UN EXTRAÑO CASO DE ENCANTAMIENTO
  
Hablan los medios de comunicación
sobre un caso de encantamiento
en el cual un viejo ejecutivo
se enamoró de su secretaria adolescente,
de tal manera que cuando ésta murió,
el anciano permaneció a su lado
olvidando los asuntos de la empresa.
 
Colegas y familiares, preocupados
por el comportamiento del Doctor,
decidieron examinar el cadáver
y hallaron, bajo la lengua de la muerta
una sortija incrustada de diamantes
y otras piedras preciosas.
 
El allegado que descubrió el hechizo
fue objeto del amor del empresario,
con pasión igual o más ardiente
que la sentida por la difunta joven.
 
Aterrado por tan extraño proceder,
el amado arrojó la ambicionada joya
a las aguas de un lago que adornaba
la casa de recreo del inusual pretendiente.
 
Hundido en profundos pensamientos,
el desolado industrial
fue a sentarse a la orilla del lago,
melancólico y dispuesto a enamorarse
de aquellas aguas tranquilas,
dadoras de paz y recogimiento,
olvidando del todo y para siempre
a su querido allegado
y las horas vividas con su bella secretaria.