¿Donde estas Giannina?
Plaza de la Bandera, Pueblo Libre, Lima
dic. 77

cada madrugada cuando levanto la mirada hacia el techo
revivo el cadaver de esa mosca fortuita
aplastada entre polillas acaros rayos de luces mortecinas debiles telarañas restos de semen adolescente
alli esta
aplastada igual a la noticia del periodico enrollado que puso fin a su vuelo inconsulto

destripada desintegrada aplanada por el astuto polvo y el tiempo criminal

ya no es posible como antes clavar los ojos en el cenit para ver solo los años idos
para contar los pelos escapados desde la corteza prefrontal
para dibujar proyectos celestes como cuando la sangre era todavia un espejismo histerico
no una realidad lacerante

alli arriba siempre arriba esta la muerte insecta mirandome
mirandola yo

aun me lanza una horrible sonrisa desdentada
aquel cadaver de mosca
me recuerda que no tengo tanto que celebrar
que igual que ella sigo pegado al estiercol del dia gris en esta ciudad sin furia

destripado desintegrado aplanado por el astuto polvo y el tiempo criminal

bello epitelio desgajado es la vision de la mosca-cadaver
como el cid campeador muerto sobre su caballo incierto
su historia aun se rie de mi vida trasquilada
de mis dias perdidos entre ondas electromagneticas libros descosidos llamadas congeladas cenas adulteras charlas esteriles

como podria haberlo sabido tres decadas atras pequeña giannina
como adivinarlo cuando lamia tu entrepierna jugosa despues del colegio
como preverlo cuando nos untabamos el lonche entre los labios frente a tu madre feliz complice miserable
o como cuando la hierba de los parques doblaba el espinazo ante tu paso despreocupado impio conchudo fresco inevitable

como podria haberlo sabido amada giannina
mientras conspirabamos para decapitar el statu quo tasajear la sotana del parroco
hacer una pira eterna con los intragables libros baldor
lanzar a los gatos desde el quinto piso para que caigan siempre parados (aunque fuera muertos)
planes para escaparnos a una choza serrana lejos de la tv del smog de los horarios de los uniformes de la autoridad
y correr correr sin parar sin escrupulos sin saber adonde ni hasta cuando

pero era mucho rosado para un fondo tan sepia
tenia que aparecer en escena tu primo fronterizo
debia ocurrirsele amenazas suicidas si lo marginabas
te seducia su declaracion de amor enfermo
habia que robarme la sonrisa para que venza la terapia

y el miedo te enterro los colmillos en la joven yugular
viste fantasmas azules en la pared del futuro
entonces nos escondiste a los dos para siempre tu piel caramelo
detras de un arbol flebitico sin manzanas ni ramas
un tronco oscuro lleno de elegantes serpientes venenosas que mordisqueaban tu corazon infartado

como se me podia ocurrir que era posible arrancar mis huesos del fondo del viejo pozo
como abrigar una timida esperanza en medio de esas carceles mugrientas que eran las anchas calles las plazas hambrientas los frios mezanines las iglesias abandonadas

debia permanecer pegado a la inmundicia al dolor al vacio
mientras fugaban los pajaros rebeldes desde el ultimo rincon de mi vientre inflamado

(‘sometimes you have to let the pussy go, kid', asi me decia el viejo mientras jugaba cricket entre la niebla de londres)

debia dejarte ir
debiste dejarte ir
debiste dejarme ir
nos dejamos ambos
nos dejamos todos
para llenar el espacio en las agendas de otros alienigenas
para esculpir fotografias de extraños
para dibujar patrones geometricos de parejas incompatibles

sin embargo
besos nerviosos
escorzos asesinos
lamidas fugaces
coitos interruptos tendran siempre espacios alfombrados en mi album de costras latentes
en mis recuerdos evasivos heridos agridulces
y alli han de respirar para regodearse a solas
hasta que la muerte se robe mi cuerpo cansado plastificado por años de miradas anonimas

seran como aquellas camisetas con el latinazgo que nos martillaba el cerebro -¿recuerdas?-
‘res firma mitescere nescit' (‘las cosas sólidas no se ablandan')

lo unico que sabre ablandar sera mi pecho debilmente rencoroso para darle cobijo al inolvidable aroma de tu pelo castaño a tu sudor vespertino a tus lagrimas brillosas
mi boca ansiosa guardara torturada tu saliva limon

y mientras tu luchas por olvidarme en la ruta de los pensamientos homicidas
le sacare ventaja al cadaver de la mosca
y me dormire igual
destripado desintegrado aplanado por el astuto polvo y el tiempo criminal
para siempre pegado en ese techo
bajo el peso de tu vida fecunda sobre mis dias marchitos