EL PORTENTOSO BIG BANG
 
Me cuentan personas sabias
merecedoras de todo crédito,
que en el instante de la Explosión
sólo existieron partículas elementales
y una luz muy intensa, ¡mucha luz!
 
Que pasados unos minutos
la temperatura empezó a caer
hasta el punto de permitir
los primeros núcleos atómicos.
 
Talvez el espacio (digo yo)
y su gemelo el tiempo
fueron los hinchados al comienzo,
dejando que la materia iniciara
su expansión indefinida,
sin restricciones arteras.
 
Luego llegaron otros cambios
dramáticos para el recién nacido,
cuando se formaron estrellas,
galaxias, nebulosas y planetas,
satélites, cometas y asteroides.
 
Mientras pasaba el tiempo
la temperatura siguió disminuyendo
y la expansión continuó
con un trasfondo de "estática" difusa
en las ondas de radio que flotan
cual diminutos ángeles
en oscuros rincones del espacio.
 
Pequeñas y grandes perturbaciones
en la distribución de la materia
formaron sistemas astronómicos
como los vemos hoy,
ampliados por fuerzas gravitacionales
que ejercen su labor constante,
presentes en el mundo conocido.
 
Por ello y muchas otras cosas
incomprensibles para un poeta,
se formó la teoría cosmológica
portadora de mayor prestigio
y sustentación experimental
entre destacados científicos,
conocida hoy fastuosamente
como el portentoso Big Bang.