KALEIDOSCOPIO CERO
Publicado en Sep 29, 2009
Prev
Next

PRESENTACIÓN
KALEIDOSCOPIO CERO
NOVELA
POR JORGE ALEJANDRO SUAREZ GARCIA
©KALEIDOSCOPIO CERO
©JORGE ALEJANDRO SUAREZ GARCIA
© PROHIBIDO SU USO, REPRODUCCION TOTAL O PARCIAL POR CUALQUIER MEDIO.










©TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
©COPYRIGHT-2009
MEXICO DR.


































INDICE


1.-CAPITULO UNO

2.-CAPITULO DOS

3.-CAPITULO TRES

4.-CAPITULO CUATRO

5.-CAPITULO CINCO

6.-CAPITULO SEIS

7.-CAPITULO SIETE-ZONA VERDE-

8.-CAPITUO OCHO-ZONA VERDE DOS-

9.-CAPITULO NIUEVE-ESTUVE EN BRASILIA-

10.-CAPITULO DIEZ-RED HOUSE-

11.-CAPITULO ONCE-RED HOUSE DOS-

12.-CAPITULO DOCE

13.-CAPITULO TRECE

14.-CAPITULO CATORCE-RED HOUSE TRES-

15.-CAPITULO QUINCE-RED HOUSE CUATRO-

16.-CAPITULO DIEZ Y SEIS

17.-CAPITULO DIEZ Y SIETE

18.-CAPITULO DIEZ Y OCHO

19.-CAPITULO DIEZ Y NUEVE-SEÑAL SUPER NOVA-

20.-CAPITULO VEINTE-EL MISTERIO DE LAS VEGAS-

21.-CAPITULO VEINTIUNO-EL ESCOPION DORADO-

22.-CAPITULO VEINTIDOS-EL TEMPLO DE LA ESTRELLA DEL SUR-

23.-CAPITULO VEINTITRES-LA ALIANZA INTER ESTELAR-

24.- CAPITULO VEINTICUATRO-LA LUNA DE SEVILLA-

25.-CAPITULO VEINTICINCO-CONTRA ANUBIS-

26.- CAPITULO VEINTISEIS-LA CASA DEL LAGO-






































































“Es fascinante el ver como en estos días se puede manipular casi todo, como los villanos se encumbran como benefactores del orden común…para luego ser manifestados como héroes y dioses verídicos…sin macula, sin pasado, ni presente y mas aun, lejanos de conciencia…

JORGE ALEJANDRO SUAREZ GARCIA









 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
INTRODUCCIÓN

Kaleidoscopio cero
El joven profesor de filosofía de la nueva universidad de Montreal, habituado a los conocimientos novedosos, ha tenido una vida sosegada; wals wels, hijo de Judith, una mujer millonaria, poseedora de una las fortunas mas reconocidas, y de steve, un hombre poseedor de una línea de empresas dedicadas a la investigación, desarrollo y aplicación científica, había acordado con èl desheredar a su hijo cuando este se cambio el nombre de Niedere wals wels al de ALBERT VON GRAZ. Pero en un alarde de conciencia, recapacitan y le devuelven a Niedere lo que le corresponde, casi antes de que su vida tome un vuelco y se torne en un mare mágnum de acontecimientos sin fin.
La ciencia al bien común, hace escalar alturas desconocidas, en donde el hombre común, alcanza lo que se propone, haciendo de las colectividades, no un cúmulo de masas sin pensamientos propios, sino teniendo un plan común, Niedere se encargara de desarrollarlo hasta sus últimas consecuencias.
Donde la política, la religión, el deporte y el libre pensamiento, son tareas comunes de una sociedad en constante movimiento. Que sin los dogmas de la comercialización, se antepone, el bien humano al máximo por encima incluso, de los iniciados...
Kaleidoscopio es así mismo una manera de ver el arte: drama, acción, aventura, suspenso, comedia, ficción y ciencia; encuadran la obra, no en un género puro, sino el amplio sentido de literatura, como creación actual y en el idioma original que es el castellano-español de México-.
A los personajes desde un inicio se les ha designado un apellido, de manera que lo identifique como individuo ficticio único e irrepetiblemente original, sin tener paralelos con otras obras del pasado, presente o futuro. Estos apellidos fueron tomados-algunos- desde los orígenes geográficos de los personajes, de ahí es que radica su originalidad, en cuanto al nombre del personaje principal se indica aquí que el original es BVLGARI, Y Niedere WALD WELS, que a su vez son uno mismo, así como el de albert von graz. Los demás que han conocido en rincón de poesías no aparecerán en esta obra por ser nombres ajenos a esta creación literaria y que fueron usados para dar a conocer este trabajo como "nombres emergentes" pero que a la vez fueron creados originalmente, ya que tienen apellido distinto a los comunes, así que aparecerán algunas veces solo los apellidos, algunos ya conocidos por los fans; aquí en este libro solo aparecerán los nombres con apellidos que fueron creados desde el principio en que surgieron las ideas para hacer esta obra en su contexto original.
Así que el contenido de esta obra es ciento por ciento original…

Nota:

El nombre de BVLGARI es una traducción de la palabra “vulgar” en su significado latino, así como el de BÚLGARO en su contexto latino que es de donde retome el nombre BVLGARI para darle contexto a el personaje principal.

Esta obra es un thriller.

Jorge Alejandro Suárez garcía
























































CIENCIA FICCION


“LAS VERTIENTES OPUESTAS A LO EXTRAORDINARIO SIEMPRE VERAN EN TODO, UN CAMINO DE OBTACULOS, PERO EL HOMBRE COMUN NOTARA SEGURAMENTE, QUE LOS CAMINOS EXISTEN DESDE SIEMPRE, SOLO QUE LAS ENTRADAS NO TIENEN CLAVE DE ACCESO…ABRA ENTONCES QUE DESCUBRIR EN LA MEDIANIA, LO QUE SE ES CAPAZ DE LLEVAR A CABO, A PESAR DE TODO, INCLUSO DE UNO MISMO…
YO TOMARE LOS TIEMPOS Y LOS REVOLVERE EN UNA LICUADORA, Y CON ELLO HARE UNA NAVE QUE ME LLEVE A LO QUE SABEMOS PERO QUE HOY NO CONOCEMOS, PERO TAL VEZ ME EQUIVOQUE Y LO QUE HOY SE SEPA MAÑANA, SEA MENTIRA…
CON TODO ESTO, MIRARE SIEMPRE AL INFINITO EN BUSCA DE ESA LLENA DE ESTRELLAS TACITURNAS, Y TAL VEZ ALGUNA VEZ AL ALCANCE Y EL SUEÑO SEA ENTONCES REALIDAD…”

JORGE ALEJANDRO SUAREZ GARCIA






























CAPITULO UNO

La tarde era espléndida, cada individuo gustaba de un tono gélido, dándose prisa para allegarse al interior de la universidad de Montreal, recurriendo a la tarea de encontrar el camino de las aulas; los arboles lucían quemados por la intensidad del frío, las recientes nevadas así lo atestiguaban. Los pasillos circunvecinos casi no se distinguían, no obstante, de estilo clásico, la limousine se acercó al borde de la entrada, abrió la puerta y dejo entrever su espaciado interior con todo el lujo posible.
Era lunes veintisiete de febrero del año 2020, nueve con treinta minutos y cero segundos de la mañana, cuando por doquier silbaban las sirenas, a veces de ambulancias y otras, de las palas mecánicas buscando recrear las avenidas repletas de nieve.
El cielo parecía un sólo ser con la tierra firme, en el horizonte se veía apenas el rumor de un viejo barco que rasgaba con su motor de combustible, todo parecía efímero, carente de sentido, incluso por eso las gruesas vestimentas casi no se olvidaban en los clóset y cuando ello pudiera haber ocurrido, acaso un esbozo de un resfriado solía aparecer de pronto, por eso, los abrigos llegaban a las rodillas o mas allá.
Petra paseaba cuando se tropezó causalmente con Niedere, reciente catedrático y premio Nóbel de física, que tenia un viper negro blindado con un sistema de comunicación parlante.
Ambos se vieron, petra tenia sus lentes algo opacados y queriendo recoger los libros que se le habían caído, Niedere se comedio y sin esperar menciono.
-¡buenos días!, la prisa no es buena consejera…
-y que decirlo, ya tengo diez minutos de retrazo, tenemos que hablar tu yo, ¿estas libre hoy al medio día?
-¿almorzaremos?
-sí…
-¿Dónde?
-en la cafetería, no hay tiempo para algo mas…
Los libros eran diversos, cautivadores en cierto sentido, todos eran parte de la enseñanza de petra, quien fungía como directora de la cátedra de sociología, petra era un mujer agraciada, rubia, de ojos azules y cuerpo atlético, eventual competidora de los cien metros planos y medalla de oro participando por Rusia.
Petra había nacido en la ciudad de Moscú, el año de 1969, a las once del día.15, según los médicos que la trajeron a la vida, había llorado tanto que en su primera noche, había caído en profundo descanso.
Su padre había sido un empleado de la compañía petrolífera del estado, y durante muchos años se había encargado de hacer en su familia, un agradable ambiente de cordialidad.
Petra había sido una niña mimada, tenia una arracada de oro en el ombligo, recientemente instalada ahí, luego de haber logrado el primer lugar en el certamen de memorama internacional.
-¿me plantearas el asunto frente a tanta gente?
Petra lo pensó un poco, aquello era común en ella, pero esta vez, ella no había reparado en lo importante del asunto y por eso asumió que debían gozar de la tranquilidad necesaria.
Petra se volvió en torno a su alrededor, ya con los libros en sus brazos, se acerco a Niedere y le dijo.
-caminemos entonces…
Niedere tenía corbata de moño, vestía de un abrigo negro en lana y usaba anteojos para ver, portafolios en mano y una gorra negra que cubría su cabeza, además de pantalones rectos, comenzó a caminar amortiguando el paso con sus clásicas botas de piel de morsa, ajustables a sus pies.
Los ojos azules de Niedere se fijaron en los de petra, quien le menciono mostrando ligeramente una sonrisilla.
-se que no eres comunista…
-tu tampoco…
-por eso mismo me voy a atrever a decirte esto…yo necesito a un hombre, que me acompañe, que me ayude…es decir, un compañero…y me parece que ese hombre eres tu Niedere…
Niedere se detuvo en el acto, con la mirada fría, menciono con la seriedad requerida tomando del brazo a petra.
-no sabes lo que dices…
Pero petra seguramente ya lo tenía decidido y sin más volvió sobre lo mismo con la misma convicción.
-quiero que vivamos juntos…quiero tener un hijo contigo, no te pido que te hagas cargo de todos los gastos…tu sabes, mi padre es rico, te dará una dote sustanciosa si te casas conmigo…ya me ha dicho que nos dará una casa en Alemania, es una mansión que mando construir para cuando me casara…además te dará un serial de bonos del petróleo ruso al portador, valen como mil millones de euros… ¿no es mi padre un gran hombre, que mas podría pedirle?
Niedere tomo aire, le sostuvo el brazo a petra, se la quedo mirando un instante y luego súbitamente se volvió a su entorno y viendo como ya comenzaba a nevar otra vez, dejo en el suelo el portafolio y se enderezo las solapas de su abrigo.
-¡mil millones…!
-¿no es fabuloso?
Niedere comenzó a caminar instintivamente luego de tomar el portafolio otra vez, no articulaba palabra, petra caminaba junto a él acomodándose los anteojos y viendo que no se le volvieran a caer los libros, con cierta prisa quería escuchar lo que Niedere seguramente tendría que decir.
-tu no quieres un hombre, ni un esposo, tu quieres comprarme...y sucede que no estoy en venta…
De pronto petra se detuvo con violencia, tanto que sus enormes ojos azules le jugaron una broma, los anteojos se le empañaron y queriéndoselos acomodar, abrió los brazos y los libros cayeron otra vez al suelo, Niedere se detuvo en seco, de pronto parecía que el clima había subido su temperatura, ya ni el frío sentían, se habían sonrojado sus mejillas, ambos titubearon, pero ella menciono con mucha impaciencia.
-¡no! Es solo que mi padre es así… ¡no puedes culparlo porque quiera lo mejor para su hija…!
Niedere se enfrió más que el mismo hielo y casi sin pensarlo articuló una par de frases con la exactitud de una operación matemática.
-¿tu sabes lo que en realidad quieres petra?
-a ti Niedere…
Pero cuando parecía que no era lo último ni lo más grave, Niedere saco de su chistera una argucia de lo más elemental.
-¿y como sabes que no te puedo dar eso que tu padre te da…?
-¿Cómo?
-sencillo, ni siquiera me conoces…
Niedere comenzó a caminar pero petra se había quedado momentáneamente en shock, pero en cuanto se dio cuenta avanzo con prisa hacia donde él y le dijo detrás de su hombro.
-¿porque haces esto, no te das cuenta?
Entonces Niedere se detuvo y volviéndose de pronto se vio de frente a petra.
-si, pero no creo que entiendas, ni siquiera conoces mi numero de teléfono…
Niedere se quedo ahí, expectante, petra lo comenzaba a mirar con horror, ni siquiera hubiera ideado aquellas respuestas de Niedere, un hombre a quien ella solamente le había colocado la etiqueta de “oportunidad”, aparentemente ella se creía muy por encima de èl y por eso le clavó la mirada, intrigada mas allá de lo que le proponía.
-…sí…tienes razón Niedere, nunca me lo pregunte, eres un profesor con un bajo salario, ¿Cómo podrías mantenerme a mi?, te estoy brindando la oportunidad de tu vida y tu como si nada, cualquier hombre estaría feliz con mi proposición…a menos, claro esta que…
Pero Niedere no dijo nada, únicamente observo como una alumna se les acerco y menciono trayendo consigo los libros que petra había tirado atrás.
-señorita udinov, sus libros…
-si, gracias.- aguardaron a que la alumna se alejara lo suficiente, viéndose mutuamente, ya no avanzaron dado que ya se encontraban en los corredores principales de la universidad y enseguida cada uno iría a sus actividades, pero esto ultimo parecía no importarles en lo absoluto a ambos, ya que la campana de la primera clase había sonado y ellos aun trataban su asunto.
La nueva universidad de Montreal era basta, sus instalaciones contaban con lo más novedoso del quehacer educativo, contaba incluso con un estadio rondándolo una pista de atletismo de hechura artificial, ahí precisamente era donde petra entrenaba al unísono de Niedere, quien era participe de el equipo de decatlón profesional, quien ya había sido campeón mundial en cinco ocasiones. Representando a Austria en todas las ocasiones, que era a su vez su país de origen, nacido en la ciudad de Viena en el año de 1969 a las ocho horas del día. Fue un hijo deseado, esperado por sus padres quienes habían tenido intentos por procrear un hijo sin suerte, hasta que Niedere llego. Como era hijo único, todos los cuidados que se podrían tener, él los tuvo, educado en las mejores escuelas del orbe, de padres ricos, es decir, multimillonarios desde hacia cuatro generaciones, su madre, Judith wels y su padre steve wald, ese mismo día del nacimiento de Niedere obtuvo nombre: NIEDERE WALD WELS.
Petra temblaba, pero no de frío, tenia las mejillas rojas y los ojos hundidos en cólera, el azul se entre mezclaba con la nieve, apretó los labios y violentó la mirada.
-podría casarme con cualquier hombre en este instante…
-seria tu decisión, tal vez lo consigas, tal vez no, pero entiende una cosa, no soy juguete de nadie, si el dinero es una carga para tu felicidad, deberías de prescindir de él o al menos no ponerlo en primer orden…
-seria fácil sino lo hubiera tenido siempre…
Niedere mostró una mueca que parecía una sonrisa, y sin dudarlo mas levanto la vista y la dirigió hacia donde el camino de su aula, ya que en esos instantes debería de dar la clase de física…
-mi padre ya hablo con tu padre, ambos están de acuerdo en nuestro matrimonio, te guste o no, serás mi esposo…
Niedere entonces mostró aun más su sonrisa en tono de diversión, como si fuese aquella idea la que rondara su mente que en ese instante la sacara a relucir.
-… ¿así?, pues que te puedo decir, tendré que sacrificarme y pasar por alto mis principios, la palabra de mi padre es la mía, así que tendrás lo que quieres…pero aun tengo que comprobar si tengo el talento necesario...
-en esos términos… Si tienes el talento...
-en esos o en otros, ya no importa…
-pues no te sacrifiques tanto, la vida no es una partida de ajedrez, es dura y duele…
-no me darás un sermón de filosofía o ¿si?
Aquello era una demostración de lo que podía llegar a ser un matrimonio desencausado, sin tino, pero con la encomienda de participar de lo que se le denomina “acuerdo por interés común”, pero poco le importaba a petra el significado de aquello, ella estaba dispuesta a pelear con tal de tener lo que según ella le había sido ya dado, por lo visto, desde niños ambos habían sido dados en matrimonio por sus padres, así que solo deberían esperar hasta la mayoría de edad para casarse, ya era solo cuestión de meros tramites.
Ambos notaron como el director de la universidad se acercaba con un aire de autoridad, viéndolos a ambos en medio del patio principal y que no estaban en sus labores, era una señora de unos setenta años, cuidadosamente vestida, tenia cuarenta años al servicio de la educación, era francesa, hablaba cinco idiomas y tenia cuatro títulos.
-¿profesores? ¿Por qué no están en clase?
-se nos hizo un poco…
-si ya lo vi., miren, ambos son muy jóvenes para esto, pero les voy a sugerir algo, dejen sus asuntos personales para después del trabajo, de otra manera tendran que dar muchas explicaciones y nadie quiere eso ¿verdad?
-no, claro...
La directora se había cruzado de brazos y esperaba el tiempo, ya que petra y Niedere no tenían la menor intención de ir a sus labores, ella dijo.
-¿y entonces?
Entonces ambos tomaron sus pertenecías y tomaron caminos diversos ya sin articular palabra sin siquiera darse un afectuoso beso o despedirse el uno del otro, parecía que el invierno por fin les había llegado y les estaba calando con efecto temporal.
La nieve comenzaba otra vez por acumularse en torno de los pasillos, para eso ya se encontraban los trabajadores de la universidad con su maquinaria para desalojar la nieve, pero no se les veía muy apurados, se estaban tomando su tiempo, estaban al filo de los quince grados bajo cero.
La directora entonces levanto la vista y vio al subdirector en la torre principal del campus que tenia unos prismáticos con los que se aseguraba que todos ya estuvieran en sus labores, cuando noto que la directora le observaba, le mando un saludo con su mano, ella de inmediato correspondió.
La arquitectura de la universidad era de estilo bizantino, con grandes monumentos dedicados a los grandes hombres y mujeres, hechas a base de mármol y piedra rocosa.
La rectoría estaba compuesta de cinco torres, una en medio, la más alta, las otras cuatro rondándola, con enormes cúpulas como pabilos de velas encendidas, su color era blanquizco, con relieves en rojo y azul, la torre Zeus, era la de en medio, constaba de unos cincuenta pisos, cientos de oficinas para los docentes, así como de tramites burocráticos. Construida apenas un par de años atrás…
Las otras cuatro, las denominaban los cuatro vientos, eran tan delgadas como un alfiler, ahí se tenían todos y cada unos de los despachos de todas las facultades, ahí precisamente era donde Niedere tenia su oficina a la que iba luego de dar clase.
La oficina de petra se encontraba justo en frente, tenía a su cargo unas cinco personas que organizaban todos los materiales llegados ahí, se encargaban de darle trámite a todo, ahí tenia una pequeña biblioteca personal a la que accedía en cuanto la ocasión se presentara.
















































