza el libreto, para ensayar lo antes posible. Jaime- Está bien. Carla- No puedo creer que actuábamos con un fantasma o un espíritu, ¡Qué horror! FIN.
El cantante asesino. (3ª. Parte). Acto III. Esta escena se realiza también en casa de Manolo. Manolo- Raúl, ¿Está todo listo? Raúl- Sí, ya compré las sodas y las botanas. Manolo- ¿Compraste el pastel? Raúl- También, no sabía que vamos a celebrar el cumpleaños de Janet. Manolo- Debía aprovechar, para celebrar el cumpleaños de tu amiga. Raúl- Estoy seguro que le encantará el detalle. Manolo- Sí, seguramente. Raúl- Y tu amigo, ¿A qué hora te dijo que iba a llegar? Manolo- Me dijo que temprano, para esperar a Eduardo. Raúl- Y dime, ¿Sabes tú cómo le hace cuando hipnotiza? Manolo- Hace que las personas vean un péndulo que él tiene. Raúl- ¡Un péndulo!, como en las películas. Manolo- Sí. Raúl- Yo creía que eso nada más en los largometrajes pasaba. Manolo- No, también pasa en la vida real. (Suena el timbre). Raúl- Ya llegó alguien. Manolo- Ve a abrir. Raúl- Ya voy. (Se asoma por la ventana), Es Janet y su amiga. Manolo- No es cierto, ¡Abre! Raúl- Voy, ya voy. (Abre). Janet- ¡Hola Raúl!, ¿Cómo estás?, Manolo, ¡Que tal! Manolo- ¡Qué tal!, Janet, ¿Cómo estás?, ¡Feliz cumpleaños! Janet- ¡Gracias, Manolito!, (A Raúl y Manolo), les presento a Laura Verónica. Raúl- ¡Mucho gusto! Laura Verónica- Encantada. Manolo- Mucho gusto, Raúl es un admirador tuyo. Laura Verónica- ¡Ah sí!, ¡Estaba segura! Raúl- Pásenle, todavía falta Eduardo. Laura Verónica- Me dijo Janet que lo van a hipnotizar. Manolo- Sí, Toño va a hipnotizarlo. Janet- ¿Y para qué van a hacer eso? Raúl- No te podemos decir, es una sorpresa, lo bueno fue que aceptó. Manolo- ¡También hicimos esta reunión para celebrar tu cumpleaños! Janet- ¡Gracias, Manolo!, pero mi cumpleaños fue hace tres días. Manolo- Un poco tarde, pero también nosotros te vamos a felicitar. Janet- ¡Claro! Manolo- Laura Verónica, te vimos en la portada de la revista “Sombrío”. Laura Verónica- ¿Y qué les parecí? Raúl- Te veías muy bonita. Laura Verónica- ¡Gracias, Raúl! Raúl- ¿Por qué te gusta actuar ese género del teatro? Laura Verónica- No sé, siempre me gustó el teatro del horror. Raúl- ¡Te va bien! Laura Verónica- No sabía. Manolo- ¡Bueno, todos!, vamos a partir el pastel. (Suena el timbre). Raúl- (Se asoma por la ventana), ¡Es Toño!, (Va a abrir). Laura Verónica- ¿Quién es Toño? Manolo- Es el amigo que va a hipnotizar a Eduardo. Laura Verónica- ¡Ah! Janet- Me encanta que puedes ver por la ventana, quien viene a visitarte. Manolo- Sí, podemos ver quien es, pero eso me preocupa, porque pueden ver desde afuera si no hay nadie. Janet- Tienes razón. Manolo- Por eso quiero poner portones enteros, para que no se vea adentro. Janet- ¡Hazlo!, Te vallan a asaltar. (Entra Toño). Toño- ¡Hola, todos! Manolo- ¡Hola, Toño!, ¿Cómo estás?, Te presento a Janet. Janet-  Mucho gusto, me decía Manolo que eres psíquico. Toño- Psicólogo, mejor dicho. Janet- Es que me dijo que vas a hipnotizar a Eduardo. Toño- Así es, los dejo, voy a saludar a Raúl. Manolo- Pásale, estás en tu casa. (A Janet), Y bien, dime, cuantos años cumpliste. Janet- Treinta y dos. Raúl- (A Janet). No pensé que fuera a venir tu amiga. Janet- Le dije si quería acompañarme, con unos amigos y me dijo que sí. Laura Verónica- (Ríe), Ustedes me cayeron muy bien. Raúl- ¡Gracias! Manolo- Cuando se te ofrezca algo, ya sabes, estamos a tus órdenes. Laura Verónica- ¡Qué lindos! (Suena el timbre) Toño- Debe ser Eduardo. Raúl- (Se asoma), Sí es él. (Abre). Janet- Ya llegó Eduardito, tenía mucho que no lo veía. Manolo- Yo también, tengo mucho sin verlo. (Entran Raúl y Eduardo). Eduardo- ¿Cómo están?, ¿Me pierdo de algo? Laura Verónica- ¡Hola, Eduardo!, Estábamos celebrando el cumpleaños de Janet. Eduardo- ¡Felicidades, amiga! Janet- ¡Gracias, Ed! Eduardo- ¿Llegué tarde para la hipnosis? Toño- No, llegaste justo a tiempo. Manolo- ¡Eduardo, que tal!, oye dinos, ¿Por qué aceptaste que te hipnotizaran? Eduardo- Porque une vez, en una feria, unos amigos y yo, vimos a un psíquico y nos hipnotizó. Janet- Ya vez Toño, los psíquicos también hipnotizan. Toño- Sí, también. Eduardo- Y el psíquico, aparte nos adivinó el futuro. Manolo- ¡Ah!, No sabía, porque se me hizo raro que aceptaras. Eduardo- Sí, es divertido. Toño- Entonces, empecemos. (Saca su péndulo), (A Eduardo). Siéntate por favor. Eduardo- (Se sienta). ¿Y ahora? Toño- Observa el péndulo. (Toño mueve el péndulo, Eduardo lo observa y se hipnotiza). Ahora dime, ¿Estás hipnotizado? Eduardo- Sí, estoy seguro. (Con voz pesada). Toño- Entonces, respóndenos, ¿Tú mataste a los reporteros? Eduardo- No, a los reporteros los asaltaron y los mataron. Toño- ¿Cómo sabes? Eduardo- Porque leí las notas en el periódico. Toño- Eso es todo, Eduardo, la hipnosis ha terminado. Eduardo- (Vuelve al estado normal). ¿Qué pasó? Toño- Nada. Eduardo- Muchachos que creen, me tengo que ir temprano. Raúl- No te preocupes, no vamos a hacer ninguna fiesta, era una simple reunión. Laura Verónica- ¡Ahora vamos a comer pastel! Manolo- ¡Sí!, también trajimos botanas y los refrescos. Raúl- ¡Vamos a celebrar! FIN.
