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REFLEJOS Entre la obscura bruma del espejo de obsidiana, hemos mirado el extraño desfile de aquellos avatares que vivimos sólo ayer. Una serie de sombras que ejecutan acciones nacidas del amor, o del convencimiento sonriente de que somos perfecciòn. Y ahora, después de discrepancias y nuevas ilusiones, concluimos que esos avatares no parecen agradables. Y nos posee el miedo de que el espejo muestre los reflejos. Nos da miedo que los demás los miren. Y que, debido a esa real vision, los demás dejen de querernos. Dejen de admirarnos. Porque la belleza que tanto nos empeñamos en poner en perspectiva, ha quedado obscurecida por nuestra lerda humanidad y por la necia pretension de ser el mejor ser de este mundo. SAN JERÓNIMO LÍDICE, MAYO 21 DE 2011. LUZ II Más allá de la bruma miro la luz. La de Venus el lucero de mis antepasados. La de las mañanitas azules y doradas siluetas. La de tus ojos dulces que reflejan el campo fértil que me entregas en la ladera de la montaña. Y no necesito más que tu tilma para resplandecer. EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, MAYO 21 DE 2011. ESTOY ALLÍ Todas las nochescomo una sombra tenue,como un elástico animal,rondo tu lechoy te miro dormir,mientras la vehemencia inconsútilse apodera de mis manos,que recorren,tu rostro que respondecon un suave mohín.Y continuo por las gemelas colinascon mi suave cariciarumbo al ombligo de la luna,el cubil protegido por la humbría,y el rotundo balanceode tus caderasque recorro largamentesuavemente,mientras penetro en la brumade la ensoñación.Y tu,sólo me haces el mohín.Y te revuelves inquieta,y entre abres los labiosesperando el beso inmarcesibleque mañana detestarás con miedoporque entonces sabrásque a pesar del océano,estoy allí,junto a tu cuerpo, entre la bruma de los sueñosen tu pensamiento,en la emoción que a tu pesar florece.EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, MAYO 22 DE 2011. AHORA SE Ahore se, que no he usado contigo, ni la dulzura necesaria, ni el lisonjero rumor que has esperado tanto… Es que soy un nativo de este mundo nuevo ríspido, bronco, que dice casi directamente lo que siente, aunque lastime tu sensibilidad acrecentada en Ceuta por tantos rencores, y multiplicada, por cinco siglos de conquista y de inquina que rebosan tu Óbila y el Ombligo de mi Luna SAN JERÓNIMO LÍDICE, JULIO 11, DE 2011. CANTO DEL JUGLAR El hecho de que le cante a tu amor, no está ligado a tu voluntad, sino a la mía. Yo he decidido hasta hoy ser tu juglar, tu saltimbanqui, a la major hasta tu bufón. Pero sólo por voluntad propia. Nunca he admitido la manumision sobre mis seines. Sólo el embeleso. Pero hoy te has enojado al advertir la realidad. Y aunque has dicho cosas hermosas tu furia dejó de ver lo que dice mi pésimo poema. Pero al notar que no soy tu esclavo y que tu no te has entregado en pertenencia, has visto de la forma más ruda, la verdad de un amor en sueños, en ideas, pero no en realidades. Y se rompieron nuestros versos. Y de pronto ya sólo tenemos nada en nuestras manos. Pero tu has generado, un profundo rencor por una realidad que existe aunque yo no lo quiera. ¡Ah preciosa mujer, la vida real no sólo es sueño, es la acción cotidiana! Es el contacto diario diferente, extraño, es la caricia y la penetración real, la capacidad de trocar con nuestras manos, con nuestro cuerpo, esta tosca realidad en un deliquio. SAN JERÓNIMO LÍDICE, JULIO 20 DE 2011. TROVADOR Puedo cantar ahora en una alegre melodía ese amor que tu has querido darme y puedo alabar tu belleza a pesar del señor de Foix que se ocupa de la guerra diaria. Tu boca es la fuente de mi consolamentum y tus ojos me han enseñado el horizonte del orígen y del temporal contenido de este cuerpo que te pertenece, y que te entrego mientras al pie de Mont Segur arden nuestros sueños. SAN JERÓNIMO LÍDICE, JULIO 23 DE 2011. EL SILBIDO DEL AGUILA Ahora mi corazón ha empezado su danza final. Escucha su lerdo resonar, su cansado eco. Mira cómo inconsciente se ha integrado, en misteriosa danza, al círculo de bruma que corona el sol. Mira cómo insistente busca en el azúl del cielo el vuelo majestuoso del nahual de sus sueños. ¡Escucha ese largo silbido! Se hunde en la sangre y recorre todos los recovecos, todos los sutiles contenedores de la esencia y allí, al son de la danza, inicia la última vibración, la que se precipita en el núcleo de la luz. SAN JERÓNIMO LÍDICE, JULIO 30 DE 2011. AMOR CORTES A partir de ahora, sólo giraré mirando desde mi espiral, la vastedad del espacio. Sólo percibiendo la distancia que hay entre la Vía Láctea y la galaxia que está cruzando. Sólo descubriendo los colores ténues de las miriadas de luces que recubren la oquedad infinita. Y desde aquí, desde el obscuro rincón de las ensoñaciones surgirá el rumor del canto del juglar. De ese loco y astroso saltimbanqui, de ese bufón que pasó por Carcasona, por Montreal, por el condado de Foix. Y dijo su mensaje a la amada pura, a la inmaculada, a la exigente, a la que toleró la pira en Mont Segur. A aquella que permitió la muerte en llamas del astroso, del trashumante, del desesperado que profesó el amor cortes, hoy inusitado. