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MIRADA II MADRIGAL Seria, ensimismada, con la dulce mirada en una lejana inmensidad. SAN JERÓNIMO LÍDICE, MARZO 27 DE 2011. LA CONCLUSIÓN Hemos llegado a concluir, Tu por dolor Y yo por un amargo vericueto, Que nuestra esperanza no tiene, Como dicen lo sueños, La cara franca Y la mirada ardiente. Tal vez ni siquiera El raudo resonar De unas pisadas conocidas Y suaves, Y menos aún el halo, Deslumbrante y sugestivo, De una sonrisa dulce, De una mirada tierna, De una caricia larga. Nuestra esperanza es hoy El silencio amenazante, aciago, Un inmenso cuajarón De sangre y odio Y el arduo peso de un rencor Que se ha arrastrado Por toda la faz de los sueños. Nuestra esperanza es ahora El ritmo de un sollozo, Un repentino grito que retumba Allá en lo hondo, En el profundo y solitario confín De los recuerdos. Y no podemos decir hoy Y tal vez ya nunca, Ni nuestro origen, Ni cuando será el fin de nuestro llanto Y menos aún Podremos decir las causas De esta febril actividad, Que nos ahoga Hasta agotar la fuente, Delicada y límpida, De nuestro amor, De aquel amor que había manado En esos días soleados Y llenos de rumores De nuestro valle Fecundo y perfumado. Nuestra esperanza es hoy Un velo desgarrado. Una fuerza desbocada Que arrasa la florida pradera. Una raíz violenta y descastada De catástrofes, En este mundo Poblado de fantasmas. Y tal vez se haya convertido En el germen del dolor. En la horrible semilla De la muerte atroz Que nos espera en la terrible soledad. PECHOS MADRIGAL Suaves arremolinados con su rotunda redondez en lontananza. SAN JERÓNIMO LÍDICE, MARZO 27 DE 2011. EL AMOR Y LA ESPERA Ayer por la tarde vi en tus ojos Un claro destello de ternura Y esa suave y tímida sonrisa Que ilumina tu rostro, A pesar del sordo fragor Que se agolpa en tu pecho Para inundar todos los valles del mundo. Y desde entonces me pregunto Cómo es que podré detener Tu paso ensimismado y violento Y cómo podré apagar la amarga sed, Que alimentaste, Por largos y tortuosos caminos. Pero hoy por fin he descubierto, Que ni las auras ardientes, Ni los lejanos horizontes, Y ni siquiera mis brazos Presurosos y tristes, Habrían podido detenerte, Porque te acosa El demonio mahadado y terrible Del recuerdo. FRUICIÓN MADRIGAL Se que esperas con vehemencia ensimismada, una palabra dulce y la caricia delicada para poder soltar el caudal que te rebosa SAN JERÓNIMO LÍDICE, MARZO 27 DE 2011. *POEMA A LA VIDA.Con la arribada del sueño,Con el beso y las caricias,Fue floreciendo el amorY nuestra sangre dormida.Y luego surgió el futuroCon sus raras perspectivas,Con sus ritos de locuras,Con su imagen peregrina.Cuando el éxtasis llegó,Con nuestras almas ahítas,Esperamos enlazadosEl lucero de la vida.Y apenas apareció,Con su magia menudita, Tus pechos se enternecieronCon el fulgor de su risa.Agosto de 1989. DE AMOR Y DE MUERTE. Dale a mis sueños La llama viva De tu imagen Y tus besos. Porque si quedo así, Al margen del recuerdo, He de vivir Como si fuera un muerto. Y mi cuerpo sin fuerza Y con el yerto Obscuror de la desdicha, Dormirá como un barco Con la calma chicha. Y tal vez, Más allá de la inmensa Lejanía del horizonte, Será el naufragio De los sueños, De las lunas Que rielaron el océano. Y así, El largo y presuroso vagar Tendrá su ocaso Y un paisaje sin par: Aquí las ondas Allá la espuma, Y más allá de la calma Y la tormenta, Las gaviotas conmigo gritarán, Las preces rotas, Del amargo dolor Y la tristeza. Dale a mis sueños la llama viva De tu imagen y tus besos. Porque si quedo así Al margen del recuerdo, He de vivir Como si fuera un muerto. LA DESPEDIDA Después de algunos años De dulce beatitud, De pronto me he encontrado Con el sombrío Rencor que te consume. Al volver