En el algún momento del pasado, manchaste nuestra historia con gotas de alcohol..
Fuiste capaz de tocar otros labios que no eran los míos, lastimando a mi alma y tirando a mi corazón por la borda... Luego, mientras recogías pedacito por pedacito, jurabas a mi rostro bañado en lágrimas que jamás ocurría una cosa así....
Dios mío que me costó!!!!
Pero ya no podía separarme de ti... ya era tarde, pues estaba enamorada de ti desde lo más profundo de mi ser...
Acepté seguir siendo tu mujer, acepté seguir besando esos labios traicioneros...
Pero no puedes despertarme de esta manera... diciendo que por segunda vez, habías traicionado a mi confianza... de la peor manera... ¿porqué ella?, ¿Porqué de esa forma?
Es mi amiga... o por lo menos lo era... ya no quiero mirarla a la cara...
Ya la pena, ha desaparecido.. solo la rabia y el orgullo llenan mi corazón....
Y como era de suponerse, te perdono una vez más... pero yo que tú no me confiaría... pues yo perdono.. pero jamás olvido...
Y esta mancha de mi corazón no se borrará con nada....