Es tan tonto, me digo, redactar esto
como si alguna vez tus ojos claros se fueran a posar en estas líneas tristes y vehementes
que no hacen mas que un vano intento de alcanzar tus ojos
tus oídos y tu voz
 
Esto intenta ser una carta
pero parece uno de esos poemas mal escritos que odio tanto
intentando imitar de mala manera a Boudeliere o Ramboud como lo he hecho toda mi vida
 
Sé que esos hombres que tanto te gustan
son Adonis, Dionisio, Shakespeare para ti
mas para mis ojos no son mas que un montón de bodoques que solo fingen para ti
para agradarte
para acercarse
para seducirte de esa manera tan indigna de ti
y son entonces mis palabras meros intentos de aquello mismo
Pues de adonis, perseos y Hércules
no tengo ni la punta de mis zapatos rotos y desgastados
 
no soy mas que un simple estudiante promedio
ni un mateo lleno de cerebro ni un líder visceral y lleno de músculos
por esas dos simples razones sé que no me ves pasar
 
Es tan tonto igualmente imaginar
Que el tipo al que se le entregaré esta misiva en mi nombre hacia ti
va a ser quien roce tu mano y no yo
será él quien mire a tu cara y diga que esta te la manda un imbécil de ropas sucias
pelos revueltos y lentes gruesos
al que no llamará mas que “un amigo”
un amigo suyo que dice amarte
Pero sin saber nada de amor realmente
Como no saber que al mirarte
Él querrá ser quien llegue primero a tu boca
Quizás hasta lanzará la premisa de ser él el autor de la presente
Y no me importa
 
No me importa porque el hecho simple de mirarte me alivia la mala leche de la vida
De esta vida injusta que me ha tocado como todo lo demás
Verte en tu alo mágico, traslucido y misterioso me contenta suficiente
No soy mas que carne para los cuervos
Mira
Todos ríen a mis espaldas
Todos murmuran de mi mal aliento
De mi pobre pinta
De mi peinado pasado de moda
Y de mis libros, mi único refugio….
- aunque es mentira que tenga mal aliento, pero las murmuraciones,
a veces, tienen mayor peso que las verdades, eso lo sabes-
 
Te miro a lo lejos, escribo estas líneas
Y sé que no te importo
que no me conoces
Que ni siquiera sabes que piso el mismo suelo que tu
Que huelo el mismo perfume que rodea la sabana que es esta ciudad que tu
Que miro las mismas caras abúlicas que pasean por doquier igual que tu
Y que puede ser incluso que tengamos amigos en comunes tú y yo
Pero que, como es la costumbre de estas situaciones paradójicas y un tanto estúpidas
Ni siquiera lo sepamos
O si alguno de ellos lo sabe no lo ha dicho porque ve en mi el prototipo de hombre
Que tu nunca mirarías
O que tú nunca te dignarías a mirar
Dadas tus costumbres de niña bien
Dado que no soy un niño-bien
Y otras tantas cosas que no diré
Por pudor un poco
Y porque esta es, o pretende ser, una carta de amor…
O de pseudo-amor
 
Te miro y sé que no sabes que existo
Que no imaginas que un ser patético como yo puede existir
Que te mira
Que te admira
Que desespera como un tonto cada vez
Que tus manos han tocado a otro
que tus labios han besado a otro
que tus palabras han alcanzado a otro
que tus oídos han oído a otro
Y no a mí
No a mí
No…
 
Soy un ser de ficción, mírame bien,
Hecho a la medida de mi aflicción
Y aunque suene a verso barato es verdad
El dolor, presente en esto tanto como en otras cosas humanas,
Carcome mis ansias al mirarte
Al oírte
Al saberte en este mundo
Tan cerca de mí
Y tan lejos a la vez…
 
No son las costumbres las que nos separan
Yo creo que mas bien nos juntan un poco
Claro, en esta lejanía de ciudad que vivimos…
Como se juntan la luz y la sombra y nunca la una sabe de la otra
Más que por referencia
 
Debiera intentar, al menos, hacer un poema…
Pero no puedo, porque se supone que es una carta de amor…
 
¿Qué tengo para darte?
Nada
Pretendo amarte y no sé lo que es eso
Pretendo que me quieras
Pero no quiero que me quieras tampoco
Y aquí se pone todo más absurdo
Ojala me hablaras un día
Aunque sea que me preguntes la hora
En ese momento no miraré tus ojos,
Ni tu boca
Ni tu bien contorneada figura
Miraré mi viejo reloj
Te diré “las nueve y seis” y seguiré mi camino como un fantasma en halloween
 
Así es el mundo
Tal vez seas demasiado buena para mí
O yo demasiado pésimo para ti…
No hay futuro posible
Y esta ya no es una carta de amor…