a este lugar, Otrora caro a mis ensueños, Con el sombrío pavor De los desesperados, He empezado a sentir La daga fría de tu mirada, La amarga hiel de tus rencores Y el helado fragor de tu desprecio. Y temo que he perdido mis poderes, Porque no puedo cambiar el maleficio Del hosco lagar de mi destino. ¡Oh caro amor! ¡Cómo deseo haber podido atemperar tu ira.! ¡Cómo deseo haber podido Aherrojar mis ansias! Pero el fatal destino que me humilla, Me entregará inerme ante la fiera, Eterna soledad que me silencia, Como cuando tu me miraste con ternura. Como cuando tu me entregaste Tu alegría. Como cuando tu me impusiste El dulce beso. ¡Ese que aún me marca! ¡Ese que aún me quema ¡ ¡Ese que con susurros y sonrisas, Ardiente incendia las caricias! Oh caro amor A partir de esta muda soledad Que hoy me inunda, Me iré consumiendo Ya lejos de tus ojos. ¡Y no habrá luz! ¡Ni aguas refrescantes! ¡Ni vientos perfumados, Que fortalezcan Los hilos del recuerdo! Solo el terror fatal Y la negrura, Tomarán el antiguo Reducto en que reinaste. 8 DE JUNIO DE 2002. LOS LUBETONES. Este día fresco y claro Van saliendo del cubil, Con su asombro en la mirada, Hacia el ábrego sutil. Se perciben retozonas Como en otros días surgir, Las rampantes acechanzas Y un zarpazo asaz gentil. Junto al fulgor de las flores Y a la vera del cantil, Es hermosa su elegancia, Temerario su perfil. Nos presagian raudos sueños, Dulce anhelo de vivir, Un vigor a toda prueba Y entereza en el sufrir. Lubetones que hoy miramos Sabios lobos sean al fin, Si esta logia les infunde Sus ideales de raíz. LA PREGUNTA ¿Por qué buscar las causasde nuestra propia torpezaen los suspiros y en los sollozossoterradosy suavesdel amor que pacientese va entregando, en silencio,intensamente,hasta extinguirse? EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, ENERO 17 DE 2010 ESTOY AQUÍ Estoy aquí, en tu puerta, ante las murallas enhiestas ante la pétrea dureza de tu resistencia, y ahora que miro tus ojos dulces, condescendientes, con esa luz misteriosa que casi me entrega su delumbramiento, me atrevo a pedirte preciosa, que seas mía, aunque solo sea un saltimbanqui. ¡Mira mis saltos! ¡Ve qué hermoso bailan mis andrajos! ¡Oye la música de mis calzas…, son como las de don Gil el que las tenía verdes, como mis esperanzas! ¡Pero mírame! ¡Aquí estoy! ¡Recabando la fuerza y el vigor de los vientos! ¡Aquellos en que te bailo! ¡Aquellos en que te canto, para romper tu corazón y derramar el néctar que me debes y que cuando me convierta en ventarrón te arrebataré! ¡Aquí estoy preciosa vengo a raptarte en medio del viento y de mi loca pasion! SAN JERÓNIMO LÍDICE, 1º DE NOVIEMBRE DE 2009. MADRUGADA Acariciando un sueño azul y tu cuerpo desnudo, espero la madrugada. SAN JERÓNIMO LÍDICE, JULIO 22 DE 2011. EL NAVEGANTE Sabes que he navegado por mares tempestuosos y helados… Y que mis ojos han hurgado por los vientos, que revuelven las aguas salobres, entre tus arrecifes. Y sabes que cuando por fin me acerco a la escarpa de tu airoso litoral, ese que se dibuja ante la bruma de mis sueños…, adivino el misterio que me escondes. El misterio precioso que cubres con esa mano alada, que descansa en el vuelo de tu mirada insondable, y de tus sueños inasibles, y del dejo velado de tu sonrisa suave. Y entonces preparo la arribada. Y recojo las velas. y tomo con mano firme el timón…, Y entonces vuela mi quilla ante fulgor de tus miradas que vehementes me atraen, hacia la gruta misteriosa que escondes, entre las cinco escolleras de tus dedos. SAN JERÓNIMO LÍDICE, 28 DE NOVIEMBRE DE 2009. ELOGIO Firme, enhiesta cumbre de morena elegancia, China de ojos hermosos con tonos café y osadía de Atenea. Con luz deslumbradora de valiente entereza y ternura en las manos. ¡ China