El actor del horror. Por: Miguel Saavedra. Personajes: Jaime Rey. Genaro. Susana. Martín. Arturo. Luis. Leo. Arlet.                         Acto I. Esta escena se realiza en una sala, están Jaime Rey, un integrante de teatro y amigos. Jaime Rey- ¡Gracias por asistir al estreno de la temporada de teatro! Genaro- De nada amigo, estuvo muy bien, te felicito. Jaime Rey- ¡Ah, sí! Susana- Amigo, estuvo excelente la función. Jaime Rey- ¡Gracias! Susana- Y en esta ocasión, ¿Cómo le hiciste para conseguir actores? Jaime Rey- Me fui al malecón a invitar gente y llegaron, aparte de los actores de puestas en escena pasadas. Susana- Te pregunté, porque un niño quería salir en una obra de teatro. Jaime Rey- ¿Por qué no me lo mandaste? Susana- Porque no sabía si ibas a necesitar gente. Jaime Rey- Me lo hubieras mandado, ¡Qué lástima! Susana- Todavía le puedo decir, es un alumno de mi clase de universidad. Jaime Rey- ¡Dile!, pero, ¿Es talentoso? Susana- Sí, también se ve responsable. Jaime Rey- Te agradeceré que me lo mandes. Susana- Está bien, Yo le digo, ahora, te tengo otra pregunta. Jaime Rey- Te escucho. Susana- ¿Por qué te gusta el género del horror? Jaime Rey- No sé, el teatro del horror, simplemente me encanta. Susana- Porque a mi alumno, también le gusta mucho ese género. Jaime Rey- ¿Qué está estudiando? Susana- Comunicación. Jaime Rey- ¡Oh! Susana- Espero que te sirva su participación. Jaime Rey- Por las referencias que me das, se ve que me va a servir de gran ayuda. Susana- Pronto tendrás un aprendiz. Jaime Rey- Así es, déjame decirte que había estado pensando, que necesitaba a un niño, para que me siguiera los pasos. Susana- Pues este niño te va a seguir mucho, porque como te dije le gusta mucho el teatro y el género. Jaime Rey- ¡Qué bien! Susana- Con eso de que nunca tuviste hijos. Jaime Rey- Que quieres decir con eso. Susana- Quiero decir, que a quien le vas a heredar, tu compañía de teatro, cuando te mueras. Jaime Rey- No lo había pensado. Susana- Amigo, los años pasan y es necesario pensar en el futuro. Jaime Rey- Tienes razón. Martín- Jaime, te quiero invitar a la presentación de un libro, que voy a publicar. Jaime Rey- ¿Cuándo? Martín- Le decía a Genaro, que en dos meses. Jaime Rey- Si puedo ir, ¡Claro! Martín- Te invito porque es una obra de suspenso. Jaime Rey- Que interesante. Martín- Es un libro de dramaturgia, tal vez te interese hacer, la puesta en escena. Jaime Rey- Suspenso, suena bien, ¿Dónde va a ser la presentación? Martín- En la universidad “Bella Vista” Susana- ¡Cómo creen!, ahí estoy dando una clase, (A Jaime Rey), ahí estudia el niño que te digo. Jaime Rey- ¡Ah! Genaro- ¿Y por qué vas a publicar el libro, hasta dentro de dos meses? Martín- Porque me tengo que esperar a una convocatoria, todavía tengo que ver si me van a seleccionar. Genaro- ¿Quieres decir que no es seguro? Martín- No, pero me van a seleccionar, vas a ver. Genaro- ¡Seguro!, eres muy talentoso. Jaime Rey- ¿Por qué no publicas ese libro, en una editorial? Martín- La convocatoria te publica el libro, si eres ganador. Jaime Rey- Entiendo, a lo que me refiero es, que por qué no publicas sin participar en un concurso. Martín- Lo que pasa es que un amigo me dijo lo de la convocatoria, porque le pregunté si podía publicar un libro en su editorial. Jaime Rey- Y te dijo que hicieras eso. Martín- Sí. Jaime Rey- Deberías buscar una editorial para que vendas tus libros. Martín- Yo escribo para una en el área norte del país y me va bien. Jaime Rey- ¿Qué tan bien? Martín- Con un libro que publique gané el doble de la inversión. Jaime Rey- ¡Menos mal! Arturo- Jaime, ¿Podrías llevar mañana la computadora al teatro? Jaime Rey- ¿Para qué? Arturo- Para hacer el cartel de la obra de teatro. Jaime Rey- Yo pensaba que ya lo habías hecho. Arturo- Todavía no, lo único que tenía, era la imagen. Jaime Rey- Claro, mañana la llevo. Martín- ¿Pero no estrenaron hoy? Jaime Rey- Sí, lo que pasa es que estuvimos dando un taller de teatro y vamos a presentar algo. Martín- ¡Ah! Jaime Rey- Es algo sencillo. Martín- (A Arturo). Si quieres te puedo ayudar, a hacer el cartel. Arturo- ¡Esta bien! Martín- Mañana nos vemos en el teatro. Arturo- De acuerdo, (A Jaime Rey), también te quería decir otra cosa. Jaime Rey- Dime. Arturo- Que una muchacha nos invitó, a formar parte de una comunidad de teatro. Jaime Rey- ¡Sí!, ¿Quién era? Arturo- Una actriz que viene de Monterrey y piensa vivir aquí un tiempo. Jaime Rey- ¿Y dónde va a formar la comunidad? Arturo- En una red social. Jaime Rey- Busca la comunidad e invítala a que vea la obra de teatro. Martín- Amigo, me retiro. Jaime Rey- ¿Ya te vas? Martín- Sí, tengo clase a las siete de la mañana. Jaime Rey- Siendo así, te veo después. Martín- Yo te hablo en la semana, para ver que hacemos. Jaime Rey- Está bien. (Se despide de Martín). Susana- Yo también ya me voy. Arturo- Y yo. Jaime Rey- ¡Ya se van todos! Susana- Sí, Jaime, ya me voy porque quiero descansar. Jaime Rey- Que te vaya bien. (Susana se despide y sale). Genaro- Me retiro, te veo luego. Arturo- Maestro, nos vemos mañana en el teatro con la computadora. Jaime Rey- No te preocupes Arturo, mañana la llevo. Arturo- ¡Gracias! Salen todos.              
