La desdicha de pensarte     Hoy tejo ilusiones creyendo Que a mi lado podré tenerte, Hoy vivo al recordarte y siento La desdicha de pensarte. Me ilusiono despierta soñando Con tus besos, tengo la alegría De creerme dueña de tu cuerpo Te recuerdo, quiero abrazarte Pero luego concuerdo con el recuerdo De que mi alma te sueña Porque no eres mío, y así muero, Tu corazón no es mi dueño Y hay otro hombre junto al mío. Pero hoy ya no se a quien adorar Pues mis manos te adoran Manos que te quieren tocar, Y solo toco tu retrato, tu ausencia Que llena mi soledad. Te pienso queriendo descifrar Y descifro que te quiero encontrar, Encontrarte a mi lado Pues este sitio vacío tú ya has ocupado. Ocupo con el recuerdo de tu sonrisa mi mente, y vuelvo a tener la desdicha de pensarte, Pues pienso en tus ojos bellos Esos ojos que tiernos me miraban, Miraban a una cruel mujer que a otro besaba, Y yo con la mirada tus negros cabellos Intentaba acariciar, pero esa noche Tan solo pudimos bailar, Tus manos me tocaban Pero al tiempo a otra tocabas ya. Pienso nuevamente que no soy libre, Y mi alma quisiera liberar de Este angustiante martirio que no me Deja pensar, si tu voz en el teléfono Me martiriza y mi piel se eriza al oírte, En tus palabras quiero zambullirme, Ahogar mis deseos de sentirme mujer en tus brazos Una simple y sencilla mujer con dueño Pero en tus labios quiero fundirme, Fundir y unirme a tu cuerpo, Ser dos almas en una, la unión más oportuna, Pero todo es una mágica y pecaminosa ansiedad, Una infortuna necesidad de ya no sentir la Desdicha de pensarte y poder al fin besarte Para ser una verdadera realidad. Dos reales amantes que una mañana se amaran Para guardar el recuerdo de un amor prohibido, Y aunque la tierra se haya destruido Cuando sus cuerpos se hayan en un lecho fundido, Jamás podrán borrar la cicatriz de Un volcán que ha erupcionado, pues en el pecho De ambos quedara marcado el triste aceptar Del amor escondido cuando el destino Los haya separado. Pero ese momento jamás lo olvidaran, pues Ha sido el deseo descontrolado de un dulce y Fogoso pecado, amar y haber amado, en sabanas Con dueños, mas con el ensueño y la gratitud De que el camino los ha encontrado, y la desdicha De haberlos separado…

La estrellita en el cielo    Apareció un destello en la tarde Cuando ella se despedía, pero mis ojos Veían alguien que resplandecía, Como una estrellita que brillaba Tú te ibas, pero luego de improvisto regresabas. Quizás te veo con otros ojos O tal vez es mi alma la que te juzgue Te amé, o creí hacerlo, te dejé ir, Volviste, jugaste y nuevamente te fuiste. La estrellita que antes imaginaba que eras Hoy es un destello fugaz en mi vida, En esta infeliz ínfima vida que juntos deshicimos Pues no podré olvidarte, quizás, tal vez Odiarte, o solo disfrazar a este herido corazón Que dejaste al marcharte Pero nuestros caminos se vuelven a enlazar, ¿Por qué? Le pregunto a mi ángel celestial, El no encuentra una razón existencial Me dijiste adiós cuantas veces ya, Pero al despedirnos esta noche, De lejos sin un beso como ayer ¿Quién sufrió más? Aun nadie me lo puede explicar Si esa niña que tenias a tus pies O el hombre-niño que esta noche se Quiso despedir de mí, Quizás con un beso en la mejilla, Pero tu conciencia te dijo con un Tono burlón: ¡Ya no la atajas más! No es una estrellita que un día viste brillar, Hoy es un cometa que dejaste una vez escapar.

