De dama no tengo nada, uso pantalón y sombrero; no soy dócil, ni quiero serlo.
Nuca soñé con ser madre; nunca soñé con ser maestra; no jugaba a las muñecas; tampoco soñé para mis quince una fiesta... La única rayuela que me apasiono en la vida, es la de Cortazar.
Cambie la iglesia por Kung Fu a los ocho años, porque aprendía más de él, viendo su serie, que escuchando al cura en la misa del domingo.
La vida me enseño que para sobrevivir no alcanza con ser mujer, hay que ser hembra, saber oler. La Dama pierde sus instintos naturales, el olfato se le arruina con Channel.
Me gusta beberme la vida de un solo trago, ponerle sal, pimienta, gazpacho. Aceptar todas las apuestas, probar suerte en las máquinas traga monedas. Jugar carreras con el tiempo. Desafiar al reloj, correr más rápido que sus agujas, aunque a veces me cuelgo con el Cucu... Siempre me atrapo esa forma absurda de expresar la hora.Trato de mantenerme el mayor tiempo despierta, dormir es perder minutos que no se recuperan...
Me gusta el olor de un buen habano cubano, que los hombres huelan como el, que tengan barba del tercer día y la onda del Che. El hombre percudido, transpirado, desalineado,
que exquisitez, un hombre con sabor a macho.
Caminar con pasos firmes mi senda, en lo posible tratando de dejar huellas, cada camino recorrido marcado, por si decido volver a caminarlo.
La cursilería me supera, difícilmente algo me conmueva. Si no es profundo, misterioso
o me invita a ver que hay detrás de la puerta.
Equivocada o no, soy fiel a mis convicciones y las expreso cuando hace falta. Soy natural, fresca, espontánea, express, siempre lista, instantánea, nunca me hace falta caretearla.
No se puede estar bien con Dios y con el Diablo, no se puede tener dos caras iguales, ser moneda falsa. En la vida uno suma amigos y enemigos, aunque a veces no veamos la diferencia, las cosas se mezclan, aparecen esos grises que tanto molestan.
Me encanta que la vida me despeine, me sacuda, me golpee, me tire de los pelos,
que vida aburrida siempre peinada a la gomina. Mi pasatiempo favorito es irme a la banquina,
hacer culo patín con la vida.
Esto no tendrá nada de poesía, no hablara de amor, ni de olvidos, pero nunca fui tan YO en un escrito.

by Eleo