Sellos, los nuestros
Publicado en Dec 23, 2012
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El paso del tiempo desemboca en una serie de constantes preocupaciones y desvelos. Cuando ese tránsito inadvertido comienza a develarse en arrugas, canas y algunas otras tantas metamorfosis físicas, las luces de alerta se encienden como los focos del semáforo y diversas pueden ser las reacciones y decisiones. Desde el reflexivo replanteo del camino a seguir, hasta la obsesiva consulta a cuanto especialista competente se halle en la cartilla médica.

Otra manifestación inquietante es el repaso por los sueños perdidos. Y aunque una lectura posible hable de un análisis romántico y nostálgico, al mirar hacia atrás no es extraño reconocer anhelos incumplidos. Entre frustraciones, decepciones y cachetazos, no fueron pocas las oportunidades en que nos escuchamos refunfuñar por lo que no pudo ser; o por lo que fue, aunque no era lo deseado. Sí, claro, algunas cosas supieron mejorar, y otras sorprendernos. Estrellas y amaneceres rosados cumplieron su misión.

Irrebatible: el tiempo pasa. El tiempo pasa y las cosas cambian. Se mueven de lugar, se borran, se destiñen, desaparecen. En constante mutación, nada parece sostenerse intacto e imperecedero. La experiencia demuestra que hasta lo que parecía inmortal e indestructible se puede oxidar y arruinar. El tiempo pasa y nosotros también variamos. De a ratos nos volvemos más intolerantes, y nos llenamos de escepticismo. El dolor nos deja cicatrices, siempre visibles, imposibles de borrar. Y los abrazos no siempre saben llegar, ni abrazar. El optimismo cruza los umbrales de la utopía. Sin embargo, cada mañana los pies se levantan y comienzan a marchar. ¿Autómatas? Esperanzados. Conocedores del tiempo, y de su paso. De lo aún posible, y de las dificultades. Esperanzados, valientes y atrevidos. Amigos de los silencios, y cómplices de la música que sabe hacernos vibrar. Cada fracción de segundo equivale a décadas. En mayor o en menor medida nos dejan estampas. Ahora bien, la relación se vuelve más interesante, más apasionada y más divertida cuando descubrimos (o inventamos) la forma de imprimirle al tiempo nuestros sellos. Únicos. Y divinos. 
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Foto del autor Marita
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Descripción

Fin de ao. Paso del tiempo.

Palabras Clave: Crecer

Categoría: Artculos

Subcategoría: Comentarios & Opiniones



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