de mi tierra ! Te veo florecer a la luz de este sol que quema tu piel con la generosidad y el amor que te rebosa, que arde, que te va consumiendo lenta, suavemente en la diaria entrega vital. SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 25 DE ABRIL DE 2010 NO QUIERO MIRAR Me resisto a mirar como te refleja el espejismo, que ha surgido de ese avieso rincón. Siempre te vi hermosa discreta, sabia. Y ahora un hado maligno me ha traido una imágen de la que se desprende un amor que no sabes florecer. De un amor que he mirado que destella en la furia de tus ojos, pero que se endulza en tus labios. De un amor que he mirado que ha peleado y que ahora asume la derrota y el silencio. Ese silencio aciago que ha olvidado el pacto y el arrojo del juego. De un amor que ha olvidado la intrépida aventura de las ensoñaciones, y de las posibilidades, y de la magia de la voluntad de construir la realidad aún esa que se imagina imposible. No miraré la inquina que sólo desesperada me aduces, que casi quemando las naves me arrojas reclamando el soplo del viento del oeste, para luego retornar con los dones. y el caballo avieso que llevará las lanzas que piensas que tomarán Ilión. SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 28 DE ABRIL DE 2010. ALEGRE Hermoso y fuerte corazón el que ahora escucho, cave la bruma de tu imágen sonriente que hoy he visto en mi imaginación, con las lomas de tus pechos resaltando sobre el fragor de tu torzo, entre las tersas curvas de esas piernas que rodean en firme trabazón, esta voluntad que ha resistido inexplicablemente, hasta hoy, tu embrujo. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 6 DE 2011. CARICIAS II Aun tengo muchas caricias en mis brazos y muchas más en mi boca, y en mis piernas vehementes, tantas, que este ávido cuerpo ya no soporta su peso y su multitud está a punto de romper los diques endebles de las imaginaciones y los sueños, para invadir tu cuerpo. SAN JERÓNIMO LIDICE, SEPTIIEMBRE 21 DE 2011. VIGILIA ¿No has sentido que todas las noches te miro? ¿Que todas las noches acaricio tu cuerpo? ¿Que todas las noches te quito la tanga y el sostén para tenerte desnuda? ¿Que mis ojos no duermen? Hace dos años Que estoy en vigilia. Todo el tiempo te miro SAN JERÓNIMO LÍDICE, SEPTIEMBRE 22 DE 2011. BELEM Con apenas ocho años quise escribirte y decir tantas, pero tantas cosas que mi mente se quedó en blanco. No supe decir nada de tu nombre. Ni de tu calidad de madre. Ni de tu voz.De esa melodiosa armonía que entonaba con una tristeza infinita las canciones de María Greever o los tangos interminables y trágicos o los dulces boleros o la troba yucateca. No supe decir nada de tu diario sacrificio ni de tus largas jornadas ni de tu deseperación. No supe decir nada de tu serenidad ante la inquina, ante el rancor, ante la ofensa, el desprecio el dolor. No pude decir nada de tu férrea, de tu minuciosa dedicación a las diarias labores generadas por los seis destinos que brotaron de tu vientre. Y un día vi cómo fue que tu vida se extinguió silenciosa, serena, sin una queja sin rancor, sin resabio con una mirada triste ensimismada vehemente. SAN JERÓNIMO LÍDICE, MAYO 10 DE 2010. CUBIL SECRETO Ante el silencio y el olvido, sólo me queda este arraigado afecto, que florece ensimismado y solitario en este cubil secreto, como el terco rumor de tus palabras, otrora dulces, emotivas y ahora secas y frías, cave miradas despectivas y sonrientes, que otean amorosas hacia el azul del norte. SAN JERÓNIMO LÍDICE, SEPTIEMBRE 22 DE 2011- ATL III Tal vez, esta civilizaciónse desplomehasta volver al caos primigenio,a la lucha a muertecon ejércitos malhadadosal mando de los poderosospor una gota de tu sabia... Tal vez nos cueste la sangre de millones y millonesde