Su cara desfigurada, y su cuerpo lleno
de marcas ocasionadas por golpes cobardes
de quien impone su fuerza física;
sus ojos ya no tienen brillo,
hace tiempo lo perdieron, su mirada
llena de amargura desgarra el alma.
 
Soñó casarse y ser feliz, tener una familia;
 hoy vive llena de angustias, entre insultos, humillaciones, maltratos.
Su vida ya no tiene sentido ¡Cómo lo va a tener! 
si cuando siente tocar la puerta, se va presa de miedo, agazapada a un rincón de  su habitación,
como presagiando con seguridad la violencia
que se desatará sobre ella. Si cada vez
que intentó levantarse, fue doblegada a golpes, aniquilada, sin voluntad, siempre dominada
 por el miedo, ese miedo que te anula;
es un sentimiento que se apodera de ti y no te deja reaccionar. ¿Qué sucedió con tu bella sonrisa?
¿Qué han hecho de ti mujer?
¡Ya no puedo ni quiero verte así, tu sufrimiento es nuestro sufrimiento también!
 
Esa alegría de vivir que siempre tenías ya no está,
sus amigos ya no están, las flores que adornan
 su mesa se han marchitado,
¿será que también están temerosas?
 
Amiga, ¡aún es tiempo de levantarse!
Seca tus lágrimas, tu cuerpo está herido,
tu alma está herida, pero podrán sanar.
 
Transforma tu dolor en canto, tu llanto en risas,
tu angustia en poesía,
cada golpe y cada insulto transfórmalos
en un canto de esperanza y valentía.