Ladrón
 
Cuatro caballos vienen corriendo,
Tres balas rompiendo el silencio,
Tres caballos vienen corriendo,
La muerte atrapó a uno ellos.
Adiós, adiós hermano querido…
 
Van cuatro hombres armados montando sus caballos,
Dos de ellos llevan pistolas, los otros sus manos,
Tres de ellos son padres, todos ellos tienen hambre,
La nieve sigue sus huellas, la policía sus pasos,
La luna mira del cielo, las rocas desde lo alto.
 
Los árboles van cobijando a los ladrones de caballos,
Entre los riscos ven hombres con sus armas apuntando,
Mas es la luna traviesa que los tiene preocupados,
Se escucha silbar el viento entre los cerros azulados,
El corazón late y late como potro desbocado.
 
El sol allá en los caminos va sus huellas delatando,
Con la llegada del día entre árboles se han refugiado,
Los caballos cual sus amigos en silencio han aguardado
Pues ya se viene la noche ellos deben seguir andando
La traicionera a los cuatro ha delatado.
 
Allí van los ladrones, dice la policía en silencio,
Escondidos entre las rocas salen a su encuentro,
No hubo palabras de ¡ALTO! Sólo disparos,
Un hombre que está sangrando tendido en los guijarros,
La luz que ilumina el rostro, es el menor de los hermanos.
 
Escondidos entre las rocas los otros están mirando,
La luz le quemó la frente y la vida arrebatado,
Las lágrimas van surcando por sus rostros callados,
Entre los otros hay risas mientras toman mate amargo,
Con su mirada perdida en el cielo sus ojos se han fijado.
 
Con la luna traicionera bajo piedras lo van dejando,
A su caballo compañero las orejas le han cortado,
Las llevaran al patrón para decirle que han ganado,
Allá en la cordillera una cruz hecha de natre amargo,
Entre las rocas escrito por “robar caballos”..