  La niña su inocencia perdio... Ella era tan solo una pequeña  Su cuerpecito de niña no conocía maldad alguna, Pero un día su alegría se fue volando, Pues un ser siniestro llegó para borrar su sonrisa, De un modo que daña, de manos que engañan, Un hombre que trajo solo a un hogar tristeza. Hoy esa niña creció y se piensa que todo lo olvido, Pero es imposible porque en cada noche recuerda ese momento Sabiendo que esa noche oscura su inocencia perdió. Ella si, la pobre niña que soñaba con jugar, Divertirse con amigas de algún cercano lugar, Ella que no salía de su hogar y jugaba con muñecas Teniendo lindas noches con un bello despertar. Pero hoy no se callara porque esa niña Se fue convirtiendo en mujer, luchara gritando su verdad, Esperando que las palomas injustamente encerradas Vuelen en su libertad y aquellos cuervos que gozan de Caminar sin problemas paguen su error perdiendo Su injusta libertad. Porque aquella niña que en su rostro reflejaba inocencia, Alegría, el ángel de la bondad, todo pudo perder en Esa noche tan triste, un hombre que no tenia cordura, Que alucinaba y se mareaba la atacó en la oscuridad Hurgando el cuerpecito de la niña, haciendo muchas cosas indebidas, Maltratando a una criatura de Dios sin necesidad, Sin tener justificación la hizo sufrir, ella conoció su maldad. Noche oscura y callada en donde solo se escuchaba Gritos de auxilio, gritos de una niña de cristal que en la Maleza se quedó llorando, el cristal de su cuerpo pequeño Y frágil se rompió como el pétalo de una flor y el roce de Un hombre que con sus manos solo odio transmitió. Un hombre tan falto de moral, tan bajo de pensamientos buenos, Tan corto de escrúpulos, pero tan lleno de locura, De malas acciones, de usar su cuerpo para llegar A tales intenciones, de lastimar a esa niña sin dejarle ilusiones. Toda inocencia, soñar con la virginidad, Toda tranquilidad perdió la niña, se lleno de Preocupaciones y más de una enfermedad. Hoy ya es una mujer y no la detendrán Pues esa niña perdió toda ilusión de infancia soñada, Toda felicidad esperada, pero hoy hay muchas niñas felices Que caminan sin tener preocupación, Pero que viajan en peligro, cuidémosla por favor, Tratemos de que el cuervo que tiene alma de diablo, Al fin vaya a la jaula de la que se escapo y que no salga nunca más, Porque cualquier niña como hace años perderá su inocencia, Sin tener más felicidad.  

Me niego a ver   El viento golpea las ventanas Cada vez mis manos se enfrían más, Me niego a ver las hojas de los arboles envejecer Porque el invierno se acerca ya. Me niego a ver el cielo oscurecer Porque así la noche caerá Sin tenerte a mi lado, mis ojos entristecerán. Me niego a ver que el frio llegara Y yo sufriré en mi alcoba, La ausencia de tus besos, de tus caricias, de tu mirada. No puedo aceptar que nuevamente No te tengo, deseo detener el tiempo Pues otra vez llegara el invierno y no tendré Con quien soportar la soledad, Que no está a mi lado mi dueño. Me niego a ver que otra vez Caeré en el pozo depresivo, El de necesitarte y no poder tenerte conmigo El de ver el invierno frente a mis ojos pasar Y yo en mi lecho, mi cuerpo frio Sin poder junto a tu piel calentar. Me niego a aceptar que tú no vuelves Y que nuevamente debo esperar, Solo y con paciencia esperar Para ya no dejarte escapar más. Autora: Fernández Andrea 

