No me ultrajes el poemaque todavía no lo salvoque todavía no lo puedoque todavía no me nace. Una tras otraaborto y abortolas mínimas palabrasde mi diccionario. Escribo para escapar urgentedel hijo que nunca tuvey desde la nadame está acusando. Aunque soy un hombre, escribo,es decir, soy una madre.Pero el poema, tampoco así,me nace.

Hoy no rompas las pelotas,no me vengas que viejas historias,ponle azúcar al mate,y lávate por Dios esa cara.Vístete como quieras,como se te cante las ganas,y juega con los colores de las mediascomo si fuesen los colores del alma.Abre todas las ventanas,y deja que sol entrey tome posesión de tu morada.Siéntate en el suelo,pero donde haya tierra y calma,para sacarte las ufanas mañas.Canta en voz alta, prepotente y desafinada,que piense los vecinos, envidiosos y malhumorados,que anoche hiciste el amor,hasta morir en la madrugada.No te peines,deja que el pelo se vea distinto.Saborea el aire,como si fuese miel en la tostada.Húrgate el bolsillo,no importa sin no hay un mango,que te saque de las malas,solo busca si te ha quedado un verso,pendiente de un hilo.Ráscate los oídos,juega con tu nariz,haz gárgara con el tiempoy escupe hacia fueralo que te atragantaba.Hoy no rompas las pelotas,con que no llegas a fin de mes,si las cosas no te salieroncomo habías planeados,es que los sueños son así,así,inconstante como el viento.Hoy festeja tu día,como si fuese tu cumpleaños,afuera hay brotes de primavera,aunque te joda la alergia,hermano hazme caso, aprovéchalo.Hoy sé tu mismoy al quien no le guste,que se vaya al mismo carajo.Hoy no hay lágrimaspara sacrificarle a los Santos,Dios te quiere vivo y feliz,dale ese regalo.Hazle un guiño de ojos al destino,para que te otorgue una mano.Hoy no te gastes en críticas,no vale la pena,no ganas en nada,ni te dan vuelto por eso.Putea solo cinco minutossi es necesario,para sacar las viejas broncas.Y disfruta amigo,disfruta hoy mañana será otro día,bastante duro y largo...

Digan de mi lo que quieran. Mejor. Sigan sin decir nada.     Pero les prohíbo terminantemente sospecharque habito el mismo mundo de ustedes.     Antes de eso, llevo mi dedo índice a la sien y me disparo.     Ordeno ser peor, jamás, ser igual a vos.

Porque frotaste tus patas de mosca poco antes de envidiar el clavicémbalo que asesinó sin toscos miramientos los oídos de cuatrocientos dioses Y de no ser así como lo cuento a las aladas hadas desalmadas les saldrá un desatino asalariado en medio de las trompas de falopio Tres millones de muertos no son nada comparados con la triste derrota de una vida fraguada en salfumán y endulzada con estiércol y berzas Pero es hora de morir como cerdos en el matadero art decó del mar de inocentes que escupen al consorcio de los grandes bastardos del planeta Y cuando me deje crecer el rabo haré una orgía de heces y de sangre destinada a salvaguardar la honra de las penas los panes y los penes Y con mi genio atrabiliario afirmo no sin descojonarme de alborozo que desandando se abre otro camino y jodiendo también es un gerundio Para jugar al gua con las estrellas y acariciar la arena sin aurora vituperé a los ángeles centrípetos y divulgué el secreto de la luna Cuando cierre el averno sideral y el sol se vierta en el aceite hirviendo fabricaré una estufa con tu clítoris y a lo mejor un nuevo clavicémbalo

Yo me llevé la vida por delante, inscrita en el rumor azul de un cuento. Galopé a rienda suelta contra el viento. Fui el hacedor de mi destino errante. No serviré jamás de ejemplo andante al corazón que escapa del lamento. Mi fuero interno es terco y arrogante y el más fiero dolor es mi alimento. Del mundo he aprendido cuatro cosas, a saber: que el amor es sempiterno; sin espinas, las rosas no son rosas; que no hay felicidad sin desgobierno y en todo vientre danzan mariposas. Esto os puedo enseñar. Este es mi infierno.