CAPITULO DOS


La zona exclusiva de Montreal estaba habituada de enormes y portentosas mansiones, con árboles y jardines verdes, distintos estilos las adornaban, la mansión de Niedere se encontraba precisamente en la calle principal, por eso no era raro ver la circulación en su entorno, esa mañana petra estaba de visita ahí.
-¡señora wels!, su hijo quiere romper conmigo.
-¡calma, siéntate, hablemos, seguramente no será mas que una pelea de novios…!
-¡no!, èl no esta dispuesto a aceptar mis términos, dice que no quiere mi dinero…
-bueno, Niedere tiene su propio dinero…
-supuse que su padre lo habría desheredado…
Y entonces alguien que entro en la sala menciono desde donde se encontraba.
-supusiste bien, pero es de sabios equivocarse, es solo un nombre, ya hice los arreglos para que mi fortuna pase a manos de Niedere…
-steve, no esperaba esto…
-lo se petra, era mi regalo de cumple años para Niedere, pero ya que las cosas están de esta manera, lo mejor es hacerlo así…
-en ese caso, de todas maneras mi padre querrá darnos algo por la boda…
-eso tendrás que planteárselo a Niedere, pero ya en otros términos, mira petra, a nosotros los hombres nos gusta gastar lo nuestro y Niedere no es la excepción…
Entonces llego la camarera con una tablilla de servicio, el té estaba listo, Judit tomo una taza y la dio a steve, luego tomo otra y la dio a petra y tomando la tercera se la quedo, entonces se acerco a los cubos de azúcar y comenzó a servirse…
Alguien estaba a la entrada, de inmediato la servidumbre acudió para abrir la puerta, la casa estaba hecha con un estilo barroco, con puertas de hojas de madera de nogal, provistas de un llamador de campana y una mirilla en frente.
La puerta principal se abrió, eran los padres de petra, tenían el semblante algo endurecido, parecía que habían acudido a una confrontación, pero al notar a los demás, se tuvieron que ablandar un poco.
Saludaron cordialmente, de beso en mejilla, y se colocaron al lado de petra luego de sentarse, Judit ordeno trajeran algo mas de tomar para los recién llegados, había tensión en el ambiente, nadie se atrevía a recobrar el control de la platica, no obstante Judit se levanto y menciono.
-yo también heredare a mi hijo, es el único…
-¿nos perdimos de algo?
-no de mucho basil-menciono steve.
Entonces trajeron la otra charola con más té, Judit servicial menciono.
-es té ligero… ¡sírvanse!…
Mientras tanto, petra cruzada de brazos se estiro sobre el sillón, con la cara larga espero a que se sirvieran.
-¿como es que heredaras a Niedere?...Judit...
-es mi hijo, es normal ¿no?
Basil se levanto bruscamente dejando la taza de té sobre la mesa de centro, se veía alterado, volteo hacia todos lados.
-¡por eso no quiere casarse!…si será el hombre mas rico del mundo…
-eso no es un pecado basil-menciono steve quien se levanto de su lugar y convino para que basil se sentara.
-mi hijo no es una mercancía-dijo Judit-nosotros acordamos que nuestros hijos se casaran, pero tampoco lo obligaremos si él no quiere…
-además, nosotros confiábamos en que petra se haría querer sin necesidad de violentarse...-dijo steve. La servidumbre se acerco a Judith y sin remilgos menciono aun cuando la conversación estaba en su punto.
-¿señora…?
-dime jazmín…
-el joven Niedere esta en la televisión…
De pronto, todos se levantaron de sus lugares, encaminados por jazmín fueron al saloncito, en donde se encontraba la televisión con el programa en turno, Niedere estaba siendo entrevistado en el canal internacional.
-¿cuenta ya con financiamiento para su proyecto?
-no de índole gubernamental, sino mas bien privado…
-¿y son lícitos sus patrocinadores?
-todo es legal, mas aun tratándose del tamaño del proyecto que beneficiara a millones…
-su competidor mas inmediato es la firma inglesa de transportación aérea, ellos dicen que el proyecto esta ganado por ellos…
-¿Quién lo dice?
-ayer salio su vocero, el señor luigui belafonte, dijo que el gobierno esta con ellos…
-según tengo entendido, el gobierno lo protege, nosotros ya hicimos una investigación en la que el señor luigui se ve involucrado en trafico de influencias, corrupción, lavado de dinero, fraude, así como asesinatos en serie…
-lo que dice es muy serio señor…
-yo siempre hablo en serio señor…además ya ha sido denunciado…
-el señor luigui dice que usted es un traficante de drogas, ¿Qué tiene que decir al respecto?
-eso es motivo de una larga conversación, solo puedo decir por ahora, que el señor luigui al verse descubierto en una conspiración para asesinar a los hombres mas connotados del orbe, urdió esa estratagema, se cree el rey de la selva, ¿creería eso?
-¿conspiración…?
-¿algo mas que quiera preguntar?
-…si… ¿nos puede decir otra vez su nombre y a que se dedica?
-claro, me llamo albert von graz…soy dueño de empresas graz de exploración espacial…
-muchas gracias por asistir aquí a esta entrevista señor albert…
-no, gracias a ustedes…
-bueno, señoras y señores, el show de Walcot tribeth ha concluido, ustedes saquen sus propios pensamientos de esto, la cadena internacional vía satélite se congratula por esto, nos vemos a las diez de la noche la semana próxima en otro programa mas de “pregúntele”.
El programa había terminado, albert se encaminaba ya a la salida, no obstante el que tenia que despedirse de su anfitrión, mismo que se encontraba aun con los micrófonos encima, luego Walcot, fue a donde albert quien se encontraba sentado en una silla alta.
-¿tienes un momento albert? Quiero charlar contigo un poco.
La entrevista había sido grabada, para ubicarla en el horario nocturno, aun eran las dos de la tarde.
-claro, dime…
-editaran un poco, ¿quieres agregar algo mas que no te haya preguntado o algo que se te haya olvidado y lo estas recordando?
-…bueno, hay algo mas, pero quisiera que esto lo ubicaras en un recuadro con formato de cine…
-de acuerdo…
Entonces albert llamo a los camarógrafos para que continuaran la grabación de manera informal.
-¡eh chicos!…
Dos hombres portando una de dos cámaras y un tercero con una cámara fija acudieron a donde se encontraban, lo encuadraron y comenzaron a gravar.
-no aun no-dijo Walcot-traigan las de cine también, haremos algo para la posteridad…
Tenían un par de cámaras de cine a la mano, dos mujeres fueron las que se encargaron de ellas, colocándolas en los ángulos del foro.
-comenzaremos con movimiento-menciono Walcot al quitarse el saco.
Ambos se levantaron y comenzaron a caminar hacia la salida del foro, las cámaras los seguían, entonces una mujer encargada de los micrófonos llego rápido y les ciño uno a cada cual, luego los probó en su monitor y dijo.
-listo, pueden comenzar…
-dime una cosa albert, que hay de cierto en que tenían una patente de un avión…
-¿quien te dijo eso?
-rumores
-lo cierto es que un día me abordo un tipo que dijo ser empleado de una empresa en Alemania, encargada de crear transportes de alta denominación, los enviaron como espía, es ingles, se llama Bertránd di marco, mercenario y terrorista, actualmente vive en Milán. Quería los planos de una aeronave…
Judith apago el televisor y solicito que se abrieran las cortinas de la sala, luego abrió una ventana y el aire comenzó a entrar purificando el ambiente que ya se había cargado.
-Esto lo ha hecho a propósito, ahora quien sabe que más planeara… ¡Maldito!
-¡calmate petra!, ¡así no resolverás nada!
-pero papa
-¿Qué hay de cierto de lo que acabamos de escuchar?-Menciono basil.
Judit se encogió de hombros he hizo como si no supiera nada, pero steve quien ya tenia su respuesta menciono.
-ese es parte del trabajo, no se le puede reprochar nada, hay que respetarlo, seguramente no influirá en nada su decisión de matrimonio con petra.
-¿y si no es así señor?
-mi hijo es un profesional…
Entonces la sirvienta llego y menciono.
-la cena esta servida…
El reloj sonó dando las campanadas de las once de la noche, era viernes, cinco de febrero…
Todos se levantaron de su lugar y prosiguieron el camino del comedor que Judit ya había iniciado, sin mediar palabra avanzaron por entre los pasillos, las paredes gozaban de elegantes decorados, al filo de la escalera de la sala principal, se encontraba una escultura, creación de albert…luego la chimenea que estaba para esa hora encendida, había un clima adecuado, en eso el ladrido de un perro se asomo en el jardín y enseguida otros mas.
-¿a quién le ladran los perros jazmín?
-es el joven que esta llegando señora…
Ya se estaban acomodando en el comedor, cuando la puerta principal se escucho abrir, enseguida la voz de albert se dejo sentir.
-buenas noches señor, ya todos están en la mesa…
-buenas noches Melquíades, ¿Quién esta?
-todos señor…
-… ¿petra?
-si me permite el señor una consideración…
-claro Melquíades…
-señor Niedere, hoy es el cumpleaños de la señorita petra… ¿hay algo para ella entre sus cosas?
-te lo diría si no fuera sorpresa Melquíades…
Niedere se quito el abrigo y Melquíades lo cargo, luego tomo también el portafolio, la bufanda y la gorra; Niedere se acomodo la ropa y enseguida la corbata, así sin verse en espejo alguno, luego hurgó en el bolsillo de su saco y sintió que lo que buscaba se encontraba en su lugar, así que se sonrió y dijo.
-si gustas, puedes ver lo que sucede Melquíades…
-no acostumbro entrometerme señor…
-no será una intromisión, sino un testimonio…
-¿como un testigo?
-precisamente… ¿quieres?
-de ser así, no me lo perdería por nada señor…
-bien, entonces ve y deja eso, luego ven al comedor y colócate a mi lado y trae esto contigo...
Niedere le dio a Melquíades una cajita debidamente envuelta para regalo, era pequeña, como el estuche de alguna joya, lo puso en su mano, se sonrió y luego le palmeo un poco el hombro, con suavidad.
-tárdate un poco Melquíades…
Niedere miro en su alrededor, luego avanzo hacia el comedor, no fueron muchos pasos y ya se encontraba al filo de la entrada, avanzo sin mediar palabra buscando su lugar habitual y mientras lo encontraba justo antes de sentarse dijo.
-buenas noches a todos…
Había caras largas, la única que se atrevió a dirigirle la palabra fue petra, quien trago saliva, lo vio de reojo mientras le servían la cena.
-estuviste todo el día fuera…
-si…
Petra ya no aguanto más la presión así que se levanto y dijo con la quijada casi trabada, apretó los puños y golpeo la mesa, entonces los platos casi se estremecieron, pero unas copas rodaron por el suelo.
-no se que te hayas propuesto, pero lo que hiciste hoy es digno de un idiota…
-¿así?
Todos se le quedaron viendo a petra, incluso su madre que no daba crédito a lo que estaba escuchando y fue en ese instante que basil entro y se coloco al lado de Niedere, sin inmutarse volteo pero èl le envió un mensaje sin palabras, solo movió la cabeza en síntoma de desaprobación.
-¿le sirvo señor?-Menciono jazmín.
-si, gracias, pero no demasiado, quiero llegar al postre…















 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

CAPITULO TRES


-¡quiero que me digas cuanto quieres por casarte conmigo!
Niedere estaba al borde de la orilla, había nadado, la alberca estaba semi desierta, así que no tenían a nadie para importunarlos, petra se encontraba con una toalla al cuello, sentada al filo de la alberca, mojando sus pies con el agua.
Niedere tomo un poco de aire y subió la vista, la veía incrédulo, pero tuvo que aguardar a que petra le volviera a decir aquello.
-¡si! escuchaste bien ¿Cuánto quieres?
Steve venia por la orilla, parecía que estaba leyendo el diario de la mañana porque entonces se les acerco y colocándose en cuclillas le dio la página a Niedere.
-¡enterate!
El encabezadazo decía: GERARDO CLEMENTE, reportero de un diario ingles, es buscado por el tribunal internacional por presunto caso de conspiración, perteneciente a una secta, es judío, se le acusa de haber participado en el atentado de un avión estadounidense que transportaba a diez personas, cuando iba en vuelo comercial hacia Chicago.
-ese tipo no es el que te quiso chantajear…-Menciono petra
-el mismo…-Dijo steve.
-¿sabes que vive en Marruecos?-Dijo Niedere al salir de la alberca y estrujar el diario casi al punto de desbaratarse con el agua.
Petra entonces se levanto de donde estaba sentada y fue a donde su toalla para secarse.
-¿en que nos perjudica a nosotros?-Dijo Niedere.
-en nada-dijo steve.-pero habrá que estar a la expectativa, nuestras empresas fabricaron la tecnología con que se fabrican esos aviones…los reactores provienen de las fabricas en IRAN.
Otras páginas del diario mencionaban mediante fotografías las recientes investigaciones que se tenían de Gerardo clemente, los satélites lo habían captado en distintas ciudades, en una de ellas, se le había visto en la ciudad de Washington de cuando intercambiaba documentación incriminatoria con un empleado de la CIA.
De eso se dio cuenta Niedere que alcanzo a reconocer al tipo que se encontraba con Gerardo clemente, se trataba de Tony, un terrorista que la CIA había reclutado como un subalterno en el África del norte, también era miembro de la misma secta, entonces menciono.
-este tipo, Tony, es el mismo policía que asesino a un niño en el metro de Madrid en el año 2002…
Cierto, Niedere tomo su toalla y comenzó a secarse, mientras, petra tomaba un jugo de naranja, para eso, Irina, la madre de petra ya se encontraba entrando a la piscina con Judith.
Irina era una mujer de principios fijos, educada en las artes, guió a petra a su manera, a muy temprana edad quiso que asistiera para aprender lo mas elemental de la supervivencia en el agua y para eso la llevo al puerto mas próximo en que le enseñarían todo, fue ahí donde aprendió por primera vez lo que era estar en el agua.
Niedere se vio sorprendido al ver que algunas personas aun no conocidas se encontraban por ahí, pero aguardo hasta ser presentado con propiedad, ya que no acostumbraba a irrumpir en las conversaciones, de manera que, petra se coloco casi a un costado, rozando una de sus piernas con la mano de Niedere, ello lo hizo volver la vista a ella quien le hizo presión para no mirar demasiado a las recién llegadas.
-¿Niedere?-Menciono Judith.
-¿si?
-quiero que conozcas a dos de mis mas cercanas colaboradoras…
-con gusto…
Niedere se acerco a donde se encontraba Judith, colocándose la bata para cubrirse y secarse, así como calzaba un par de chanclas de fina hechura que lo colocaron ante ellas.
-Niedere es mi hijo, quiero que lo traten de hoy en adelante como el jefe de todo, ¿entendido?
-perfectamente señora…
-bien…Niedere, ella es nadra…
-un placer-dijo Niedere acercándole la mano para estrechar la suya, pero en el instante que ella lo saludo, el llevo la mano a sus labios y la beso con paciencia.
-¡OH, que galante!-menciono nadra reflejando el azul de sus ojos con la mirada fija de Niedere que no la dejaba de contemplar con admiración.
-todo es poco tratándose de personas tan cercanas a mi madre... como usted…
-me parece que nos llevaremos muy bien…
-no lo dudo…
-pero en lo subsiguiente, será mejor tutearnos, ¿no te parece?
-por supuesto…
Entonces Judith irrumpió en la íntima charla de Niedere y nadra, quien al parecer había hecho química para mencionar.
-ella es Iknah, hermana de nadra, lleva los asuntos fiscales…Iknah nació en Alemania y nadra en Austria, como tu Niedere…
-Me es muy grato conocerte…Iknah, dime una cosa, ¿eres soltera?
-…casada…
-¿puedo preguntar quien es el afortunado?
-si, pregunta…
-¿Quién es?
-francoise…
Parecía que algo había enfriado el ambiente, así que Niedere se devolvió sobre sus pasos y noto como petra se encontraba al lado de Irina, basil estaba llegando y noto que ya se estaban despidiendo.

-¡hola padre!-Dijo petra quien al notarlo le hecho los brazos encima.
-hola, parece que ya se hizo tarde, ¿almorzamos?
Entonces Judith en su carácter de dueña, no dudo un instante en establecer su autoridad para que todo volviera a su cause.
-aun no he terminado con las presentaciones basil…
-¡OH!, perdón.
Luego, Judith se refirió a petra y su padre con la misma cortesía que lo hiciera con Niedere.
-ella es petra, la novia de Niedere y el es basil, padre de petra y ella es Irina, madre de petra…ellas son mis colaboradoras, nadra y Iknah.
Dicho eso, petra se acerco a donde Niedere y se le arrimo tomándolo por el brazo con mucho apasionamiento.
-mucho gusto de conocerlas-dijo petra.
La piscina era techada, con el domo retráctil, así que se veía como la nieve estaba cayendo sobre ellos, la temperatura también era óptima dentro, a los lados habían divanes donde podía descansar mientras tomaban algo, también habían mesas donde comer.
Luego de las presentaciones, Judith menciono con algo de soltura y amabilidad.
-pueden ir a cambiarse, por allá están los vestidores…
Ello dirigiéndose a nadra y Iknah, quines fueron invitadas a departir.
Nadra nunca le quito la mirada de encima a Niedere, al pasar por donde se encontraba, le envió un par de mensajes que solo el lograría descifrar, Niedere aspiro el perfume de nadra, pero con la discreción que solo él sabia manifestar. La vio muy de cerca, tanto que alcanzo a respirarle sobre su cabellera negra que le llegaba al hombro, nadra era una mujer atlética, elegante y educada en los mejores colegios de Austria.
Entro al vestidor siguiéndole la mirada no solo de Niedere, sino de los demás que se encontraban ahí, pero petra se le unió más a Niedere.
-voy a entrar al agua otra vez, ¿y tu Niedere?
-yo voy a descansar un poco...
Steve siguió cerca de Niedere, que se ubicó sobre el diván de su preferencia, y volvió para abrir lo que quedaba del diario de la mañana.
-¿quieres que te cuente un secreto steve?
-¡si hijo!, ¿que es?
-ese hombre va a perder a toda su familia y su final no tendrá epitafio, ¡qué triste! ¿No?
-es una verdadera pena, aun los seres más mezquinos merecen cierta compasión...
-si, supongo…pero te aseguro que él no siente remordimiento por sus victimas, es como una bestia enferma de sangre y muerte…yo he visto su declive y es horroroso...ni siquiera sus enemigos sentirán compasión por el, pero ninguno se alegrara de su debacle…
Niedere se puso sus gafas oscuras, movió el cuello y quedo con la cara al cielo, sacudió las hojas del diario y siguió leyendo…
Steve estaba en el otro diván, estaba tomando un refresco, con los brazos cruzados sobre la nuca, volvió la vista hacia donde se encontraban los demás, quedó pensativo y luego de ello se enderezo para ver en la página del diario que Niedere leía, el encabezado.
-“segundo año consecutivo que WALS WELS gana el premio Nóbel y no acude a recibir su premio, ¿usted sabe donde esta?, si lo ve, avísenos, queremos darle sus premios, comuníquese a NORUEGA, deje el mensaje…”
En ese preciso instante, nadra paso por donde Niedere, con toalla en una mano, se distinguía por vestir un portentoso bikini que no dejaba nada a la imaginación, tenia un hermoso cuerpo, lo movía con sutileza, tanto que Niedere solo se dio cuenta de que ella andaba por ahí cuando nadra movió con una de sus piernas, el pie de Niedere.
Entonces prosiguió hasta donde se encontraba un diván, casi al otro lado de la piscina, Niedere no se había movido, pero discretamente se había percatado de donde se encontraba nadra, viéndola por una rendija de la página de diario que sostenía con ambas manos.
Iknah era tan bella como nadra, tenia una personalidad atrayente, ella noto todo lo sucedido, pero sostuvo el aliento como por acto reflejo, incluso mostró una sonrisilla que disimulo con satisfacción cuando llego y se tumbo en el diván posterior al de nadra quien al verla estiro su mano llevando el frasco de crema e indicándole que le untara un poco en la espalda.
Iknah tomo el frasco y dio un ligero vistazo a donde se encontraba Niedere para notarlo dejar las pocas paginas del diario de la ciudad de Montreal, así como la toalla sobre el diván e ir en pos de petra, que ya le aguardaba con los brazos extendidos dentro de la piscina.
Petra se sonrió cuando vio que Niedere se metió en el agua producto de uno de sus clavados especiales, yendo hasta el fondo de la piscina, donde demostró sus muchos días en el agua, nadaba demasiado bien; cuando alcanzo las piernas de petra, esta solo se vio confortada, ambos entonces se sumergieron.
Ambos estaban dentro del agua, juntos se abrazaron para luego besarse sin la expectación de los demás, luego, al salir a la superficie, ambos se colocaron en posición de ir a la orilla, casi sin mover el agua, se deslizaban únicamente con las piernas; Niedere se sumergía de vez en cuando para refrescarse un poco, se volteaba de espalda y luego volvió a su posición habitual.
Petra llego a la orilla buscando la escalera, de inmediato salio del agua, y volvió la vista a donde Niedere, que ya estaba detrás, tanto que solo dio dos pasos y ya la estaba tomando por la cintura y casi al oído menciono.
-¡quiero hacerlo…!
Petra se volvió un tanto impresionada, ya que todos los veían, se sintió un poco incomoda y simulo concordancia.
-¿ahora?
- ¿tienes algo mejor que hacer?
Petra no dijo mas, dejo que Niedere se uniera mas a ella y colocara sus labios sobre su nuca, un instante y luego la hizo volverse, ya de frente, la tomo por las manos, y la atrajo hacia el, luego como para hacerse sentir ante los demás, la beso con ternura.
Petra escurría de agua, se desaparto de Niedere y camino hacia las regaderas, el la siguió y consideró el que los demás no se ocuparan de ellos, pero cuando llego a donde petra, volteo incidentalmente y se encontró con la mirada azul de nadra quien le clavo la vista y giro el cuello violentamente como para que Niedere se diera cuenta de que lo ocurrido no le había parecido bien.
Pero petra ya tenía lo que quería y no estaba dispuesta a desaprovechar la ocasión, así que tomo a Niedere y lo abrazo en la regadera y ante la vista de todos para entonces besarlo.
El clima artificial era excelente, parecía un día de verano, incluso con algo de humedad, el techo sudor haba liquido vital, tanto que comenzó a calentarse la superficie, los alrededores eran de un verde intenso, el prado estaba en su plenitud, incluso los árboles eran frutales y como si fuera poco, seguía nevando.
-¿Estas contenta?- Mencionó Niedere.
-claro, estoy radiante, este es el mejor día en mucho tiempo…me parece que voy a conseguir lo que quería…
-me parece que ya lo conseguiste…
Niedere salio de la regadera y noto de reojo que petra iba detrás, el avanzo por la orilla de la piscina, paso incluso por los lugares en que se estaban haciendo los preparativos para el almuerzo, basil cocinaba la carne a la parrilla, el mismo le hizo la seña para que tomara un trozo de carne ya lista y se sirviera el mismo.
-vamos, acérquense, ¡ya vamos a comenzar el almuerzo!-menciono basil con referencia a los demás.
Petra llego y se coloco al lado de Niedere, tomo carne de su plato y se la llevo a la boca, el ambiente era muy agradable, hacia tiempo que no departían con tal devoción y por eso Niedere se agradó.
-¿qué tal?-Menciono basil.
-¡excelente!-Dijo Niedere.
-me alegro que les guste, vamos, sírvanse todo lo que quieran…

