Mi ruego a Dios   Sigo amor aquí rogando a mi Dios Que te traiga pronto a mi lado Miro las nubes que pasan lento Oigo el canto de los pájaros Y en mi interior un ruego Que aun no ha sido escuchado. Fumo los pensamientos que de Mi cabeza se han escapado, Y quisiera gritarlo, pero callo, Solo digo que aquí te sigo esperando. Mi ruego a Dios es persistente Le pregunto porque los días Pasan lentamente aunque Extrañamente las horas a mi lado Pasen volando y se convierta en pasado El presente. El día se transforma tristemente En la tarde lejana que de mis manos Se han escapado, y nuevamente Llega la quietud de la noche, Una noche fría y calma que me colma De melancolía preguntando ¿Por qué no llega el día en que Este en tus brazos? El día soñado tráelo Dios mío A mi lado, este presente ya no lo soporto, Es un momento desconsolado El soñar con mi hombre y seguir soñando Que lo estoy abrazando, Tráelo conmigo, Dios, de rodillas Te pido que regrese, tanto lo extraño, Es un dolor soportado. El cielo que tanto he mirado Tan solo se ha cubrido de grises nubes Y vuelvo a preguntarte Dios querido, ¿Cuándo regresara mi amado soldado?

MOMENTOS DIFERENTES   Dios nos cruzo una noche Aun no se bien porque Y aunque entre ambos Había tantas luces, tanta gente Tantas voces, solo tu sonrisa Yo podía ver, Tus ojos que se iluminaban al verme Me hacían enloquecer Yo jamás olvidare, Aunque tus rojos labios nunca besare. Momentos diferentes nos unieron Estando tan cerca, es que el destino A veces siendo cruel Te cruza con el pecado, Pudiendo habernos conocido en el pasado, Pero en el presente el deseo acecha, Mis ganas de conocerte, de sentirme mujer En tu piel, pero mi alma desecha A otro pertenece y jamás sabrás que Por ti mis manos temblaban al oírte, Al verte esa noche bajo el manto De estrellas, tanta gente, tantas voces Con esa luna bella, y yo, una ardiente y Pecaminosa doncella Pensaba con un dolor en el pecho Hacer lo peor, dar rienda suelta a mis Deseos de compasión, Añoraba arte mi pasión, soñar que era Libre, que obtuve mi emancipación, Robarte un beso lleno de calor Pero la felicidad nunca es perfecta, No llega, y jamás toca nuestra puerta. Porque no podía cometer ese delito Ese demonio que entro en mi cabeza Lleno de ideas, diablo maldito Pues tú nada querías conmigo. Momentos diferentes Horas equivocadas las que cruzaron Nuestros caminos, Hoy tan solo quiero guardar en mi mente El recuerdo de tus ojos bonitos Y esconder cada frase, cada poema Que escribo si en ti pienso Que me castigue Dios por todo lo que digo Y si repito que a otro pertenezco, aunque Por ti vivo, pero maldigo el día que entraste en Mi vida, cuando te cruzaste en mi camino Si eres un amor prohibido Si todo lo que siento tiene que quedar guardado, Impregnado en los besos deseados que no Aun no te he dado, en los momentos soñados, Por eso te pido que jamás creas que para Mi fue algo pasajero, pues quiero estar en tus brazos Sentir un amor verdadero, es un cariño certero El que ofrezco, aunque en el infierno muera Mas me quema tu nombre en mis labios guardar, Y querer decirte que te quiero Si no lo puedo gritar, Y mirando al cielo perdón yo le pido A mi Dios por no hacerle caso a mi corazón Y sentir que todo es prohibido Que mi amor esta dividido Y no poder escuchar lo que mi corazón pide Un dulce beso de tus labios Para no seguir sufriendo y a Tu lado para vivir un amor prohibido Salir corriendo…

