Mi Primer Historia de Amor
Publicado en Dec 01, 2010
Prev
Next
No puedo creer como paso todo tan rápido. Hace unas semanas yo estaba muy bien. Yo era dueño de todo Madrid. Toda la ciudad era mi territorio. Desde que yo tengo razón siempre ha habido  una barrera entre los chicos y las chicas. Dicen que cuando una chica te toca algo muy malo puede pasar. Pues yo logre pasar sobre esa barrera. Mi padre me había estado entrenando desde que tenía seis años de edad para poder ser el mejor portero y poder entrar al real Madrid algún día y ser el portero titular. Un día, mientras esto ocurría al atajar un disparo choque con algo, o mejor dicho con alguien. Mi padre corrió y me ayudo a levantar y yo ayude a ese alguien a hacer lo mismo. Ese alguien era una chica que había conocido hace mucho en el jardín de niños. Se llamaba Karla. Íbamos juntos a la escuela desde entonces, aunque no entiendo porque. Sus padres eran de posición económica alta. Después de disculparnos ella siguió su camino. En la escuela nos comenzamos a ser amigos. Me dijo que le gustaba mucho la música y que estaba en clases música en una institución comunitaria. Un día al entrenar me la volví a encontrar. Mi padre se fue temprano al trabajo y me dejo en el parque un rato más. Karla iba con su hermanito y su nana que la cuidaba. Platicamos un rato. Ella me decía que las chicas maduran más que los chicos. Aunque yo difería de esto lo acepte para complacerla. Después le dije que los chicos son mas agiles que las chicas. La rete a una carrera de velocidad en el parque y le dije que si tomaríamos un helado y que yo pagaba si ella me ganaba. Sorpresivamente me gano y tuve que pagar.
            Les propuse a mis padres que me metieran a estudiar música en esa escuela donde ella estaba. Accedieron aunque no de muy buen modo. Ella tocaba el bajo y yo decidí tocar la guitarra. Nos tocaba tocar juntos puesto que era muy parecido los instrumentos. Ese día al verla tocar me di cuenta que tan lindos ojos tenia y que tenía la cara como la de un ángel. Mi cara estaba como la de un bebe al ver chocolates. Ahora después de ver lo fantástica que es la música comenzó a interesarme y escuchar un poco de música. Después de unos días de hacer esto ya tenía un ídolo, alguien a quien imitar en la música. Quería ser como Paul McCartney, uno de los guitarristas de los Beatles. La clase siguiente ocurrió algo inesperado, ella dejo de practicar conmigo la música puesto que llego otro chico de nombre Arturo que también tocaba el bajo. Al final de la clase me acerque a ella para despedirme y me dijo que me hablaría después que ya tenía que irse. Esa noche estaba ansioso, cada vez que sonaba el teléfono volteaba. A las siete en punto sonó el teléfono y mi mama contesto y me paso el teléfono. No lo podía creer llamo como me lo había prometido.
            Ahí le hice la invitación para que fuera a mi casa. Practicaríamos música juntos como antes.  Mis padres habían ido de compras cuando ella llego. Era tiempo para ella, yo, y la música. Pasamos un rato muy bueno. Aprendí a tocar diferentes canciones pero mi favorita era Ocho Días a la Semana de los Beatles. Ella también aprendió algunas canciones. Puede ser que me podría estar enamorando de ella, aunque no se si era cierto o no. Tenía once y ella doce. Esa noche me invito a un concierto de música clásica. Dijo que aprenderíamos mucho viendo esta presentación.
            Ese día me desperté más temprano que de costumbre, y me duche como nunca. Casi quería rechinar de limpio ese día. Me peine y me puse mi mejor ropa. Cuando era tiempo para el concierto sus padres pasaron por mí. Ella estaba hermosa con su vestido verde que tenia puesto. Mientras estaba la música inconscientemente mi mano se acerco a la de Karla y antes de que pudiera saber lo que ocurría ya nos estábamos agarrando de la mano. ¡Oh! ¿Qué tal si se molesta, o piensa mal de mí? Me preguntaba si sus padres se dieron cuenta. Al terminar ese día tan fabuloso sus padres fueron a comprar leche mientras nos despedíamos. Me decía algo sobre una boda de su prima aunque yo ni le ponía atención puesto que veía su bella cara. Antes de que ella dijera algo más si querer me acerque a ella y la bese. ¿Qué pasa? ¿Me pondrá un bofetada? ¿Le habrá gustado? Nos despedimos y me fui a casa. Esa noche no podía sacarme ese momento de la cabeza. Después de dos días de que ocurrió eso, decidí que ya era tiempo. Le llame y hable con ella para invitarla a comer ese fin de semana y me dijo que no podía. No era cierto, ya era tiempo de decirle lo que tenía que decirle. Le pedí explicación acerca de x que no podía y me dijo un certamen de tonterías de vestidos para bodas y cosas así. Me enoje tanto que le dije cosas de las que después de eso me arrepentiría.
Después de esa llamada rompí en lágrimas. El día siguiente cuando fui a practicar con mi padre algo paso que no podía atajar ni el aire. Le dije lo que ocurría y me dijo que debía sacar lo que tenia adentro, que debía estar en paz conmigo mismo. Después el se fue al trabajo y ocurrieron cosas extrañas. En todos lados veía su nombre, la veía a ella, etc. Sabia lo tenía que hacer. Fui a encontrarla y después le dije que me perdonara que la amaba. Ella me dijo que si me perdonaba pero que ella no estaba lista para eso. Además me comento que cuando entrara a la secundaria iría a una escuela privada, lo que significaría que no la vería más. Ahora que paso todo esto ya todo volvió a la normalidad. Sé que habrá más chicas y me enamorare más veces pero nunca habrá otra primera vez.
Página 1 / 1
Foto del autor Aldo
Textos Publicados: 12
Miembro desde: Nov 26, 2009
0 Comentarios 413 Lecturas Favorito 0 veces
Descripción

Palabras Clave: Amor

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Personales



Comentarios (0)add comment
menos espacio | mas espacio

Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.

busy