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NARANJA
Publicado en Sep 09, 2010
 Cerró su libro, apoyando sobre él sus dos manos. Cerró por un instante profundo los ojos, Con temor de ver la realidad al hacerlo. Temblaron sus párpados y sus pestañas… Buscaba el fin de sus fantasías… Sin comprender el motivo de su temor, Llegó a sorprenderse a oscuras… Notó que al cerrar los ojos se veía la paz… A modo de ritual o costumbre de Caballero, Suspiro, renovó el agua de sus rosas rojas, Y antes de partir de sus sueños, esos que aun contenía, Enfundó su espada antes de montar su corcel. Dejó al viento de la velocidad delinear sus desahogos, Arrojando a un costado del camino El casco que siempre había cubierto su cara… Se alejó de todo… Incluyendo a las distancias… Se despojo del escudo con gran necesidad, Arrojándolo por los acantilados de la nostalgia… Clavó su lanza con gran énfasis, En las rocas que formaban la orilla del río de la gloria… Su pechera la dejó flotar hasta verla hundir a lo lejos, Parado en la playa del mar abandonado… Y cabalgó bajo la lluvia, Bebiendo de sus gotas frescas, disimulando sus lágrimas… Y en una cima escarpada… Desnudo encontró un atardecer nuevo… Del color inocente que creía olvidado… Naranja.
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Descripción
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Eduardo Fabio Asis
MARIANO DOROLA
Soy mucho mas común de lo que tú crees...
y mucho peor inclusive.
Gracias por la buena onda de siempre-
abrazo grande AMIGAZO
Enrique Dintrans Alarcn
Un proceso interior, el hablante describe con precisión esta decisión irrevocable del Caballero. Arrojar los signos de la fuerza del combate. Arrojar esa espada, la coraza y avanzar bajo la lluvia asumiendo una radical vulnerabilidad ... incluso llorando.
Interesante el acto de clavar la lanza en la roca ribereña de las aguas de la Gloria. El "arma" destructora del "enemigo", el arma que hiere en el corazón y que conduce a la victoria... se clava en una roca. No sé si esa roca quiere significar un corazón endurecido o tal vez la adversidad violenta e irracional en la humana existencia. En todo caso, una resistencia descomunal, asombrosa en la que el "arma" principal queda clavada, como si fuera una ofrenda en que se va la vida.
Impresiona el camino ascencional hacia la escarpada cima en un atardecer renovado. El Caballero llega allí sin sus fuerzas, pero llega. ¿Una huída? O un combate diferente, en que el color ya no es el rojo de la sangre, o el negro de la ira? ¿Por qué ha escogido el naranja?
Es difícil y riesgoso aventurar una explicación. Mi impresión es que el naranja evoca una luz especial del sol al concluir el día. Al ver un atardecer el cielo se viste de colores y el sol ofrece esta luz. Por otra parte, la "naranja" es fruta dulce y ácida y por cierto da un sabor muy vital, de exhuberancia. Este color de "nuevo" atardecer implica una renovación, los códigos cromáticos del antiguo Caballero ya no son válidos. Es preciso la renovación y asumir que los días antiguos ya terminaron. Entonces a repasar todas sus experiencias y a interpretarlas bajo una nueva luz. La luz "naranja".
Saludos
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MARIANO DOROLA
Gracias por tu GRACIA.
Por darme tu mano en el momento exacto.
bajo un nuevo cielo NARANJA.
Los cielos se renuevan bajo este mismo color, tanto en los atardeceres como en los amaneceres...
Es posible que nosotros renovemos nuestros espíritus del mismo modo...
Bajo el color Naranja, el mismo que renueva las noches y los días.
La señal es Naranja. Exacto.
Es posible renovarse de las oscuridades de nuestras "noches espirituales" bajo un cielo que amanezca NARANJA y de ese modo vivir un nuevo día...
Del mismo modo que es necesario descansar a fin de renovar fuerzas, luego de nuestros "días espirituales" progresivamente y mediante un atardecer NARANJA a fines de reposar en la noche que antecede a cada nuevo día...
Te abrazo con toda mi alma.
W ART IN
No me sorprende amigo, porque tienes el don de
tocar el alma y sin vanagloriarte de ser poeta...
Saludos JM.
MARIANO DOROLA
PIEDAD DE ESTE MORTAL VIEJITOOOOO
UN ABRAZO ENTRE NUDITOS EN LA GARGANTA.
Rita
MARIANO DOROLA
MUCHÍSIMO...
AMIGA FIEL.
PARA SIEMPRE
fairy
mirándolo de lo alto....casi pudiendo tocarlo
cálido, delicado, suave.
MARIANO DOROLA
MUCHAS EN VERDAD....
DE ALMA