El actor del horror. (2ª. Parte) Acto II. Esta escena se realiza en un aula de la universidad donde trabaja Susana, en el aula hay una mesa larga y sillas. Susana- Luis, ayúdame a poner los manteles. Luis- ¿Qué va a haber? Susana- La presentación de un libro. Luis- ¡Oh!, ¿De qué tipo? Susana- De una obra de teatro que escribió el amigo de un amigo. Luis- ¡Ah, sí! Susana- Por cierto, Luis, tú nos has dicho que te gusta el teatro del horror. Luis- Sí, mucho. Susana- Te comento esto, porque el amigo que te digo, es actor y va a poner una obra de teatro de ese tipo. Luis- ¿En cuál teatro?, para irla a ver. Susana- No, Luis, el maestro te quiere invitar a que participes con él, en su puesta en escena. Luis- ¿Cuántos actores son? Susana- Jaime Rey tiene una compañía de teatro y siempre hacen teatro del horror. Luis- ¡Qué bien! Susana- Dime, ¿Por qué te gusta ese género? Luis- No sé, siempre me ha fascinado actuar ese tipo de personajes. Susana- Te gusta hacer papeles antagónicos. Luis- Sí, me encanta. Susana- ¿Has estudiado teatro? Luis- Sí, he tomado talleres de actuación y expresión corporal. Susana- Pero yo me refiero, a nivel licenciatura. Luis- No maestra, nunca estudié la carrera, porque preferí estudiar comunicación. Susana- ¿Y te sirve de algo la comunicación, para tus estudios de teatro? Luis- Sí, mucho. Susana- Quieres decir que te gusta más bien, comunicar cosas del horror. Luis- Así es. Susana- ¿Y qué has hecho aparte de actuar? Luis- He recitado poemas en un programa de televisión y he hecho reportajes también. Susana- ¡Qué bien! Luis- ¿Dónde está el teatro de su amigo? Susana- Es el teatro que está en el deportivo del centro. Luis- ¿En ese? Susana- Sí, Luis, en ese. Luis- Para irle a preguntar a su amigo, si necesitan actores. Susana- Pues él me dijo que te esperaba, no te había querido decir antes, para que no descuidaras tus estudios, como era final dl cuatrimestre. Luis- ¡Claro maestra!, ¡Gracias! Susana- De nada, dile a Jaime que vas de mi parte, que eres el niño que le dije. Luis- Está bien. Susana- Oye, ¿Pero tienes tiempo?, ¿No interfiere con tus tareas el teatro? Luis- No, seguro. Susana- Bueno, Luis te deseo suerte. Luis- ¡Gracias! Susana- Ahora ayúdame a terminar de poner los manteles, para la presentación. Luis- Sí. Susana- Quédate, te va a gustar. Luis- A ver si compro el libro. Susana- ¿Cómo que vas a comprar el libro y no sabes el tema? Luis- No lo sé, pero es de dramaturgia, por eso lo quiero comprar. Susana- ¡Pues te tengo una sorpresa con el libro! Luis- ¿Cuál es? Susana- Que es de un tema de suspenso. Luis- ¡Ah, sí!, ¡Qué bien! Susana- Estoy segura, porque oí cuando el escritor le decía a Jaime, que era una obra de teatro de ese género. Luis- ¡Oh! Susana- Porque iba a participar en un concurso y si ganaban, haría una presentación. Luis- ¿Y cómo sabe que es el mismo escritor? Susana- Porque la presentación sería en esta universidad. Luis- ¿A qué hora es? Susana- A las 6:30 empieza. Luis- No tengo clase, ¡Me puedo quedar! Susana- Muy bien, Luis. Luis- Hay que poner los micrófonos. Susana- Ahorita los traen, de la cabina de radio. Luis- Si quiere, yo voy por ellos. Susana- No te preocupes, el conserje los va a traer. Luis- Bueno. Susana- El maestro Jaime Rey, va a venir al evento. Luis- ¿El director que me dijo? Susana- El mismo, lo que pasa es que no sabía si tenías clase. Luis- No, voy a quedarme a la presentación. Susana- Aprovecha para hablar con él. Luis- Pero, ¿qué le digo? Susana- Que te gustaría participar con ellos, en sus obras de teatro. Luis- ¡Claro! Susana- Mira, ahí viene Martín, el que va a presentar el libro. Martín Entra. Susana- ¡Hola, Martín!, ¡Felicidades por lo de tu libro! Martín- ¡Gracias! Susana- ¿Estabas seguro que ganarías? Martín- Un poco, ¡Pero tuve suerte y gané! Susana- Sí que tuviste suerte, te presento a este alumno. Martín- (A Luis), ¡Mucho gusto! Luis- Que tal. Martín- ¿Cómo te llamas? Luis- Luis. Martín- Yo soy Martín Contreras. Susana- Miren ahí viene Arturo. Arturo entra. Arturo- ¡Hola Susana!, ¡Que hay de nuevo Martín! Susana- ¿Cómo estás? Arturo- ¡Muy preocupado! Susana- ¿Por qué?, ¿Qué pasó? Arturo- ¡Jaime tuvo un accidente! Susana- ¡No es cierto! Arturo- Sí, ayer chocó. Susana- ¡Dios mío!, ¿Cómo está? Arturo- Muy grave. Susana- ¡Vamos a verlo! Arturo- No, quédense a la presentación, seguramente el desearía eso. Martín- ¡Pobre amigo!, ¡No podemos cancelar el evento! Arturo- No se preocupen.                      