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 6 DE 2011. NIÑOS La vida diaria no sólo es sueños y lisonjas, también necesidades. De trabajar para poder comer y beber. De procrear para extender la vida de la especie. De pensar, de soñar, de realizar para poder vivir. Por eso, además de las lisonjas, también existe la costumbre reiterada de evadir los sueños, de llegar a la vivencia, y hacer con la potencia inmersa no sólo palabras, sino hechos, besos y caricias y niños. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTP 7 DE 2011. A PESAR DE TODO La dorada rotundez de tus pechos. Los extraños reflejos de tus ojos. El arrebol de tus labios. Ese ombligo que es centro de mi mundo. La oquedad que rebosa vida y éxtasis Tu voz Y esas caderas que se balancean en las columnas firmes de mis sueños, no han logrado que olvide nuestra materialidad. He tenido que acudir a las emociones más profundas, a las palabras más selectas, a las ideas más atrevidas para poder difuminar en un ficto discurso perfumado de poesía, los malos olores de este mundo que nos son propios y que pasamos por alto en el culmen del deliquio Pero a pesar de todo, estamos aquí, amándonos. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 10 DE 2011. LILIT II Con la mirada de soslayo con la que oteas minuciosamente mis acciones lejanas a la sujección a tus deseos, con la airada calma subrayando que no estás enojada, con el rencor con el que guardas cada palabra con la que rebato tus mandatos de esclavitud y posterior promesa de una entrega limitada sólo a un sueño, con todo eso has intentado atarme el corazón, pero al no lograrlo ahora sólo hay una tensa calma que no me importa si se rompe en el dogal de otros brazos. SAN JERÓNIMO LÍDICE, AGOSTO 25 DE 2011 TUAREG Tengo que resguardar mis sentimientos, que apenas han nacido, de los crueles latigazos de tu voz. De esa voz que lacera cuando espetas que tus cartas o tus versos han surgido por otro amor. Y aunque entonces empiezo a disolverme en amargas soledades conservo la esperanza de recorrer el largo camino entre el mar tormentoso y el oasis. Tal vez mi mirada iguale al Tuareg que recorre la escarpa desierta con un amor sediento, ensimismado solitario. SAN JERÓNIMO LÍDICE, SEPTIEMBRE 11 DE 2011. OBRAS SON AMORES Mi pueblo ha dicho con su sabiduría infinita: “Obras son amores y no buenas razones” Por esa razón siempre he buscado que todos mis sueños se conviertan en acción real, que mis caricias no sean solo sueños, sino que se prodiguen por todo tu cuerpo, que lo recorran repetidamente hasta el éxtasis. Siempre he visto esas obras como fuente de la vida, como fuente de la felicidad. Siempre he sabido que esa es la fuerza del hombre. La de cambiar los sueños en realidades, la de hacer del amor una realidad cotidiana. SAN JERÓNIMO LÍDICE, OCTUBRE 25 DE 2011. FLUYE Si te poseo y como dices, soy tuyo, ¿Por qué entonces el silencio? Dime: ¿Por qué ese caudal intangible empecinado y vehemente que me inunda? ¿Por qué perder el tiempo en pequeñeces, cuando nos avasalla una profunda veta, que fluye hasta lo más hondo y que produce la flor y el canto? Anda, Es tiempo de que te lo digas y de que me lo digas. SAN JERÓNIMO LÍDICE NOVIEMBRE 2, DE 2011.. ATADOSEse díaextrañosólo probémi suertepara sabersi contestaríasdespués dela airada tormenta...¿Cómopodría haberte pedidoquevolvieras,si, aunquete enoje,yo sabíaque tu no te habías ido y que yo aún percibotus enojos desmedidos y unvehemente miedo cervalal hecho,de que larealidadno sepliega a tus deseos?Peroseguimos atados...al rencor, alensueño,a un amordesesperado, real,ávido decaricias prolongadas y dulces,a unsilencio y a una ausenciaque están allí,en medio de nosotros,interconectados,con undeseo vehementequeterminará por romper los diquesy nosarrojará, uno en brazos del otro.En el lugardonde ondean las banderas, noviembre 6 de 2011. AMA No quiero que calles. No quiero que te vayas desterrada a la lejana y solitaria region del olvido. Sólo ven. Arrójate en mis brazos. Da el abrazo vital y giremos entrelazados en una caricia desnuda vertiginosa y ávida…, hasta la consumación. SAN JERÓNIMO LÍDICE, NOVIEMBRE 11 DE 2011. CAZANDO TODAVÍA Como cuando me decías que me querías y yo incrédulo leía y escuchaba música en mi cubil secreto, acecho pacientemente el