CAPITULO CUATRO


Niedere se encontraba en el running ice arena, en donde entrenaba en la pista de hielo para su competencia de velocidad en días posteriores, ya había dado unas decenas de vueltas que le pondrían en forma y ritmo, en eso disminuyo la velocidad y comenzó por dirigirse al interior de la pista.
Freno en frente de petra, quien al tenerlo de cerca, le comenzó por medir los signos vitales de inmediato con un monitor de pulso.
-¡no te muevas!
Niedere permaneció quieto por un instante, tanto que aguanto la respiración como era habitual; todo en el era de lo mas normal, no hubo exageraciones, por eso, petra solo apunto en su bitácora sus observaciones de rutina.
-¡por hoy ya ha sido todo…!-Menciono su entrenadora, la profesora grossner.
Petra levanto la vista hacia las gradas en las tribunas y se dio cuenta de que un par de cámaras les estaban observando, y se volvió hacia el otro lado uniéndosele más a sus compañeros.
-tenemos visitas.
Niedere se volvió a la tribuna y saludo a los fotógrafos y a un par de reporteros, se sonrió un poco, luego tal como acostumbraba, se dio la vuelta y se olvido de ellos.
No había mucha gente expectante a esa hora, ya que los entrenamientos siempre abrían sus puertas mediante un costo económico bajo, de esa manera los verdaderos aficionados garantizaban su estancia y cercanía con sus favoritos.
-miren allá-mencionó la doctora grossner, refiriéndose a otra parte de la tribuna.
-¿Qué estará haciendo aquí?-Dijo petra que a la distancia le hacia señas para que fuera a donde ellos se encontraban.
Era francoise quien en compañía de Iknah se estaban divirtiendo, tenían una cámara de video con la que estaban tomando las incidencias de los entrenamientos de todos cuantos se encontraban, iban vestidos con ropas muy gruesas, se habían ubicado en un ángulo ideal para sus tomas de cámara.
Niedere los miraba a la distancia e incluso ya estaba haciendo algunas poses a manera de que fuera tomado por la cámara convenientemente, y también les hacia señas para que bajaran y se les unieran.
-mejor nos vamos-dijo petra tomando una de sus maletas en las que portaban sus elementos de entrenamiento.
Niedere tomo la suya al unísono, iba de la mano de petra par enfilarse rumbo a la salida, la doctora grossner venia enseguida, Así como dos de sus asistentes, quienes manejaban lo elemental del equipo de trabajo.
Niedere se volvía de vez en cuando a las gradas y observaba de un rápido vistazo a cualquier lugar y por eso no se dio cuenta cuando ya casi por salir se tropezó con alguien.
-¡Niedere!, ¡cuidado!-dijo petra que lo tenia de la mano y lo tuvo que soltar ya que su maleta se vio comprometida.
Niedere se volvió de pronto pero con la vista al hielo, viendo las maletas como se enredaban no advirtió a la persona y cuando levanto la vista se dio cuenta de quien se trataba.
-¡hola!
-hola, no te vi.…
-si, ya lo note, no tengas cuidado… ¿ya te vas?
-si, acabo el entrenamiento hace apenas un instante… ¿y tu?
-no, yo…apenas voy a iniciar…
-bueno, en ese caso, nos veremos luego…me llamo, Niedere… ¿y tu?
-Madeleine…
-ha sido un verdadero placer conocerte…hasta luego...
-cuídate Niedere…
Niedere entonces subió hacia el interior del túnel para salir, petra ya se había adelantado y lo aguardaba a la salida con cierta impaciencia, ella tenia su maleta sobre el suelo, y desde ahí había notado todo e incluso las habladurías de los que se encontraban por ahí no se hicieron esperar y vieron en aquella eventualidad una opción de Niedere para entrar en contacto con la hermosísima mujer con la que se había tropezado.
Y eso a petra parece que no le había gustado por completo, cuando Niedere se le acerco, ella de inmediato mostró su inconformidad.
-¿hasta cuando te tengo que esperar aquí?, ¡Parezco tu estupida!
-no exageres.
Niedere entonces tomo su maleta y prosiguió a la salida del lugar, petra ya no dijo mas y lo siguió detrás, entonces la doctora grossner les menciono a un par de pasos de distancia, por que al parecer ella tomaría un rumbo distinto.
-¡oigan muchachos!
Ellos se volvieron pero sin prisa e incluso fue Niedere el que dijo.
-¿no vendrá con nosotros?
-¡no!-dijo la doctora grossner, quien al advertir ese pequeño roce entre Niedere y petra, mejor decidió optar por ir a otro lado y dejar que arreglaran sus diferencias y eso, ambos lo notaron.
-¿Por qué?
-recordé que tengo algo mas que hacer…los veo mañana a tiempo… ¿si?
Ambos se vieron las caras y optaron por lo evidente.
-¡esta bien!
En eso, alguien llego hasta ellos y algo sofocado por el eventual imprevisto menciono una vez que la doctora grossner se hubo ido.
-Niedere, ¿tienes un instante?
-¿para que?
-parece que se esta orquestando una huelga, quieren cerrar las instalaciones, dicen que el sindicato de trabajadores no llego a un acuerdo con la empresa…
Niedere se quedo sin habla, no estaba enterado de los acontecimientos que se estaban sucediendo en aquel instante porque incluso, ya se escuchan los gritos del interior de la arena, eso sobresalto a petra.
-mejor vamonos Niedere, esto se empieza a poner feo…
En ese sentido petra tenia razón, a ellos eso no los debería de importunar, ya que ellos no eran empleados de la arena, aunque en cierta manera si los estaría perjudicando un eventual cierre de las instalaciones.
Niedere se quedo pensativo un instante colocándole la mano sobre su hombro a Fabián, quien al notarlo menciono.
-no te habría molestado sino fuera porque los empleados te piden como mediador del asunto…
Tu y el dueño de la arena son amigos y quizá podrías hablar con el y solucionar algo al respecto… después de todo, tu entrenas aquí, nos convendría a todos…
Ciertamente el sindicato de los trabajadores ya tenia algunos meses sobre la misma idea que fuera votada en los certámenes de la asamblea, los empleados formarían una cooperativa y le comprarían el coso al dueño, de esa manera a todos les darían un numero de acciones con lo cual asegurarían su futuro. Pero el dueño era un empresario muy astuto y tal vez al venderles aquello quería llevarse algo más que lo ofrecido y por ello los planes del sindicato estaban siendo postergados.
-¡entonces!-Dijo Fabián.
En eso llego otra persona encargado de la organización de la huelga y de inmediato sin más preámbulo dijo.
-¿Niedere?
-¿como estas?, jeremías…
-bien, pero podría estar mejor, ¿puedes ayudarnos?
Niedere estaba pensativo, porque ya le estaba doliendo el estomago de hambre y además no había bebido suficiente liquido rehidratante y tenia sed y además estaba cansado y acalorado.
-eso depende…
-¿de que, Es dinero…? No importa, pide lo que sea…
-además de eso, ¿Quién se beneficiaria con todo esto?, Porque no me digas que los trabajadores tendrían mas y mejores condiciones de vida para ellos y sus familias.
-¡esto es Canadá! Niedere, el país mas indrustializado del mundo, pero creemos que necesita de un bálsamo que lo revitalice y por eso queremos comprar el equipo de deportes invernales, y esta arena…
Ahora si Niedere lo había comprendido, ya no harían falta mas preguntas, estaba frete a un eventual vuelco deportivo, querían privatizar el deporte, hacer como una empresa, donde todos tendrían una función mas mercantil que deportiva y para ello a èl le ofrecían algo así como un estimulo por sus prestaciones otorgadas a la empresa que a partir de entonces se podría convertir en un megalópolio…
-antes tendría que hablar con el sindicato…-Dijo Niedere echándose su maleta a la espalda.
-no haría falta, ya acordamos que yo hablare por ellos, puedes decirme lo que sea, yo les comunicare a todos los resultados.
Eso era como darles la puntilla a los trabajadores, pero eso no lo podría permitir y por ello Niedere no solo le asesto un golpe final, sino que incluso fue como un nocaut...
-es ese caso, no puedo ser juez y parte…
Niedere le hizo la seña a petra de que debían de regresar al interior de la arena en donde se estaban dilucidando los pormenores de la presunta huelga, petra le alcanzo a mencionar estando en camino de la pista de hielo.
-oye, no puedes decirles que el dueño de esto eres tu…
-no claro que no, pero tampoco les dejare libre el camino.
Aquel túnel estaba semi iluminado, había faros a los costados, de manera que se pudiera ver por donde se caminaba, tenia forma exa oval, la puerta de entrada o salida a la pista de hielo era octagonal, con una pendiente hacia adentro.
Francoise y Iknah se encontraban ahí, al borde de la pista, estaban ansiosos, pero también tenían cierto temor porque la mayoría de los fanáticos que se habían dado cita para ver los entrenamientos se estaban yendo, ya que la pista estaba intransitable, habían muchas personas ya con pancartas, aludiendo sus observaciones y peticiones, gritaban sendas consignas a favor de los trabajadores, decenas de reporteros se habían dado cita y los flashes de las cámaras comenzaban a hacerse presentes.
-¿Qué significa esto?-Menciono Iknah quien se encontraba ya con un pie dentro del túnel.
-solo como precaución, será mejor que se vayan…-Dijo Niedere quien ya tenía una idea de lo que sucedía.
-no, yo me quedo.-dijo francoise.
-entonces nosotras nos vamos.-dijo Iknah refiriéndose a ella y a petra.
Melquíades había llegado luego de haber aguardado la llegada de Niedere y petra al estacionamiento donde se encontraba el transporte para llevarlos a casa, así que tomo las maletas y espero a que ambas estuvieran en posición de irse.
-¿señor?
-dime Melquíades.
-¿Se le ofrece algo?
-¡llevalas! a casa y luego vuelve por nosotros, esto se prolongara muy entrada la noche…
-como diga señor…
Niedere entonces le dio un beso a petra.
-ve a casa, luego nos vemos…
-si, pero debes de tener cuidado, esto parece que se les puede ir de las manos a todos…
Niedere y francoise subieron a la tribuna en donde ya estaban los representantes del sindicato, ubicados en el palco principal que se había improvisado, ahí mismo ya estaba también el dueño del coso, que de reojo noto que Niedere se ubicó cerca.
-haré unas tomas por allá.-dijo francoise refiriéndose a su equipo de video tape.
-si, pero no te arriesgues mucho, aquí nos vemos…
Abajo ya muchos se estaban uniendo en torno del centro de la pista, todos tenían tanto frío pero que en aquellos instantes no lo estaban sintiendo, por eso cuando, mediante el micrófono, el líder del sindicato comenzó a tomar la palabra, todos callaron para escucharlo, eran apenas un par de miles de personas.
Pero en primera instancia el micrófono no funciono, eso dio lugar a un impaz, cierto nerviosismo comenzó a dejarse sentir, el animo también se estaba caldeando.
En eso Niedere se volvió a un costado y se encontró con Madeleine, quien estaba viendo el curso de los acontecimientos desde la grada superior, al notar que Niedere la veía, se levanto y fue a donde se encontraba, solo bajo un par de gradas y camino un par de pasos y estuvo al alcance de él.
Niedere se levanto en cuando la tuvo a un costado y le indico que tomara asiento sobre la grada cubierta de una lujosa butaca, forrada en terciopelo y hecha ergonómicamente, era de lo más cómoda.
-¿que te parece esto?-Dijo Madeleine.
-es una contrariedad…
-¿sabes que el dueño esta por allá?
-si, lo he visto al llegar…
-ojala se solucione esto, de lo contrario no tendremos lugar para entrenar…
-¿vienes seguido?
-no, en cierta manera estoy por aquí porque mi avión se retrazo…soy de Austria…
-¿no te quedaras para el prix?
-me iré luego de participar, no lo tenia previsto así, debía de competir el día de hoy…
-¿y tu vuelo…?
-saldría en cuanto terminase la competencia, pero ambas se retrazaron y estaré un par de días mas…
-ah, no te había visto…
-mi entrenador y jefe de relaciones publicas dicen que no debo de andar mucho por ahí, es parte de mi imagen, ¿sabes?, dicen que si me ven mucho como cualquier persona, no tendran la capacidad de apreciar la importancia de tener a una campeona…
-de manera que te debes de hacer poco menos que inalcanzable…
-es como medida de precaución…no es nada de vanidad, sino únicamente para que los demás comprendan que nosotros somos algo especial y se nos debe tratar como tal… ¿Qué te parece?
-es una estrategia muy arriesgada, y dime, ¿te funciona?
-ayer habían mil personas afuera de la arena para pedirme el autógrafo y no pude salir, ¡imagínate!, hubiera sido un caos…he visto casos en que la gente incluso muere en tumultos por querer ver a su estrella…
-me lo puedo imaginar, no solo porque eres al parecer una campeona, sino porque eres muy hermosa...
-noto que no me conoces aun, oye, ¿de donde eres?
-no te lo imaginas…
-puede ser… ¿de Viena?
-vaya…nunca lo hubiera imaginado.
-no tienes tipo de ingles, ni de francés, tu estilo es muy elegante, diría que incluso refinado, como en antaño, me refiero a el típico hombre de grado…
Niedere entonces se volvió más de cerca, cruzo las piernas y alargo el brazo de manera que estuviera detrás del hombro de Madeleine.
-nadie me había alagado tanto como tu…
-¿ni siquiera tu novia?, porque lo es ¿o no?
-¿te refieres a…?
-a la rubia con la que estabas, es hermosa…
-si, lo es…
Madeleine se quedo un tanto fuera de balance sin comprender aun porque los acontecimientos se habían dado demasiado rápido.


















 
 
 
 
 
 

CAPITULO CINCO

La limousine entro por la puerta principal y se estaciono a la entrada del palacete estilo barroco, se abrió la puerta y de ella emanaron Iknah y petra, quienes al parecer ya estaban más relajadas, steve estaba en la puerta y la vio, desde el umbral les alcanzo a decir.
-¿y Niedere, y francoise?
-se quedaron, la arena esta que hierve, van a emplazar a la huelga, los del sindicato quieren absorber el deporte…-Dijo petra mientras subía por la escalera principal.
Petra avanzo naturalmente hacia el interior, steve se veía más calmado que nunca, únicamente aguardo a que Melquíades guiara a Iknah a dentro, cargando ya las maletas de entrenamiento.
Cierto, había una rara calma, ya ni los perros ladraban y a esas horas siempre era muy recurrente oírlos ladrar e incluso el agua de la fuente que se encontraba al frente ya no estaba subiendo y bajando.
La puerta cerro en automático detrás de Melquíades, al levantar la vista se dio cuenta de la situación en la que se encontraban, eso lo hizo reaccionar de manera que soltó las maletas que cayeron al suelo y subió las manos en condición de apresado.
-¡siéntense todos!, ¡hay lugar suficiente!
-¿Qué significa esto?-Decía petra quitándose de encima al tipo que la jaloneaba del abrazo y que a ella le parecía repugnante.
-¿es un asalto?-Se atrevió a mencionar apenas con cierta timidez Iknah que se encontraba al lado de Judit.
-no seas tan ingenua jovencita, estamos aquí porque queremos algo que ustedes tienen y nosotros no…
Entonces el tipo se volvió a otro de sus cómplices y le menciono al indicar el aparato que se encontraba de frente.
-enciende el televisor…
El televisor era tridimensional, empotrado en un respirador de titanio, tenia una pantalla plana al vacío, con recepción satelital.
-ahora veremos por lo que nos encontramos aquí…
El televisor se prendió y dio con la programación acostumbrada, el tipo le sintonizo el canal que según el era el que debían de ver.
-ahí lo tienen-dijo
-bien, ahora vigilen a todos mientras les explico a esta familia lo que deben hacer…
El se refería a los otros cómplices con quien se comunicaba mediante ínter transmisión interna conducto de un micrófono, aquellos se dispusieron a rodear la casa y vigilar que nadie entrase.
Portando un arma de grueso calibre se ubicó sobre una silla con los pies encima, encendió un fósforo y con el un cigarrillo corriente, entonces le dio una fumada y la bocanada la hecho al aire que de inmediato se contamino.
-me llamo Gabriel Crowley,
Soy participante de una facción de la CIA, generada para complacer a los altos mandos del sistema anglo en todo el mundo, ahora me han pedido de favor que venga aquí y los convenza a ustedes, pero antes de convérsenlos de nada, debo decirles algo de mis galones como militante de esta facción que opera discrecionalmente en todo el orbe…soy vise comandante de inteligencia militar por parte del ejercito ingles, nombrado caballero y otorgándome la medalla al valor…amo a mi país como ustedes al suyo, y no dudare en asesinarlos si me provocan algún enojo, ¿esta claro?
Ante eso ninguno se opuso pero tampoco nadie respondió, eso era una confrontación tal cual, era como si un grupo subversivo se hubiera metido a la casa con el ardid de realizar un asunto gubernamental para justificar lo que se estaba perfilando como un secuestro.
En la televisión ya todo estaba claro, el evento que se transmitía era el del arena de hielo, en donde se encontraba una presunta huelga, que parecía disgustarles a los que se encontraban en casa de steve.
-la cuestión es que, queremos que ustedes eviten la huelga y nos den el favor de controlar el medio del deporte…que luego usaremos como arma para nuestros fines…
Pero entonces un silencio se hizo presente el cual no dejo lugar a duda, alguien debía responder a ello, steve de inmediato dijo.
-no tenemos nada que ver en eso…
Gabriel tomo un poco el cigarrillo con sus dedos y lo arrojo al suelo para luego pisarlo, entonces avanzo hacia donde se encontraba petra, la vio de frente, la tomo del brazo y la hizo levantarse y dijo.
-pues yo creo que si… ¿no es así petra?
Todos miraron a petra con incredulidad, se estaba vislumbrando lo que seria, pero decidieron darle el beneficio de la duda por eso únicamente steve dijo.
-ella no sabe nada…
Pero el hombre insistió y obligándola a hablar la tomo del brazo con violencia y le dijo.
-habla, diles lo que sabes, que ahora nosotros ya sabemos…
Petra lo pensó un poco, pero aun así se negaba a hablar y no fue sino hasta que el otro tipo señalo el televisor y dijo.
-habla o el morirá…
Al notar de quien se trataba, petra se inconformó y por primera ocasión sintió terror ante eso, y aun se negaba a todo.
-¡no!, Françoise, ¡no!
-entonces, sino quieres que tu hermano muera, habla ahora…
Un pequeño monitor se encargo de convencer a petra, al ver ahí la imagen satelital del coso, y a un francotirador que le apuntaba sin ser visto no solo a francoise, sino a la multitud que se cernía a favor de la huelga.
-desgraciados, asesinos, mentirosos, dijeron que no nos harían nada a nosotros…
-Es nuestra forma de asegurar un trato…ahora, diles lo que sabes…
Petra trago saliva cuando viendo a los demás bajo la cabeza pero Gabriel se la levanto y tomándola del cuello dijo.
-¿que esperas?, Diles que necesitamos que Niedere se ponga de nuestro lado, que sabemos que el es el dueño de el arena de hielo, que usaremos la empresa para encubrir nuestras operaciones y que nos beneficiaremos de ellos para financiar nuestras operaciones en todo el mundo. Diles también que necesitamos que Niedere de la cara y que si no lo hace lo asesinaremos ahí mismo…
Gabriel le mostró a petra el monitor en el que se notaba a otro francotirador que le apuntaba Niedere y por lo que se veía solo esperaba la orden para actuar, de manera que al verlo todo en perspectiva, sopeso la situación y moviendo la cabeza dijo.
-si, ellos saben todo eso, en la CIA han estado reuniendo toda una serie de archivos mediante los cuales tienen santo y seña de los mas ricos del orbe, no importando su nacionalidad…
Entonces, con lujo de violencia, el otro tipo, tomo a steve del brazo y lo encamino a la puerta.
-¡ábrela!
-abrió la puerta y el tipo empujo a steve hacia fuera, luego apuntándole le dijo.
-¡mira arriba…!
Steve levanto la vista y noto cuando un avión estaba sobre la casa como a un par de kilómetros de altura, sin embargo lo pudo percibir por los destellos que emitía.
-ahora mira aquí…
Le mostró el monitor que portaba, ahí tenia las imágenes que se estaban recibiendo desde el avión…
Steve lo noto enseguida y se dio cuenta de que las imágenes de su casa las estaba enviando desde el avión al centro de operaciones de la CIA. Entonces el tipo lo vio a steve con violencia, se lo quedo mirando un instante y luego dijo.
-¿ya te diste cuenta?, no eres mas que un elemento reciclable, te hemos estado espiando desde el mismo instante en que naciste, ¿no te das cuenta de que podemos hacer contigo lo que se nos pegue en gana y que nadie nos lo podría impedir?
Entonces el tipo tomo a steve y lo precipito hacia adentro de la casa otra vez, el tipo se volvía a todos lados cuidando de no ser visto por alguien que seguramente visitaría a steve y su familia. Pero steve no entro de inmediato, aguardo en el quicio de la puerta y viendo al tipo de manera retadora, le dijo.
-¿ustedes son judíos verdad?
-…si… y lo que se cuenta de nosotros es poco, aun hay mucho mas de lo que se ha contado hasta el momento…
Entonces steve entro en la casa, ya los demás se estaban acomodando de manera que firmaran una serie de documentos que les convendría a los tipos y que por lo visto Judith se había negado a firmar.
Al cerrar la puerta se oyó un impacto mas adentro, enseguida todos se quedaron expectantes para saber de que se trataba y para eso Yazmín salio desde la cocina, otro tipo le apuntaba con una pistola en la cabeza, ella estaba con el alma en vilo, no se atrevía siquiera a mirar a los demás, no busco protección de alguien porque todos ahí estaban perdidos.
-la encontré en el sótano de la casa…
-maldita sea Adrián, siempre les dije que revisaran bien, ¡que se siente con los demás!
Jazmín estaba herido del brazo, su ropa se había manchado de sangre, tenia el brazo tenso, inmóvil, con una mueca le dijo al odio a Judith.
-lo siento pero me encontraron…
Judit en ese sentido no tenia mas que admiración para jazmín, le tomo del brazo herido y lo acomodo de manera que la sangre no le corriera.
-no te preocupes…
Eran más de una docena de hombres encapuchados y vestidos de amarillo, con rifles de alto poder, amagaban a todos, Gabriel le dio vueltas al asunto, hasta que al parecer, se había llegado el tiempo de actuar en consecuencia con las negativas de los miembros.
Tomo su teléfono y marco un numero, espero comunicación mientras veía a los demás, entonces parece que alguien le contesto.
-si…
-pásale el teléfono, dile que su padre quiere hablar con el…
Espero un instante, se oía la conversación cuando la persona en cuestión estaba comunicándole a Niedere.
“-te digo que es importante, es tu padre, quiere hablar contigo…
-¿mi padre, como sabe de ti?…
-no hagas mas preguntas, no hay tiempo, solo toma el teléfono y escucha lo que te van a decir…”
Pero Niedere no le creía, ya estaba dudando acerca de la verdadera identidad de Madeleine, que era quien le había pasado el teléfono y de quien pudo haber tenido cierta simpatía pero que en ese instante, se volvió a su entorno y se dio cuenta de la situación cuando vio los rifles de los francotiradores que se habían ocultado dentro de la arena de hielo.
Se detuvo en Madeleine un instante, con extrañeza entre cerro los ojos y arrebatándole el teléfono celular, se lo coloco al oído.
-¿Quién es?-Menciono Niedere todavía viendo a su entorno, buscaba darse cuenta de lo que estaba pasando, porque estaban apunto de comenzar las conversaciones entre sindicato y trabajadores y/o empresa.
-tu padre te va hablar y mas vale que lo escuches, de otra manera será la ultima vez que lo oigas…
-¿Qué?, ¿Quién eres desgraciado?, si tocas a cualquiera de mi familia te matare a ti a tus cómplices, ¿me escuchaste?
-¿así?-menciono el tipo, pero no dijo mas, un instante y se escucho como amartillaban un arma para luego activarla, se escuchó el disparo tan seco que el oído de Niedere estuvo expuesto a la detonación.
Niedere entonces concluyo la conversación, se le quedo mirando a Madeleine con violencia, se dio cuenta del teléfono en su mano y lo arrojo al vacío, entonces la tomo del brazo y la levanto con cierta brusquedad y le dijo muy de cerca.
-¡estas muerta!, ¿lo sabes?
-si, lo se.
Madeleine siento el poder de sus palabras y la decisión que ello conllevaba y asintió con la cabeza, ya se sentía con la piel erizada, sabia que ahora su vida dependía no solo de la voluntad de un hombre decidido, sino de su ley, que en cierto sentido, era la mas radical de todas.
-bien, ¿quieres morir sin causa o quieres preservar tu vida y morir mas tarde?
Madeleine lo pensó mientras bajan las gradas, Niedere ya no necesitaba mas que ir a donde se encontraba el micrófono, casi a jaloneos Madeleine iba con el, cuidándose de no ser descubierta por los demás ya que podría incluso ser acusada ante el foro común y posiblemente ser linchada en aquel momento.
Niedere con lujo de poder, llego hasta donde los demás, tomo el micrófono que ya estaba en buen estado, y probó que si servia, sin soltar de la mano a Madeleine menciono.
-atención, atención, atención…
Había conseguido la atención de los asistentes, todos ya le escuchaban, se veía enojado, con la cara dura y las facciones muy definidas.
-me han pedido que interfiera en este asunto, y que lo haga de manera que unos cuantos se beneficien, quieren hacerles creer a los demás que estaban haciéndolo en pro del deporte, un hampón ha secuestrado a mi familia en mi casa, aun no se quien sea, pero seguramente me esta escuchando en este instante… ¡te digo a ti, que no ganaras esta vez y que los que te mueven los hilos van a caer…es una promesa…!
De pronto las cámaras se acercaron a donde se encontraba Niedere, francoise que se había dado cuenta de la situación se estaba escurriendo entre los demás, y fue en aquel instante en que una bala lo alcanzo en una pierna y lo hizo caer entre las personas gradas abajo, eso lo vieron todos y luego cuando el pánico se hizo presente, la multitud se agacho y otros trataron de salir de ahí como pudieron, pero Niedere seguía en lo suyo, y volteando hacia arriba se dio cuenta de donde se encontraban los francotiradores y hurgando entre los bolsillos de Madeleine, dio con su arma, la tomo con fuerza y apunto enseguida.
Pero Madeleine que lo vio apuntarles, trato de impedirle que disparase, para eso le tomo del brazo y lo quiso bajar, pero la fuerza de Niedere y esos musculosos brazos lo impidieron y casi cargándola con un brazo, logro apuntarle a uno de los francotiradores y cuando al fin disparo, advirtió que había hecho blanco porque el tipo cayo al vacío estrellándose contra el hielo el cual qued ò manchado de sangre molida.
-¡no, no, no!…-decía Madeleine que seguía tratando de impedirle Niedere que no siguiera disparándoles a sus cómplices, pero Niedere seguía apuntándoles a los que se encontró y cuando disparo un segundo tiro, el otro tipo cayo pero esta vez sobre las gradas, encima de la gente que estaba por ahí agachada para no ser alcanzada por alguna bala perdida.
En la casa de Niedere, los tipos ya se habían dado cuenta de la situación, tenían todo fuera de control, así que ya se estaban preparando con sus armas colocándoles silenciadores.
-Maldito…mil veces maldito…-Decía Gabriel pateándolo todo, estaba furioso a sabiendas que Niedere seguramente descubriría quien era y por eso tenia que irse de ahí de inmediato porque ya las autoridades estarían avisadas cuando se diera el aviso por la transmisión de televisión.
-te lo dije, el muy maldito no iba a ser fácil de convencer…-menciono Adrián.
Gabriel entonces puso el ojo en la persona de petra en quien seguramente recaería toda la culpa, se acerco con su arma, se la puso en la cabeza y le dijo.
-todo nos salio mal, es tu culpa… ¿porque no nos hizo caso Niedere?
-¡tu lo provocaste, el vendrá por ti!…-Dijo petra.
















