EL REPORTERO ADIVINADOR. Por: Miguel Saavedra. Capítulo 1. Es una mañana como todas, Juan tiene que llegar a trabajar al canal de televisión, él sale en un programa a la una de la tarde, programa de entrevistas, también trabaja como reportero, para el noticiero de la misma televisora, es licenciado en comunicación y le gusta mucho su trabajo. Juan está muy entusiasmado, porque ha aprendido a adivinar el futuro, en sus ratos libres se dedica a aprender cosas ocultas y de misterio, él compra libros de brujería y se va a las cafeterías, se toma un café expreso y hace lecturas con los residuos de éste, últimamente ha leído cosas y han resultado ciertas, por eso Juan piensa en adivinar algunas cosas. El comunicólogo ha entrevistado a gente de todo tipo, él está interesado por informar de la mejor manera, él está seguro que hace un buen trabajo, en el área de reportaje, también le gustaría conocer a personalidades, que son para él importantes, por diferentes atributos que forman a éstas. A Juan le han pedido que dé el noticiero de la mañana, porque quien lo da, estará ausente un tiempo, por motivos personales, Juan necesita unos lentes y piensa ir a la óptica pronto para conseguirlos y así poder leer las notas. El reportero estará más ocupado, se cansará más y por eso ya no andará en su bicicleta, en las tardes como antes, tampoco saldrá a los centros comerciales, a Juan le gusta comprar en una tienda departamental que está por su casa. Han empezado la nueva temporada de noticias con Juan, finalmente contrataron a un comunicólogo más y también dirá notas, él ya se ha comprado los entes y los usa para cubrir las entrevistas del noticiero, cuando no sale él. Juan sigue a Yesica Sonia en una red social, ella publicó la revista donde la entrevistaron éste mes, él la vio en el supermercado y la compró, para enterarse d cosas nuevas de ella, a él le gustaría conocerla y entrevistarla, él piensa qué adivinando con lecturas del café, la puede conocer. También cree adivinar su número de móvil, le podría hablar para invitarla al cine y a cenar, porque Juan afirma que si le dice que si quiere ser su novia, ella aceptará. Todo está planeado para contactarla, entrevistarla e invitarla. El reportero es muy carismático, dice las noticias de una forma muy eficiente, la gente ve el noticiero y lo comenta, también los productores del canal, la han pedido que diga las noticias, del noticiero de la tarde, él está muy contento trabajando en ese lugar, le encanta su trabajo, nada más le falta conocer a Yesica Sonia. La novia de Juan y él fueron al centro comercial, a ver unas cámaras fotográficas, porque quiere poner una exposición, Andrea va a modelar, por eso lo acompañó, ella es su novia, mejor dicho, es una gran amiga, porque no quieren profundizar en sus sentimientos, ellos se conocieron en la preparatoria y se llevan bien. Al estar en el centro comercial, se encontraron a José, el recitador, se quería comprar un moño, para su próximo número, él recita muy bien y lo invitan mucho al programa, que transmiten en el canal donde trabaja Juan. Juan estuvo buscando en la red social, más de Yesica Sonia, para seguirla, encontró de su trayectoria y de ella en francés, Yesica habla muy bien francés y había fotos y videos de otra revista, que iban a publicar de sus años de trayectoria. Al reportero le gusta la vida misteriosa, él cree que ese tipo de vida es interesante, pero a veces piensa que no está preparado para vivirla, porque las lecturas de café que hace, algunas veces no resultan afirmativas, por eso se siente inseguro de ser un hombre enigmático, aunque no siempre le sucede eso. El comunicólogo fue a comer con unos amigos sushi, iban a celebrar que un amigo de Juan vendió una casa, por eso se hizo la invitación a comer, él les comentó que quería conocer a Yesica Sonia, que iba a tratar de contactarla, para estar con ella, uno de sus amigos le dijo, que ella estaba comprometida con Arturo Félix, el escritor. Juan se quedó sin palabras, al enterarse de la relación de ella con el escritor, lo único que le vino a la mente, fue saber, que hacen en sus ratos libres, el amigo le comentó que ella estaba haciendo una telenovela, en la ciudad donde vivía Arturo Félix, que eran amigos desde tiempo antes e iban a exposiciones de arte y a presentaciones de libros, que era todo lo que hacían. A Juan no le cayó muy bien la noticia, de las relaciones de Yesica con Arturo, por eso pensó en adivinar el número de teléfono de ella, para hablarle e invitarla al cine o a cenar, él cree que eso es una buena idea, para que se dé cuenta de sus sentimientos. Yesica Sonia es una actriz famosa, también canta, es muy bonita y le encanta su trabajo, ella cree en el amor y no se da por vencida, en encontrar al amor de su vida, piensa que Arturo Félix es una persona interesante y apasionada, por eso lo conoció, ella convive con él profesionalmente y amistosamente. La actriz y cantante trabaja en una compañía de teatro y algunas veces actúa en programas del canal de televisión, donde trabaja Juan, pero en la Ciudad de México y él no lo sabe, ella ahorita está actuando para una telenovela en Zacatecas, está muy entusiasmada y visita a Arturo, después de las grabaciones, a ellos les gusta jugar videojuegos. El reportero ha estado muy ocupado en su trabajo, a él le gustaría ir a un café, donde leen la mano y el tarot, para adivinar el número de teléfono de Yesica Sonia e invitarla a salir a alguna parte, cuando regrese de Zacatecas, lugar donde también vive el escritor. Yesica hoy no va a ir a casa de Arturo, a jugar videojuegos, porque la van a entrevistar, en el programa de la una de la tarde, del canal cultural, ella le ha avisado por teléfono al escritor, para que no la espere, él va a ir al supermercado a comprar comida. Juan ha regresado del canal, está en su casa y encendió el televisor, que daba una entrevista de la actriz.      