instante preciso en que, después de perseguirte, mis garras se asirán a tus grupas deseadas para poseerte, y saciar esta hambre de milenios. SAN JERÓNIMO LÍDICE, NOVIEMBRE 17 DE 2011. ANTE EL ESPEJO TEZCATLIPOCA Estar ante la negritudmás profunda.Ante el ancho radio de los sueños.Ante el insondable diámetro,del espejo intangible,que transmite los reflejosde pechos, de caderas.De efigies incorpóreas.De ligeros tufosdel aroma que desprendenlas espespaldassurcadas por manos que sony que dejan de ser.Como las pisadas.Como el ritmo del baileque es y enseguida se extingue.Esa es la realidad que me das.EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, NOVIEMBRE 20 DE 2011. AD TE DIVA POTENS CYPRITodos mis díasEstán hambrientos de ti.Todos estos amargos díasQue van pasando,Largos y exánimes,Sin tu clara mirada,Sin tu suave sonrisa.Tal vez alguna tardeMe aventure a merodearPor tus sueñosMulticolores y radiantes,Que florecen,Junto a tu cuerpoCon aroma de maleza silvestre.Quizá prefiera Mirarte desde lejosY luego acercarme a ti,A tu visión mirífica y constantePara poder vivir, Ávido, inerme,Ante el narcótico Ritmo de tu veste.Tal vez entonces,Estos extraños díasSe transfigurenEn una tenue ensoñación,O en un milagroArrebatado y flamígero,En que me entreguesLa fruición de tus labios,Rojos, suaves, tiernos.Como un delicioso sacrificioDe amor ensimismadoY sonrienteTal vez entonces logre romperLa sorda monotonía,Retumbante y terrible,De estos días que aún no logranTrasmutarse a sí mismosY ser parte de otro mundo,De otro tiempo, De otra dimensiónEn que encendidosEn un abrazo deslumbranteY etéreo,Logremos convertirnosEn un solo ser,En un solo amor,En un solo sueño. POR EL REENCUENTRO LA VISIÓN Esa tarde vi tus ojos Sorprendidos, dulces, Asombrados…, Mirando hacia el fondo, De tu ardiente corazón. Y entonces percibí, Que violenta borrasca Señoreaba tus manos, Y no sabías qué decir, O qué hacer, Y estuviste a punto de ahogarte Con el desasosiego Y con el ansia. Con los sueños enfebrecidos. Y con toda aquella premura De beber la savia, el dulzor, La suave frescura, El elíxir milagroso, Los goces del amor. Pero no. No lograste la intensa beatitud. Y entonces te marchaste, Silenciosa, callada, Con la cara triste y preocupada, De quién no quiere incomodar. De quién prefiere las sombras. De quién se sumerge en los sueños. De quién se esconde en la historia Vehemente y minuciosa De su propia soledad. Y entonces mi torpe corazón te dejó ir. Y supe que la noche Y que la lluvia, Que la amarga distancia, Que el tiempo malhadado Nos hirieron Y que sólo nos queda El sueño bendecido, La ilusión, La radiante esperanza, De que algún día Podremos apurar, El zumo de la vida, La infinitud ¡ Y el tiempo ! SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 7 DE JULIO DE 2007 *AD TE DIVA POTENS CYPRI Todos mis días Están hambrientos de ti. Todos estos amargos días Que van pasando, Largos y exánimes, Sin tu clara mirada, Sin tu suave sonrisa. Tal vez alguna tarde Me aventure a merodear Por tus sueños Multicolores y radiantes, Que florecen, Junto a tu cuerpo Con aroma de maleza silvestre. Quizá prefiera Mirarte desde lejos Y luego acercarme a ti, A tu visión mirífica y constante Para poder vivir, Ávido, inerme, Ante el narcótico Ritmo de tu veste. Tal vez entonces, Estos extraños días Se transfiguren En una tenue ensoñación, O en un milagro Arrebatado y flamígero, En que me entregues La fruición de tus labios, Rojos, suaves, tiernos. Como un delicioso sacrificio De amor ensimismado Y sonriente Tal vez entonces logre romper La sorda monotonía, Retumbante y terrible, De estos días que aún no logran Trasmutarse a sí mismos Y ser parte de otro mundo, De otro tiempo, De otra dimensión En que encendidos En un abrazo deslumbrante Y etéreo, Logremos convertirnos En un solo ser, En un solo amor, En un solo sueño. *A VENUS De pronto he descubierto Que entre tu y yo Ha nacido una suave, Una dulce, Una extraña corriente de premura. Ha nacido una hermosa corriente que ha venido, Del dolor y del sueño, Del rencor y el silencio Y de esa abrupta soledad, Que ha poseído, El mágico fulgor de tus miradas. Yo no se si fue La cálida algarabía De tu voz, O tu hermosa silueta Dibujada contra el cielo azul Y la tierra perfumada, Lo que empezó a formar La deliciosa soga Que me ciñe los sueños. Tampoco se De qué artificios Te valiste Para transmutar Mi corazón hosco Y taciturno. ¡ Pero estás aquí, Con tu dolor vibrando ! ¡ Con tu sonrisa radiante A punto de sollozo ! ¡ Con el ágil devaneo De tu de tus pasos ! ¡ Con el ensueño A punto de recuerdo ! Y como la primera vez Que nos miramos, Tu ya sabes que mi magia Es capaz de arrancar el puñal Que te rasga el costado. Y que por fin podré Romper el sortilegio Que