Cuando pueda...Cuando el tiempo me concedala moneda de la fortuna,y pueda,seguir  o aceptarser parte de esto que no me cabe. Tendré la fuerza suficiente,para maldecir tu designio.Podré ingeniármela,para no ser un espectro,y olvidarte como es debido. Tendré,las ganas suficiente,para delirar,y desolarsi es posible al mismo invierno. Cuando pueda,construiré mi propio pasadizo,para hallarme.Recién ahora,comprendo lo cansada y lo fatigada que estaba,¿por qué tarde tanto en darme cuenta?será por esa puta costumbre,de reconciliarme con lo que me trastornaba. Por creer que no había otro camino,me deje apalear,con palabras egoístas, huérfanas y rutinarias... Ahora soy yo,y no hay instrumentos, ni artefactos, ni máquinas,que me detenga...Ahora soy yo,a quien pertenezco... Y no tendré que recogerme más en mugrosas palas,ya no... ¡Cuánto he callado! Cuantas veces sentí, que me robaban el último suspiro.Ahora veo con mis ojos,y oigo con mis oídos,y no me tengo lástima,tengo orgullodevastado, revividotengo orgullo,siempre lo he tenido... ¡Cuanto hace que no amo!hasta creo que me he olvidado como se hacia,¿como se siente?, ¿con que color se pintan esos versos?¿a que huele?primera cosa que haré,volver a sentirlo... Cuando pueda,y no falta mucho,ya lo percibo,me encontrarán,aquí,mostrando, la batalla que he ganadoy que creía,por esa puta costumbre,  que había perdido...

Le comentaba a una persona muy querida...lo inconcientes que somos los seres humanos del valor que tiene nuestra libertad. Ella es un estado del alma en el cual determinas por ti mismo quien eres, que quieres, como y porque...alejados de la poderosa influencia de "otros" y que, al usar tu libertad necesariamente, aprendes a amarte y por ende, amar a otros. No es casual que la historia de la Humanidad haya sido sistematicamente, la historia del hombre en busca de su libertad. Y yo...amigos mios...tengo un fuerte apego a la libertad...que no es hacer lo que quiero, sino querer lo que hago y lo que soy. Muy por el contrario de lo que la mayoria piensa, la libertad te "restringe" a tu propia esencia en lugar de dispersarte en un mar de posibilidades, como le ocurre a la hoja que navega al afan del viento...pero hay que tener coraje para volver a nuestra esencia y no dejarse violentar por otros que, con muy buenas intenciones, solo pretenden que les sirvamos para despejar sus miedos, sentirse significantes, o darse el placer de tener el cntrol. Quien es libre, se deja dominar, quien es libre, no necesita dominar, quien es libre no claudica, insiste en sus sueños, da la pelea, confia en si mismo y tiene siempre a Dios como su aliado.

  Desde mi niñez nunca me llamaron tanto la atención los circos como esa otra cosa mágica en el mundo: los cementerios.   Ese despilfarro de arquitectura para el olvido esa mezcla de belleza y espanto ¿Cuánta curiosidad por conocer esas vidas que ahora yacen muertas?     Deseaba con irracional furia que me dejasen una noche solo en el cementerio y contemplar la luna desde alguna tumba ignorada.   Ni Psicoanalistas ni Místicos me han develado todavía las razones de mi deseo. Tampoco me importa.   ¿Existe algo más perfecto que los cementerios? Ignorantes y sabios, amigos y enemigos, allí guardan silencio.   Después vinieron los modernos parques, ingratos y despiadados…   sólo pasto como si nosotros, los vivos, fuésemos caballos, y yeguas.   Anhelo los monumentos de Chacarita y Recoleta y sigo recordando esa obra magnífica y callada, el cementerio de Palmira, en Mendoza, el primero que encendió mi deseo por las ánimas que será también, mi definitiva casa.   ¿Qué cosa sublime y atroz es el cementerio? Un lugar donde viven los muertos Y es cosa sabida, pero no siempre meditada que muy bien viven los muertos allí porque de allí…   casi nunca, vuelven. (Me constan algunas…    ¡ay ay!… muy breves visitas especiales, pero eso lo callo)  

Amorosa anticipaciónNi la intimidad de tu frente clara como una fiestani la costumbre de tu cuerpo, aún misterioso y tácito y de niña,ni la sucesión de tu vida asumiendo palabras o silenciosserán favor tan misteriosocomo mirar tu sueño implicadoen la vigilia de mis brazos.Virgen milagrosamente otra vez por la virtud absolutoria del sueño,quieta y resplandeciente como una dicha que la memoria elige,me darás esa orilla de tu vida que tú misma no tienes.Arrojado a quietud,divisaré esa playa última de tu sery te veré por vez primera, quizácomo Dios ha de verte,desbaratada la ficción del Tiempo,sin el amor, sin mí.