Capítulo 2. Yesica Sonia nació en México, es actriz profesional y hace muy bien su trabajo, le va muy bien, la gente la admira mucho, ella está viendo lo de un programa de televisión, después de terminar la telenovela que está haciendo en Zacatecas, piensa regresarse a México, porque está segura que el escritor no es más que un amigo y ella anhela encontrar a un hombre, que la quiera como a una novia, casarse y tener hijos. A la actriz le dijeron que se probara un vestuario, para el personaje que está haciendo, ella oye que una niña le dice a su mamá, que Yesica estaba ahí y que le pediría un autógrafo, eso a ella la hizo sentir admirada y muy contenta, con lo que hace. Los vestuarios le quedaron muy bien, todo está listo para los nuevos capítulos de la telenovela. Han pasado los días y Yesica está muy entusiasmada con la telenovela, porque piensa que ese trabajo la hará escalar, para mejores oportunidades en la televisión, cree que a la gente le importará verla en futuras telenovelas, ella es muy feliz con eso de su vida, nada más falta alguien que le haga compañía y sea así como ella. Juan está decidido por adivinar el número de móvil de Yesica, después del noticiero irá al café donde leen el tarot y la mano, para que sea más fácil saber el número, hablarle a ella es una buena idea, al menos eso piensa. Arturo Félix citó a Yesica en u café, él quiere hablar con ella de algo muy importante, ella llegó a la cita después de unas tomas, que le hicieron de la telenovela, no sabía que le quería decir Arturo; le pidió que fuera su novia, ella no sabe qué decir, le dijo que lo iba a pensar y no pudo aceptar el anillo, que le quería regalar. Yesica Sonia ha pensado acerca de la proposición de Arturo, le va a decir que lo va a aceptar, pero que va a intentar llevar la relación, porque no sabe bien cuáles son sus sentimientos hacia él; Arturo está de acurdo con lo que ella le quiere dar, lo que pasa es que no está segura si podría realmente amar al escritor. Arturo está muy contento con la relación, que ha empezado con Yesica, él está convencido que ella es una mujer de fiar, pero el escritor es muy desconfiado y no puede hacer sentir a la actriz completamente a gusto, ella le dice que por qué es así, con la gente, él le dice que la vida lo ha hecho desconfiado y que no sabe si algún otro hombre, buscará a Yesica para decirle, lo mismo que él. La actriz le pregunta al escritor, que por qué piensa que alguien le diría, lo que él le dijo, Arturo le contestó que seguramente alguien, le hablará por teléfono, para saludarla o algún admirador de la red social, le escribiría un mensaje para conocerla, ella le dice, que no cree que eso pueda pasar. Juan después de días de trabajo, ha podido ir al café, para adivinar el número de móvil de Yesica, ha pedido un café expreso y se compró una galleta, con números de la suerte, porque dice que éstos serán los números del móvil, de la actriz, abre la galleta y apunta los números en un pedazo de papel, ya tiene todo listo, para hablarle por el móvil a Yesica Sonia, piensa ir a un mirador de la ciudad, que él conoce, para marcar y esperar, si le contesta ella o no. Yesica está en casa de Arturo jugando videojuegos, están pasando un rato agradable, están pensando que van a hacer, para celebrar el comienzo de su noviazgo, o al menos algo como eso, el piensa si van a comer sushi, sería divertido, pero le dice acerca de que alguien le va a hablar. Juan ha llegado al mirador, marca al número que adivinó y está llamando, Arturo espera a que suene el móvil de Yesica y no pasa nada, ella le dice al escritor, que se olvide que alguien la va a buscar. El reportero está desilusionado, porque marcó al número que adivinó y era un número equivocado, no se explica porque no acertó a su adivinación, no sabe qué hacer por la frustración, de que no se comunicó con Yesica y porque algunas veces no adivina, él piensa ir al café nuevamente, a hacer una nueva adivinación. Juan está en su casa, después de un día más de trabajo, ya no tiene más quehacer, piensa descansar hasta el otro día en la mañana, quería ir al supermercado, a comprar leche y cereal, pero lo dejará para después, ha encendido el televisor, para ver que hay en el canal, está el programa de Miroslava Alba, está diciendo algo al público y sin palabras le dice a Juan, que piense bien, eso de buscar a Yesica Sonia, él no sabe que pensar, se ha dado cuenta de que Miroslava está enamorada de él, mejor dicho, no sabe por qué le dijo eso. El comunicólogo ahora piensa, que no nada más es Yesica Sonia, quien debería conocerlo, ver lo que le dijo Miroslava Alba, le ha hecho cambiar sus sentimientos hacia la actriz, lo único que se pregunta es cómo Miroslava, sabe acerca de sus sentimientos por Yesica, la conductora del programa es actriz también, debe conocer a Yesica o a alguien, que le dijo, lo que Juan sentía por ella. Juan está muy frustrado, porque algunas veces sus adivinaciones, no resultan ciertas, lo del número de móvil de Yesica, le ha hecho pensar eso, cree que necesita más práctica como psíquico, para que no le sucedan ese tipo de cosas, porque eso le produce frustración, él piensa ir al café con los psíquicos, para que le enseñen a adivinar mejor, él espera que no le pase más eso. Yesica Sonia sigue con su trabajo en ese lugar, la gente la sigue mucho, su relación amistosa con el escritor, ahí sigue, no hay nada nuevo, Juan sigue con la idea de aprender a adivinar mejor, pero no ha tenido tiempo de ir al café de los psíquicos. Miroslava Alba es una conductora, del canal de televisión, donde trabaja Juan, casi no la conoce, la ha visto, pero no son amigos, ella estudió comunicación también, pero trabaja en ese programa, no da las noticias, ni hace entrevistas, solamente conduce el programa de la tarde, la conductora percibe que alguien está enamorado, de una artista, pero esa artista no corresponderá, el amor de ese enamorado y ella cree que podría ser ella, la compañera sentimental de éste.        
Capítulo 3. Miroslava Alba tiene una vida como la de cualquier comunicóloga, es muy capaz y a la gente le gusta mucho su trabajo, ella está complacida por entretener al público, con el programa que conduce, no está comprometida con nadie, ella por el momento se dedica a trabajar y no hay ningún pretendiente, a ella no le gusta estar sola, tuvo un novio que cantaba en un grupo musical, pero el noviazgo no funcionó y quedaron como amigos. La conductora no saldrá en la televisión hoy, porque no van a transmitir el programa, va a salir el noticiero nacional, ella va a estar libre, por eso va a irse a un retiro de un convento, Miroslava tiene una amiga que es monja y le dijo que si podía fuera al convento, por eso va a ir, a saludar y a convivir un rato con Dios. Juan ahora tiene dos mujeres en quienes pensar, las dos comunican y entretienen al público con sus trabajos, son muy buenas en sus áreas, él definitivamente piensa, que tiene que decidirse por una en especial, ha contemplado conocer a Miroslava, opina que es muy atractiva y que seguramente sería una buena compañera en el amor, aunque está seguro que la actriz es la mujer de sus sueños. Yesica Sonia está muy ocupada con su trabajo, todavía falta para que terminen las grabaciones, de la telenovela, ella planea tomarse unas vacaciones en Nueva York, después de que acabe ésta, a ella le gusta mucho ese lugar, lo ha visto en películas y en programas de televisión, por eso tiene en mente conocer personalmente la ciudad y hacerse de nuevos amigos. El reportero ha ido al café de los psíquicos, pidió un expreso para adivinar algo. Está convencido que el café le dirá de cosas, que no le podrían pasar, si hiciera otras actividades, también está seguro que le dirá acerca de Yesica, ha entrado un señor de barba larga y anciano, se le ve apariencia de mago, piensa que seguramente ha hecho hechizos y que ha de ser muy bueno. El anciano pide un café expreso y se sienta en la mesa, que está junto al sofá donde Juan está sentado, el hombre de las barbas