me priva De tu pasión deslumbradora. A UNA HERMOSA. Todo en ti era bello. El ritmo de tu paso, Tus ademanes, La forma en que mirabas, El fulgor de tus ojos, Tu elegancia, Y esa sonrisa tuya, Promisoria y extraña. Nunca pude descubrir La fuente de tus sueños, Y tampoco pude conquistar, Tu belleza y misterio. Tan sólo pude mirar, Cómo en un soleado día Aladamente recorrías Los caminos del viento. LA AMADA INTANGIBLE Apenas ayer he descubierto Que la hermosura de tu faz Es sólo un reflejo de luz Y de misterio. Que tu alada silueta Es sólo un juego de colores Y de sombras. Y que el armónico timbre de tu voz, O el suave resonar de tus pisadas, Son sólo un largo fragor, Son sólo una suave vibración Que a lo lejos se diluye. Y ahora he confirmado que eres, Sólo una gama de destellos, Inasibles, brillantes, Una vaga exhalación que se cruza ante mis ojos. Y no puedo abrazarme A tu figura, Ni puedo recorrer tus laderas, O penetrar en tus auras etéreas. Tampoco puedo confundirme contigo Y asumir con tus ojos Unos nuevos horizontes. Y menos con mis sueños, De halos luminosos, Puedo refundar Una estirpe gloriosa. ¡ Sólo te veo cruzar Entre los hilos de luz, Hasta el deslumbramiento ! EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, A 31 DE AGOSTO DE 2007. A UNA MADONA Tu recuerdo Es una imágen Que revolotea En mi mente Y en mi corazón. Tu recuerdo Es una voz. Un largo resonar En mis oídos. Un suave eco Por los valles. Un destello Por las sombras Una suave visión Por la amarga, Por la terca soledad. Y no puedo Sino arrastrarlo Por la aciaga, Por la luenga, La dolorosa Desesperanza. Y aunque no eres Más que un agudo dolor. Más que una herida Que rezuma Su acíbarado licor. No quiero arrancar Ese recuerdo, Porque te amo, Y apagar su fulgor En mis ensueños, Significa La desesperción Y el olvido SAN JERÓNIMO LÍDICE, NOVIEMBRE 6 DE 2008. EL REENCUENTRO Después del transcurso De tantos, De tantísimos años, Ahora recuerdo de nuevo Tus miradas alegres, Tus sonrisas felices, Tus saludos estrechos. Y una fuerte corriente De emociones Inunda mis caminos Misteriosos y extraños. Aquellos que recorrí, Con tu imagen soñada. Aquellos que recorrí Con tu voz Resonante. . Aquellos que recorrí, Con la daga, Presurosa y querida, De tu ensueño. Pero todo esto no te lo dije. Sólo viví Con la punta Insidiosa y terrible, De los celos. Con el veneno De tu ardiente figura Que me abrasa las entrañas Y consume mis deseos. Y por alguna, Extraña razón, No te pude escribir, Como ahora lo hago, Aunque me lo pediste. Pero desde que oí tu voz, El río de mis sueños Se ha desbocado. Y ni las protestas, Que imagino, Vehemente expresarás, Y que aún no me dices, Me arredran para arriesgar Mis ejércitos maltrechos, Ahora ya desesperados, En la conquista Del sueño en que apareces Como madona inalcanzable. SAN JERÓNIMO LÍDICE, NOVIEMBRE 21 DE 2008 EL DESCUBRIMIENTO He vivido tanto tiempo Lejos de tí, Que ya olvidé Cómo es la luz de tu mirada. Cómo el esplendor De tu sonrisa. Y sobre todo, Cómo el calor de tus caricias. Este mundo, En que vivimos, Es sólo un cúmulo De acciones, Ajenas, extrañas, Por las que nos pagan. Pero en ese cúmulo, No hay pasión. No existe la chispa divina Del ensueño. Ni el vínculo secreto Que ilumine tus ojos. Sin embargo, Allí puedo hablar contigo, Y hasta escuchar Que cálida me dices, Que en este rudo universo, Ya no eres inalcanzable. ¡ Y esa circunstancia Me ha llenado de sueños ! SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 14 DE DICIEMBRE DE 2008. LAMENTO Estoy triste, Muy triste, Casi ya desesperado. Y eso es porque hoy, Que por fin Te encuentro al alcance De mis sueños, La cruel naturaleza Me ha impuesto sus límites. Me ha impedido Verte a los ojos. Ha impedido Que mis manos te acaricien. Y me ha impedido oír tu voz. Esa risueña voz Que recuerdo cálida Suave, delicada, Respondiendo en un susurro, Y que hace ya muchos años No escucho, Como en aquella tarde En que encendiste Mi gusto Por tu bella silueta. La naturaleza se ha valido De la aciaga presión, Que sin piedad ha ejercido En los vasos comunicantes. ¡ Y los ha roto ! Y eso ha retenido Mi esperanza De mirarte de nuevo. De expresarte mis sueños. De vivir contigo La aventura desmedida De la pasión que soy. Y es por eso Que me miro solo En esta algarabía. En esta vorágine de acciones. Ahora ya casi frías. Ahora pendientes De un proceso, De un ritual. De una larga costumbre, Cristiana, automática, Impasible, imperceptible, Inútil. SAN JERÓNIMO LÍDICE, 21 DE DICIEMBRE DE 2008. ANIMALIA En este mundo, Por el que tus pasos Y los míos, Por azar se cruzaron, Sólo realizamos Acciones cotidianas, De triviales trabajos. Acciones minuciosas, Autómatas, necesarias. De supervivencia. Acciones perentorias para que viva la