Se ha llegado la hora para expresar en estas letras
el más grande Amor naciente y ahora por ti siento,
no tengo el oro con el que compran las marionetas;
pero es tuya mi vida que te ofrezco sin rendimiento.
 
Tuve que cruzar montañas, ríos y más de un valle
enfrentándome a ejércitos, fantasmas y dragones
y al encontrarte aunque sin cansancio me halle
reposar deseo en tu blanco regazo a borbollones.
 
Un prolongado camino tuve que andar y recorrer,
poco sabía de ti, los libros no contienen información;
no habían profecías ni historias de amor… ni el ayer,
pero te pedí en mis sueños y te sentí en mi corazón.
 
El recorrido ha valido la pena inmensamente,
pues al verte llegué al cielo y es cuando existí,
eres un ángel que deseo se quede para siempre…
a mi lado. Así ha sido mi camino para llegar a ti.
 
DANNTO
Danilo Castaneda