blancogrises lo saluda, él le contesta el saludo, después de eso, hace la lectura de su café, no puede interpretar lo que éste le dice y se desespera, el viejo le dice, que por qué no puede interpretar las adivinaciones. Juan le dice al señor, que algunas veces no le dice el café, lo que en verdad pasará y eso le molesta, porque algunas veces piensa, que pasará alguna cosa y no pasa, el señor le dijo que a veces sucede eso, para que pasen otras cosas y que no deben pasar las cosas que él piensa, el comunicólogo le pregunta al señor, que cómo se llama, él le dice que Brujo Gallo, Juan le agradece su enseñanza del café. El Brujo Gallo es un anciano joven, que estudió medicina y también aprendió brujería, le gustan las cosas ocultas y ayuda con sus embrujos, a la gente, para que obtengan salud, dinero y felicidad, él le ha dicho a Juan, que si quiere adentrarse en la adivinación, va por buen camino, que lo único que necesita es práctica, el comunicólogo le dijo, que le gustaría verlo en futuras ocasiones, para compartir sus aprendizajes, Juan y el Brujo Gallo ahora son amigos. Yesica ha terminado la telenovela, ya está de regreso en su casa, todos la esperaban muy entusiasmados, su amistad con el escritor no llegó a tanto, porque ella veía en él a un amigo nada más, le prometió que le escribiría cartas a su correo electrónico, la actriz piensa, que tomar unas vacaciones cortas sería divertido, después de una temporada de trabajo y hace planes para ir a Nueva York. Yesica finalmente está en la ciudad de Nueva York, está muy emocionada de ver gente diferente, en un lugar tan bonito, ella está tomando fotos y se encuentra a una banda musical en un parque, la música es muy agradable, se acerca al frente del escenario, para escuchar mejor y se da cuenta que un amigo, está tocando en el concierto, no lo puede creer y espera a que se acabe la canción para saludarlo. La canción se ha acabado, Diego oye que gritan su nombre y busca entre la gente quien lo llama, se da cuenta que es Yesica y se acerca a ella, él la saluda y le pregunta que qué hacía en Nueva York, la actriz le dice que está tomando unas vacaciones y el músico le explica, por qué está el también en la ciudad. Diego le dijo que fue a Nueva York, porque lo invitaron a tocar, con su banda a la ciudad, que iba a estar unos días y la invitó al hotel donde se hospedaba, para cenar, ella acepta la invitación y le dice que después de la cena, tomaría un taxi a su hotel, él le dice que está bien. El músico le dice a Yesica Sonia, que está muy emocionado, de haberla visto en esa ciudad, le dice que es una casualidad muy agradable, él y la actriz se conocen desde la preparatoria, fueron compañeros de clase y lo conoce bien, algunas veces fue a fiestas, de amigos que tienen en común, él le pregunta que cuando se va a regresar a México. Yesica le dice que estará unos días en la ciudad, que piensa ir a los lugares de atracción turística y de moda, Diego le pregunta también, que con quién fue de vacaciones, ella le dice que sola, el músico le propone ir con ella, a algunos lugares en sus ratos libres y recordar los tiempos de la preparatoria, ella le die que está bien. Diego y Yesica han salido juntos, a dar la vuelta en la ciudad, ella está muy divertida de conocer los lugares de atracción, él también está muy entusiasmado por tocar con su banda, en el festival del parque, piensa que fue una gran oportunidad participar en éste, con sus compañeros, también se siente muy bien de haberse encontrado, a su amiga de México, ella le dice que recuerde los viejo tiempos. La actriz pasó una vacaciones excelentes, conoció lugares en compañía de un amigo, de la adolescencia, está muy interesada por volver al trabajo, después de un merecida descanso, lo que va a hacer ahora es, actuar hasta unas nuevas vacaciones, ella se ha comprometido otra vez con los escenarios, le han ofrecido nuevos papeles y entrevistas.          
Capítulo 4. Juan ha estado muy interesado, por hacer cosas de comunicación, en otras áreas de esta licenciatura, cree que hacer teatro sería una buena idea, el reportaje le ha dado un poco de tiempo libre y no sabe si buscar una universidad, para dar clases de comunicación o una compañía de teatro, el comunicólogo no ha sabido nada de sus amigos y piensa ir al grupo de teatro de un amigo, a ver si le dan un buen papel. El comunicólogo le habló por teléfono a sus amigos, para que fueran a su casa, a tomarse unas cervezas y a comer carne asada, también para decirles que le gustaría hacer una comunidad de amigos que hacen teatro, a ellos les ha parecido una buena idea, irán a casa de Juan y hablarán de eso. Los amigos de Juan lo invitaron a ver una puesta en escena, para que si le interesaba se integrara a ésta, él ha ido, le ha parecido una obra estupenda y quiere participar, Miguel le ha dado un papel secundario, para que lo memorice y empiece a trabajar con ellos, le dieron un papel chico, para que sus compromisos, en el canal de televisión, no se vean afectados. El reportero ahora hace teatro, está muy entusiasmado con lo que hace, él está seguro que es un excelente comunicólogo, ha dejado de pensar en Yesica Sonia un poco, el trabajo no lo deja pensar tanto en ella, aunque sigue creyendo que la conocerá, también ha pensado en Miroslava, no sabe si en verdad es una buena idea, que contacte a la actriz. Lo que hace últimamente es trabajar, para distraer su mente en otras cosas y aprender a adivinar con más exactitud los cafés. Juan está en el teatro, un amigo de éste no se puede hospedar en la casa de huéspedes, donde él vive, porque salieron de vacaciones, entonces el comunicólogo le dice, que puede hospedarlo en su casa unos días, él acepta la invitación y le dice que después del ensayo, vayan a un concierto de Jazz, porque tiene boletos que le dio el maestro del teatro. El amigo de Juan y él, ya están en su casa, el concierto estuvo muy bueno, gustó mucho, la gente se fue muy contenta, el comunicólogo le dice a su amigo, que se puede quedar en el cuarto de al lado, él se llama José y le dice a Juan que lo ha notado muy pensativo, él le cuenta por qué había estado así últimamente y le dice que es porque piensa en Yesica Sonia, que le gustaría conocerla, pero que no sabe si ella le correspondería, José le dice que no sea pesimista y que la conozca, que seguramente la actriz es una buena persona y podrían entablar una interesante amistad. También le cuenta de Miroslava, le dice que no la conoce y que tal vez, podría ser también una buena amiga, pero él está interesado por Yesica, porque piensa que ella es la mujer de sus sueños, José le pregunta que como sabe, que no la conoce más que en la T.V, que nunca la ha entrevistado y no sabe tanto de su vida privada, Juan le dice que tiene razón. José le dice, que no se desanime y que no sea pesimista, acerca de conocer a la actriz, él le dice que adivinando se podría acercar a ella, José le comenta que es una buena idea eso de adivinar, para conocerla, que vaya al café a hacer lecturas, para ver que le dicen los cafés, él lo invita a éste. Juan está en el café, ha pedido un expreso doble, porque quiere practicar más sus adivinaciones, está seguro que la actriz y Miroslava, no son las compañeras indicadas, son simplemente figuras públicas y nada más. El Brujo Gallo entra al café y saluda al comunicólogo, le pregunta que cómo ha estado, él le dice que bien, Juan ya dejó de pensar en Yesica, no ve más que a una actriz, muy talentosa, eso es todo, a él le gustaría conocer a una chica, que lo siga en sus planes y no sabe dónde encontrarla, toma de su café hasta terminárselo y hace una adivinación, ésta le dijo que la chica que él está buscando, es la hija del Brujo Gallo, que le diga que se la presente. El comunicólogo hace lo que le dice el café, el Brujo le dice que está bien, que le presentará a su hija, para que la conozca, Juan ahora piensa en otra chica, está seguro que será divertido conocerla, que seguramente vivirán muchas experiencias de maga juntos. FIN.  