hombres,de mujeres,de niños,de páriasde condenados a muertepor el número que somos,por el descuido de las fuentes,por nuestra incuria. JUNIO 19 DE 2010, EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, ATL IV Agua dulce, agua clara,vuelve a nuestros cantos,arrulla nuestros sueños,refresca nuestra boca,florece en nuestros corazones. JUNIO 19 DE 2010, EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, TEMAZCAL Estoy entre tu vientre, amada mía aspirando con mis hermanos el aroma del tabaco florido y la fuerza de nuestras decisiones. SAN JERÓNIMO LÍDICE. OCTUBRE 27 DE 2011- LA VISIÓN Esa tarde vi tus ojos Sorprendidos, dulces, Asombrados…, Mirando hacia el fondo, De tu ardiente corazón. Y entonces percibí, Que violenta borrasca Señoreaba tus manos, Y no sabías qué decir, O qué hacer, Y estuviste a punto de ahogarte Con el desasosiego Y con el ansia. Con los sueños enfebrecidos. Y con toda aquella premura De beber la savia, el dulzor, La suave frescura, El elíxir milagroso, Los goces del amor. Pero no. No lograste la intensa beatitud. Y entonces te marchaste, Silenciosa, callada, Con la cara triste y preocupada, De quién no quiere incomodar. De quién prefiere las sombras. De quién se sumerge en los sueños. De quién se esconde en la historia Vehemente y minuciosa De su propia soledad. Y entonces mi torpe corazón te dejó ir. Y supe que la noche Y que la lluvia, Que la amarga distancia, Que el tiempo malhadado Nos hirieron Y que sólo nos queda El sueño bendecido, La ilusión, La radiante esperanza, De que algún día Podremos apurar, El zumo de la vida, La infinitud ¡ Y el tiempo ! SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 7 DE JULIO DE 2007 ¿QUÉ IMPORTA? ¿Qué importa el tiempo pasado? ¿Que la soledad desesperada? ¿Que la premura vehemente? SAN JERÓNIMO LÍDICE, NOVIEMBRE 8 DE 2011. MALENA Y vi tu cuerpo balanceándose moreno, elegante, ágil, entregando su ritmo vital, su pefume , su belleza, su ardor, y no pude menos que soñar, que intentar aprisionarte entre mis brazos, que estrujarte, con vehemencia, con premura, en silencio, para siempre, en una danza ritual, misteriosa, de amor, de fecundidad , ensimismada. SAN JERÓNIMO LÍDICE, 11 DE JULIO DE 2010 AMOR EN REALIDAD He acariciado tus pechos y tus caderas desnudas mientras te penetro, amada mía, pero no en sueños, ni en simples deseos, sino en la realidad insuperable. SAN JERÚNIMO LÍDICE, NOVIEMBRE 17 DE 2011. FELINOAcecho entre las sombras como un silente jaguar.Sueño que tal vez hoy podré satisfacer el hambre.No se escuchan mis pisadas.Son lentas, suaves...cave las grupas ensoñadasy las delicadas carnesque mis garras y mi colmillo retorcido,perforarán.EN EL LUGARDONDE ONDEAN LAS BANDERAS, NOVIEMBRE 22 DE 2011. TU DESESPERANZA He mirado la soledad y el ansia de amor en esa hermosa faz, en tu sonrisa triste. Y también he escuchado suaves sollozos mientras la niebla, la desesperanza, te arropan con manto frígido, ténue, impenetrable. Y ahora oigo tu grito ese grito desesperado ese desgarrador sonido que me rompe el corazón ¿Qué puedo hacer amada mía? ¿Sólo escuchar? No. Te abrazo, te arropo en mi pecho Y te miro, Y te beso hasta la confusion total. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 3 DE 2010 EL RUMOR Hoy volvió tu antaño saltimbanqui, ése astroso y desgarbado. El de las calzas de tanto andar desechas. El que se atrevió a cantar. El que osado y en silencio te ama. El desesperado que baila ante tus ojos y al que ya ni miras. El loco que sueña con que lo quieras. Ese bobo que anda por las plazas deseando beber tu aliento y al que inmisericorde sólo le brindas una sonrisa despectiva. Hoy llegó. Pero pronto se irá. Y tal vez un día de estos te llegue un rumor. Sólo un rumor velado, diluido, casi