CAPITULO SEIS


Había helicópteros de la marina rondando la casa, un contingente estaba rodeándola por tierra, y sendos vehículos blindados se acercaron a la entrada, e incluso untar de tanques estaba apuntado al interior, alguien dio la orden y arrojaron una par de bombas de humo que se expandieron de inmediato en el interior.
Con un alta voz el que lideraba la operación salio de su vehículo por la parte de arriba y dijo a quienes suponía aun se encontrarían ahí.
-a los de la casa, ¡salgan con las manos en alto, ríndanse y no les dispararemos, tienen hasta la cuenta de diez…uno…dos…tres…cuatro…cinco…seis…siete…ocho…nueve……diez… ¡Fuego con gases lacrimógenos!
Con unos prismáticos desde el interior de un blindado, Niedere notaba todo cuando pudiera suceder en el interior de la casa, poco a poco un reconocimiento y se encontró con algo fuera de lo común.
-miren, ahí, en el césped…
Estaba pintado el emblema judío, la cruz de David, de color blanco y azul, y luego unas siglas; que en hebreo significaban:”el sol, nuestro dios”.
Y sobre el emblema estaba incrustada una cruz doble con una corona en su cabeza…
Todos lo habían notado, parecían incrédulos no obstante lo estaban viendo, entonces Niedere, tomo en sus manos un lanza llamas y saliendo de su vehículo, se aproximo a donde se encontraban aquellos símbolos, encendió la llama y se propuso a quemar el césped de manera que no quedara rastro de aquella afrenta a la inteligencia racional.
Se veía mal el ambiente, unos cuantos comenzaron a entrar en la casa, enfundados en máscaras antigases, abrieron la puerta de entrada con lujo de violencia, la derribaron y siguiendo entre la bruma se aproximaron a cada lugar.
El césped ya estaba dejando su huella en forma de humo, lentamente Niedere se veía acalorado, las llamas se levantaron por un instante, luego con una manguera un par de hombres disiparon el fuego que amenazaba con propagarse en toda la casa e incluso en áreas circunvecinas.
Alguien salio de la casa y menciono refiriéndose a Niedere.
-señor, venga, es importante.
Niedere dejo lo que estaba haciendo y fue hacia el interior de la casa, pero no tenia mascara anti gas, por ello se limito solo a quedarse ante la entrada, espero a que alguien le diera una mascara, para ello un hombre se le acerco y le dio una. Al colocársela, de inmediato entro con cierto cuidado.
Avanzo a cuenta gotas, veía en todas direcciones, notaba que algunos hombres ya se habían hecho camino y estaban en la parte superior de la casa, que fue a donde se dirigió, subiendo la escalera de mármol, se agarro del barandal y cuidadosamente fue alternando cada paso tomando cada escalón con seguridad.
-allá señor…
Le indicaron la habitación del fondo de la casa, el seguramente había que ahí no habría nadie, puesto que era usado como cuarto de ejercicios en donde el pasaba las mañanas.
Avanzo lentamente, no estaba seguro de que encontraría, por eso agudecio la vista aun mas, se sostenía de las paredes, al llegar al borde de la puerta, noto que habían varios hombres por ahí y no fue sino el que se encargaba de aquella operación quien salio al pasillo y le dijo.
-hay una par de personas… no le voy a mentir…están muertas…debe de reconocerlas… ¿esta listo ahora o quiere tomarse su tiempo?
-de una vez…
-bien, entre…
Niedere entro mas con expectación que con el deseo de ver de quien se trataba, no quería encontrarse con alguien conocido, esta como contando cada paso, eso porque quería que no fuera lo que se estaba imaginando, ciertamente cuando vio los dos cuerpos en el suelo, noto también el charco de sangre, y justo antes de verlos, se fijo en su entorno y noto con cuidado que estaban en el suelo un par de placas de policía, como que abrió los ojos aun mas y dijo.
-¿que es eso?
Parecía que nadie se había dado cuenta de las dos placas y un hombre las levanto y con cuidado usando unos guantes de hule, las acerco y las leyó.
-insignias de la CIA…
-¿CIA?-Menciono Niedere quien de pronto se agacho y descubrió a los dos cuerpos en el suelo, y se dio cuenta de que ninguno de los dos muertos eran conocidos de el.
-¿los reconoce?
-no, nunca los he visto…
-bueno…
Niedere se recargo sobre la pared, quedo mirando en su entorno y como ya se había disipado el gas, se quito el casco y lo dio a otro hombre.
Vio como estaban revisando los cadáveres, los estaban intentando reconocer para eso hicieron algunas llamadas a el centro de marina de Montreal, con su sistema de comunicación de radio control, pero parecía que la comunicación buscando toda la información requerida iba demorar un poco.
Niedere continuo revisando por si mismo el lugar, los vidrios estaban rotos, parecían haber sido quemados, eso lo inquieto e hizo venir a una mujer que estaba hi como perito.
-mire…
Ella se acerco y noto lo que Niedere le mencionaba, ella se coloco los guantes de hule, lentes y con una brochita se limito a revisar los contornos de los vidrios.
-esto es raro, parece que fundieron el vidrio…
Niedere se volvió a otro lado de la habitación que era algo espaciosa, dejo un poco el lugar donde la ventana y se aproximó hacia el medio, miro arriba y noto que la lámpara o estaba sujeta como debía, e incluso había un dardo en el techo, tal vez disparado desde una pistola o un rifle de dardos…
Se ayudo con una silla, la acerco y la coloco, entonces se subió en ella y alargo el brazo pero sin tocar nada, solo vio que era lo que había.
-¿Qué es eso?-Dijo la mujer al darse cuenta de lo que Niedere hacia.
-¡un dardo!
Ella observo el objeto con cuidado pero desde donde se encontraba no tenia buena visiona si que le menciono a Niedere.
-tengo que verlo de cerca.
-claro, sube.
El se bajo de la silla y ella se subió, al tiempo que revisaba, saco de uno de sus bolsillos una lamparita, y la dirigió a donde estaba el dardo, ayudándose con unas pinzas, comenzó a denotar su estado de composición.
El dardo esta como enterrado en el concreto, eso enrareció las pinzas que comenzaron a desprender un raro gas, que de pronto se noto como ácido, a lo que ella menciono.
-Alejémonos de aquí…
-¿quieres la mascara?
-no, el dardo aun no se descompone, se desprenderá ácido de el, la mascara no servirá de nada, incluso, la puedo perforar, mejor salgamos hasta que el ácido se diluya…
Para eso y por ultimo, sacó de su bolsillo un atomizador pequeño que tenia un liquido neutralizador, lo roció desde lejos sobre el dardo y entonces bajo de la silla.
No salieron de la habitación solo se distanciaron un poco, ya que los cadáveres aun se encontraban por ahí, debieron quedarse y mirar lo subsiguiente, un par de hombres advirtieron lo del dardo y no quisieron acercarse, pero los fotógrafos ya estaban tomando placas de los muertos e incluso ya habían hecho un dibujo del lugar de la ubicación de las muertes, de esa manera, terminaron con lo de rigor, y subieron los cuerpo enfundados en bolsas y los colocaron en camillas.
Niedere vio cuando se los llevaron y fue detrás, se dio cuenta de que ya el gas se había disipado por completo en toda la casa y se dio a la tares de revisar todas las habitaciones con cuidado.
Comenzó con la suya, la puerta estaba derribada, hacia dentro, noto eso porque se ubicó en el cuadro de la entrada, desde ahí noto que todo estaba revuelto, incluso habían forzado sus cerraduras de los cajones y clóset, así como la chapa de la pequeña bóveda ubicada en una pared cubierta por uno de sus trajes situada dentro del closet.
Su ropa estaba en el suelo, pisoteada, no se explicaba como pudieron tener tanto tiempo para hacer todo aquello sin que nadie la impidiera y comenzó a evaluar la situación.

-¿su cuarto?-Dijo el militar que comandaba la situación.
-si…mayor…
-¿tiene donde quedarse?
-si…
-cerraremos todo esto hasta que las averiguaciones se hayan terminado, los encontraremos, no tenga cuidado…
Niedere se quedo pendiente, y quitándose de la entrada fue a otra de las habitaciones, la de steve.
Los pisos eran firmes con cubierta de mármol y madera, había suficientes entradas de luz, las cortinas se encontraban arrancadas de los lugares, había rastros de metralla en las paredes de los pasillos, casquillos sobre el suelo y rastro de sangre embarrada.
La habitación de steve no estaba mejor, tenía todo revuelto, el colchón estaba roto con muestras claras de haber sido roto por medio de una navaja punzo cortante, el suelo estaba levantado, habían hecho un hoyo en el suelo como con un hacha, y el espejo estaba roto, y parecía que con los pedazos habían cortado a alguien ya que estaba lleno de sangre.
La joyería de steve estaba por todo el suelo, anillos, cadenas de oro, mancuernillas y sujetadores de corbata; las fotografías estaba hechas pedazos, pero entonces la perito entro y vio el techo y emitió un gritito.
-¡ouch!
Niedere levanto la vista y se dio cuenta de lo que había, estaba manchado de sangre y aun las gotas estaban cayendo, sin darse cuenta una le había manchado el hombro, la perito se impacto tanto que el mayor le dijo.
-¡puede salir de aquí ahora mismo!…Denia…
Ella se recargo y sostuvo del marco de la puerta, como que sintió un mareo, pero luego logro la compostura y ya más calmada dijo.
-es el mismo emblema judío…
Pero sobre el emblema se encontraba el símbolo del sol, así que ella se limito a tomar una muestra de sangre y la ubicó dentro del vaso de ensaye.
-la llevare a laboratorio, veremos de quien pudiera ser…
-la marina tiene archivos de los criminales mas conocidos del orbe, seguramente encontraremos algo...-dijo el mayor.
-eso suponiendo que sea de alguno de ellos…
-¿los que están muertos?
-precisamente…-Dijo Niedere.
-¿y si no?-Dijo Denia.
-entonces comenzaremos de principio…-Dijo el mayor.
Niedere reviso los objetos de steve, ya nada se podía rescatar, únicamente estaba viendo lo que pudieran haber buscado y que se pudieran haber llevado, para eso reviso el closet en donde el sabia steve guardaba sus documentos mas elementales y se dio cuanta de que la bóveda pequeña estaba abierta, la habían hecho explotar con algún arte facto plástico.
-¿falta algo?-Dijo el mayor.
-si, al parecer…una estatuilla de oro macizo de unos 24 quilates, del periodo clásico maya, proveniente del centro de América..La tenia desde que el museo se la dio en consigna, la debía de guardar para luego llevarla a su destino, el museo de antropología en la ciudad de México…
-¿su valor?
-es incalculable…
Los demás documentos habían sido quemados, incluso el dinero que había ahí estaba intacto, las monedas de plata y oro no se las habían llevado, así como tampoco un viejo brazalete de oro de hechura artesanal que estaba valuado en un millón de dólares.
Niedere entonces hecho todo en una bolsita de plástico y lo tomo en su mano, miro en su alrededor y noto que había la mochila que siempre ocupaba y que steve le prestaba de vez en cuando la necesitaba; así que la tomo, la abrió y guardo en ella sus pertenencias.
-nos quedan un par mas de habitaciones...-dijo Niedere dirigiéndose a la salida de la habitación de steve, aspiro aire y luego se dio prisa, la habitación contigua estaba también muy mal, pero ahí si estaba la puerta, noto que algo se movía y se puso en guardia, incluso el mayor que le seguía, saco su pistola y la apunto al bulto, entonces avanzaron adentro y revisaron, removieron las cosas de entre la ropa y no había nada, solo había sido una ráfaga de aire que había entrado ya que la ventana estaba abierta.
-¿de quien es esta habitación?-Dijo el mayor.
-de claudia, es una monja que desde hace tiempo se queda con nosotros, es como de mi edad, ahora anda en una misión de caridad en África…
Niedere avanzo con medida, no quería violentar la intimidad de la habitación, por el mismo pero más por claudia que aun no sabía nada, y que guardaba todo con sumo cuidado, solo vio que su ropa estaba en su lugar, pero sus documentos estaban por el suelo, su caja fuerte también había sido violada, por eso comenzó a registrar todo.


























 


CAPITULO SIETE

Zona verde

Un par de siluetas entraron en las instalaciones espaciales, lo hicieron con sigilo, sin ser notados hurgaron en todos los lugares, removían documentos y tiraban estantes; era de noche y un reflector recorría lentamente un lado a otro el patio principal y la zona siendo verde por el color con que se había pintado, subyugada, por un segundo artefacto, que iba en sentido opuesto, tuvieron que adentrarse entre la sombras de la noche, eran ya entradas las primeras horas de la mañana.
Ambos individuos tenían un arma, era ligera y poseía un silenciador, les servía con eficiencia, en cualquier momento lo podrían ocupar, porque la ocasión se presentaría, de un momento a otro ellos tendrían que recurrir a sus mejores artilugios.
-ya esta, ya lo tengo.-dijo suavemente una voz femenina.
-aquí hay otro-menciono rápidamente una voz masculina, en eso, varios sujetos entraron en las oficinas, lo que los hizo ponerse alertas ya que se encontraban en los despachos interiores.
Se ocultaron, y al sentir de cerca el peligro, se adentraron en la oscuridad que rayaba hacía la madrugada, uno de ellos encendió la iluminación de la oficina y reviso con cuidado.
-oí ruidos por aquí_ dijo el guardia a los cinco hombres que lo acompañaban.
-parece que no hay nadie-menciono un tipo sucio al hablar.
La iluminación se volvió a apagar, y ambos que vestían de negro, salieron de su eventual escondite, al darse cuenta de que el peligro había pasado intentaron salir de ahí.
-ya se fueron-dijo convincentemente la mujer, iluminándole a su compañero en el rostro con una pequeña lámpara de mano infrarroja.
En eso, uno de los guardias dijo al urgarse en los bolsillos y notar que no se encontraba en ellos lo que buscaba con tantas ansias.
-se me olvidaron las llaves.
Los hizo volver, la oficina estaba con la puerta abierta, eso fue ocasión de que vieran a los intrusos, pero entonces se dieron prisa.
-ya nos vieron-menciono con firmeza cuando los vigilantes ya se aproximaban.
Uno de los guardias exalto la voz y menciono al tiempo que usaba su silbato con fuerza, por eso, los ladridos de los perros de caza no se hicieron esperar.
-¡hay intrusos!
Una inusitada balacera se inicio, seis de los soldados arremetieron en pos de ellos, tenían el rostro cubierto por pasamontañas ceñido, dentro del cuartel comenzaron los gritos y las sirenas comenzaron a dejarse escuchar, eran las alarmas, por ello todos comenzaron a movilizarse y salir de su letárgico descanso, eran las cuatro de la mañana entonces.
Pero ellos se diluyeron entre los muros y encontraron el mismo subterfugio por el cual entraron, era un pequeño orificio en la tierra, se adentraron en él y sintieron que los seguían.
-por aquí se metieron-menciono un soldado con cierta sofocación-
En eso, uno de los soldados le alcanzo la metralla que comenzaron a librar los dos en huida, al caer sucumbió en el acto, así mismo como el que lo secundaba.
-¡le dieron al teniente y al cabo!-dijo otro de los soldados que se había adueñado de la entrada y no se atrevía a seguir.
Como dos topos se estaban escabullendo, sus siluetas zigzagueaban entre el tiroteo, salieron al patio trasero y subieron al techo, los reflectores estaban oscilando constantemente y yendo de un lugar a otro, los soldados trataban de ubicar su posición, pero ambos se movían rápido y por eso llegaron a donde la salida, no obstante los que iban tras de ellos, se apresuraron a tomar sus respectivas posiciones en espera de que no escaparan.
-allá van-dijo alguien furico.
En ese instante tres soldados más cayeron producto de las heridas de bala de titanio y sangrantes ambos se lamentaban; al subir a su vehículo, como pudieron lo pusieron en marcha, no encontraron las llaves, seguramente las habían tomado, por ello lo tuvo que ajustar y conectar directo, entonces saco una chispa y el motor comenzó a funcionar por eso pudieron alejarse con rumbo de la espesa jungla.
Un helicóptero restallaba con su hélice de mosquito y varios eran los vehículos en que los perseguían de cerca, disparaban tratando de bloquear su partida.
-¡los tenemos encima Niedere!
-¡toma la basuka Emma!-mocionó hallándose frente al volante del vehículo todo terreno y haciendo que no les dieran alcance así como tampoco les alcanzara alguna bala.
Mientras eso sucedía, tomo su arma y comenzó a dispararles, trataba de obstruir su camino, ya que uno de ellos los alcanzo y los chocaba.
-¡date prisa Emma, disparales ya!
Al hacer fuego, algunos de los vehículos que los perseguían se comenzaron a incendiar, el helicóptero todavía estaba tratando de detenerlos, los acometió Niedere con su transporte cuando se les acercaba el otro, pero la maleza fue en la que se adentraron, en la espesura detuvo la marcha.
Tomo otra de las bazucas con misiles teledirigidos y lo alimento con una cápsula de nano plutonio, al disparar noto como la línea entre el helicóptero y ellos se hacia menos, un estruendo les dijo que el aparato había sido alcanzado y comenzó a caer luego de estar cubierto en llamas.
-por ahí-dijo Emma.-por acá-dijo Niedere mostrando un sendero repleto de árboles de rugoso color y extenso cuerpo.
-¡cuidado!-dijo Emma cuando un misil pasó cerca de ellos y fue para hacer blanco unos metros atrás.
Entonces decidieron abandonar el vehículo en que viajaban, dejando en lo oscuro, al bajar se posicionaron de un par de armas y un maletín que Niedere se encargo de custodiar.
La tomo de la mano y comenzaron a correr lo mas rápido posible, la prisa los apremiaba y cuando llegaron a un claro ella menciono.
-ahí esta Niedere…
Notamos la motocicleta, estaba entre las plantas, se acerco a ella y noto que estaba lista para ser usada, de inmediato le menciono a Emma quien se veía abatida.
-¡sube!
Emma aun tenía la basuka entre sus Brazos, en eso, otro helicóptero los rondo y con su reflector los alumbro, por ello Emma levanto la mira de su arma y fue cuando menciono Niedere.
-¡disparales ahora, derribémosles!
Emma no tardo en darse cuenta de que el cohete que había disparado hizo blanco, al estallar, los pedazos cayeron sobre la espesura y comenzó a incendiarse parte del lugar.
-¡les dimos!-menciono Emma tirando la basuka ya que los repuestos se había terminado.
-¡sujétate Emma!-menciono Niedere al arrancar la motocicleta.
Emma se apretó a su cintura, iban sorteando los caminos de terraceria y se encontraron con algunas veredas muy accidentadas que los llevaron lejos.
Al salir de lo verde, tomaron un atajo bastante transitable, que los llevo hasta la zona de lanzamientos espaciales.
Se encontraban al pie de la base de KOUROU GUYANA FRANCESA y a unos cuantos cientos de metros de la plataforma, detuvo la motocicleta y entonces menciono Niedere.
-llegamos, hay que darse prisa.
Del asiento, saco algunos artefactos y los preparo para usarlos, estos eran microscópicos, producto de la nanotegnologia. Entonces sincronizo las manecillas de su reloj, marco dos minutos antes de las doce, tiempo adecuado para poder irse de ahí bien librados.
Emma se puso un tanto extraña, su semblante era el de una persona distinta, seria, casi sin apasionamiento, sobando su arma de vez en cuando, parecía que esperaba a alguien.
-¿sabes que te he amado siempre Niedere?
El no le puso atención al caso y tomándose su tiempo terminar con lo que hacia menciono.
-si Emma, pero ahora no es lugar para mencionarlo, hay trabajo que hacer y aun no hemos terminado.
Mientras alistaba sus utensilios y armas, Emma modifico su semblante más aun, parecía distinta, extraña e invariablemente eso Niedere, noto como si le ocultara algo.
-¿Qué te pasa Emma, te sientes bien?
-no es eso Niedere…
Emma se distancio un poco de èl, le mostró su arma con la que estaba apuntándole y la sujetaba con ambas manos y dijo.
-lo siento Niedere.
Le seguía apuntando mientras volvía la cabeza a todos lados e incrédulo entendió lo que sucedía y menciono.
-¿Qué haces Emma?
-tengo que evitar que los destruyas.
Al escuchar eso, Niedere menciono con las facciones frías y la mirada clavada en ella.
-¡suelta el arma!
-¡no puedo Niedere, te amo, pero tengo que matarte!
-¿cuanto te dieron por traicionarme?
-lo suficiente como para no preocuparme nunca…esto el presente…
-esos terroristas no te van a respetar lo que haces, una vez que consigan lo suyo, no les importara quitarte de en medio…
Niedere noto en la palma de la mano izquierda de Emma un símbolo y menciono.
-no conocía que fueras judía…
-ahora lo sabes…
-esa facción es malvada.
-el mundo ahora nos pertenece Niedere, y los que se opongan los liquidaremos, lastima, pudimos ser algo mas…
-ese es el símbolo de una secta…
-es antigua…todo su conocimiento nos servirá ahora que cuando todo cuenta, nuestro señor es más poderoso que tú…
Niedere movió la cabeza.
-eso…lo dudo…
Mientras eso sucedía, unos ruidos entre las hierbas se escucharon, eso fue suficiente para que Emma se distrajera y de un movimiento hábil, la desarmo Niedere, al maniatarla la deposito en el suelo que estaba húmedo y por ahí tuvo la certeza de que algunos seres ya les siguieran de cerca.
-no te muevas-menciono Niedere al darse cuenta de que varios hombres comenzaron a rodear la zona, por lo tanto, comenzó a disparar al aire como advertir de su presencia, al tiempo que se tiraba al suelo pecho tierra.
-me habían dicho que me habías traicionado Emma, pero no quise creerlo, y decidí darte el beneficio de la duda, ahora comprendo que no tienes sentido de la lealtad y creyendo que valías, ahora se que no significas nada, espero que los que te estén pagando sea mucho, esta traición les costara demasiado, los deprimiré financieramente y no tendran dinero para seguir con el terror.
-¡ríndete Niedere!-menciono Emma revolviéndose entre las hiervas.
Saco de entre su ropa una bomba de gas lacrimógeno y la arrojo a donde se había escuchado el ruido, un tipo de inmediato comenzó a sofocarse, lo escucho porque comenzó a toser, el lugar se permeo de humo, trato de alcanzar la motocicleta y tuvo que abrirse paso entre las ráfagas de metralla que ya comenzaban otra vez, lo cual parecía una verdadera hazaña.
Niedere no se había dado tiempo de esposar a Emma únicamente la había atado con una cuerda y al notar que los soldados se acercaban aprovecho el momento para escapar.
Tuvo que seguir avanzando, pecho tierra hasta alcanzar su cometido, luego, se llevo la motocicleta entre la bruma, unos metros adelante se subió y comenzó por avanzar a toda velocidad.
Fue tiempo propicio de hacerse mas a las instalaciones espaciales, en la zona de lanzamiento se daba la cuenta regresiva, varios soldados acordonaron todo, entonces saco un pequeño maletín en el cual tenia su teléfono celular, unas mariposas de nano tamaño explosivas, que funcionaban con frecuencia remota, mismas que hizo volar a donde se encontraba la nave amarilla que se dirigía a la planicie del ermitaño en la constelación de cáncer.
Luego, una abeja y dos mosquitos volaron a donde se encontraban las dos antenas de nano frecuencia clandestina, que recibían y emitían comunicaciones de diversa índole.
Cuando esos insectos llegaron a donde les fue indicado a través del nano computador que lo había conectado al teléfono satelital, se quedaron adheridos a las estructuras metálicas.
Un zumbido dejo claro el encendido, entonces pulso Niedere los datos clave, luego, fue a su motocicleta y arranco el motor y cuando un grupo de soldados serpiente se le acerco, puso el botón de su teléfono celular y la explosión no se hizo esperar.
Ya salido del rango de alcance de alta frecuencia y aun al alcanzó a notar como los hierros se retorcían, el incendio que desde el primer instante no se hizo esperar, levanto una densa nube radioactiva de polvo verde.





















































