TRES MITOS
 
1
De acuerdo con creencias antioqueñas,
somos seres incorpóreos que nos gusta
revelar los secretos más oscuros
al oído de personas inocentes.
 
En noches de Luna salimos a decir
las cosas que se quieren escuchar,
porque somos así las Ilusiones:
Indiferentes a mentiras y a verdades
que se puedan jurar o discutir.
  
2
Soy Bola de Fuego, y por las noches,
en campos de Colombia y Venezuela,
ruedo como un farol grandísimo
alumbrando mi propio recorrido,
desde la punta de los altos picos
hasta el inicio del extenso Llano.
 
Suelo acercarme a las personas solas,
que maldicen si quieren retirarme,
o rezan si desean verme próxima.
 
Nada más para decir en esta historia,
y si hay interesados, que reblujen
en el viejo fardel de su memoria.
  
3
Los que me oyen a la media noche
o en altas horas de la madrugada,
murmurando como una multitud
por recodos y calles pueblerinas,
saben que me llamo Ánima Sola,
que sufriré Purgatorio sin descanso
hasta el último instante de la vida
cuando llegue el anunciado Juicio.
 
Dos días del año, cuando canta el gallo,
recibo siempre congratulaciones
porque muestro guacas y demás tesoros
como prueba de bondad y buena suerte
para los vivos que jamás me olvidan.
 
También cuido campos y poblados,
procurando tenerlos protegidos
contra las plagas y la escabechina.