imperceptible. Un rumor enigmatico, incierto… Tal vez te digan que lo vieron adentrarse en las sombras de tu bosque, aquel que amaste primero, y que de allí no ha vuelto a salir. Tal vez te digan que lo han visto, frente a la laguna, mirando cómo el noble bruto se refesca contigo a lomos. Quizá alguien te comente que lo ha oido recitar unos versos, cálidos, ensimismados allá por las madrugadas mientras contempla tu silueta, tus redondas caderas que se balancean al son de tu corazón, cuando vas a dormir. A lo mejor te dice un dulce recuerdo que lo ha visto rondar como un fantasma, como una sombra por tus sueños, entre el resplandor de tu mirada, entre tus crenchas suaves y tal vez te diga que sueña y anhela tus caricias. Tal vez te digan que lo vieron morir pronunciando tu nombre. Y entonces recordarás a tu antaño saltimbanqui SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 4 DE 2010. POR TU CALLE Voy ahora por tu calle con rumores de algarabía, aunque mi corazón ya sabe, de tu dureza y porfía Y en tanto que en tu ventana florece la bugambilia, oigo el rumor pausado, suave, dulce, desgranado de tu intrépida alegría. Y el espejo del silencio. refleja impío mis miradas, que ardientes te van buscado como llamas incendiarias Y luego resabio amargo acuchilla mis entrañas porque tus labios le cantan, a una ajena sombra extraña. Con ignota melodía. Con intensa, fervorosa exultante osadía, que se aferra a tu garganta y a tus ojos que deslumbran con esa luz que te envidia. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 23 DE 2010. AL-MARIYYĀT BAYYĀNA En la bahía soleada bajo el viento fresco, esquivo, la silueta minuciosa de tu horizonte soñado aparece por la escarpa con doradas redondeces, largos caminos de agua y leyendas de Abencerrajes. En tanto que entrecortados los rumores de legiones que fundaron Portus Magnus, se entremezclan imprecisos con estruendos del combate en que Urcí fuera tomada por invasores que llevan las delicias de tu aroma y fragores ensimismados de tu sangre fatimí, este golfo me revela tus ritmos y tus oleadas, y tu misteriosa damza de intrépida y dulce hurí . SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 24 DE 2010. QUETZALCÓATL-2 En este día,casi al término de la negra rutade nuestro quinto sol,miro tu tronco frondosode ahuejote enraizado, que se aferra al mínimo litoralque flanquea los canalesde mis sueñosOh serpiente de multicoloresdestellos. EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, SEPTIEMBRE 15 DE 2010. DIFICIL AMOR Es dificil el amor después de mucho tiempo de mezcla con la diaria actividad, con las cotidianas necesidades, con la rutina reiterada, inconsciente… Ciertamente es difícil el amor después de mucho tiempo de acoso de las emociones derivadas de los deseos y los sueños, de los fracasos… A veces se torna intolerante desesperado, rencoroso, violento, y estalla en horrísonos reclamos. A veces se torna triste, desesperanzado, suavemente exigente. Pero está alli. En el difícil arte de decir con una mirada o con un susurro, con una palabra o con un reclamo, ¡Quiéreme! SAN JERÓNIMO LÍDICE, DICIEMBRE 18 DE 2010. EL ROMPIMIENTO Largos años conviviendo ese profundo amor que había nacido de una hermosa alegrìa desgranada en carcajadas. Largas caricias prodigadas con generosidad y con denuedo para poder vivir y soñar sin prisas, sin rencores. Pero inícuamente interumpieron ese radiante fuego la inseguridad, la duda, aquella actitud que llevó a investigar, a vigilar, a suponer a partir de palabras, de sueños, que la distancia es inexistente. Y ahora estamos en medio de la soledad, del desamparo, soñando con el recuerdo que enclavado en el corazón ahora nos destroza. SAN JERÓNIMO LÍDICE, DICIEMBRE 19 DE 2010. EN EL OMBLIGO DE LA