bestia. Esa que somos, Tu y yo, Y toda la grey que pulula A tu vera y a la mía. Y en verdad no ponemos En esas acciones, Ni el halo mistrioso Ni la chispa divina. Sólo el instinto. Sólo ese sentir que nos sube Desde el fondo del estómago, Y de todas las células, A la zona central de decisiones. Y casi nunca Encontramos el ensueño. ¡ Sólo el tedio, Sólo la rutina ! No encontramos El halo de aventura, Ni el deseo de acceder A extraños universos Y de ese mundo Insufrible y mezquino, Sólo me salva tu recuerdo. Ese recuerdo tuyo, Dulce y vehemente, En que tu cuerpo se aparece Como la Venus de Boticelli: ¡ Desnudo y deslumbrnte ! ¡ Cálído y tembloroso ! ¡ Felino y elegante ! ¡Y con un perfume exhótico, Tuyo y para mi ! SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 27 DE DICIEMBRE DE 2008. DESDE ESE DÍA. Desde ese día en que te dije Que tu me gustabas, A tí no puedo hablarte De manera diversa A aquella en que lo hice, En esa tarde lumínosa Y aciaga, En que a mi modo Y de forma desgarbada Te dije que te amaba, Aunque mi respeto por tí Me impidió abrazarte Y retenerte. ¡ Y te dejé ir ! Y ese acto malhadado, Se me hundió Por años y años, Como un puñal En el costado. Y te ví muchas veces, Sonriente y alegre, Mientras yo vivía Ahogado de dolor Y de celos. Pero ahora me pregunto: ¿ Podré tocar tu dulce corazón Y lograr que se olvide De esos días ya pasados ? ¿ De esos sueños esfumados? Confio en que la magia De mis manos sea suficiente. Y por fin, ya sin la retención, Lograré trasmutar El tono de tu voz Y la luz de tus ojos En radiante alegría. SAN JERÓNIMOLÍDICE, A 8 DE ENERO DE 2009. PARA CONQUISTARTE Para conquiatarte amor, Quisiera realizar Las hazañas De los fieros adalides. O los mágicos pases De los más consumados hechiceros. Pero en verdad Quisiera convencer A tu dulce corazón, De que tu eres mi ensueño. Y ahora que te hablo, No te fijes en mis trazas, Miserables y ajadas. Ni tampoco te cuides De mi aspecto desolado Y maltrecho. Solo mira la llama De passion, Que en mis ojos flamea. Solo mira el río De mi sangre, Que arrasa Todos los valles De tu pecho. Sólo mira el amor desesperado, Que asoma por mis sueños Y persigue tus pasos. SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 13 DE ENERO DE 2009. PARA ACERCARME A TÍ Para acercarme a ti, He realizado Todas las estratagemas, Todos los ritos, Toda mi magia. Y mientras tanto He visto que me esperas. Tranquila, Silenciosa, Sonriente. Con tu silueta etérea, Que me mira Y me extiende los brazos. SAN JERÓNIMO LÍDICE, ENERO 24 DE 2009. SIC TE DIVA POTENS CYPRI Así como la poderosa Diosa de Chipre, Te apareces. Con ese pelo tuyo Revoloteando en el ire, Con los ojos refulgiendo Matices de ensueño. Con tus brazos iniciando Dogales rotundos. Y mientras tanto Yo me quedo Admirando tu talle, Que se arropa, Con el rojo manto De la tarde. SAN JERÓNIMO LÍDICE, ENERO 25 DE 2009. LA DECISIÓN He estado pensando Qué hacer cuando te vea. También he pensado Qué decirte. Y la verdad me asalta Con una descarnada Realidad. No se que hacer Que te sorprenda O que te agrade. No se qué decirte Que no sepas. O que no te imagines. No se cómo vivir Con esta serie de sucesos Repetidos, insulsos, Que se suceden dia a día Y que consisten En comer, en dormir, En trabajar, Y en hacer muchas otras cosas En familia. Pero en estos sucesos No hay misterio, No hay aventura. Sólo la repetición, Continua, insoslayable. Sólo las mismas cosas. Sólo las mismas emociones. Y para poder soñar Tenemos que salirnos De los mismos esquemas, De las diarias acciones. Y por ello, Tenemos que escaparnos Por largos vericuetos. Por rutas prohibidas. Por campos peligrosos. Y entonces Tenemos que tomar Unos riesgos inicuos, Decisions extrañas, Pero a pesar de eso, Vale la pena el esfuerzo. Por eso, Amor: Rompamos los silencios, Quebremos las defensas, Abandonemos Las calles amuralladas, Las seguras rutinas. Salgamos al campo. A la rauda libertad. A la luz de este cosmos, Delumbrante, Inasible, cambiante, Para poder vivir Eternamente. SAN JERÓNIMO LÍFICE, ENERO 26 DE 2009. *DECIMA Por ti mi tristeza muda,Allá en al cuenca floridaDe tus ojos, se deslumbraComo gacela aterida.Por ti la fuente dormidaSus arco-iris emplumaY mientras huye la bruma,Refulge con tu sonrisa,Un haz de rayos de lunaMecido por suave brisa. *MADRIGAL VIII. No quieras hender Mi corazón, Con los puñales De una nueva ilusión, Porque su acoso, Tanto tiempo en floración, Tanto tiempo en reposo, El ritmo acallará, Hondo y violento, De mi ruda emoción, De mi alborozo. HAY KÚ IX Tu cálida mano. Tu sonrisa radiante. ¡Mi corazón galopa! Una jornadaTe veo por la mañanaQue bajas de la cama, Que despiertas a tus hijos,Que te das un baño.Y luego que te arreglas.Que todos desayunan. Que llevas a