CAPITULO OCHO

ZONA VERDE DOS

Un gato montes rompió el silencio con un rugido, se notaba avanzar en paralelo con la motocicleta, las hojas de los árboles se movían ligeramente y cuando el terreno se tornaba mas sinuoso que nunca, una parvada levanto el vuelo.
Aun tenia la mascarilla cibernética en su rostro; se había protegido del gas lacrimógeno al accionarse automáticamente, su cabeza quedo cubierta hasta los hombros, tenia un color negro metálico y la vista le brillaba iluminándosele en el trayecto.
La selva se veía amenazante, era espesa, tanto que cada vez que un árbol se topaba con el, le parecía un obstáculo como a un metro de cerca de los demás matorrales, la vegetación tropical quiso dar los primeros esbozos de querer clarear.
Aun le seguían y cada vez mas de cerca, un par de naves sonda dirigieron sus reflectores amarillentos hacia abajo, el faro de la motocicleta fue captado y entonces escucho brevemente que las aguas de un caudaloso rió rondaban por ahí y comenzaban a correr con cierta violencia unos metros adelante.
La consola de comunicaciones de la motocicleta se ilumino, el tablero dio la alerta parpadeando en rojo y su ropa se plegó a su cuerpo herméticamente.
Habían disparado un misil y ya estaba por llegar a el, entonces se paro sobre el asiento y cuando estaba a la orilla del río salto y justo al clavarse en sus incesantes y calientes aguas, el misil colisiono con la motocicleta, eso lo pudo escuchar aun a pesar de estar cuatro metros dentro del agua.
El visor era perfecto, la mascarilla de plasma activo el modo acuático y del lado derecho emergió un esnorquel con forma de culebra de agua, eran tan eléctricas que si alguien la hubiera visto seguramente no se hubiera atrevido a acercarse.
Comenzó a nadar de inmediato, plegó los brazos a su torso y movió sus piernas con rapidez, noto entonces que no había peces y al estar en aguas mas profundas atestiguo como un grupo de pirañas le rondo, sin embargo copudo servirles de alimento, su ropa era blindada y emitió una onda alterna de calor y frío.
Al llegar al cause del río, advirtió a los soldados, iban a bordo de un blindado y revisaban con rapidez la orilla, pero sin entrar en el agua, seguramente se dieron cuenta de que estaba infestado de pirañas, cocodrilos y víboras venenosas y ellos no tenían protección alguna.
Emma venia con ellos y troto infructuosamente de encontrarlo, uso todos sus medios que tenia a su alcance e incluso instalo un sonar a la orilla.
-¡escapo!-dijo un soldado.
-revisen el río-dijo el coronel-hay que dar con el.
De inmediato todos se encontraron en los umbrales del cause, trajeron una lancha de motor fuera de borda y con ella se ayudaron en la persecución.
Todo fue infructuoso, ya que no pudieron atrapar a Niedere, los soldados zombi decidieron retornar a su cuartel, según escucho por medio del súper micrófono contenido en su reloj de pulso.
Pero no se fueron sin haber disparado en repetidas ocasiones al agua.
Ellos aun tenían la creencia de que estaría cerca y en efecto, así era, sin embargo cuando su mano se sostenía de la orilla, la nave manta raya paso sobre la superficie del río y emitió una onda láser e hizo hervir el agua que se torno fangosa que ya avizoraba cierta variedad de insectos.
Había accionado sus zapatos, de ellos unas potentes hélices instaladas en las suelas, hicieron moverse lejos de ahí con gran velocidad, ya no escucho sus voces, solo el ruido de motores que emanaban de sus vehículos, entonces tomo la cola de un cocodrilo y dejo que lo llevara a la orilla.
El remo de un kayak estaba sobre la hierba agria y la embarcación de un solo pasajero estaba flotando, era tiempo de comenzar en toda su expresión y entonces se aventuro y remo con violencia.
Las rocas estaban por doquier, a los lados las bestias salvajes rondaban y de vez en cuando el canto de un pájaro se dejaba ver.
Al desembocar, las aguas se volvieron mansas, en un claro se detuvo y acercándose a donde se encontraba un torrente descendió de su embarcación.
Ahí cambio de transporte, subió a una balsa con remos anchos, de madera y de textura plástica, así los rápidos fueron cosa de niños, ya no había tanta violencia en las aguas, al darse cuenta de su soledad, se quito el snorquel y tomo un poco de aire natural, lo cual lleno sus pulmones de oxigeno y deshecho el aire viciado.
Enseguida, tomo sus lentes y trazo con ellos un mapa, su reloj tenía brújula holográfica y le sirvió para que el mapa indicara en que zona se encontraba, al marcar su posición, recorrió la espesura con la vista y noto que el sol estaba saliendo con un tono rojo.
Dado que el fantasma estaba cerca, cosa de unos tres kilómetros río abajo, se dejo llevar por la balsa que ondulaba en las aguas que paulatinamente se sosegaban, la vegetación era abundante y había una bruma densa que apaciguaba los sentidos.
Para eso momento seguramente los soldados zombi y su coronel habían retornado a lo quedo de su base espacial, que en su tiempo era muy hermosa, construida con los últimos avances de la tecnología hiper quántica.
La nave quedaría construida, tenía una forma de ballena azul y sus potentes miradores permitían avizorar las estrellas todo el tiempo.
Se imagino lo que estarían discutiendo, Emma quien atestiguo el suceso tal vez estaría diciendo.
-¡ese canalla se nos volvió a escapar!
Diría el coronel con el semblante pálido y su jefe estaría ahí, de esa manera les lograría infringir temor a sus soldados y a él respeto.
-¡ese tipo es incansable!-diría el coronel, para luego volver a intentar el atrapar a Niedere.
-¡ese tipo no se volverá a burlar de los franceses! Diría el jefe de ellos, golpeando con violencia su escritorio, mismo que podrían haber levantado de entre los escombros.
-¿Qué quiere que hagamos señor?-Diría el coronel.
-primero que nada, quiero que Emma nos diga todo, ella sabe mucho al respecto de Niedere.
-no creo que haya algo mas sobre Niedere, ustedes lo espiaron y fueron muchos años, saben todo de él.
-pues quiero saber algo mas, no es posible que siempre nos gane, es un pobre mexicano de…
-de primera clase.-diría interrumpiéndole Emma-eso lo tendrá que solicitar a Londres, ya que si hay algo nuevo de él, ellos sabrán…
-hagan un recuento de los daños, quiero saber con lo que podemos contar.-diría su jefe.
-le destruimos su auto y su motocicleta quedaron inservibles, tendrá que desplazarse a pie…-diría el coronel Haroldo.
Eso daría la oportunidad a que su jefe mencionara que Niedere aun tendría algunos recursos prevalecientes con los cuales accionar y sortear así la situación.
-Niedere tendrá utilizar algún transporte e ir a la ciudad más cercana, envié un pelotón para que lo rastreen…
-enseguida señor…-mencionaría el coronel.
-¿creen que doce hombres serán suficientes?-diría Emma.
-deben serlo, dado que es un solo un hombre.
-¿Por qué cree eso jefe?-Diría Emma.
El jefe era impositivo y por eso se aventuraría a mencionar sin recato alguno, ya que se mostraría evidentemente furico y con la tendencia de ser brutal.
-¡pero mis hombres son mejores!
-Niedere es el máximo oponente que usted haya tenido en su vida jefe…
-ya veo donde vas Emma, pero Niedere coleman es un hombre y lo voy a atrapar…-Eso lo diría levantándose de su asiento y estando al borde de perder los estribos, entonces Emma muy dada a eso le mencionaría abiertamente como desenfadándolo y corroborando de lo que su jefe seria capaz.
-le costara muy caro, si usted no mata a Niedere, él lo matara a usted y eso es seguro.
En ese instante Haroldo interrumpiría…
-su transporte esta listo, debemos salir de aquí…
-recojan todo lo necesario y den aviso a París de lo sucedido…
Para eso instante ya estaba llegando muy tranquilamente al término de los rápidos, entonces remo para alcanzar la orilla y por eso distinguió que el fantasma estaba en los alrededores.
Al notarlo, se dispuso a levantarlo con todo y balsa, sin embargo eso no pudo ser posible, notaron algo raro y por eso no se acerco.
No quería hacer demasiado ruido y le instalo el silenciador a su arma, avanzo con cuidado y lentamente entro en la maleza.
Todo era armonía, el fantasma acciono el sistema furtivo a fin de no hacerse notar, pero alguien que le seguía hizo ruido suficiente para poner en guardia a los soldados serpiente.
-allá esta-dijo un hombre.
De pronto, fueron notándose los soldados zombi, pero aguardo hasta el ultimo momento, fue dejando fuera de combate a algunos mientras que el shadow hacia disparos con una arma de partículas quánticas y ponía en agonía a sus enemigos.
-¡ahhhggg!, Me dio el maldito.-dijo apenas un soldado zombi.
Enseguida les acometió, al abrirse paso sintió que estaban derrotados y escucho a uno de ellos mencionar.
-¡sargento!, ¿Qué hacemos?-Dijo el cabo al notar que solo quedaban cuatro soldados zombi.
-¡esperen! tenemos que agarrarlo antes de que suba a su nave, tal vez ahora trate de ir ahí.
Esperaron un largo rato, hasta que algo notó y se dieron cuenta de que no había movimientos, el sargento dijo
-usa tu lampara e ilumina alla.
Entonces saco Niedere de su bolsillo una moneda dorada y la arrojo al agua, se convirtió en una masa gelatinosa azulada como gel, la sustancia se vio densa, por ello salto al agua y se introdujo en la oscuridad, mientras que los soldados zombi fueron donde se había visto su silueta.
-no es nada-dijo el cabo.
-¡maldito, es muy astuto!
Eso fue lo último que dijo el cabo porque en su frente comenzó a brotar un torrente líquido sanguinolento que despedía hedor, producto de un disparo, lo que hizo que el cabo cayera sin vida.
-¡cúbranse!-Dijo el sargento.
Mientras tanto Niedere subió al shadow que se había sumergido en las aguas a través de la escotilla, situada en su casco, esa era una entrada de emergencia.
Ya dentro, se preparo, se quito la ropa mojada y se vistió de otra seca y confortable después de tomar una ducha, entonces maniobro el shadow y emergió del agua subiendo en pos de la nave fantasma que ese encontraba en el cielo que ya era muy claro.
Parecía que se les había escapado a los soldados zombi, que en ese instante se habían convertido en simples observadores.
Niedere coleman se ubicó sobre la proa del shadow y bajo una caña de pescar, el mar era inmenso y ya era el medio día de aquel sábado del año 3045 y decidió probar suerte con la nueva especie de peces sintéticos.















































CAPITULO NUEVE


ESTUVE EN BRASILIA


Adriana era un mujer rubia, ligera de cuerpo y cuando caía la nieve sobre el lago brasilla se deslizaba sobre el espejo helado, sus patines dejaban un surco delgado que otra persona se encargaba de borrar.
Con unos prismáticos le observo por una hora, luego se situó sobre el respaldo de una banca cercana, no tenía frío, su cabeza estaba cubierta por una gorra y sus manos estaban protegidas por unos guantes.
Una multiplicidad de personas de todas las edades se daban cita ahí después del trabajo, dejo los prismáticos y hojeo un poco el diario que tenia en su brazo, era un trozo de papel a color que estaba arrugado, entonces noto como una parvada se alejaba dibujando con su canto el cielo verde.
Adriana salio del lago y al quitarse los patines vino a Niedere, ella le había visto hacia tiempo, se le veía risueña, llevo sobre sus hombros los patines y saludo a unos niños que jugaban cerca y luego se refirió a él.
-¡Niedere!, ¿Cómo estas amor?-Menciono con tal delicadeza que se sintió en el paraíso mismo.
No tenía tiempo para arrumacos y tomándola del brazo la llevo consigo, al comenzar por caminar, ella se mostró extrañada y soltándose menciono con la misma sinceridad que hacia un instante tuviera.
-¡Niedere!, espera, ¿Qué sucede?-Menciono deteniéndose.
Entonces quitándose los lentes negros para sol, le dirigió su atención comprensivamente, le acaricio el mentón con ternura y menciono al continuar la caminata.
-un agente murió…
Siguieron caminando, ella no atendió a lo que Niedere menciono, tardo un poco en digerir aquello y entonces saco de su bolsillo un recorte de una revista de tiraje mundial y le mostró lo que era.
Lo observó meticulosamente, estrujo el recorte y se puso entonces triste su mejilla y al mencionar el motivo, se sintió que fue como un balbuceó, por lo que creyó debían ir a su alojamiento.
-¿Quién la mato Niedere…?
No menciono nada de momento, dejo que el tiempo transcurriera sin apresuramientos y unos pasos adelante surgió el momento propicio, Niedere se detuvo, le tomo de las manos Adriana y la atrajo a sus labios.
-fue una traición…-Menciono cuando el cuerpo de Adriana se alojo en el pecho de Niedere.
Pese al frío los pies de Niedere estaban bien, surcaba los treinta grados la temperatura ambiente pero bajo cero, tenia zapatos sintéticos y una camisa con cuello de tortuga con la que cubrió su cuello.
Adriana había nacido en Ámsterdam, era diseñadora de sistemas de generación continua-inteligencia artificial-, fueron al para bus y aguardaron a que el camión llegase.
Sentados como estaban, ella se recargo sobre el hombro de Niedere, y menciono al dibujar con su pie un nombre en la nieve que se atrincheraba a sus pies.
-¿Qué es eso Adriana?
-así se llamaba…
El autobús llego, por eso subieron y Niedere aporto los pasajes, se ubicaron en la ventanilla derecha y vieron como transcurrían los minutos mientras estaban en marcha.
El transporte no estaba lleno, un par de mujeres se situaron delante de ellos, el conductor era una mujer negra y llevaba a un sobrecargo que le servia como vigilante. Cuando el bus se detuvo, las puertas se abrieron y ellos bajaron.
Las puertas del hotel hilton eran de suntuosidad y de lujo, ahí era el lugar en que se hospedaban y estaban frente a ellos; al entrar les saludo el hombre vestido de rojo, las puertas se abrieron automáticamente y Niedere noto como el ambiente interior era confortable.
La suite principal era su lugar, Adriana tiro sobre una silla tallada finamente su abrigo de piel de oso polar y entonces Niedere cerró la puerta.
Alguien llamo por el timbre, Niedere abrió y se encontró con un mensajero del hotel, tenia un mensaje para él.
-¿Niedere coleman?
-si, ¿Qué desea?
-¿es usted el juez?
-ya le dije que si, ¿Cuál es el motivo de que irrumpa en la tranquilidad de mi hogar?
-la señora carolina esta en la suite presidencial y quiere verlo a usted…
Carolina brens era una antigua amistad, al saber que se encontraba en el hotel, Niedere sintió curiosidad por saber cual era el motivo de su urgencia al requerirle Niedere.
-esta bien, dígale que iré a verla, pero tendrá que ser mas tarde…
-esta bien señor, ella le esperara…
Al cerrar la puerta, Adriana veía a Niedere y por eso el menciono.
-tengo que asistir a una cita, ¡vístete y espérame en el auto!
-¿tardaras?
-no se, tal vez, pero tengo que ir, cierra la cuenta del hotel.
Enseguida fue a su habitación para estar listo, abrió las cortinas y noto que las naves pangea sobrevolaban la ciudad, eran el transporte común de los citadinos civiles que los llevaban de un lugar a otro.
Brasilia estaba repleta de edificios blancos, sus calles eran extensas líneas que se prolongaban ininterrumpidamente.
En la calle, un niño pedía dinero para comer, se notaba que la estaba pasando mal, era una época difícil y vestía un abriguito blanco que arrastraba en la acera.
Una pareja se besaba atajada en la esquina, un poste de luz los ocultaba, un perro guardián se jaloneaba de la correa y el vigilante que lo traía lo calmo con la caricia de su mano.
Un hombre se había congelado, estaba semi-desnudo y lo cubrían unos periódicos, una ambulancia llego y de ella bajaron una cuadrilla de paramédicos con una camilla.
La ropa de Niedere estaba sobre la cama, se comenzó a vestir, el viento era frío, casi congelaba hasta las coyunturas de los huesos, se puso el saco y fue al espejo.
En la sala, Adriana ya había hecho las maletas, con uno de sus guantes golpeaba ligeramente su mano, su gorra cabria en su cabeza y tomando Niedere su equipaje y le dijo.
-que el valet te ayude con las maletas.
-¿llevas a tus amigas?
-si, nunca salgo sin ellas.
Dio un par de golpes a la puerta con el llamador de metal y se encontró con una voz que le dijo.
-¿Quién es?
-Niedere…
La suite era fastuosa, el humo del cigarrillo se elevaba hasta el techo, entonces una mujer emergió de la otra habitación.
-¡Niedere!, ¡que sorpresa encontrarte en Este lugar!, es una zona neutra.
-te equivocas carolina, esta zona no es neutral, estas en mis dominios…
-si, si, pero he venido para hacer un trato contigo.
-¡no hago tratos con terroristas!… ¡Además tu diste la orden de asesinar a todo aquel que llevara sobre su cabeza una gorra de beisbolista!-menciono Niedere fehacientemente.
-¡por favor Niedere!, deberías de ser mas comprensivo, ¿Por qué no nos relajamos y la pasamos bien?
Carolina se prendo del pecho de Niedere, se había quedado apenas con un baby doll que le delineaba su figura con cierta sensualidad.
-¿Cómo te arriesgaste a venir aquí? Luego de haberme corrido de mi propia casa apunta de pistola.-menciono Niedere cuando ella se apodero de su saco y lo acomodo en el respaldo de una silla estilo colonial.
-hay ciertas cosas que uno mismo no sabe si seria capaz de llevarlas a cabo hasta que no las realiza.
-no soy del tipo de hombre al que estas acostumbrada.-menciono Niedere al sentir que los labios de carolina mordían los suyos.
Con la corbata revuelta ambos cayeron en la cama, a carolina se le había iluminado el rostro, pero cuando le mostró Niedere el mismo recorte de la revista que le acercara a Adriana, mudo su sonrisa infortunadamente.
-aquellos cobardes que le quitaron la vida pagaran muy caro esa afrenta, de hecho ellos saben que no vivirán mucho.-menciono Niedere cuando ella pasaba sus uñas sobre el abdomen de él.
-por eso me gustas, tienes una fuerza que me hace temblar.
-¿quien esta detrás de la puerta?-Menciono Niedere cuando sus manos aprisionaron el cuello de carolina con violencia, por lo tanto le mencionó.
-¡ahora Carolina!, grita, porque el fin del mal esta comenzando ¡grita fuerte!, que todos te escuchen morir.
Aflojo un poco la tensión de sus manos, carolina no gritaba y por eso le volvió a mencionar con firmeza, notando como su rostro modificaba el tono de su piel.
-¡grita carolina!, ¡ahora!
Le permitió que gritase un poco, entonces, detrás de la puerta se escucharon murmullos de alarma.
La fuerza de los brazos de Niedere se desbordo y carolina adquirió el tono violeta de un moribundo, por eso dejo de apretar cuando ella ya no respiraba, quería alargar su agonía.
Casi estaban por entrar, queriendo tirar la puerta se escuchaban golpes, pero todavía le dio tiempo a él de ponerse el saco y colocar sobre el buró su reloj del pulso que traía en ese instante.
La ventana por la que salio daba al jardín, la parte trasera del hotel hilton estaba oscura y cuando comenzó a llover plomo, se escabullo en zigzag para no ser alcanzado por al metralla de la escolta de carolina.
Eran diez hombres vestidos con disfraces de marinos, lo noto enseguida, su ropa era de pésima calidad y el logotipo era una calcomanía y no el bordado láser acostumbrado.
Al pretender detenerlo, las personas que andaban por ahí, se asustaron y por ende se tiraron al suelo.
Era muy entrada la noche, él aprovecho que no había iluminación y se dio prisa, pero alcanzo a escuchar un enorme grupo de perros que seguramente venían detrás de el.
El auto tenia encendido el motor, Adriana estaba ansiosa por irse, cuando Niedere entro le menciono.
-¡listo!, vamonos ahora.
Al comenzar el trayecto por sobre encima de las calles, Adriana menciono.
-¿Qué tal estuvo?
-Tuve que salir rápido.
-no me refiero a eso, sino al tiempo que pasaste con ella.
-la mujer que se acaba de quedar en ese hotel no era carolina, era un clon, fabricado por MUN NOK, ellos saben que no les pueden dar un alma, al no tenerla, solo hacen lo que se les ordena.
-¡autómatas!
-pero aun, soy seres malignos.
-pero la besaste.
-sus labios estaban inertes, su besos no sabían a nada, era como besar un trozo de metal; no acuñe ningún sentimiento.
El reloj de Niedere se veía atribulado, estaba en la muñeca de carolina, con su teléfono celular, Niedere noto cuando el reloj transmitía a través de su cámara nano, hacia la del teléfono, así vio a cinco individuos que revisaban el cuerpo femenino, pero ella aun vivía, solo se pudo mover un poco de lado a lado, pero su brazo cayo pesadamente y al pretenderle quitar el reloj, uno de ellos menciono alarmado.
-¡no se le puede quitar!
Entonces los colores comenzaron a parpadear y desde su teléfono, Niedere marco cinco números de la clave de activación e instalo en el modo virtual, la secuencia de autodestrucción del reloj.
La explosión se sucedió cuando Niedere oprimió la tecla ínter del teléfono celular de alcance remoto, entonces un resplandor se noto a cinco kilómetros a la redonda y Adriana y èl continuaron su camino a la salida de la ciudad de Brasilia.
El auto ya no les servia y por eso bajaron y se orillaron tal como lo marcaban los estándares de auto navegación citadina, al salir del vehículo en un parador, Niedere abrió el cofre y le quito un cable, mismo que le conecto al tanque de combustible de DETACALOENO, luego le quito las llaves y el auto salio disparado del suelo hacia la troposfera, ahí se hizo cenizas.
Ya sin transporte, ambos se dieron a la tarea de llegar a la parada del bus, caminaron con el portafolio que Niedere sostenía y Adriana conservo su bolso de mano.
Hacia buen tiempo y por eso había subido la temperatura a unos quince grados bajo cero, llovían hojas de árboles mestizos y Adriana menciono.
-mañana serás mas famoso que ninguno, las noticias dirán que el hotel Casablanca hilton de Brasilia se hizo pedazos, pero ojala digan que en el estuvieron un sin fin de clones.
-despreocupate Adriana, ellos solo dirán que a causa de un ataque terrorista o cualquier otro motivo, se le adjudicaran a personas que en su vida han visto, eso tranquilizara a los jerarcas y entonces nosotros estaremos muy lejos.
Cuando el bus llego, ellos abordaron, había cierta cantidad de gente, se ubicaron cerca de la puerta trasera y entonces sentí que comenzó a nevar otra vez.
En una par de paradas nadie subió y en la tercera, cuando se abrieron las puertas, un grupo de encapuchados con ropa color café se apodero del camión y uno de ellos quien parecía ser el líder, mencionó.
-solo queremos a un hombre.
Vinieron a donde Adriana se encontraba, se acercaron y pusieron su arma automática en el pecho de Niedere, por eso les miro con cierta perspicacia y cuando el tipo les indico a sus hombres de èl, únicamente le escucho y no hizo más.
-¡aquí esta!, ¡vámonos Niedere!, tenemos que irnos, ¡levántate!
Cuando bajaron del transporte, fueron a una nave, era de las del tipo bengala, al subir al cielo los tipos les miraban con recelo, cuestión que no duro mucho tiempo.
Niedere noto que las instalaciones eran excelentes, de vanguardia, era toda una fortaleza, de enormes andadores y salones acabados en fina piedra.
Al salón donde les llevaron se encontraba una mujer quien se ubicó sobre un sofá, junto a ella un hombre de edad avanzada y nadie dijo más sino el que les escoltaba. Aquí están señor, ¿algo más?
-no, nada, puedes irte y diles a los demás que tengan todo listo dentro de una hora, la operación se llevara a cabo entonces.
El tipo se retiro y ellos quedaron ahí, las paredes eran gruesas y lineales, adornadas por distintas figurillas acabadas en porcelana y entonces la mujer menciono.
-¡que tal Niedere!, ¿ya no me recuerdas?
Seguramente en otras circunstancias la hubiera recordado, sin embargo en tan embarazosa situación se declaro incompetente.
-no, ¿de donde nos hubiéramos conocido?
-me llamo petra rubonsky, ¿ese nombre no te dice nada?
-no, en lo absoluto.
Al acercarse a Niedere, le miro de una manera poco usual, de arriba a bajo y con su mano acaricio su hombro.
-es una verdadera lastima, porque tu y yo lo pasábamos bien.
Después de eso, fueron llevados por un grupo de médicos a un gran salón, ahí se encontraba toda una gama de aparatos de ultra tecnología, con lo que seguramente experimentarían y Niedere sospechaba que tal vez con ellos.
-tu serás mi creación Niedere, he revisado tu biblioteca dimensional y encontré que has hecho algunos avances en tus indagaciones, ahora veremos si eres el genio que todos esperábamos que fueras…
-no se de que habla señor…
-dolo dime doctor, mi nombre es Leonidas, ese es mi nombre, ya te he atendido en el pasado, a algunos de tus conocidos les causaste una magnifica impresión, eres una mente superior, tal vez recuerdes París. Sabemos que eres además de mente, cuerpo, fabricado… ¡OH!, ¿que estoy diciendo?, eso se oye muy mal, fuiste nacido de la fusión de dos tipos de genes, los A y los B, manipulados en laboratorio, lastima que la científica que lo hizo ya haya muerto, ¿recuerdas ahora?
-¡no!, no recuerdo nada, la palabra es exacta, Niedere fue sometido por un grupo de diez individuos que le colocaron sobre una mesa semi esférica, paralela a un monitor de energía tridimensional holográfica, sintió cuando el enorme scanner le pasó por todo el cuerpo a manera de holograma y en la otra mesa paralela a la suya, se dibujo otro exactamente igual a el en forma holográfica.
Lo último que vio fue sobre una mesa de cristal debidamente esterilizada, a un par de ojos azules que palpitaban, entonces miro hacia arriba y el doctor le dijo.
-no te preocupes Niedere, son tuyos, los obtuve de el ADN que me proveyó una de tus células en una de tus uñas, eres un tipo aseado, pero en lo sucesivo debes cuidar de no dejar por ahí partes de tu cuerpo o serian mal usadas, por ejemplo, podrían hacer un clon de ti con un simple cabello tuyo.
-¿clonaste mis ojos?
-si, pero como estos no habrá jamás, estos lo aseguro, hice algunas mejoras, modifique la matricula genética y la mejore un ciento por ciento…
Un combinado de robots se hicieron cargo, la operación se iba dando en su cuerpo en forma de holograma, el grupo de robots iba haciendo la operación meticulosamente y los robots que estaban el iban delineando cada trazo en el cuerpo de Niedere, conforme a lo que el mando central automatizado les ordenaba.
De eso no supo hasta que luego de diez horas se concluyó con éxito la operación, el doctor le llevo a su alojamiento en el mismo hotel en el que había estado hospedado, en el Hilton, entonces transcurrieron treinta días en los que tenia los ojos vendados y cuando se llego el tiempo en que las vendas fueran quitadas, Adriana estaba ahí.
-extraordinario.-menciono el doctor al ver que Niedere mostraba los resultados de la operación.