No quería…   No quería que el otoño Me cubriera con su frío, Pues no tendría para ser feliz Tus abrazos, tu calido abrigo.   No quería sentir el invierno que Llegara para pintar mis días de gris Y negro, no quería y rezaba a mi Dios En mis noches sin sueño.   No quería y Dios me bendijo Pues el sol sigue brillando, La primavera Quedó a mi lado suspendida Pero aun así sigo sufriendo.   Pensé al final de que me sirve Un cielo perfecto sin nubes, Un calor especial y la brisa celestial Que va pasando, Si a mi lado tu no estas Y este instante soñado No lo puedo disfrutar.   No quería ver el frío llegar Y el calor se quedó para mi soledad Poder acompañar, Pero aun así no puedo sonreír, No puedo sentir en mi corazón paz, Porque tu estas muy lejos Y tu llegada lejana esta.   Te extraño y cada día duele más Aunque cada hora a ti me acerque mas, Se que tu me extrañas y como Yo anhelas regresar, Para no separarnos más.   Pero solo nos queda Eternamente esperar,   Y aunque muera de ganas por salir Contigo y de la mano caminar En una tarde despejada, Tarde primaveral;   O quedarnos abrazados en El lecho nupcial, Una noche de invierno, Noche de amor eterno, Aun todo es imposible, Todo esta en mi eterno imaginar;   Aun todo es un sueño, Sueño que fabrico para poderte Besar, para abrazarte y nunca Mas dejarte escapar.   Pero se que llegara el día en que pueda Estar contigo y nunca más de ti Me podré separar.

Penumbra cristalina   Rememorando viejos momentos estoy Esclava y amiga de mi soledad, Entre cuatro paredes lejanas y frías Aunque a mí alrededor todo sea nocturna tranquilidad. Tranquilidad nocturnal de Julio Con estruendos lejanos y un tic tac Que marcha en vano, pues en esta penumbra Los minutos y horas pasan pero Tu regreso es aun muy lejano. Lejana quedo la noche en que te conocí Donde mañanas bellas y floridas compartimos Hoy la penumbra cristalina me invade Me acompaña, me abraza y me recuerda Lo que en esos días fuimos. ¡Fuimos! Si, en esas calles dos que se amaban Hoy somos artífices de nuestros caminos, Que solo el destino de mi Dios podrá unir Ambos cuerpos, ambos corazones, Un inmenso cariño. Penumbra cristalina es donde estoy envuelta Como hundida en un verde y claro mar Del cual no podré salir sin tu ayuda, Pues me ahogo y es del aire que me sobra Del amor que no te puedo dar, Porque tu aquí ya no estas y no puedes Como antes mis lágrimas cristalinas secar, Con tus besos robarte mi aliento y Devolverme la paz, la tranquilidad. Tranquilidad de saberte cerca y a mi lado De creer en tu fidelidad, como la que yo te guardo Esa, con otra doncella jamás tendrás. Autora: Andrea Fernández 

¿Qué representa el fumar?     Escribo para hacer preguntas Que nadie me responde, Fumo mas aun sabiendo que mi Cuerpo se desvanece, se funde. Más, ¿Qué representa el fumar? Un suicidio a largo plazo En manos de quien los consume Sin poder remediarlo a diario. Un homicidio con autor intelectual Con nobleza de empresarios, Con nombre legendario, Aun sabiendo que el tabaco ha Matado a varios. ¿Para que fumamos? ¿Quién los puso en nuestras manos? Quizás los nervios y la amargura, Tal vez una diabólica compañía Con negra y mortal vestidura, Que va llenando el poco aire Que en los pulmones tenemos de armadura De tabáquica y delgadez arquitectura Solo huesos cubiertos de piel fina y dura. Pero es una angustia si no lo tengo En mis manos, La desesperación más así la liberación de esta adicción, Humo que se va como el corto plazo De mi vida, desgastando los momentos Que junto a alguna pareja fui pasando, Tal vez junto a una amiga mateando O algún novio paseando, Algún presidiario añorando su libertad Padres y madres queriendo a sus hijos De ese mal ayudar, O quizás algún que otro padre compartiendo Sus horas de soledad, dividiendo esa difícil Enfermedad, Que los adictos a algún vicio tenemos, Mas intentando apagar la extinción a nuestra economía, queriendo dejar de fumar, Volvemos a encender un cigarrillo Sin saber que nuestra vida ya es de la parca Llena de fumadores una barca que van muriendo. Junto a la muerte guardando un lugar, Un lugar en mi pecho de aire Puro quiero llenar, ¡Lo quiero dejar! Dejando esa idea de no fumar Sin darme cuenta, Nuevamente estoy fumando Sin poderme controlar.    