los hijosA la escuela.Que te vas al trabajo.Y luego por la tarde,Que recoges a tu madre. Que recoges a tus hijos.Que van a casa de tus padres.Que en seguida Haces de comer.Y luegoQue vuelves al trabajo.Que en la noche, En casa de tus padres,Recoges a los hijos.Que se van a tu casa.Que meriendan.Y que entonces, Se van a dormir,Tu con la cara cansada, Con un enorme pesoEn la espalda. Y con angustiaEn el corazón.Y tus hijos,Con el haloDe la juventud.Pero no he visto,Ni la luz de tus ojos,Ni tu pecho con pálpitos,Ni una suave sonrisa.No he visto en este día,El vuelo de tus manos,Tu silueta ondulando,Tu perfil ensoñadoY tampoco oí tu voz,Ronca, ensimismada.Ni oí tu alegríaDesgranada en carcajadasNi he visto tus recuerdos.Ni el vuelo esperanzadoDe tus sueñosNi siquiera un barruntoDe deseos.Y sólo me he quedadoEn un punto de atisbo,En la espera del fragorDe tu sangre dormida.En la espera del caudalDe tu savia exquisita.A la vera del camino,¡ Ansiedad infinita !Mirando el horizonte Y las nubes esquivas.Vibrando con el truenoQue resuena en tu pecho.A punto de la flama,Del incendio escondido..Y no acierto a consumirme, Ni a brillar en tu fuego.Ni a hundirme Entre tu peloConsumiendo tus besos.Ni a morir bajo las lanzasDe tus manos heladas.Ni a acercarmeA tus mejillasPresurosas y suaves.En cambio te persigueEl dogal de mis brazos,En el mundo en que me vivesY en que inerme me matas.Y luego extrañamentePor el aire te escapas,Oh diosa que reclamas,El misterio y la esenciaDel libre y decididoGermen de tu ensueño.0SAN JERÓNIMO LÍDICE.- 26 DE MAYO DE 2006. HAY KÚ V UN FULGOR VERDE AZUL. ¡TU MISTERIO DESLUMBRA! sAN jERÓNIMO lÍDICE, MARZO 11 DE 2005. TENGO EL PODER I ¡Tengo el poderDe estar junto a ti,Aunque estés muy lejos! Tengo el poderDe tomarte entre mis brazosY acariciar tu pelo,Y también de mirar esos ojos,Calmos, soñadores,Con una luz brillando. Y tengo la magiaDe ceñir tu cintura,Y de beber sedientoUn beso apasionadoDe tus labios arreboles. EN EL LUGAR DONDE ONDEAN LAS BANDERAS, A 5 DE SEPTIEMBRE DE 2009 *MADRIGAL XII ¿Cómo haré de mi ilusión un verso,Si has dejado mi vergel desierto? ¡Ya no puedo cantar!Ya se hay secoEl brocal de los conjuros,Que hizo florecer mi huerto. Adiós amor, adiós renuevosAdiós musas y gnomos.¡ Mi corazón ha muerto! *MADRIGAL XIII ¿Por qué te asustaQue las auras y mis ojos,Acaricien tu cuerpoQue desnudo refulgeCon la luz de la tarde? ¿No sabes acasoQue mis sueños más bellos,Presurosos deambularonPor un edén,En que el ardientePerfume de las floresSe confundeCon tu amada silueta? L A E S P I R A L Durante miríadas de momentosHe venido danzandoPor las largas, Las extrañas peripeciasDel hilo lumínico,Que en espirales Cada vez más amplias,Recorrí En esta infinita negrura. Mis avatares cotidianosSe sucedieron incontables,Indecibles, irrefrenables.Y se desprendieron desde mi, Como pañuelos que ondean,O como vuelos de aves mitológicas,O como tiras de dolor. Algunos de ellos Permanecieron Por largos tramos recorridos. Otros apenas fueron un fulgor. Pero a cada nuevo momentoSe inventaron, Y reinventaronCon un nuevo matiz. Y sentí su premura por nacerY por volar.Para luego dejar de ser. Y así ha sido durante este recorrido. A veces con la fuerza de ser. Otras con la voluntad de cambiar y romper arquetipos. Pero ahora, la espiral Se ha estrechado.Los círculos concéntricosAhora se precipitanEn un raudo, frenético, Vertiginoso vórtice,Que apuntaHacia un núcleo de luzDeslumbrante, inmenso, Al que me precipitoArrojando avatares cotidianos. Y mis manos se deshacen De hechos. Y mi boca,De dichos e historias Y ya soy sólo luzLa intensa luz y su fulgor. Aquel violento destello En que estoy consumiéndomeExtinguiendo la escoria... San Jerónimo Lídice, a 23 de marzo de 2008. El adiós Desde hace ya Muchos años Que camino Por los tibios, Los luminosos, Los inefables Días de la vida. Y en los primeros, Todo era nuevo, Todo era claro, Todo era libre. Y a pesar de que, Cuando irrumpen las reglas, La armonía de las horas Se hundió en el colapso. Y que desde entonces, Por ensalmo maldito, Por resabios amargos, Por disputas infames, Se murieron Algunos de mis sueños. Disfruté por las noches Con estrellas brillantes, Con la luna redonda, Con mil astros cambiantes. Y en la lenta travesía Que por años y años Me consume la vida, Me inunda el regocijo De los largos, De los días rutilantes. De los cielos azules. De nubes que galopan. Del perfume en los vientos. De los bosques umbríos. De la dulce alegría, De los suaves recuerdos. Y mis magras perspectivas De ignotas aventuras, De hijos que viven, De hijos que sueñan, De hijos que otean Por un raro horizonte. No han hecho Tediosa esta larga rutina. No han hecho prolongados, Los días de trabajo. Ni amargo, El inútil alegato. Ni