Perú (America en el Corazón)
 
Miro las nubes que se funden con los cerros,
Vestidos de verde se abrazan al silencio,
Vestidos de lluvia cantan, ríen, lloran, callan,
Cual colibríes los hombres danzan las colinas,
Piel morena de esta tierra te lamentas del olvido,
Miras al cielo las gaviotas posadas en las manos,
Ya no vuelan libres tienen precio cada una de sus alas,
Escucho el viento que se funde con el canto,
Es canto de los hombres que marcharon solitarios,
Piedras y barro, totoras y palos, fuego y cenizas,
El viento sopla las caras aricadas del anciano,
Mas sus lagrimas lluvia que riegan el campo,
Mas sus lagrimas son ríos corriendo por las caras,
Saborean el viento solitario mirando atardeceres,
Mirando en sendas bruscas a los hijos que marcharon,
Los ojos se hacen largos como día de verano.
Mas no ven sino las llamas con su canto desbordado.
 
Cierro mis ojos para sentir el canto del viento,
Quiero mirar desde el cielo a Macchu Picchu,   
Quiero sentarme en las escalitas de roca,
Ver el tren serpenteando entre los cerros,
Como oruga gigantesca que se mece entre las hojas,
Como oruga gigantesca que se vuelve mariposa,
Posa sus alas blancas en blancas pieles despiadadas,
Posa sus patas negras en negras pieles de los pobres,
Sopla un viento sereno a los dueños del dinero,
Sopla las migajas a los hijos de piel oscura,
Mira por sobre sus alas a los hijos del imperio,
Mas se posa en blancas manos, delicadas, asesinas,
Mira sobre sus alas el hambre y la lucha campesina,
Más voltea su mirada hacia las pieles blancas,
Mientras campesinos se funden con las tierras,
Mientras campesinos se mueren en la belleza,
En la belleza de la tierra su única riqueza.
 
Dedicada al pueblo de Perú, como sabrán mi fin no es ofender a nadie de trabajo o que viva por su propio sacrificio o sobreviva gracias a la tierra.
Caranndor