PRIMAVERA
 
En la mañana de septiembre, soleada
al despertarme noté algo
distinto en el ambiente.
Un ruido alegre, musical
mi alma golpea, pidiéndome entrar.
Dejé interrumpido el sino
del hacha, golpeando la leña
y presté atención al paisaje.
 
Mis ojos descubrieron
la nevada florida de pétalos blancos
adornando los citrus.
El duraznero asoma capullos rosados
que se funden con el rosa
de la alegre alborada.
 
Vi que mil plantas, vibran
en hojas nuevas, verdes por doquier
lujuriosa en la flora
explota la vida.
Vibrantes los pétalos
forman las flores
de tenue existencia
que darán camino al fruto.
 
Las flores:
frágiles y bellas
dúctiles y fragantes,
alegrarán por un momento
la breve vida del hombre.
 
Invaden el aire
armoniosos y dulces trinos
de pájaros.
Bulliciosos edifican sus nidos
alimentan a sus pichones
¡Hermoso canto a la vida!
Y comprendo por qué
esta mañana es distinta
y me siento feliz
 
¡Cómo no, si la primavera ha llegado!
Y como ella es: flor, pájaro
alegría y adolescencia
alegrará por un instante
la breve, triste, vida del hombre.
 
Leandro N. Alem  1982