ruda la demanda. Ni siquiera despreciables Los asuntos de rencores, De relatos de quejas, De responsabilidades insulsas, Ratoneras, mediocres. Ni han insertado Su resabio, En esta ya larga vida, Los rencores. Porque mis manos Se han cargado de magia. Y mis ojos de luz Y mi boca, De palabras y versos. Y de amores. Y de hermosas historias. De inefables deseos. Y ahora , De un adiós que comienzo Presuroso y eterno. SAN JERÓNIMO LÍDICE, A 16 DE ENERO DE 2006. * POEMA DEL DESTERRADO Como nuevo Caín, Con quijada de miedo, He asestado a la cruel esperanza El certero asesino dolor De silencios bermejos Y he vagado universos Atisbando el blancor De un millón de luceros, Infinita ilusión, Porque en ellos no encuentro Ni descanso, ni dios. Y he creado ciudades Y he sembrado mi ardor En el brillo del oro Y en mi amarga ignición Pero nada he encontrado Y he tenido el dolor De bogar bajo el cielo Y el ensueño y el sol, Como ignoto pirata De olvidada región TONANTZIN. Tu ancestro creó tu símbolo. Invocó al este y al oeste, Al norte y al sur, Al arriba y al abajo Y desde sus días preñados De soles y de lunas, Que revolotean Sobre la tierra florida, Te modeló como jícara, Roja y verde, Rotunda y derramando Luz y vida, sueños y milagros, Flor y canto 12 de febrero de 2005. LA SEÑAL Después de andar por milenios ¡Oh desierto silencioso! Por fin he visto tus dunas Junto a la mar de Almería Y a lo lejos he he mirado Sobre las agues arteras Que sueñan tus ojos radiantes Y tu boca susurrante. Y me has impuesto tus besos Y ahora se que su marca Impredecible y extraña, Endulzará presurosa Mi beatitud absorta. SAN JERÓNIMO LÍDICE, SEPTIEMBRE 16 DE 2009. *MADRIGAL III. De pronto vi., Que el claro y límpido caudal De tus lágrimas, Se liberaba, Como al romperse los cauces, Se liberan las aguas. Y quise detener el cataclismo, Porque temí que no encontraras, Ni valle, ni monte en tu camino, Para domeñar las crespas ansias, De tu dolor alucinante. Octubre de 1965. MADRIGAL XVI Dama dulce y sensitiva, La que vehemente suspira Y se vuelve a mirar el cielo Con los sus ojos de fuego Y el perfume que destila. SAN JERÓNIMO LÍDICE, OCTUBRE 20 DE 2009 LA BEATITUD. Cuando tus ojos Y los míos, Descubran los matices De una clara alborada, O de cualquier medroso ocaso. Cuando tímidos perciban El multicolor enjambre de las cosas, Como una llama febril, Que crepita, Y que ávida Consume la existencia. Cuando por fin Se incendien El aura de los bosques, Y el tenue perfil De las marismas. Entonces ha llegado el momento De abandonar la soledad, Y el silencio, Y aquel dolor inefable, Que lacera, Que aniquila, Y que el amor pausadamente Nos mitiga. Entonces ha llegado el momento, De empezar, De explicar, De decir, Cómo es que los sueños, O los miríficos intentos De tus manos, Han logrado la fábrica, La transmutación Y el milagro, Del brillante universo En que ahora vivimos Como extrañas criaturas Que apacientan, El deseo y las caricias. Entonces ha llegado el momento De apurar regocijos y empeños Y de arder apasionadamente, Con la furia del tiempo. TRÍPTICO I Has esperado tanto, Que hoy que refulge el ensueño Con un deslumbramiento de colores, Inusitadamente te has quedado quieta Escuchando un largo soplo de silencio. Y mientras se desgarra tu costado No aciertas a beber. El aire fresco y suave Que mi pasión te ofrece. II ¿ Cómo soñaste que llegaría el amor? ¿ Acaso en la persona de un apuesto galán? ¿ Acaso en una tarde inefable? ¿Acaso en un momento sublime? ¡Vana ilusión! El amor ha llegado Por un recóndito sendero, Con un disfraz de andrajos, Con una máscara chusca. Y de pronto, Ha tomado tu reducto A sangre y besos, A marchas forzadas de deseos, Al mágico ensalmo del silencio. III Yo no sé que extraño sortilegio Te transforma, Pero hoy que te miro, Adivino en tus ojos Una tierna alegría Que desmadeja Por el aire insondable, Tus miradas ardientes, Tus sonrisas discretas, Y muy allá, a lo lejos, Un extraño fulgor de melancolía. MADRIGAL XVII Las dos puntas de tus piernas Quedaron enclavadas En la locura de mis sueños, Que chisporrotean Más allá de la muerte, Sin lamentos… Y sin culpas. ¡Sólo en destello Por la obscuridad Eterna! SAN JERÓNIMO LÍDICE, OCTUBRE 21 DE 2009. *MADRIGAL IX. Sólo tú me faltabas Para que mi vida De senda perdida Se dignificara. Sólo tú que podías Que en mi se borrara Con dulce mirada Mi melancolía Sólo tú que podías Que mi alma soñara, Que yo te besaba, Que tú me querías, ¡ Sólo tú me faltabas ! 