Hago como que leo, y en realidad trabajo, Pero lo importante no es que trabaje, sino que ahora leo, Dejo el libro a un lado tras doblar suavemente la hoja Para no perderme al regreso Me levanto y camino… Al final del pasillo estás tú Que me ves pero haces como que no me notas Y yo sé que me notaste y disimulo por no destruir tu entrega Camino por el pasillo, sin que notes que sé me has notado Y me acerco y te beso sin tiempo a nada, Impido que reacciones, y espero a que me tomes entre tus brazos Pero entonces levanto la cabeza, te miro, Y me doy cuenta que no estás ahí… Yo trabajo, mientras que hago como que leo y tú… No estás aquí

Debí crucificar a mi sombra, renegar los relojes y otras armas oscuras,centenciar a muerte los espejismos,la distancia,el llanto anudado en mi garganta... 

Esto lo encontré en una hoja suelta: ¿Qué esperas? Murmullo mendigado, Himno de lengua muerta, Lienzo de podrido de imágenes en blanco y negro, Fotocopia de una piedra en cementada a la historia de un pedazo de muro de la colonización española… ¿Qué tanto miras en ese reloj digital, so marioneta de plástico?