CAPITULO DIEZ



RED HOUSE


Había bruma en la ciudad de México, la casa de Niedere era de estilo griego, se erigía majestuosamente en lo más alto de una colina, tenia el tipo de palacete colonial.
En perspectiva se vislumbraba todo el valle, mientras ejercitaba en el gimnasio completamente acondicionado, oleg su mayordomo, le dijo que tenia visita.
Marla estaba ahí, no esperaba su presencia, pero al verla, tomo la toalla de manos y se seco con ella la frente y luego el cuello.
-¿como esta mi multimillonario favorito?-Dijo marla sonriendo y acercándose a él.
-marla, ¿Qué te trae a mi humilde morada?
-¡que modales!, ¿no me ofreces algo de tomar antes de entrar en materia?
-¡OH si!, claro, disculpa… ¿oleg?
-¿señor?
-sírvenos el desayuno en la terraza y enseguida ten listo el baño, tomare una ducha entonces…
En la pared había una escena tomada en una competición olímpica, en la que había obtenido la medalla de oro; el mural fotográfico era de tamaño natural y estaba plasmada para la posteridad.
Marla observo con atención las instalaciones, y mostrándole el diario del día a Niedere menciono.
-hoy todos hablan de el escorpión, ¿sabes algo de eso Niedere?
Niedere tomo el diario y lo envió al cesto de basura, por eso marla le miro sorprendida.
En esencia no se nada del escorpión, se dice, que nació de las arenas y los túneles del desierto de sonora, se dice también que es un hombre completamente adentrado en el anonimato, nadie lo conoce a ciencia cierta, pero hay quien se ha atrevido a decir que, es un hombre a disgusto con el sistema, que trabajaba en la MARINA y que tenia el rango de jefe del almirantazgo, pero no se han encontrado archivos de el ni de nadie que se le pudiera parecer…incluso se escribió un libro de èl, esperando en un ardid del gobierno que diera la cara, pero no les funciono…
Marla saco del cesto de basura el diario y abrió la página en la cual se mencionaba el hecho, comenzando por leer mientras iban a la terraza.
-otro golpe del escorpión al hampa, cinco tipos aparecieron en el algo flotando, están vivos, luego de rescatarlos los interrogaron y mencionaron.
“un tipo nos atrapo, era enorme y traía alguna especie de disfraz, como un escorpión y parecía que una armadura de hierro los protegía y era de color blanco. Nos dejo un poema grabado en la frente…”
Marla quiso hallar en Niedere algún tipo de alusión al tema, sin embargo no mostró interés al respecto y le dijo.
-no creas todo lo que oyes, esos diarios sensacionalistas sacan noticias para vender ejemplares, casi nunca dicen la verdad, es como una verdad mentirosa…o ficción…
Cuando fueron a través del pasillo marla observo que sobre la pared había una gran cantidad de obras de arte.
.oye tienes una colección aquí, ¿son tuyas?
-de otra forma no estarían aquí…
-me refiero a que si tu las pintaste…
-si, en efecto, son mi creación…
Irina estaba comenzando a servirles el desayuno, nacida en Hungría en el año de 1947, era una mujer docta en los deberes culinarios, esposa de oleg y madre de petra a quien desde donde estaban reconocieron cuando llego, a bordo de un porche convertible rojo.
-¡tienes una espléndida vista Niedere!, toda la ciudad se domina desde aquí.-menciono marla cuando comenzaron a desayunar.
-¿a que viniste marla?-Menciono Niedere.
-¿estas seguro que tu y yo no tuvimos un amorío?, tal vez vine a recordártelo…
Niedere se sonrió pero siguió desayunando, para eso tomo un poco de jugo de naranja, luego de que lo ingirió, el volteo a verla y le dijo.
-¿y que si lo tuvimos?, ¿no eres una mujer suficientemente hermosa para satisfacer hasta los últimos deseos de un hombre?, No digo alguien en especial, de cualquiera…
-¿a ti por ejemplo?
-por ejemplo…
-siempre fuiste un hombre especial Niedere…
-tu también eres especial marla…
-eso no resuelve el asunto, el hecho es que además te amo Niedere, me enamoré de ti, pero tengo la sensación de haber estado enamorada de ti…en el pasado.
-¿como un hombre como yo?, ¿podría olvidarse de una mujer como tu?…marla…
-Esa también es mí preocupación Niedere…
Según se, eres una mujer casada, además tu has venido por algo distinto…
-puede ser…pero terminando esta charla, tengo el anillo de casada, pero me hace falta el hombre que lo tenga…
Marla era un agente de la CIA, que seguramente buscaba algo de Niedere y por eso no quiso ponerla en aviso acerca de que estaba enterado de sus actividades en el País.
Marla era española, de castilla la vieja, sus padres eran de los mas rancios linajes, incluso tenían un castillo que habían acondicionado como casa de veraneo en la costa sur de España, casi al borde del estrecho de Gibraltar.
-tengo trabajo que hacer marla, te quedas en tu casa-claro que esa frase era solo por cortesía-voy a darme una ducha.
-esta bien, aquí te espero…
-¿esperar a que?
-quiero que me hagas un favor…
-una mujer no debería de pedir esa clase de favores.-menciono Niedere.
-no es lo que crees.
Niedere se fue a donde la ducha, marla se quedo observando el alrededor de la terraza, fue cuando oleg llego para levantar la mesa.
-¿algo mas señora?
-si oleg, quiero que llames a mi diseñador y le digas que me mande la ropa para el día de hoy…oye, ¿que hará el día de hoy Niedere?…
-tiene algunos planes, digamos de administración…
-bueno, entonces llevara corbata…dile a mi diseñador que me envié ropa para esos fines, acompañare a Niedere a donde vaya…
-como diga señora…
Marla se levanto de la mesa y fue por el corredor, de vez en cuando volteaba la vista hacia las obras de arte que estaban por todos lados, pero se dio cuenta de que había llegado a la habitación de Niedere.
La puerta estaba sin seguro, entro con sumo sigilo, oyó que Niedere se estaba bañando, cerro la puerta de la habitación y seguido se quito los zapatos, luego le siguió el vestido que rodó por la alfombra, quedándose en paños menores, así como se encontraba avanzo a la ducha, se detuvo ante la puerta corrediza que dividía el baño de la de la ducha, la abrió y se encontró que Niedere estaba debajo la regadera, entonces marla se metió.
Niedere gustaba de escuchar música ambiental mientras se bañaba, en ese instante la voz de una cantante en francés le servia de música de fondo, era un canción romántica que iba de acuerdo con la ocasión, aun sin planearlo.
Niedere no había visto que marla estaba detrás de èl, la vio cuando ella le toco la espalda con su mano, el se volvió con el rostro frío, no se lo esperaba, marla entonces le sonrió cuando ya el agua de la regadera le caía encima.
-¡quiero que me hagas un favor Niedere!
-una mujer no debería de…
Niedere ya no concluyo la frase, los labios de marla lo impidieron, ella le coloco las manos sobre sus mejillas y luego le rodeo el cuello con sus brazos.
Marla era un portento de mujer, no tardaron suficiente en la ducha, pero al salir, ella estaba envuelta en una toalla, del pecho hasta la cintura, Niedere solo se rodeo otra por la cintura.
Entonces la puerta se abrió repentinamente y ante ellos los ojos de petra quedaron al descubierto, Niedere volvió la vista violentamente y marla estaba como si no pasara nada.
-¡disculpen!, no creí que estuvieras acompañado Niedere…
Niedere y marla se encontraban ya en la sala, ubicados en los sillones cuando oleg llegó con su saco, Niedere estaba echándole más leña al fuego.
-¿y bien?-Menciono Niedere al estar listo luego de la ducha y haberse vestido.
-¡OH!, que bien, al fin podremos tratar de negocios.-menciono marla.
-¿disfrutaste de tu desayuno?
-¡OH si!, claro.
Entonces oleg le coloco el saco a Niedere y menciono al tiempo que lo ayudaba a vestirse.
-señor, su auto esta listo, los del taller llamaron, debe ir ahora mismo por él.
-¿tu auto?, ¿Qué auto?-Menciono marla.
-mi auto, lo mande al taller.
-nada grave, supongo.
-no, solo revisión de rutina; esta bien oleg, usare el transporte publico.
Entonces petra se hizo presente y menciono fehacientemente.
-si quieres yo te llevo Niedere, estaré en mi habitación.
Pero Niedere de inmediato le dijo.
-no, iré en el transporte publico…
-yo iré contigo Niedere.-menciono marla.
-bien...
Niedere avanzo a la puerta y le dijo a oleg.
-mi portafolios y mi cartera.
-enseguida señor.
Marla y Niedere salieron juntos, agarrados de la mano, caminaron hacia la avenida principal, sobre la acera, no estaba muy distanciado de la parada del bus.
Había cierto congestionamiento de transporte vial, los vehículos particulares sonaban a sus cláxones de vez en cuando, el smog se hacia presente irritando los ojos y provocando los estornudos, pero Niedere caminaba consciente de ello.
-de vez en cuando es bueno hacer vida de clase mediera… ¿no Niedere?
-¿lo dices por esta caminata?
-aja.
Pero Niedere no quería comenzar una conversación larga, para eso eran los cafés en donde la gente gustaba de pasar largas horas en la búsqueda de sus propias opciones al hacer debates de cinco personas a lo sumo.
-pero no es un síntoma de pobreza, sino por el contrario…los músculos si no se usan se atrofian…
-si pero no todos estamos acondicionados para las largas distancias…
-no claro, pero una caminata alivia el alma…
Habían llegado al parador del bus, corrieron con suerte, ya que ahí venia el autobús de dos niveles, con techo descubierto, quien les hizo la parada al verlos.
Ambos se acomodaron en el nivel superior por la parte trasera, desde ahí a esa hora de la mañana cuando ya sonaban las once, el viento estaba soplando algo fuerte, el pelo de marla se hacia de un lado al otro, Niedere se coloco el portafolios sobre sus piernas, ella se le acomodo En su hombro y recargo su cabeza sobre su pecho.
El cielo estaba tan despejado que se podía ver a través de el hacia el exterior, a los lados todo era vegetación, árboles enormes con un historial increíble, lugares que eran testigos de antiguas batallas y que en ese instante irían para atestiguar una mas, pero de manera radical como nunca antes se hubiera ideado.
El taller era enorme, y estaba repleto de autos que revisaban mediante monitoreo extra sensible, las pantallas tridimensionales corregían cualquier desperfecto y la telemetría lo ajustaba todo, un mapa completo de los componentes se inscribía en las pantallas holográficas, colocadas sobre los muros y en ese instante, basil les noto llegar y menciono.
-¡Niedere!, ven a ver tu nuevo auto.
Era un VIPER blanco, un par de hombres estaban dentro…
-¿permitiste que se subieran a mi auto?-Menciono Niedere.
Los dos sujetos salieron del auto de Niedere y uno de ellos menciono.
-¡vamos hombre!, solo revisábamos.
-bien, ¿ya quedo listo?
-claro que si.-menciono martina.
-¿Por qué no lo probamos?-Menciono petra quien había llegado antes a bordo de un Ferrari negro.
-ahí están las llaves.-dijo basil.
Mientras le mostraban sus múltiples funciones en pantalla, Niedere se acerco a basil y menciono con brevedad un tema recurrente.
-no gastes mucho en combustible, no hay dinero para los gastos…
-eso a mi no me importa, no trabajo gratis, además tu trabajas para el gobierno y no para mi, la renta cuesta y si quieres seguir en esto, debes de conseguir fondos, todo esto es mío y si el gobierno no paga ya no podré seguir ayudando…
-esta bien, veré que puedo hacer.
-no, si no pagan este mes sea mejor que comiencen a empacar; por cierto, traeré a mis propios mecánicos-mecánica quántica-.
La rampa secreta del hangar se abrió y Niedere menciono.
-¿no van a venir?
-si, claro.-menciono martina y claudia quienes se despojaron de sus overoles y abordaron el viper.
Petra iba adelante con Niedere, marla, claudia y martina en el asiento trasero,
-bien vamos, este auto es como un avión de guerra…
El motor comenzó a rugir con potencia, se escuchaba limpio, al salir, tomo Niedere la primera avenida como un bólido, al llegar a un cruce, un lamborgini murciélago negro que fungía como patrulla de caminos de la policía federal se les emparejó, al voltear a ver a su conductor, Niedere noto a un par de mujeres, una era rubia y la otra trigueña.
-¿que vas a hacer Niedere?-Menciono martina cuando lo vio sonreírse.
-vamos a dar un paseo en la autopista.
Pero entonces en la patrulla se incorporo en el asiento trasero un hombre, que al verlos pasar como una ráfaga se agarro de los vidrios, era un tipo rubio, casi pelirrojo, de pelo casi blanco y delgaducho de bigote.
Los neumáticos del viper de quedaron marcados en el asfalto, luego de reiniciar el camino, iba rebasando autos hasta que se vieron solos.
Naves sigma de dos tripulantes les rodearon, de pronto notaron que el bosque que se encontraba a un costado de la carretera, se comenzaba a incendiar, estaban entrando en la autopista y las alarmas de las patrullas les pusieron en alerta, habían excedido el limite de velocidad 200kph, fueron victimas de una persecución encarnizada y para evitar ser atrapados, se metió en sentido contrario.
El vuelo rasante de las naves, hacia que cayera un líquido sofocante de fuego, la humareda hizo que el humo se expandiera y llegara a permear el camino.
Volvió a la ruta en sentido correcto y cuando dos aves les impidieron seguir, se detuvo y salio de su auto.
La patrulla de igual manera se detuvo delante de ellos, bajo la mujer policía rubia y al notarlo, fue hacia el lentamente.
-¡que tal!-menciono.
-hace tiempo no te veía Niedere…
-lo mismo digo Adriana, oye, ¿aun sigues modelando?
-si, pero en mi tiempo libre…
-vaya, ¿ganas mas en la policía?
Adriana saco un papel y escribió algo, cuando se lo dio a Niedere noto un número telefónico y por eso dijo.
-llámame, ¿quieres Niedere? Y te responderé lo del sueldo.
-claro que si.
Entonces Adriana se le acerco aun más y le dio un beso.
-gracias por hacer esto conmigo Niedere…
Luego ambos fueron a sus respectivos transportes, abordaron sin prisa, por lo tanto el sistema de simulación artificial natural había concluido la sesión, la tarea había sido un éxito.
-¿andamos de conquista Niedere?-Dijo martina.
-ten cuidado martina, tienes novio…
-¿pero podrías mostrarme el papel?, Me gusto el rubio.
-si, pero mejor no, lo guardare, no se que hagas algo indebido, además soy soltero…yo si puedo y tu no.
El viper no tenia numero de matricula, solo tenia un nombre, las letras eran de color negro y el fondo de la única placa era de color blanco y estaba ubicada en la parte trasera y decía BVLGARI.
