Que distinto...     Que diferente amor si Dios no apartaba nuestras vidas Como seria de distinto, que ni tú ni yo estaríamos Durmiendo en otras camas, Suspirando por otras almas, Y maldiciendo a quien nos ama.   Que distinto y que cruel este mi Dios Y que brutal este destino que recuerda Siempre esa la noche de tu adiós, Esa noche y tantas noches que creí lograrte olvidar, Que me quedé mirando esa luna bella en el cielo La luna amiga silenciosa que sabe de mi dolor, El de tan solo callar sin poder verte regresar.   Olvidar es lo que intento, regresar es lo que anhelo, Solo puedo amarte nuevamente, luego de tanto tiempo,   Pero al verte aquella noche desde La punta del salón, ambos tan lejanos pero con La mirada muy cercanos, Que distinto es hoy amor Pero a la vez muy claros, ¿Qué es lo que nos pasa? ¿Qué es eso que me hiciste sentir nuevamente?   Si te había olvidado o al menos así yo Lo sentí, por ti había borrado todo Mi atormentado pasado, y hasta creí Que el odio acumulado, rencor destrozado Era la cura para llevarte bien guardado, Pero no amor hoy descubro que todo es diferente O mejor dicho...nada quedó extraviado.    Que distinto hubiese sido amor, Si no hacías lo que tú sabes, No seriamos prohibido, ni siquiera Clandestinos, pero eso quedo en el olvido, Como todo hubiese cambiado, Yo contigo amor eso no lo dudes Soñaría cada noche a tu lado.   Y tus hijos, los míos, los nuestros hoy Serian los que pudiéramos haber concebido. Ya comprendo el dolor que te oprime Si a mí me afecta mucho peor el verte sufrir, Me dices que de nada sirve pensar lo que no fue, Me dices que te arrepientes y quieres tenerme, Pero de difícil se me hace no pensar en Lo que hubiera hecho si en mis manos Tuviera la posibilidad de regresar el tiempo atrás,   Justo hoy vuelves cuando creí que ya nada sentías O al menos así me habría hecho la idea Para no seguir sufriendo viéndote con ella. Y cuando pensaba que alguien haría feliz mi vida Cuando creí que la alegría llegaba nuevamente Regresaste.   Has regresado amor, Y miento si digo que hoy es distinto nuestro amor Porque nunca quedo algo concluido, El romance que a tu lado no he logrado Jamás podre sentirlo con otro, tenlo Bien afirmado.   Si Dios no te hubiera amarrado Es una certeza que nunca percibirás, De seguro estaríamos un hogar levantando, Las noches estaríamos juntos acostándonos, Y es una gran tristeza, una pena Que aun sentimos eso que no comprendemos. Es incierto nuestro futuro pero...   Que distinto a él ayer Y que similar, el presente... al pasado, Si queremos y creo que así será.   Nuestros corazones tontos quedaran... Aun callados... En secreto...  nos seguiremos amando.

