En la arena se haceuna escritura de pájaros:Se hacen amantes que llevarán las nieblas.Se hacen caminos que vienen de un ovillo.En la arena todo se reconstruye, borra y reconstruyedesde un gran abeto hasta un calcañar:Se hacen las dunas de arrastrados vacíos:Se hacen los sueños en que cae el durmiente.La arena vela a la vera de la playacomo una sumatoria de puntitos de plata.Pasa a a través de mis dedos cerradosy reposa cada noche en pureza.A veces la latiga un frenético holocáustopero es suave y cauta luego de los tsunámis.Mi ninez la pasé entre sus manos conceptualesconstruyendo castillos mientras lloraba el cielo. 

No me verás exacerbado, irritado, abrumado o enfadado.¡A punto de estallar!No andaré desanimado, frustrado, acongojado o apendejado...¡Apunto de llorar!Aunque te parezca raro no me quejaré, ni me lamentaré, ni me cruzaré de brazos...¡Transformaré mi dolor en paz!

Aquello que nos separa no es distancia,ni oscuridad ni claridad: Es tiempo.El tiempo separa a las parejascon sus patas de perro poderoso.Cuando regreso, ya de madrugaday apagando mis luces, te despiertas:Y vas a la jornada diaria y yo hacia sueños glamorosos.Cuando vuelves hay un catre vacíoque tiene la realidad de dos amantes:Nos separan el tiempo y las rutinasy los fragores de trabajos extenuantes.Por eso yo seguiré besando a la cabareteray tú matando tus ganas con el dueño de otra.