LUNA En la zambra que desde el litoral de las dunas doradas de África zarpó, he navegado, ensimismado, absorto, rumbo a Al Mariyat Bayana… Al pie de la coatépetl que señorea la bahía juré encontrar la cueva misteriosa donde brillan tus luceros y suena tu voz que susurra hondamente, que retumba como los cajones gitanos. E inicio la larga travesía. Cruzo por Óbila, miro la cumbre enhiesta, humbría, y sueño en tu regazo, en tus cálidos brazos, en tus labios dulces que me muerden suavemente. Y busco más allá de esos valles el recóndito paraje, la cueva misteriosa, tus ojos que cuelgan de mis sueños como estrellas lejanas, y tu voz resonando, cave el rojo hogar que refulge, mientras florecen el canto y la danza y el amor. Y más allá del océano, busco en la selva del país del hule, en Olmeca, la de los megalítos de rostros africanos. Y veo el rastro de tu sol, de aquel doró tus dunas. Y percibo el rastro de tus piernas que cruzaron las estepas de Asia y el son del corazón que rieló el Atlántico para parir mis sueños. Y ahora en el ombligo de la luna, en Mexhi-co, arden tus ojos y tus labios y tu corazón y tu vientre y cantas a la vida con esa tu voz profunda y suave que enamora. SAN JERÓNIMO LÍDICE, FEBRERO 7 DE 2011. COLLAR Veo tu cuello con ese entramado refulgente, el de colgantes lavas, el de mis sueños encaramados, el de brillantes chalchihuites… y veo también tus piernas firmes y rotundas que prometen entregas, y tus labios sedientos, y tus dunas doradas, y acaricio… SAN JERÓNIMO LÍDICE ENERO 27 DE 2011. FLAMAS Al florecer tus besos entre mis manos ávidas, tu belleza y mis sueños se han convertido en fuego. Y las flamas de tus pechos, el hogar de tu vientre, ahora me consumen, ahora volatilizan mi desesperación. SAN JERÓNIMO LÍDICE, FEBRERO 17 DE 2011. EN LA LEGIÓN EXTRANJERA Después de que me convenci de que no existe indicio alguno de que siquiera me des una esperanza, o me recuerdes, o de que tal vez mi voz resuene en tus oidos, me enrolé en la legion extranjera para caminar por mis últimos y calurosos días sobre las abrazantes lomas doradas de ese mar immensurable que se extiende más allá del horizonte. O para dormir en las gélidas noches a la luz de tus miradas. O para escuchar el rumor de tu voz confundido con el lejano eco de las caravanas de sueños que se van esfumando entre las sombras. Y ahora sólo me queda la voluntad de caminar con un hilo de esperanza, como antes, cuando la soledad campeaba sin descanso, cuando pensaba en la daga que pararía de un golpe el tropel de mis pasos, que han intentado llegar al oasis do floreces, mientras me avalanzo a tu frescor, agua dulce, y a mi muerte. SAN JERÓNIMO LÍDICE, MARZO 6 DE 2011. ALTIVEZ Y me miraste fría, seria,severamente. Y entonces condescendiendo,impusiste nuevamente esas reglas. Aquellas,las manhadadas, las inútiles. Las que hablan de cosas que ni tu crees. Las que pasan por altoque el amor es voluntad,como la que ves que te avasallay te pone a veces dulce,a veces tierna,a veces triste. Las que ignoran la corrienteque te empuja al retornoa pesar de tu empeñoen resistir,en continuar empedernidamenteseca y áspera,dura, autoritaria,antes de disolver tu iraen esa sonrisaque deslumbra y que concentrala vehemencia,en el intento de romperotros recuerdos,otros sueños. Y te llenas de desencantocuando mirasque tu poder es magroante la fuerza horrizonade los hechos que te avasallany confunden hasta el vuelco que te comprimeel pecho. SAN JERÓNIMO LÍDICE, ENERO 16 DE 2011. Perdoná la distancia… Yo no conocía la tristeza En huesos desnudos Afilada Sarcástica Descolorida La belleza También Es un poco triste Está ahí Sin poder tocarla Hago los versos más largos para alcanzarla… Pero no… Entonces Desanimada Sigo mis versos Cortos… Pero