Recuerdos   Qué triste pensar que todo quedo atrás Aquel momento en que anhelaba mi libertad Cuando era una adolescente que comenzaba a soñar Creía que todo era fácil, que el amor iba a llegar Con quien formaría mi hogar. Creí que el tiempo de salir a bailar jamás se iría Que con esos compañeros de colegio viviría una eterna amistad Hoy cada uno tiene su vida, tal vez una familia ya Nuestros caminos se han separado Y todo quedo en el pasado. Que nostalgia al recordarlos, al querer regresar El tiempo atrás, Qué tristeza la mía cuando se que no Se puede volver a vivir esos años de felicidad. Recuerdos tan solo son, Momentos imposibles de olvidar Dolores que vuelven y pesares que alguna amiga Me ayudo a soportar, Recuerdos que no puedo de mi corazón borrar, Y un te quiero para cada persona que transformo Mi adolescencia en una eterna felicidad.   Autora: Andrea Fernández  

Sentada en el umbral   Sentada en el umbral, mateando con mi soledad Viendo caer la lluvia sin cesar, esperándote llegar Con mi niño en mi portal, observando la tempestad En esta mañana fría anhelando tu amor, tus caricias. Sentada en el umbral, calentándome con este mate Amigo de mis penas, oído de mis angustias Componente de esta gris y fría soledad. Te espero en el umbral de este vacío hogar, Lleno de muebles, lleno de suciedad, lleno de voces Que gritan, peleas, desasosiego y mis pensamientos Que se escapan, que con fuerzas te llaman Pues mi mente hoy, aunque lejano estas, Te trae a mi lado, el recuerdo de mi umbral De tus besos cada vez mas lentos, atrevidos, Manos suaves, abrazos calidos, A veces picaras sonrisas y otras lágrimas sin prisa, Lagrimas de emoción por el amor, Llanto de la ilusión de estar por siempre juntos. Mateando con mi soledad te espero Sentada en el umbral de mí aspaviento Queriendo traerte con mis pensamientos, Y con mis sueños despiertos, Queriendo tenerte a mi lado Para apagar el sentimiento de amarnos tanto Y prender el fuego de nuestro aliento Para seguir día y noche amándonos Muy tiernamente, fuerte y lento.  

Si tú sabes…     Si tú sabes que no es amor ¿Por qué te embarcas en esa barca Titulada ilusión? Si sabes que es prohibido, imposible Apenas una idea que no llegara a realización. ¿Por qué piensas y no lo sacas de tu mente? Ya no le sigas dando vuelta A esa loca idea que lastima y A su vez anima a tu corazón. Lesiona tu cabeza, la hace alucinar Una mentira repetida Se convierte en verdad, Que el te ama, tu sabes , Eso jamás sucederá. La idea a su vez anima, tu alma Algo quiere intentar, Llegar a creer que podrás tocarlo Y el tu cuerpo exaltar, Con sus besos, con sus labios, todo Tu ser agitará. Olvídalo niña, deja de soñar Que en tu cama lo tendrás, Aunque el sea libre Tú eres pájaro encarcelado y ya no puedes Junto a el volar, No puedes dejar el nido vacío para Imaginarte en el suyo, son aves que Sus caminos separados volaran. Suponlo con un cuerpo horrendo Con su piel áspera, sus manos sucias, manchadas, Su figura desaliñada, imagínalo Con el cabello mal cortado, sin perfume Su nuca, sus labios fríos, sin seducción; Y no crees en tu mente una imagen de ambos juntos Abrazados, sin vestimenta Que sus cuerpos uno con el otro Una sola silueta, inventan. Si tú sabes que es solo pasión ardiente Y que por su parte, otra cosa no recibirás, ¿Por qué te ilusionas amiga? ¿Por qué no logras dejarlo de pensar? Olvídalo amiga sabes que el miente, Tú lo sabes, el solo quiere un momento De diversión, una travesura y apenas Una amistad. El solo te desechará cuando ya no Puedas darle lo que le darás, O cuando se canse de lo valioso que le entregues, Escúchame una vez mas amiga, Es un galán Con aires de Don Juan, Si tú sabes que no es amor, Deja de engañarte ya…  