CAPITULO ONCE


RED HOUSE DOS

Niedere estaba en la base naval de transportación en la ciudad de México, dentro de las instalaciones de lo que fuera el estadio de fútbol de la ciudad universitaria, luego de haber sido devastado por el ultimo de los cataclismos que azoto a la población mundial y que el estadio tuviera que ser abandonado cuando el deporte del fútbol fue clausurado.
Ahora aquellas viejas instalaciones habían sido remozadas pero conservando su estructura original que era como un sombrero.
Niedere se encontraba en la sala de espera, su maleta estaba al pie, y el viendo la hora en su reloj escucho la llamada del alta voz cuando ya su salida estaba próxima.
Noto un cierto tumulto a unos cuantos pasos de èl, un grupito de personas se amontonaban en torno de unas dos personas que parecían importantes.
-es ingles, viene a México en visita diplomática, el rey de la comunidad británica lo envía…-Menciono una persona que estaba al lado de Niedere anotando los acontecimientos.
-¿Quién es?
-se llama benito Crowley…
-¿esa comunidad no estaba ya disuelta tras la revuelta en Londres?
-si, cada país obtuvo su independencia, y ahora èl viene a México a finiquitar el asunto, ellos resolvieron que fuera aquí en que se firmaran las actas de abdicación del poder, México como capital del nuevo imperio de la republica imperial…a la que se han sometido…
-en otras palabras benito fuera de México es un esclavo…
-pero será libre en cuanto se firme el acto constitutivo…
Niedere volvió la vista a un costado y se encontró con una cara conocida, venia vestida de gabardina de piel negra, con guantes y boina, gafas oscuras y cargaba un portafolio de piel.
-Niedere…
Niedere se levanto de su asiento, quedo precisamente en frente de ella, casi a la altura de su boca.
-hola Madeleine…
-hola…
Pero también goran venia de la mano de Madeleine, se acerco a Niedere y le dio un beso en la mejilla.
-hola papa…
-hola hijo…
El sequito de acompañantes que benito tenia, se encamino hacia donde justamente se encontraba, este no los había notado, ya que se encontraba de espalda a ellos, pero alcanzo a darse cuenta de que la gente comenzaba por acumularse.
Al volverse, tomo de la mano a goran y pudo ver al hombre de quien se estaba comentando tanto y que al tenerlo de frente lo pudo notar tal cual.
Benito advirtió la presencia de Niedere, y por un instante se abrió paso entre sus congéneres, Benito, era un tipo rudimentario, negro, de pelo ensortijado, de grandes ojos negros y dentadura blanca, regordete y de corbata gris.
-tengo curiosidad, me parece haberlo visto antes.-dijo benito a Niedere viéndole hacia arriba, ya que Niedere era un hombre alto, de expresión firme que denotaba fuerza y vestía de gabardina y boina con su grado militar.
-no lo creo…
-¿y porque no?
-ambos somos hombres inolvidables-menciono y para corroborar su atención, benito dijo.
-¿para bien o para mal?
-no importa, la cuestión es no pasar desapercibidos…
Pero se notaba que benito sabía muy bien de rangos militares y más aun cuando dichos niveles se habían ganado por medio de una buena educación.
-todo importa contra almirante...los detalles, napoleón nunca los hubiera olvidado…
Niedere se sonrió y quitándose la boina se peino con la mano y lo miro detenidamente, notándole a benito pendiendo de una cadena de oro sobre el cuello una cruz de oro.
-¿es usted admirador de napoleón?
-no solo eso, he sido su alumno desde el aula...lo he estudiado mucho…
-ya veo...pero ni usted ni yo estamos aquí ni por el uno ni por el otro, y asumo que usted y yo muy pronto nos volveremos a encontrar…por otro lado, napoleón no es tan genial como se dice, lo vencería sin pelear...
-con seguridad, es lo mas probable, es usted oficial de la republica imperial y yo esclavo del imperialismo liberal, seguro que así será…
Pero benito no perdió detalle, se fijo en todo cuando goran y Madeleine hubieran hecho y por eso le menciono.
-es usted si me lo permite decir, una mujer hermosa… ¿su hijo?
-en efecto, es goran, mi hijo y el señor, albert von graz, mi esposo…
Benito entonces se alejo pero no tanto cuando le hizo a los tres un amplia caravana e incluso llamo a su sirviente con las palmas de las manos.
-¿Gerardo?
-¡diga el señor!
-reacuérdame hacerle una invitación a almorzar a el contra almirante albert von graz a mi residencia en Londres...y a su hermosa esposa e hijo…
-claro señor, todos están anotados…
-¡gracias Gerardo!... ¿aceptan la invitación señor von graz?
-es usted un diplomático señor benito, pero yo no, la única manera en que vaya a Londres, es porque algo muy grave suceda, de otra manera nada tengo que hacer ahí...soy austriaco…
Gerardo era un hombre blanco, de la misma estatura de benito, de ojos negros y se notaba que era tan servicial con benito como un sirviente fiel y que también usaba un crucifijo pendiendo de su cuello.
Ambos tenían un anillo sobre su dedo en la mano izquierda, era de oro con incrustaciones en diamante el que Niedere noto enseguida.
-¡es una joya cara!
-ah, esto, no es nada, es una baratija…
-lo seria sino proviniera de las minas del norte de África, donde los esclavos mueren de hambre…
-bueno, yo no se nada al respecto…
Benito entonces dio por terminada la conversación al darse vuelta y avanzar entre la gente, los demás lo volvieron a cobijar porque ya habían avisado por el sonido local que las salidas se habían suspendido.
-¡papa quiero ver!-dijo goran jalando a Niedere hacia fuera del puerto terrestre naval.
Muchos comenzaron por salir casi de inmediato, parecía que algo los había sobresaltado y ese algo se encontraba sobre el puerto.
-¡con permiso, con permiso!-dijo Niedere al avanzar entre la gente que hacia algún tumulto dentro.
Madeleine venia detrás, con apretujamientos se hicieron camino, las grandes ventanas hicieron posible que vieran lo que estaba sucediendo afuera, todos tenían puesta la vista hacia arriba.
-¡mira papa!-Menciono goran alarmado.
La nave era descomunal, tenía un logotipo amarillo y negro, así como una bandera de los mismos colores que ondeaba sobre la proa.
-¡es la nave nodriza escorpión!-decían entre la multitud que se había aglomerado.
Pero entonces de la nave nodriza comenzaron a salir naves de menor tamaño que al descender en las zonas aledañas al puerto terrestre, abrieron sus compuertas para dejar salir a un contingente armado.
Eran guerreros escorpión, con armaduras de oro, con rifles de partículas ultra quánticas, que comenzaron a formarse en pequeños contingentes.
Cuando comenzaron a moverse, Sus pasos resonaban por los lugares en los cuales pasaban, marchaban con la atención fija, trayendo consigo también una espada de oro.
La base terrestre estaba ocupada por la legión de guerreros escorpión y se contaban en un millón de hombres, comenzaron por abordar los pequeños transportes navales que los llevarían a su destino prefijado y no demoraron en ponerse en camino.
Ante tal confluencia, los pasillos de la base terrestre “zitle”, tuvieron que ser desalojados, por ello apresuraron las salidas de transportes ya fijadas y por eso el sonido local tuvo que dar las llamadas de último momento para que la gente abordara su transporte y salieran cuanto antes.
Albert escucho que la llamada era para su salida, por eso tomo de la mano a goran y le dijo a Madeleine.
-anda, vamos, ya esta nuestro transporte listo…
Entonces goran menciono al caminar de una manera pronta.
-oye papa, ¿conoces a todos esos hombres?
-no, son demasiados...pero despreocupate, ellos saben de ti…
En el anden numero cinco se encontraba la nave que albert usaría, al aproximarse un par de hombres le tomaron los ticket de viaje, era una tarjeta fusionada en la planta de su mano, que le fue requerida, la coloco sobre el scanner y se vio en la pantalla la aceptación.
-¡pueden subir!-dijo el empleado que tanto èl como el copiloto de la nave shadow ya estaban listos para salir.
Los tres abordaron, al entrar una mujer les recibió, era la sobre cargo que les guió hasta sus lugares en donde pudieron acomodarse.
-aquí es…
-si gracias-dijo Madeleine.
-si gustan tomar algo solo pídanlo por medio de Inter Voz, opriman este botón y enseguida vendrá alguien. Me llamo clara, soy la sobre cargo principal, estoy para servirlos.
-¡muchas gracias!-Concluyo albert.
A goran le encantaba el asiento de la ventanilla, ahí fue donde se le ubicó, Madeleine estaba en medio y albert en el asiento del pasillo.
-estos vuelos son de lo mejor…-Dijo goran probando una y otra vez la comodidad de los asientos que eran ergonómicos e individuales.
Albert solo mostró simpatía y Madeleine le tomo de la mano y la apretó un poco.
-¿trajiste todo lo necesario?
-si…
-¿no sea que nos tengamos que regresar…?
-no te preocupes Madeleine, todo esta en orden, disfruta del viaje...
Ella se le recargo en el hombro cuando las luces interiores comenzaron a parpadear a eso le siguió la comunicación desde la cabina del piloto.
-¡señoras y señores!, esto es viajes concordia, siéntense cómodos, haremos de este trayecto lo mas placentero, somos la línea comercial mas segura del orbe, si gustan hay refrigerio para el camino, muchas gracias por preferirnos.
Entonces los sillones se acomodaron automáticamente para iniciar el vuelo, los cinturones se ajustaron y la atmósfera modifico su frecuencia de oxigenación de manera que se purifico. La nave comenzó a moverse saliéndose del andén y comenzó por elevarse por en medio del la base estadio “zitle”.
El shadow se elevo a una altura promedio, tomo el rumbo haciendo un par de giros, pero se trasladaba con lentitud, había la costumbre de pasear a la gente por los principales alrededores de la ciudad, luego entonces se dispuso a mostrar las mejores vistas, ya que los pasajeros solían tomar algunos videos de sus viajes.
Goran tenía una pequeña cámara de video con la que estaba haciendo alguna toma, cuando la nave pasó por los principales rascacielos de la ciudad, se notaban apenas las figurillas de las personas, a la distancia a esa hora ya el sol se estaba poniendo, cuando eran las nueve de la noche en punto. Albert y Madeleine veían con discreción a través de la pantalla que se había abierto a un costado, luego el shadow se aproximo más de prisa a la salida de la ciudad y fue cuando la gente dejo de tomar videos.
El shadow hizo que los asientos de los pasajeros se comprimieran, de manera que no tuvieran ningún movimiento, por eso, la nave se enfilo hacia el norte, tomando posición de lanzamiento de súper velocidad.
El shadow entonces subió mas allá de las nubes teniendo una vista del espacio exterior de primera, los pasajeros tenían la cabeza viendo al cielo cuando el shadow tomo posición de velocidad crucero, los asientos se despresurizaron de manera que los pasajeros pudieron estar relajados, albert pidió un jugo de naranja…





















































CAPITULO DOCE

En Toronto Canadá eran las 11:30 horas de la noche, un reflector alumbraba el edificio de la compañía de seguros nacional, la sombra de albert se notaba recorriendo los pasillos, pistola en mano, el hombre a quien perseguía se estaba escurriendo por las puertas que abría con una llave maestra.
Su arma se posiciono de su frente cundo logro abrir la puerta de la calle, se detuvo petrificado, se volvió a el con lentitud cuando una gota de sudor le bajo por el occipital.
-¿que haces Niedere?
-vengo a cobrarte, me debes boletas del tesoro y son al portador, uno punto cinco billones de libras esterlinas, ¿las tienes ahora?- Menciono ajustándose la corbata de nudo.
-bueno, sí, as tengo, pero comprenderás que no las llevo encima, además te propongo un trato…
-ya sabes que no hago tratos con terroristas Xavier, ¿Dónde están tus cómplices pepe homero y Edward Crowley?
-de ellos no sé nada, el dinero está en mi oficina, claro pero ¿porque no lo piensas mejor?
Xavier se veía inseguro, Niedere le hizo la indicación de que fueran a su oficina y en el camino menciono.
-te cambio los certificados del tesoro por un holograma de identificación humana, cuestan el doble…
-de pronto te volviste espléndido…
-es por tus molestias…
La oficina de Xavier Vázquez era muy lujosa, los muebles eran sobre diseño y se tenía un par de obras de arte sobre la pared.
La bóveda se situaba sobre el suelo, la puerta corrediza se abría automáticamente al apagar la iluminación con un par de apagones.
-no puedes irrumpir en mi oficina con lujo de violencia, es un delito…
-bueno y desde cuando te interesa a ti Xavier el cumplimiento de la ley, además de que la legalidad no solucionó nada ya que tu los corrompiste, eso lo hará mi arma, ¡abre la bóveda o te disparo!
Niedere quito el tapete persa que cubría la bóveda, el mecanismo estaba a la vista, un candelabro pendía del techo, se sincronizaba con la combinación de la bóveda, iluminaba con un color verde fosforescente indicando que se había abierto.
-¡dame mi dinero!-menciono al tiempo en que noto la fotografía de una mujer situada en el escritorio de Xavier el cual se encontraba a un paso, solo tuvo que estirar la mano y tomarlo.
-simpática ¿no?-menciono Xavier.
-es muy sexy, ¿Quién es?
-una amiguita...se llama margarita…
-¡es tu amante!
-dicho así se oye muy violento, dejémoslo en mi amiguita, se oye mejor… dicen que tuviste tu oportunidad con ella y la desaprovechaste…y también dicen que te traiciono.
-¿Quién te lo dijo?
-el mismo con quien margarita te traiciono...
-no tuve mi oportunidad, yo cree la opción donde no había nada, y no la desaproveche, simplemente no la use como ella quería, ella es una mujer del sistema y a mi no me gustan los amores compartidos… simplemente le dije que no, pero parece que no perdió el tiempo... Supe que se caso…
-ya se divorcio…
-bueno, eso ya no es mi problema…
Había muchos documentos, entre los cuales varios centenares de mini lingotes de titanio presurizado y muchas planillas de hologramas de identificación.
-vaya, veo que tienes una pequeña fortuna ¿quieres compartirla conmigo?
Al notar eso, Xavier saco de inmediato los certificados del tesoro y se los dio a Niedere, luego menciono.
Aquí esta tu dinero, es todo lo que te debo.
-creo que no, me parece que faltan los réditos y digamos...un billón y medio mensual al diez por ciento, por cinco años, creo que me estas robando Xavier.
Xavier palideció, pero Niedere fue más lejos y le menciono una cifra mágica.
-son seis billones aparte de esto…
Por eso sobrevino lo que mas esperaba, Xavier se inconformo.
-¿Qué quieres hacer, empobrecerme?
Por lo tanto, reviso Niedere la bóveda y noto un fajo completo de certificados al portador.
-por lo menos hay cien billones de libras, así que me das mi dinero o tomo lo que quiera.
Desde donde se situaba la oficina de Xavier se podía ver la zona del lago Lawrence, donde seguramente habría alguna fiesta en alguna de tantas dicotecs.
-no acostumbro a desvelarme, dame mi dinero y podré irme…
Xavier lo pensó un poco, saco un par de platillas con hologramas y le dio una para que la viera.
-toma esta y dime que te parece…
Esta vez fue el turno de Niedere, le resto importancia al asunto.
-ya conozco esto, no son actuales, y tampoco originales.
-¿Cómo?
-lo que oíste, son falsos esos hologramas, ¿Dónde los conseguiste?
Xavier no respondió, quedo pensativo, pero entonces Niedere noto un cuadro enmarcado sobre la pared, se acerco y noto lo que estaba empotrado en un cuadro, era nada menos que un reloj barato, como de diez centavos de dólar, tenia un texto abajo que decía” obtenido por la trampa del complot a Niedere coleman”.
-¿Qué no era este el reloj que se te había perdido y que dijiste que yo lo había tomado?
A Xavier le cambiaron los colores de la cara una y otra vez porque Niedere ya se había dado cuenta de todo y también noto otra fotografía sobre la pared.
-ella es dolores, la que me acuso del robo del reloj…
Entonces Xavier menciono.
-ella quería acostarse contigo y como tu no quisiste…
En el cuadro había una dedicatoria que decía y que Niedere leyó.
-”con todo mi amor para mi hijo Xavier...”
Niedere le apunto a Xavier a la cabeza, se le acerco y cuando iba a jalar del gatillo Xavier dijo.
-¡por favor, no me mates, tu madre nos mando para hacer esto, yo no tuve la culpa!
Niedere se le acerco y con la cacha de la pistola golpeo en el mentón a Xavier que cayo al suelo con la boca rota.
-¡eres un cobarde!
Pero Niedere no se quedo con las ganas de accionar su arma y la vació en toda la oficina, se veía como se destruían los enseres, archivos, cuadros, y vitrinas con trofeos seguramente comprados para lucirlos como ganados.
Luego, Niedere metió la mano a su bolsillo, saco su encendedor y abrió la flama, se la puso a Xavier en la cara.
-¿también mi madre te mando a echarme la culpa cuando incendiaste mi negocio?
-...si, ella fue, creeme…
-pues no te creo infeliz terrorista…
Niedere entonces, tomo el liquido que se encontraba en una botella y lo roció sobre el cuerpo de Xavier hasta vaciarla, luego pateo de manera que se volviera a el.
-¡esto es por lo que me hiciste!
Niedere arrojo el encendedor al cuerpo de Xavier que de inmediato comenzó a encenderse, el se veía quemándose, de pronto se levanto y trato de apagar las llamas acercándose peligrosamente a una de las ventanas, intento sostenerse de uno de los vidrios, pero este cedió ante el peso y se abrió, Xavier entonces se desequilibro y comenzó a caer fuera de la hacia el vacío.
Niedere se acerco a la ventana y aun pudo ver como el cuerpo de Xavier seguía incendiado y cayendo al vacio vertiginosamente; hasta entonces las alarmas de fuego se activaron y con ello los rociadores comenzaron a mojar la oficina.
Mientras tanto Niedere tomo sus documentos y se salio por la puerta principal.
Una vez llegado al pasillo, se encontró con los primeros obstáculos, algunos guardias de la seguridad que se había apresurado para llegar a donde se encontraba la oficina de su jefe. Al ver que Niedere iba en sentido opuesto a ellos con algo de prisa le dijeron con voz altisonante.
-¡alto, deténgase o disparamos!
Niedere se volvió rápidamente solo para ver quienes eran pero ya con su arma en mano, disparándoles cuando los tenía a modo.
Los pasillos eran reducidos, por eso no fallo ninguno de sus disparos, así que por un instante, los vigilantes cayeron mal heridos y el arma de Niedere estaba sin balas, pero entonces se dio cuenta de que los vigilantes se estaban levantando como si nada les hubiera ocurrido, sin rastros de heridas de balas convencionales.
Por eso Niedere, saco su otra arma que tenía en su costado y estaba hecha para usar balas con núcleo de plutonio corrosivo no expandible. Niedere estaba metido en el arco de una puerta que se hallaba cerrada, cubriéndose de las ráfagas de metralla que le enviaban los vigilantes.
Pero una vez que su arma estuvo cargada, activo el mecanismo electrónico de control de impacto cercano, así como el cerebro de disparo múltiple. Tomo su reloj y oprimió uno de sus botones y con su mano, el la paso por su cara para activar la mascara ultra sensible a prueba de explosiones radiactivas. Que cubrió su cabeza así como su cuerpo, haciéndole una armadura de color amarillo.
Entonces disparo a los vigilantes que ya mas cerca y a los que se les habían unido otros tantos, los disparos fueron certeros, se incrustaron en el cuerpo de cada vigilante y entonces se expandieron las balas haciendo que la onda radiactiva cimbrara a todo el edificio que se movía de un lado a otro, la armadura que protegía a Niedere hizo que se le Vieran los ojos rojos, ya no había electricidad, así que tuvo que moverse entre la oscuridad mientras las alarmas estaban sonando. Tomando por las escaleras de emergencia, comenzó a bajar cuidando de no ser visto por más de los muchos vigilantes que estaban por ahí.
Llegando dos pisos abajo, se cercioro de que en la entrada al piso no hubiera nadie, luego se metió y fue al ascensor de emergencia y acciono el tablero oprimiendo el botón del sótano y bloqueo la puerta.

















































CAPITULO TRECE

El ascensor se movía despacio, se dio cuenta de que algo había caído sobre el techo, en el acto, estaba abriendo la escotilla, albert aun apretó su arma con su mano que apunto al techo, apenas se hubo asomado el primer tipo, cuando ya le estaba disparando, ello hizo que la bala no expandible hiciera blanco justo en el centro del pecho de un vigilante, que al sentirse herido solamente cayo al interior del ascensor.
Albert tenia solo diez segundos para salir del ascensor antes de que estallara el núcleo de la bala, para eso, se ayudo con un cuchillo que llevaba pegado a su cintura, rasgo la hoja de metal y abrió un boquete mientras el ascensor caía. Por eso, se dio a la tarea de salir por la rendija del ascensor posterior, tenía la mitad del cuerpo fuera del ascensor cuando el reloj estaba en números rojos para el estallido, apenas alcanzo a tomar un cable de el ascensor que le sirvió para sujetarse de una saliente del conducto y justo cuando estallo, salio precipitado.
Albert colgaba de el cable, con una mano se había alcanzado a sostener, comenzó a balancearse, y con sus piernas hizo pedazos una de las puertas donde abría el ascensor y con otro balanceo entro otra vez, estaba en el segundo piso del edificio de noventa niveles.
Luego se desatoro del cable y se incorporo con cuidado ya que las cámaras que se encontraban por el techo los estaban captando con su sistema de movimiento de censor.
Había avanzado muy poco en el descenso, cuando ya un cumulo de vigilantes estaban llegando a donde se encontraba, en aquel piso, estaban los talleres de manufactura de los hologramas, por eso se oían ruidos de maquinaria.
-¡allá esta!-grito uno de los vigilantes al verlo incorporarse del suelo.
Enseguida, se volvió a todos lados buscado la forma de salir de esa guarida infestada de los hombres de Xavier, pero cuando se dio cuenta ya un grupo de vigilantes empuñando espadas veían a él con toda su furia, pero en eso, una de las puertas de la oficinas se abrió y de ella salio un hombre que le dijo.
-¡rápido, entre!
Albert entro y cerro la puerta, luego tomo un escritorio, lo levanto y lo coloco como tranca para evitar el que entrara, eso le dio tiempo.
-¿Por qué me ayuda?
-eso no importa, hay que salir de aquí…
Albert se volvió en todas direcciones pero no vio nada mas que un ventanal cubierto por gruesos hierros en donde hubiera habido una posibilidad de huida pero no le fue posible.
-no veo como…
-nada es imposible ante los ojos de buda…
El hombre era oriental y tenía un marcado acento cantones, además estaba hurgando en su escritorio y cuando del interior de un cajón saco una perilla de puerta menciono.
-me llamo lee…
-yo Niedere…
Ambos se estrecharon la mano; lee se aproximo a la puerta y quito el picaporte que tenia y le coloco el otro que había obtenido de su cajón y menciono.
-¡no podrán entrar!
Luego fue el centro de la oficina y levanto la alfombra que cubría el suelo, en el encontró una tapa de metal, la levanto y ante ellos quedo al descubierto un pasadizo secreto.
-¡por aquí, vamos, es nuestra única oportunidad, saldremos por la puerta principal!
Albert entro primero, tomo la primera posición, luego lee, que enseguida hizo cerrar la tapa de la entrada mediante un tablero numérico electrónico quedando sellada.
-¡vamos!-dijo lee que avanzo siempre con cuidado, de pronto se acerco a donde la pared y presionando un botón, hizo que hubiera luz, de esa manera tuvieron claro el camino por delante.
Era en descenso una infinidad de escaleras, de tamaño reducido, con puertas a los lados que indicaban cada piso, desde los cuales se escuchaban a personas que estaban dentro de las oficinas.
También había indicadores de temperatura y señalizaciones de presencia de oxigenación, siendo un lugar cerrado pero no hermético.
Niedere se volvía de vez en cuando para asegurarse de que no lo estuvieran siguiendo, afortunadamente ya habían bajado casi treinta pisos.
-piso cinco-dijo Niedere.
Ambos se detuvieron, llegaron a la puerta indicada y lee hizo accionar el mecanismo que abriría la tapa del que seguramente seria el suelo de un lugar.
-saldremos al suelo del baño de mujeres, hay que tener cuidado de no ser vistos.-dijo lee refiriéndose a que Niedere estaba aun con la armadura que lo protegía.
-saldré primero, luego tu…
-bien…
Pero entonces cuando Niedere levanto la tapa, con cuidado se aseguro de que no hubiera personas por ahí, luego se volvió a lee y le dijo.
-¡gracias por esto, no olvidare lo que has hecho por mi!
-no agradezcas, también lo hice por mi…
Albert salió entonces, emergió a un habitáculo del baño en donde no había nadie, con cuidado y sin hacer ruido se dio cuenta de que había mujeres en los demás compartimentos de los sanitarios y llendo con deliberación, les cerró las puertas por fuera.
Entonces fue hacia la puerta de entrada del sanitario y abriéndola, reviso el pasillo, no había nadie, pero advirtió la multitud de cámaras de video vigilancia y fue a ellas cerrando la puerta del sanitario con llave.
Con su arma rompió todas las cámaras de video y se acerco a la orilla de la pared que daba a las escaleras de emergencia, viendo que no había nadie, ajusto su reloj para quitarse la armadura y volver a su identidad habitual y luego, se encamino a bajar, escalón por escalón, bajo un piso y escucho voces en el interior, eran de mujer que llamaba a la central de policía.
-¡rápido, ha habido una explosión, parece que nos están atacando!
Albert al entrar en la planta baja la vio en la recepción, avanzo hacia ella ya sin la armadura, vistiendo con su habitual gabardina, coloco su arma debajo, ella lo alcanzo a notar antes de que estuviera a un paso y le dijo.
-¿vio algo allá?
-no, nada, ¿de que se trata?
-hubo una explosión…
-por eso sentí como si estuviera temblando, ¡OH lo siento!, pero estoy de visita, y ya termine…
-esta bien, salga ahora…
La vigilante tenia una laminilla de identificación en la se mostraba su nombre.” Victoria lemarks” y su compañera que estaba sentada frente a la consola de monitoreo del edificio se volvió a Albert y también le mostro su placa de identificación.”Sandra kuars”.
Albert salio por la puerta de enfrente cuando la vigilante le abrió la puerta en automático, una vez en la acera, noto que había en torno a un cuerpo cierta multitud, se acerco y se abrió paso entre los curiosos, entonces vio que Xavier se había estrellado en el suelo pero aun estaba vivió, se movía con dificultad y tenia tapados los ojos con unas vendas, estaba muy quemado, los paramédicos le habían asistido muy bien, acudiendo al llamado de inmediato, parecía que se había salvado esta vez.
Hacia un poco de frió, el viento pegaba de frente, albert se levanto las solapas de su abrigo y noto que Xavier le decía al paramédico.
-¿voy a vivir?
-si, no se preocupe…
Entonces albert se ubicó en frente del cuerpo y noto que el paramédico se incorporo y volteando se coloco de frente, tenia una placa de identificación que decía su nombre.
“albert Frasier”
-con permiso decía Frasier. Que el herido pueda respirar…
Albert von graz los vio llevarse a Xavier en una camilla, lo subieron a una ambulancia y cuando iban a cerrar las puertas se le cerco y le dijo al paramédico.
-¿tiene un fósforo?
-si, claro.
Albert Frasier tomo de su bolsillo una cajetilla de fósforos y se los dio a albert von graz, que lo vio de reojo y se encendió el cigarrillo.
-tome, gracias, es una lastima que ese hombre haya caído, ¿sabe como fue?
-no hay testigos, pero seguramente ya se le interrogara en otra ocasión…
Albert von graz se alejo con cigarrillo en mano, solo avanzo unos pasos y cuado se dio cuenta de que la ambulancia se estaba moviendo, arrojo el cigarrillo el interior de la cabina por la ventanilla cuando paso por donde se encontraba.
Con la vista siguió el vehículo, un zumbido comenzó a darse en la caratula de su reloj, vio que la cuenta numérica era regresiva en treinta segundos.
Comenzó a caminar a la orilla de la avenida, una limousine se le orillo, abrió la puerta trasera y él se acerco, se coloco a la entrada, subió una pierna en el estribo y cuando iba a entrar, se escucho el estruendo al final de la calle, la ambulancia había estallado; él entonces subió a la limousine y esta cerro la puerta y comenzó a moverse.
-¿señor Niedere?, ¿a donde lo llevo?-dijo el chofer a través del interfono interior.
-demos una vuelta por la ciudad Bertránd, quiero tomar aire fresco…
-si señor…






























