Mi mundo te perteneció cuando en mis atardeceresapareciste llenando mi vidade poesías y alegrías,pretendí ser tu musacuando escribías aquellos poemasque yo ambicioné hacerlos míos. Quise vivir el amor enmi mente en mi corazón,pretendí llenar de fantasíastus noches, tus días, prodigarte calor y alegríasa tu vivir para que escribierase imaginaras amándome en tus sueños,hacerte míos en ellos y entregartemi vida para despertar y dormircontigo en la imaginación de los dos. Era tanta dulzura que me prodigabasque diste a mi existir alegrías y motivospara andar por el camino de incertidumbres,lo que yo anhele fue disfrutar momentosmaravilloso y deleitarme el olor de tu cuerpoen el calor de mis sabanas. Lo que yo quise fue simplemente existirpara los dos y contar contigo las estrellasmas allá de la inmensidad de la vida.Ligia R. Gómez Deroy
Armando Calixto