Soledad   La fría noche rompe mi soledad como una compañía Triste que se va lentamente y te ansia. Mi soledad acompaña a la noche, a la luna y las estrellas Que te vieron susurrarme al oído palabras bellas. Pero hoy ya no estás y te has ido Llevándote contigo mi felicidad, El llanto que ya no puedo derramar, Con mis manos frías que buscan tu calor Se convirtieron en amarga soledad. Esperando junto a una ventana con gotas de lluvia Que vienen y van, el viento que a mi rostro golpea Te espera, y no me quiero separar del lugar Donde alguna vez te supe esperar. Aunque espere y espere verte llegar Sé que ya no volverás, Que junto a mí ya no podrás estar. Y es en la noche en quien creo que a ti me llevara, Que a tus brazos me hará volar Que podre besar tu suave mejilla y te podre abrazar. Mas en la noche en silencio estoy Y sé que a mi lado estas, tú mirándome Pero yo sin poderte mirar, sin poder ver tu anciano rostro Sin poderte acariciar. Y antes de que deje caer una lagrima De mis ojos nublados, se que junto a mi estarás Tratando de pedir que por ti no llore Y de querer volver el tiempo atrás. Como yo quisiera retroceder lo que he vivido, Mis errores modificar, tratar de no decirte tantas maldades Sabiendo que hoy te necesito más. Sé que en la soledad puedo encontrarte Como todo solitario busca un ser querido, En ese valle de reluciente cristal Donde ya no existe el dolor, donde ya nada es rencor Solo alegría y amor, se que ese lugar existe Y que desde allí me puedes escuchar, Puedes verme y quizás no sufras como yo En este triste mundo donde me dejaste, Pero tal vez no me quieres ver llorar por ti, Solo quieres verme sonreír. Sonreír por la dicha que este mundo me envió Los hijos y la pareja que hoy tengo yo. Pero a veces necesito ese calor que tu corazón De hombre me brindó y extraño tu presencia Porque eres quien todos los gustos me dio. Extraño tenerte pare defenderme Extraño tus regaños, tus gracias y enfados, Te extraño entero, te extraño. Porque contigo todo volvería a la felicidad Que de niña tuve, Y quisiera que junto a mi estuvieras Para compartir mi dicha, Mis vivencias, y ver junto a mi crecer Esos bisnietos que tú no pudiste En tus brazos tener. Lloro y ya mi cabeza parece explotar, Son los recuerdos que vienen a mi mente De un lindo pasado que quiero ver regresar. Porque no quiero vivir en la soledad de no tenerte, Porque verte de nuevo seria alegría, Porque sin ti abuelo, vivir para mi es agonía…   Autora: Andrea Fernández Dedicado a: mi abuelo Silvano..