EL ESCRITOR ANORMAL. Por: Miguel Saavedra.   Personajes: Nerea. Jorge. Arturo. Arlet.                                   Esta escena se realiza en una editorial, Nerea recibió un mensaje de la red social. Nerea- Jorge, me mandaron un mensaje, preguntándome acerca de una publicación. Jorge- ¿Qué quieren publicar? Nerea- Unos cuentos de horror. Jorge- ¿De cuántas páginas? Nerea- Sería un libro corto, no es tan extenso el trabajo. Jorge- Está bien, ¿Ya le dijiste al escritor lo de la inversión? Nerea- Sí, le dije que tenía que invertir, $ 2,700.00 pesos, para publicar el libro y me dijo que estaba bien. Jorge- ¿Y ya te mandó los textos? Nerea- No, le di el correo electrónico de la editorial, para que los mandara. Jorge- Cuando te los mande, léelos y me dices como te parecieron. Nerea- ¡Claro! Esta escena se realiza en casa de Arturo, el escritor del libro de cuentos de horror. Arlet- ¿A dónde vas? Arturo- Al casino a jugar bingo. Arlet- ¿Sí?, ¿Y para qué quieres ganar dinero? Arturo- Lo que pasa es que quiero jugar un bingo de $3,000 pesos, para ver si me lo gano y pagar una cosa. Arlet- ¡¿Debes dinero?! Arturo- No, necesito $2,700 pesos, para invertir en una publicación. Arlet- ¡Oh!, te acompaño. Arturo- Está bien, ya me voy. Arlet- Nada más voy por mi bolsa. Esta escena se realiza en la editorial de la primera. Nerea- Jorge, ya mandó el dinero el escritor, de los cuentos del horror. Jorge- ¿Y los textos? Nerea- También, ya me los mandó, por cierto, te quería decir algo acerca de los cuentos. Jorge- ¿Qué? Nerea- Los estuve leyendo, pero las cosas que escribió, no son normales. Jorge- ¿Cómo que no son normales? Nerea- Dice cosas que no pasan en la vida real. Jorge- ¡Ah!, tienen ciencia ficción los cuentos. Nerea- No, me refiero a que dicen cosas que nadie hace. Jorge- ¿Cómo qué? Nerea- Por ejemplo, en un cuento escribió, que un personaje adivinó bingos ganadores, para pagar una cosa con los premios. Jorge- ¿Eso qué tiene de especial? Nerea- ¡Que nadie adivina!, ¿Cómo es posible que se sacó unos bingos adivinando? Jorge- Déjame los textos para revisarlos. Nerea- Está bien. Esta escena se realiza en la misma editorial. Nerea- ¿Ya leíste los cuentos? Jorge- ¿Y qué te parecieron? Jorge- Están muy bien, el cuento de los vampiros estuvo muy romántico. Nerea- A mí también me gustó mucho, ¿Qué opinas de lo que te dije? Jorge- Yo pienso que no están mal esos detalles, son un poco fantasiosos, pero no están mal. Nerea- Tienes razón, aunque eso de que adivinó un bingo, está muy misterioso. Jorge- Pregúntale por que escribió eso. Nerea- Le voy a preguntar, porque eso es aparte de la ficción de los cuentos, no queda con las historias. Esta escena se lleva a cabo en la editorial, esta está en el sótano de un teatro. Nerea- ¡Hola, Arturo!, ¿Cómo está? Arturo- ¡Bien, gracias!, ¿Qué se le frece? Nerea- Oiga, lo cité para hacerle una pregunta, antes de imprimir los cuentos. Arturo- ¿Sí, diga? Nerea- Qué por qué escribió, que adivinaron unos bingos los personajes, lo que pasa es, que nadie hace eso. Arturo- ¡Sí!, ¡cómo no!, yo hago eso para obtener dinero y pagar deudas. Nerea- (Asombrada). ¡Ah, sí!, no sabía Arturo- Aunque no lo crea hay gente que adivina. Nerea- ¡Claro que no!, aunque usted me ha hecho cambiar de opinión, no sabía que adivinaba. Arturo- Así es. Nerea- Bueno, siendo así, comencemos a imprimir sus textos. (A los trabajadores). Empiecen a imprimir. FIN.      