13 de diciembre de 1960. *ENSOÑACIÓN ¿Son estas tus manos,Hálito rencoroso,Turbio, suave, tierno? Parece ser que se consumenBajo la inerme fragancia,De raudos recorridosDesesperadamente derrotados,De ardorosos recovecosObstinadamente ensimismados,De inicuos sueños ávidamente revividosJunto a la tímida silueta del silencio. Y luego revuelanCon un jolgorio tristísimo,Hacia el lejano litoralQue deambularon,Todos los crueles días del recuerdo. ¿Son éstas tus manosQue apenas ayer han destrozado,La garra, el silbido,El bronco tropelPudoroso y sonrojadoDel ensueño? Tal vez enloquecieron al hallar,Junto a los mares límpidos y claros,El fantasma maldecido y deforme,De un torvo amor,Que a duras penasSe arrastra,Repta,Se aniquila a la vera terrible y desgarbadaDel miedo presuroso y aterido. Tal vez se congelaronDespués de las caricias,Porque un vientoAullador y agorero,Las ha obligado a cobijarseEn los gélidosRinconesDel infierno. ¿Dónde están ahoraTus manosOh, muda y sutilExhalación? 18 de febrero de 1973. Perdoná la distancia… Yo no conocía la tristeza En huesos desnudos Afilada Sarcástica Descolorida La belleza También Es un poco triste Está ahí Sin poder tocarla Hago los versos más largos para alcanzarla… Pero no… Entonces Desanimada Sigo mis versos Cortos… Pero pienso… Tristeza Ha de ser Vestida De belleza Y las sonrisas Deben llegar Igual Puntuales Y las caricias Deben desparramar Sobre la piel Los besos Y el mundo todo Se lubrica De amor Y caen los versos Y si los versos No caen Se hacen Carne Y anda Otro niño más Allá sonriendo Se junta con una niña Y cae un verso Y sino cae un verso Se hace Carne Y anda otro niño más Y ve otra niña… Cuánto quisiera yo Ser tu río La orilla partida Los peces que miras Cuánto me gustaría Que en mi cuerpo Veas venir Todo eso que querés Más cielos e islas Que digas Eso yo quiero! Y me sigas Hasta donde vivo Y en mi cueva Hagas nido Pasa en la órbita Se construye Se desborda Caen sus restos Pasa en la órbita Se autodestruye Se limita Queda un cuerpo Pasa en la órbita Se conjuga Ambos se gustan Se arma el verso. Quizá un bello polvoriento extenso libro Sea la única respuesta a tu pedido. Quizá el beso imposible del que hablás Esté escrito en letras de oro en algún convento Arriba Donde hermanas sigilosas Procurando su ración de palabras diarias No pueden verlo. O en el roce húmedo de sirena del mar Cuando se abre precisa La alta ola O en un día vago y gris, al final de la calle La primer gota de lluvia Caída en tu boca Labio adentro Penetre Mínima Pura Y cuando mires Nadie, Sólo el cielo. Fiel como un perro Lascivo y alado Siempre nuevo Recorre nuestra poesía, El deseo. La toca, la penetra y la fecunda Lo goza, lo adolece y lo libera A pretendidos jardines de flores pisoteadas Él les pinta sangre como sudor Y nos hace amarlos locamente. Cuán bella nuestra voz Cuanto más nos acercamos a su regazo Y dormimos complacidos en su sino. Armónico o esquivo Da igual Si es verdadero. Me irè con el vientome irè con la aurorame irè confundida en la sombramis armas depongovivir, ya no importaes tan solo la vida un momentoamor, no se que es esopero me iré suspirandopor algo desconocidola eterna idealistatendrà que ser realistaasumir la realidadtan lejos, tan lejosde la felicidadestoy resignadadejarè de sentirme olvidada, rezagaday dormirè plàcidamentepor fin dormirè,dormirè eternamente *ROMANCE DEL HERMANO MUERTO Si supieras hermanoQue después de tu huida,Una amarga impaciencia,Con matiz de porfía Ha venido a clavarse,Presurosa y sombría,En la cuenca furiosa Que veló tu alegría. Si supieras hermanoQue en la roja sangría,Vivirá tu recuerdoComo ávida arpía. Como fiera en acecho,Como gota de acíbar,Como clavo de acero,Como mística espina Si supieras hermanoQue las flores te envidian,Que la luz del veranoHa buscado en el día El perfil de tu sombraRefrescada en la brisa,Correteando paredesY amagando la vía Si supieras hermanoQue tu madre daría,Por tenerte de nuevoComo llama encendida, Un diluvio de llanto,Y una larga agonía,Y un rumor de sollozos,Y su sangre oprimida. Si supieras hermanoQue el dolor te convida,A volver con nosotros,A soñar con la ira, A vagar por el mundoCon la muerte metida,En la sangre, en los huesos,En el tiempo, en la ira. Yo me temo mi hermanoQue jamás volverías,Que jamás fuertemente,Que jamás te reirías ¡Y que sólo obligadoPor amor tornarías! Junio de 1963 y modificado en diciembre de 1985, para ser leído en la Logia Wolgang Amadeus Mozart, de la Gran Logia Valle de México, del Rito Escocés.
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RAÚL FERNANDO TORRES
María Ester Rinaldi
Yo te agradezco que lo hagas, cada verso que escribas, aunque no lo creas, dice mucho de tì, y asì el espìritu, el tuyo, el mìo...el de quien lea estas letras, se enriquecerà...
Un abrazo...Marìa Ester.
LUIS VILLASEOR MARTINEZ
¿Y ME ADMITIRÁS COMO TU SEGUIDOR?
YO TAMBIÉN LEERÉ TUS POEMAS POR LA NOCHE...
María Ester Rinaldi
Gracias, amigo...por tu delicadeza y generosidad para conmigo.
Un cariñoso saludo.
Marìa Ester.