Tu dijiste y…     Tu dijiste que algo por mi sentías Y yo volé contigo al cielo… Tú dijiste sentir atracción por mí Hace miles de días. Y yo me encendí en segundos Imaginando que estábamos juntos En una ducha fría. Tú dijiste si, estaremos juntos Y yo acepté sin reparos, Lo que no acierto a comprender es Como puedo negarme,  ¿Cómo hacerlo? Si jamás imaginé que la oportunidad Estaba tan cerca, tan secreta Y aun así más deseada. Tú dijiste quererme, ansiar De mis ropas despojarme, Y yo me volví un manojo de nervios, Una revolución en mi mente y corazón, ¿Cómo pensar de manera objetiva? ¿Como niego que te deseo? y aun sabiendo Que solo es pasión, sigo abrigando una Esperanza de amor. ¿Cómo hago para explicar a mi corazón Que tu eres prohibido? Imposible decírselo No puedo enviar órdenes a mis sentidos De que no llegue a tocarte, De que no debo a ti acercarme, Si por el contrario es lo que todos Los días vengo pensando, Soñando, imaginando despierta Que nuestras pretensiones de calor Se hallen por fin realizadas, sin Ser descubiertas. Como esconderme si lo que quiero Es encontrarte para que me digas De frente todo lo que piensas hacerme, Y yo quiero decirte tantas palabras Pero olvidando dialogar, Mas anhelo apagar este fuego Y encerrar en un hueco certero Este insostenible idilio Que creo estar segura No podré posponer ningún tiempo más. A pesar de que diga y decrete a mi mente Que tú para mi estas vedado, Mis impulsos harán cualquier cosa, Hechos de los que no podré Arrepentirme jamás Pero que por su pecaminosa relación A mi alma castigaran. Yo volé hacia el manto celestial Cuando tus cabellos acaricie Para dejarte bien claro que Ansias de tu cuerpo hace bastante Tiempo yo abrigué. Para que comprendas que los dos Tenemos apremios similares Y que juntos podremos Agotar toda necesidad de compañía Una y otra vez, Yo te di señales y al vuelo comprendiste Así supiste como me sentía, Que estaba sola, muy sola tu pudiste ver. Tú dijiste que me harías compañía Y yo hasta hoy no puedo comprender, Que tienen tus ojos y tu suave piel Que enardecen mis deseos Para pensar un millar maneras de Extinguir el placer. El placer que guarda encerrado tu cuerpo Y que junto al mío podrá florecer,  Delicia de que ambos lleguemos a la gloria,  Deleite de nuestra piel Que al unánime se encuentren Envueltas entre sabanas revueltas Y embriagados en una danza Que hará nuestros pechos estremecer. ¿Qué fue que me dijiste negrito lindo? Hoy ya soy una loca, Que ni siquiera a los demás puede responder Cuando entablan un dialogo Y finjo escuchar, a penas disimulo ver, Cuando en realidad pensando en ti me encuentro Y soñando estar mojada bajo la lluvia Rodeada, desnuda en tus brazos, Y dejándome concluir en un suspiro, Para decirte que te quiero y Cuanto espere por ti.  

Una noche te fuiste   Esta noche en que el frio me acompaña No sabes cuánto mi corazón te extraña, Te necesito para vivir mi vida, Quiero llorar contigo mis tristezas y reír mis alegrías. Te has llevado la mitad de mi ser Como hago hoy para seguir adelante, No puedo dejarte de querer Extraño en las noches que tus abrazos calientes Me cobijaban, tú conmigo jugabas Cuando yo muy niña estaba. Una noche te fuiste, de mi rostro te has Llevado la sonrisa que una vez me diste, ¿Cómo hare para olvidarte? ¿Cómo entiendo que hoy no estás con mi madre? ¿Cómo soporto ver otra mujer a tu lado? ¡Eres mi padre! Te extraño tanto, tu dolor Ya no lo presiento, y ¿Por qué no regresas a mi lado? Si sabes que hoy estoy llorando. La soledad es quien tanto sabe De todas esas noches de frio, o quizás de calor En que te necesité como un amigo, Y soñé con tus besos de padre Pero tú no estabas, tan solo triste me abrazaba mi madre. Una noche te fuiste y ya no se vivir sin tu calor Te necesito en mis errores, mis problemas, dolores Mis días de sol, y consejos de amores. Pues solo tu traerías la parte que a mi ser le falta Como no esperar tu llegada, si me diste la vida Me enseñaste a recorrer juntos con fantasía, Alegrabas mis momentos si mal me sentía, Tú me brindabas calma, solo tú dabas paz a mi alma. Pero hoy… me dejaste tan sola La niña indefensa que ayer abrigaste y Hoy llorando dejaste, Solo te llama y quiere pedirte que no te vayas Que tanto te quiere y que veas que Ella no te falla. ¿Qué hare padre si no te tengo? Eres mi todo, y si me dejas En las noches tristes recodando que te fuiste Seré otra, vivirá en mi la soledad que hoy persiste y El frio ingresara en la inmensidad de mi corazón. Ten piedad y usa la razón, ¿No ves que cuando contigo hablo, mis lagrimas Caen sin compasión? Mis labios no articulan palabras de tanto dolor Solo padre te pido una vez más: ¡NO TE VAYAS POR FAVOR!   AUTORA: Andrea Fernández