Esta es la historia de un dolor,
un dolor que nunca termina;
andando en una cara de espinas
me aferro a esta hoja de papel,
me aferro a sus fantasías,
a sus letras, por que no hay tierra
ni mar para el poeta
 
No hay alegría ni paz;
odio y amor para el poeta.
Ni en el cielo encontré
el paraíso prometido,
por que no hay muerte
ni hay vida para el poeta,
por que a nosotros escapa
el pecado y la mentira
nuestras manos no se arrugan
nuestras palabras no mueren
por que ¡No existen los poetas!
 
Los poetas nacen desterrados
aun en la nada buscan materia
y  hacen maravillas del silencio
por que solo el nos pertenece,
¡Que sea la poesía para el poeta!
corred deprisa amigos míos
desenvainen el bolígrafo mortal,
conquistemos lo que a nadie pertenece…
¡Llenad el silencio con palabras!