EL PUBLICISTA. Por: Miguel Saavedra.   Personajes: Roberto. Juan. Jaqueline. Martha.                                   Esta escena se realiza en una escuela de Ingles, es la hora de comer, Roberto y su compañero Juan están platicando. Juan- Roberto, ¿Qué vas a comer? Roberto- No voy a salir a comer, traje comida de mi casa. Juan- Yo pedí unos chilaquiles, ahorita me los van a traer, del restaurant de enfrente. Roberto- ¡Qué bien! Juan- ¿Y qué vas a hacer cuando se te acabe el contrato? Roberto- Voy a trabajar en una agencia de Publicidad. Juan- ¿Ah, sí?, ¿Dónde estudiaste eso? Roberto- En la universidad. Juan- ¡Qué bien!, No sabía que hay licenciados en Publicidad. Roberto- También estudié Mercadotecnia. Juan- ¡Oh!, ¿Y dónde aprendiste inglés? Roberto- En Estados Unidos. Juan- ¿En qué parte? Roberto- En Washington Juan- ¿El Estado? Roberto- Sí, en el Estado, estudiaba Psicología, pero no me gustó la licenciatura y me cambié de carrera. Juan- ¡Ah! Roberto- ¿Y tú donde aprendiste inglés? Juan- En México, en una escuela de inglés. Roberto- ¡Oh! Juan- Cuando salí de la preparatoria, estudié en una escuela y tomé todos los cursos. Roberto- ¿Por eso te volviste maestro de inglés? Juan- Así es, oye, hablando de otro tema, deberías hablar con la jefa, para que te dé la oportunidad de seguir trabajando con nosotros. Roberto- No, ya hablé con ella de eso, lo que pasa es que mi nivel de inglés, no es tan avanzado. Juan- Pero hablas Ingles muy bien. Roberto- Si, pero dice que no tengo el nivel que necesitan en la escuela. Juan- ¡Oh!, le podrías decir que te contrate, para enseñar niveles más bajos. Roberto- No lo había pensado, le voy a decir. Juan- Ya no te quito más el tiempo, para que comas. Roberto- Te espero a que traigan tus chilaquiles, no me gusta comer solo. Juan- ¡Gracias!, oye, no sé si te interesaría comprar un jarabe de propiedades curativas. Roberto- ¿Vendes jarabes? Juan- Sí, con mi esposa, se venden por pedido, me lo puedes pagar en pagos. Roberto- ¿Cuánto cuesta? Juan- $ 150.00 pesos, me puedes pagar $ 50.00 cada mes. Roberto- Está bien, tráeme uno. Tocan la puerta de la entrada de la escuela. Juan- ¡Ya llegaron con los chilaquiles!, voy a abrir. (Abre, entran él y Jaqueline) Jaqueline- Ya le trajimos sus chilaquiles, ¿Me los pidió verdes o rojos? Juan- Verdes. Jaqueline- Se los traje de salsa roja, ¡disculpe!, esta niña se equivocó. Juan- No se preocupen así están bien. Jaqueline- Espero le gusten. Juan- Seguro, ¿Cuánto le debo? Jaqueline- $ 90.00 pesos. Juan- (Abre su cartera). Aquí tiene, gracias. Jaqueline- De nada. (Sale). Roberto- No le hubieras dado propina. Juan- ¿Por qué? Roberto- Porque no te trajo el platillo, como le dijiste. Juan- No le di propina, le pagué la cantidad exacta. Roberto- Yo pensé que le pagaste, con un billete de cien pesos. Juan- No, le pagué con un billete de cincuenta y dos de veinte pesos. Roberto- ¡Ah! Juan- ¡A comer! Roberto- (Saca su comida). ¡A comer! Roberto y Juan están comiendo, en eso entra la maestra Martha, jefa de los maestros. Martha- ¡Buenas tardes maestros!, provecho. Juan- ¡Gracias! Roberto- ¡Gracias! Martha- ¿Alguien me podría ayudar a bajar unos libros del carro? Juan- Yo, ahorita bajo. Martha- No se preocupe, hágalo después de comer. Juan- Está bien, Roberto, dile a la maestra lo que te dije. Roberto- ¿Lo de las clases de nivel más bajo? Juan- Sí. Martha- ¿Cuáles clases? Roberto- Lo que pasa, es que quería saber, si me podría contratar, para dar clases de inglés, de un nivel más bajo. Martha- Pues fíjese que podría ser. Roberto- Sería por un tiempo, nada más en lo que me contratan, en una agencia de Publicidad. Martha- Está bien, nosotros necesitamos que esté en la recepción, entregando libros. Roberto- ¿En la recepción? Martha- Sí, porque no va a haber recepcionista, en la escuela de Los Cabos y necesitamos uno. Roberto- Ya veo. Martha- Nada más en lo que encontramos a alguien. Roberto- ¡Gracias! Martha- ¡Se les va a enfriar la comida!, terminen de comer, para que me ayuden con los libros. FIN.    
LA ACUMULACION DEL HORROR.   Una vida feliz recordó una tristeza, sorpresiva y dolorosamente en su castillo negro, nada importaba debajo de las sombras hermosas, las cosas advertían y explicaban sin límites.   Esa vida se alejó poco a poco de esa pesadilla, aunque no estaba seguro de saber si despertaría, la tristeza seguía y seguía y no se marchaba, para siempre sin regreso y sin recuerdos malos.   Toda la vida de esa vida, no importaba nunca, porque esa tristeza azotó su cuerpo y su alma, esa vida no sabe cuándo despertará de esa pesadilla.       Miguel Saavedra.
La muchacha de los signos.   Ella era una chica sin señales, con el tiempo hizo anuncios y carteles, esa información es como la de antes, la saben músicos, payasos y maestros.   Todos conocían su trabajo, no era más que una gran comunicóloga, un cartel o un anuncio siempre trajo, ella piensa que todo lo logra.   Dar a conocer a todos, un anuncio, nada la hace más feliz, eso era todo lo que le gustaba.   Todos no podían y le decían -yo renuncio-, nada más guardaba los carteles en un beliz, y eso a ella al ponerlos a prueba, la conquistaba.     Miguel Saavedra.
La buena suerte.   La suerte siempre te acompaña, no importa lo difícil que la vida sea, la mala suerte nunca se extraña y la buena es ara el que la posea.   La suerte la encuentras con amuletos y se disfruta mucho de ella, aunque también hay algunos muertos y a la vida se le quita lo bella.   La suerte te acompaña como un amigo, nunca la defraudes o también te defraudará, todo está bien siempre con ella.     Miguel Saavedra.
No pierdas tus sueños.   Todo te dice que tus sueños son mágicos, eso en todo momento lo piensas y sientes, hay cosas que hacen esos sueños, trágicos, te confundes, lloras, te desesperas y mientes.   Esos sueños nunca estarán perdidos, la realidad se complementa de todos ellos, todos siguen y siguen en un mundo podrido, nada más las ideas y los nuevos sueños son bellos.   No llores nunca, pase lo que pase en tu vida, estos siempre estarán a tu lado, junto a ti, hay una oportunidad para una vida perdida, con nuevas ideas y alternativas para ti.     Miguel Saavedra.
El muchacho del pañuelo rojo.   Una tarde como todas con el sol, o al menos eso piensa, debajo del calor, porque las cosas son distintas como una canción, todo se atraviesa mucho, menos el amor.   Las cosas no son lo que parecen, en ese lugar de sueños y tormentas, la gente piensa que los árboles no crecen, los niños juegan, chupan dulces y mentas.   Los últimos días han sido obscuros, la gente piensa que nada cambiará, no tienen esperanza y están seguros.   La gente piensa que se derriban muros y no sabe cada uno donde estará.   Miguel Saavedra.
El hombre ave enfermo.   Un ave cualquiera cae del cielo, todos piensan que es algo extraordinario, esa ave en hombre se ha convertido, para ser en su nueva vida primario.   Siente sus alas, entumidas tanto, que piensa en inundarse de hormonas, las historias que cuenta son espanto, de lo que ven los ojos de las personas.   Ahora vuela más feliz y más aliviado, las cosas cambian, todo es mejor y diferente, esa ave ahora tiene toda la esperanza,   de ser un ave libre sin el cuello incómodo y tener una realidad total y consiente, buscando en todo momento si fue su torpeza.   Miguel Saavedra.

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