ÓNFALO
 
Júpiter/
de puro aburrido un día/
tomó un grano de arena que talló con su uña meñique derecha/
despreocupado y desganado la dejó caer de su mano y pasó a otra cosa/
sin notar/
que acababa de crear un nuevo culto sacrosanto/
para los hombres que habitaban a miles de kilómetros cielo abajo./
En la tierra/
Pausanias/
uno de los notables habitantes bajo las nubes que pisan los dioses/
Al que casi le cae el pseudo meteorito en la cabeza/
comparable en belleza sólo a la costra seca de su propio ombligo/
Tomó la divina roca cafesosa de arenisca sedimentaria caída desde el alto cielo/
Que en principio  y desde lejos le pareció un abejar/
-Tan doméstico, rústico y coloquial es el regalo de los dioses-/
pensó Pausanias/
pero calló./
No quiso crear otra diatriba ni controversia entre los otros notables bajo las nubes contra los dioses/
Y se guardó su opinión sobre aquel semi huevo con unos extraños dibujos sin talento/
Y la dejó sentada sobre una elevación geológica digna para un hito sagrado de tal envergadura/
como lo era Delfos/
Señalando el culto vivo como el oráculo/
en la justa mitad medida del centro de su orbe/
de su universo
de su cosmos/
de su infinito.//
15.05.2023