pienso… Tristeza Ha de ser Vestida De belleza Y las sonrisas Deben llegar Igual Puntuales Y las caricias Deben desparramar Sobre la piel Los besos Y el mundo todo Se lubrica De amor Y caen los versos Y si los versos No caen Se hacen Carne Y anda Otro niño más Allá sonriendo Se junta con una niña Y cae un verso Y sino cae un verso Se hace Carne Y anda otro niño más Y ve otra niña… Cuánto quisiera yo Ser tu río La orilla partida Los peces que miras Cuánto me gustaría Que en mi cuerpo Veas venir Todo eso que querés Más cielos e islas Que digas Eso yo quiero! Y me sigas Hasta donde vivo Y en mi cueva Hagas nido Pasa en la órbita Se construye Se desborda Caen sus restos Pasa en la órbita Se autodestruye Se limita Queda un cuerpo Pasa en la órbita Se conjuga Ambos se gustan Se arma el verso. Quizá un bello polvoriento extenso libro Sea la única respuesta a tu pedido. Quizá el beso imposible del que hablás Esté escrito en letras de oro en algún convento Arriba Donde hermanas sigilosas Procurando su ración de palabras diarias No pueden verlo. O en el roce húmedo de sirena del mar Cuando se abre precisa La alta ola O en un día vago y gris, al final de la calle La primer gota de lluvia Caída en tu boca Labio adentro Penetre Mínima Pura Y cuando mires Nadie, Sólo el cielo. Fiel como un perro Lascivo y alado Siempre nuevo Recorre nuestra poesía, El deseo. La toca, la penetra y la fecunda Lo goza, lo adolece y lo libera A pretendidos jardines de flores pisoteadas Él les pinta sangre como sudor Y nos hace amarlos locamente. Cuán bella nuestra voz Cuanto más nos acercamos a su regazo Y dormimos complacidos en su sino. Armónico o esquivo Da igual Si es verdadero. Me irè con el vientome irè con la aurorame irè confundida en la sombramis armas depongovivir, ya no importaes tan solo la vida un momentoamor, no se que es esopero me iré suspirandopor algo desconocidola eterna idealistatendrà que ser realistaasumir la realidadtan lejos, tan lejosde la felicidadestoy resignadadejarè de sentirme olvidada, rezagaday dormirè plàcidamentepor fin dormirè,dormirè eternamente *ROMANCE DEL HERMANO MUERTO Si supieras hermanoQue después de tu huida,Una amarga impaciencia,Con matiz de porfía Ha venido a clavarse,Presurosa y sombría,En la cuenca furiosa Que veló tu alegría. Si supieras hermanoQue en la roja sangría,Vivirá tu recuerdoComo ávida arpía. Como fiera en acecho,Como gota de acíbar,Como clavo de acero,Como mística espina Si supieras hermanoQue las flores te envidian,Que la luz del veranoHa buscado en el día El perfil de tu sombraRefrescada en la brisa,Correteando paredesY amagando la vía Si supieras hermanoQue tu madre daría,Por tenerte de nuevoComo llama encendida, Un diluvio de llanto,Y una larga agonía,Y un rumor de sollozos,Y su sangre oprimida. Si supieras hermanoQue el dolor te convida,A volver con nosotros,A soñar con la ira, A vagar por el mundoCon la muerte metida,En la sangre, en los huesos,En el tiempo, en la ira. Yo me temo mi hermanoQue jamás volverías,Que jamás fuertemente,Que jamás te reirías ¡Y que sólo obligadoPor amor tornarías! Junio de 1963 y modificado en diciembre de 1985, para ser leído en la Logia Wolgang Amadeus Mozart, de la Gran Logia Valle de México, del Rito Escocés.
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RAÚL FERNANDO TORRES
María Ester Rinaldi
Yo te agradezco que lo hagas, cada verso que escribas, aunque no lo creas, dice mucho de tì, y asì el espìritu, el tuyo, el mìo...el de quien lea estas letras, se enriquecerà...
Un abrazo...Marìa Ester.
LUIS VILLASEOR MARTINEZ
¿Y ME ADMITIRÁS COMO TU SEGUIDOR?
YO TAMBIÉN LEERÉ TUS POEMAS POR LA NOCHE...
María Ester Rinaldi
Gracias, amigo...por tu delicadeza y generosidad para conmigo.
Un cariñoso saludo.
Marìa Ester.