CAPITULO CATORCE

RED HOUSE TRES


La base fantasma ultra estaba ubicada en el interior de la montaña rocky, las instalaciones eran un secreto para el exterior, ahí se desarrollaban proyectos de ultra tecnología, ciencia y exploración de inteligencias superiores.
Los droides estaban trabajando, KYU supervisaba los trabajos, los códigos personales de identificación se plasmaban en un holograma, los datos recabados de cada persona nacida naturalmente, ahí estaban.
El holograma era de nano tamaño, de una millonésima de micra, era inyectado como una vacuna de forma cutánea en el brazo derecho.
El lugar se ubicaba entre Edmonton y Calgary, un pasaje subterráneo comunicaba hacia el exterior a través de un rio artificial.
-¡Niedere!, ¿cuando llegaste?
-recientemente, veo que todo funciona viento en popa…
-¡qué bien que estés aquí, precisamente ahora están por vacunar a una centena de personas, están en el cubículo!
A esa vacuna se le denominaba como el “nano homo sapiens”, a simple vista era imperceptible, para el ojo humano era imposible su captación, por eso un ultra lector de nano laser se encargaba de recibir los datos y verificar si la persona que soportaba era la adecuada.
Esa vacuna la administraban únicamente los droides, con una precisión absoluta, usando los tres tipos de laser-verde, rojo y amarillo.-
Eran jovencitos de doce años los que estaban ahí, uno a uno los fueron vacunando, enseguida eran saneados en las duchas electromagnéticas.
Niedere fue entonces a su camarote, el cual se encontraba en la zona de los huéspedes. Para eso tomo un vehículo interno de capacidad limitada, que solo transportaba a dos ocupantes y funcionaba con celdas fotovoltaicas. Que se alimentaban a su vez de la iluminación interna que era a base de energía alógena.
Atravesó hacia el otro lado de la base, descubriendo la capacidad que tenía, los pasillos eran un tanto anchos, pero no demasiado, tan solo albergaban a tres vehículos en lo ancho del pasillo.
El vehículo tenía un monitor sobrepuesto como tablero, que funcionaba para revisar todo cuanto se quisiera de la base, había un mapa que servía para ubicarse en la base.
Niedere llego y su vehículo entro en la zona de las habitaciones, eran ocupadas por dos personas solamente, la puerta de entrada se abrió en automático, el entro y se noto el decorado del entorno.
No era muy espacioso, pero le funcionaba bien par descansar, que eso era lo que él iba a realizar.
Solo se contaba con dos habitaciones, una la sala de llegada y la otra, la recamara en donde se encontraba una cámara de hiperhibernacion de temperaturas diversas.
El se metió en ella, la cual tenía una fase de programación personalizada y funcionaba de manera controlada mediante el reloj o como le llamaban los demás, el brazalete de “izcoatl”, dorado con cinco carátulas octagonales de distintos colores, que daban los distintos usos horarios de la tierra así como de los cuatro puntos cardinales del universo.
La cámara cerro en automático y la temperatura se ambiento al descanso de èl, entonces el leve sopor lo permeo y Niedere cayó en profundo sueño.
Solo el monitor de su brazalete le marcaba los ritmos de vida…

Se despertó a la cinco AM, y noto que la nevada era tan abundante como un bochorno veraniego.
Se acomodo en su cámara de dos ocupantes, hasta que ya no pudo mas y al levantarse, heather se despertó también y menciono al verlo sentado a la orilla de la cámara.
-¡Niedere!, ¿no es muy temprano, porque no vuelves a dormir?, esta haciendo mucho frio.
-ahora vuelvo querida, solo voy a tomar un poco de agua, tengo sed.
Cuando la iluminación de la estancia se prendió noto que los vidrios estaban empañados, se ajusto la bata y fue a la cocina, entonces abrió el refrigerador y cuando iba a tomar una caja de cartón con jugo, sonó el teléfono.
El ring hizo a heather contestar desde la habitación, Niedere noto eso porque dejo de sonar y se refresco pausadamente.
La frialdad del jugo lo hacía acido, lo sintió recorrer su organismo mientras se ubicaba en el sofá.
Heather vino a él y metió sus manos en su bata, tocando el pecho de Niedere, fue por eso que èl la tomo de los brazos y la ayudo a pasar al sofá cuando se ubicaba detrás de el.
-¿vamos a skiar?-menciono heather.
Pidieron el desayuno a la habitación, la villa se ubicaba en el poblado de banff, eran las doce del día cuando se levantaron del sofá, había dejado de nevar, echaron un poco mas de leña al fuego, la chimenea se avivaba mas cada vez.
A las dos de la tarde heather y Niedere estaban listos, cargaron sus skies y fueron al funicular para transportarse montaña arriba.
Tenían una vista esplendida y lo hubiera más si Xavier no hubiera estado por ahí para conversar con Niedere.
-creí que no te gustaba la nieve.-menciono brevemente Niedere.
-no, pero tenia que verte, necesito recuperar las papeletas de hologramas, son de todos los empleados, sin ellas no podrán trabajar.
-oye, si que tienes un grave problema, y dime, ¿que piensas hacer?
-¡quiero que las recuperes para mi!
-oye, no hago esos trabajos, ve con alguien mas.
-no puedo, ya no hay tiempo.
-envía a tu mejor hombre.
-a mi mejor hombre lo asesinaron esta mañana, es su oficina.
Habían llegado a la montaña, las puertas del funicular se abrieron y al salir Niedere le menciono.
-¿Qué ofreces?
-diez por ciento del valor de lo recuperado.
-¡no!, si me arriesgo, lo haría por un cincuenta pr ciento.
-¡que! ¿Estás loco?
Ya iban caminando, entre la gente heather se ubico en una banca y comenzó a ponerse los skies.
-está bien Niedere, te doy veinte.
-cuarenta o será mejor que lo olvides.
-esta bien, un treinta y es mi ultima oferta…
-bueno, trato hecho, pero si no pagas se los venderé a otro por el doble o el triple…
-es lo justo…
Xavier no esquiaba, por eso se limito a ver como se alistaban para el descenso y entonces menciono.
-solo tengo veinticuatro horas de plazo, de otra manera estaré en problemas.
-ya estás en problemas, así que relájate… ¿algún dato que deba tener?
-bueno, tengo algunos enemigos, pero no sabría quien…
-pues reduce las posibilidades, ¿Quiénes son tus peores enemigos que tienes?
-hay un tipo, es ruso, se llama Erick, intento sobornarme hace un mes para que le diera el nombre de mi contacto.
-¿Dónde lo encuentro?
-en Vancouver.
-con eso iniciare, ya te avisare, ah y por cierto, ten listo el dinero.
La montaña parecía haber despertado, su furia aun perneaba, el viento rondaba los diez grados bajo cero.
La nave de vigilancia alianza estaba monitoreando las actividades del día de cerca, Niedere la noto cuando salió al descenso, comenzó con lentitud seguro de cada oscilación, intermitentemente podía seguir la hilera de arboles matizados por la nieve.
Docenas de montañistas estaban dando su recorrido, algunos ya tenían varios en su haber, pero heather y Niedere solo dieron un par y luego volvieron al refugio de alta montaña en donde les aguardaba un refrigerio de lo más fresco.
Las nubes comenzaban a dispersarse, el día parecía que abriría, y el sol estaba saliendo haciendo que la nieve no fuera tan dura y que la intensa nevada se calmara un poco, de todas maneras el suelo estaba un tanto inseguro, debían pasar al menos un par de horas para que la nieve se aplacara de manera que los montañistas fueron disminuyendo en sus descensos, la montaña fue despoblándose.





















































CAPITULO QUINCE
RED HOUSE CUATRO

Niedere se alojo en el westin de whistler, ahí servían un buen filete de salmón, acompañado por un buen whiskey escocés, entorno de una chimenea.
Su suite estaba engalanada por una cama King size, alguien llamo a su puerta y Niedere fue para abrir.
-¡Niedere!
-¡que tal claudia!, pasa.
Aun no estaba listo, portaba una bata, claudia tomo asiento y revisando rápidamente la habitación con la vista dijo.
-quiero ir a estirar las piernas, ¿vienes?
La puerta del baño se abrió, el vapor se mostro y con eso Denia se hizo notar, tenia la camisa roja de Niedere puesta y aun secaba su pelo sedoso y tan largo que le llegaba a la cintura.
-¿interrumpo algo?-menciono Denia.
-en absoluto-menciono niedere. -Denia ella es Claudia, mi hermana… ¿Claudia?
-mucho gusto-menciono Denia.
Claudia le miro a él con extrañeza para mencionar levantándose de la silla e impulsivamente ir a la puerta.
-es un placer, ¿entonces que Niedere, bienes o no?
-si adelante Claudia, allá te alcanzo, antes debo vestirme.
-¡oh, sí claro, allá te espero!
Claudia tenia el buen gusto de nunca azotar la puerta, eso lo había aprendido muy bien de Judith; su madre.
-¿tu hermana?
-así es. -menciono Niedere cuando Denia le echaba los brazos al cuello y atrayéndolo hacia él la rodeo la cintura.
-pues parece que no le caí muy bien, dime, ¿Por qué no me habías hablado de ella?
-quería que se conocieran en otros términos, pero ahora ya esta hecho, dime, ¿Qué te ha parecido?
Denia cómodo el cuello de la bata de Niedere y le beso con suavidad.
-todas las hermanas comunes cuidan de sus hermanos, ¿ella es mayor que tu?
-si, pero ella no es comun…
-claro que no lo es, si es tu hermana, debe de ser algo especial.
Después de eso, Niedere se sonrió un poco y tomando de la mano a Denia la condujo a la alcoba.
-¿así que piensas irte a skiar eh?
Niedere se sentó al filo de la cama y recostándose un poco, Denia se metió entre sus piernas y dijo.
-¿no dices nada?
-me gusta tu nariz.
Al escuchar eso, Denia se hechò a reír y colocándose de lado le observo brevemente.
-hace un día esplendido, ¿quieres venir con nosotros?
-no Niedere, ya no tengo tiempo, debo regresar a Viena, ven a verme en cuanto puedas, ¿si?
-si claro, me daré un tiempo.
Al salir del alojamiento Niedere fue a su auto-el viper-en èl se encontraba claudia, al subir escucho la canción que estaba puesta.
Los skies estaban ubicados sobre el techo, cerro la puerta y comenzaron a moverse.
El camino estaba cubierto de nieve, una barredora robotizada estaba limpiando, la ventanilla estaba abajo, el perro-Sócrates- sacaba la cabeza y de vez en cuando ladraba y babeaba sacando la lengua.
Niedere noto a claudia un poco mas callada de lo acostumbrado, el motor del auto no hacia ruido, la turbina tenia silenciador y cuando estaban cerca, los vehículos se hicieron más constantes.
Un grupito de adolescentes, se ubicaban a unos metros camino adentro, aquello hizo que los muchos vehículos sonaran sus claxon.
Del otro lado algunas gentes jugaban con la nieve, en eso, una nave de carga militar paso en vuelo rasante, era del tipo molusco usada por el ejercito.
-¿Qué estarán haciendo por aquí?-Dijo claudia.
-no se, pero seguramente nada bueno.
La montaña estaba ahí, lista para ser tomada, se detuvieron en el lugar de siempre, el perro se quedo en el auto.
Para Niedere no era un día común; Claudia salió al descenso primero, el viento era más frio, había 20 grados bajo cero, la montaña brillaba como si hubiera sido pulida cual espejo.
La ropa de Niedere se le plegó al cuerpo, sostenía la temperatura corporal, las puntas de los bastones de esquiar se hundieron en la nieve, hizo palanca que le catapulto hacia abajo.
El slalom era apremiante, usaba lentes reflejantes para el sol en cuarta dimensión, en los vidrios se le dibujaban las graficas que le mostraban el camino y sus guantes eran antiderrapantes.
Se dio cuenta que diez individuos con vestimenta verde, pasamontañas y mochila se habían acercado a el por los lados.
Una nave migraña venia de frente, disparo un par de andanadas de metralla al lugar de su descenso, volaba tan bajo que tuvo que estar Niedere casi de cuclillas porque le paso rozando la cabeza una bala.
La bajada era cada vez más vertical, noto que los hombres que le seguían comenzaron a dispararle, cuestión que hizo que incrementara la velocidad.
Con su mano derecha arranco un botón de su hombro izquierdo, oprimió el botón de ultra defensa en su reloj y lo arrojo al aire. No cayo, se sostuvo en el aire y comenzó a realizar una orbita sobre los que le seguían, la imagen llego a su reloj y pudo verlos de cerca.
Rápidamente el sistema de búsqueda inicio su sistema e identifico a uno de los tipos, la información llego a su reloj y este a su vez envió la imagen a sus lentes, en donde se abrieron cuatro micro pantallas Picture in Picture.
El audífono conectado a su oído le dijo mediante el espectro de voz sensible
-¡Tony Cox, ex ministro irlandés de la corte irlandesa, integrante de la mafia y presunto terrorista nunca hallado!
No había tiempo para más, aunque el descenso era vertiginoso, el trecho se le había hecho un poco largo; tomo un segundo botón y el automático instalo el sistema de explosión.
Arrojo instintivamente el botón negro a donde venían cinco hombres, apenas le dio tiempo de virar y se protegió de la explosión. Hacia un sendero sinuoso, ahí fue aminorando la marcha, lo que propicio el que se atrincherara en un montículo de rocas cubiertas de nieve recién caída.
Los tipos se habían ocultado entre los árboles, desde ahí se limitaron a dispararle, incluso arrojaron un par de ganadas, sin embargo no hicieron mella en èl.
Tenia en la pantalla la ubicación de los tipos, oprimió el botón de disparo laser de su reloj y el botón que se había convertido en una nano esfera le indicaba que podía disparar, al hacerlo dio un blanco, cinco hombres a la vez fueron alcanzados y puestos afuera de combate.
Pero no todo iba tan bien, los primeros cinco hombres que habían caído, parecían que se habían levantado y venían en pos de Niedere.
La nano esfera estaba encima de ellos, instalo Niedere el sistema de autodestrucción y al estallar lo hizo mediante una implosión que abrió un hoyo negro tragándose a los tipos, al cerrarse una onda expansiva de un centímetro hizo que sobre viniera un estruendo.
Alguien más le disparaba a Niedere como a cincuenta metros, ahora necesitaría un arma de cañón largo, uno de los bastones de skiar se convirtió en un rifle de disparo láser y mirilla telescópica.
Niedere hizo lugar entre la nieve y se tendió pecho tierra, el rifle hechizo, tenía un secuenciador de radar que capto el lugar de donde provenían los disparos y automáticamente fijo los objetivos en la mira de vison sensible.
Al hacer los cinco disparos, los sujetos cayeron y no volvieron a levantarse, dejo un instante que transcurriera, enseguida, se sobrepuso y se incorporó de la helada tierra y con sumo cuidado continuo con su descenso montaña abajo.
Tenia el paladar acido, el rostro muy seco y el corazón le latía bruscamente, el cielo comenzó a cerrarse, al concluir el descenso busco con la vista a alguien conocido y noto a claudia cerca.
-¡Niedere!, ¿Qué paso, porque tardaste tanto en bajar?
-hay que irnos Claudia.-menciono Niedere mientras se quitaba los skies.
El auto estaba cerca, sostenía sus skies sobre su hombro, el perro ladraba intensamente al verlos llegar; acomodo todo, y regresaron a su alojamiento.
El lugar era clásico, el corredor estaba repleto, en el televisor de plasma holográfico se repetía una y otra vez la última de las noticias del día.
-“muerte en la cumbre, esta mañana, una avalancha sin consecuencias se proyecto sobre whistler, algunas gentes murieron.”-
El filete de salmón estaba en la mesa y se veía bien.
-el ministro se hizo matar-menciono Niedere.
-no tenia motivo-dijo claudia.
-algo tendremos que decir.
-nada, si preguntan, lo adjudicaremos a la mafia, algún ajuste de cuentas.
Dijo claudia antes de beber un poco de agua.
-bien, pero abra que averiguar cómo supieron que estábamos aquí.
-nos espían…la gente no echará de menos a un ministro como él, seguramente pondrán a otro.
-cierto-menciono Niedere.




































CAPITULO DIEZ Y SEIS


Tocaban y marchaban, diez grupos con diez hombres de frente y de fondo diez hombres, en cada fila, eran igual al que los lideraba.
-¡son clones!-menciono un hombre que custodiaba la entrada del alojamiento.
Niedere fue a su auto que se encontraba al borde de la acera, las calles estaban siendo ocupadas con premura, el cielo estaba descolorido, y el perro con su pelaje plateado y ojos azules, se esponjaba a cada ladrido.
Niedere se recargo sobre el viper mientras veía pasar el contingente, pero no todos eran hombres, había mujeres también.
Se le acerco un hombre de tez oscura, afro-franco, lo noto su marcado acento cuando menciono.
-¡lindo auto!
-si, lo es, ¿es suyo?-Menciono Niedere.
El tipo resalto su aparente sorpresa y por eso abrió más los ojos negros y movió muy melosamente la boca.
-¿como?
-pregunto por el auto…
-si, pero no es mío, esperaba que usted me dijera quien lo es…
-¡ah, pues, no lo se!, ¿Por qué quiere el auto?
-estoy interesado en èl, ah, por cierto, mi nombre es Fernando…soy del Congo belga…- Le extendió la mano a Niedere pero no se la estrecho.
-¡ah, ya veo!, ¿Quiere comprarlo?
-bueno, no precisamente, digamos que quisiera obtenerlo.
Al decir eso le mostro un arma de debajo de la camisa y acaricio el auto.
-pues también estoy interesado de la misma manera, ya tengo aquí media hora y no he visto a nadie que se diga su dueño.-menciono Niedere haciéndose a un lado la chamarra y mostrándole su arma ceñida a la cintura.
-en ese caso, podríamos dar el golpe juntos, ¿Qué te parece?, por cierto, ¿Cómo te llamas amigo?-Dijo Fernando.
-me llamo Niedere Coleman, pero no soy tu amigo…
Un hombre blanco de pelo negro, lacio nariz aguileña y de cómo un metro sesenta centímetros de estatura, venia con una mujer de cabello rizado, ojos claros, que se acercaron adonde se encontraba Niedere.
-¡bello auto!, ¿de quien es?
Fernando se adelanto a decir.
-no se tommy, tengo una vaga idea.
-tal vez sea tuyo querido.-dijo la mujer.
-ah, ella es margarita Kerry…y él es…Niedere.
-un placer.-menciono Niedere.
-en todo caso nos llevaremos este auto, lo confisco ahora mismo.-dijo tommy. Al mostrarle a Niedere una identificación.
-¿policía francesa?
Niedere no se inmuto, abrió su chaqueta y le mostro un par de pines conmemorativos.
-¿así?, pues yo soy del club de leones y niños exploradores, si quieres mi auto, tendrás que robármelo…
Tommy saco una pistola de entre su ropa y la ubicó en la cabeza de Niedere.
-¡dame las llaves Niedere!
-¿llaves?, ¿Qué llaves?
-¡las llaves del auto!-menciono al darle un golpe en la cabeza con la cacha pero que Niedere alcanzo a esquivar pero no suficiente.
Al incorporarse, del lado izquierdo sangraba, les noto rápidamente que estaban presionados.
-¡mejor danos las llaves, de prisa!-dijo margarita.
De un golpe rápido le quito el arma a tommy, le dio una patada con la planta de su pie en la pantorrilla y otra en las partes blandas, luego le tomo la cabeza y se la azoto en el auto.
El silbato de vigilancia del hotel que se dio cuenta de todo, lo hizo sonar, tommy, Fernando y margarita huyeron a gran velocidad, infiltrándose entre la gente que pasaba por ahí.
-¿Está bien?- Menciono el vigilante.
-si, mejor atrape a esos tipos.
Claudia salía del hotel; en su reloj, Niedere marco un par de números con el automático del tacómetro y la puerta del auto se abrió.
El auto tenia en su compartimento un botiquín de primeros auxilios, lo tomo, abrió y de él extrajo un algodón y alcohol y una bandolera, con eso se dispuso a curarse.
-¿Niedere, que paso?-Dijo claudia.
No tuvo tiempo de contestarle, un par de hombres de gabardina se les allego y el que parecía tener el liderazgo de la situación menciono.
-¿podemos platicar un momento?
La puerta del viper estaba abierta, en cuanto se reincorporo en el asiento Niedere le dijo.
-¿Cuál es el motivo?
El hombre abrió su cartera y se las mostro, en ella estaba su identificación.
-servicio secreto británico, soy David Jefferson conway y mi compañero es Walcot tribeth, solo le llevara un instante en responder.
-¡esta bien!, ¿Qué quiere? -Dijo claudia.
-¿De donde son originarios?
-somos mexicanos.-dijo Niedere.
-¿me muestra su visa?
-si son del servicio secreto, deberían de saber que los mexicanos no necesitamos de visa; somos turistas.
-hablan bien el idioma ingles.
-hablo nueve idiomas, ¿algo más?-Dijo Niedere.
-¿Cuál es su ocupación?
-soy ejecutivo de cuenta en la bolsa de valores.
-¿y usted señorita?-Dijo Jefferson.
-soy contadora publica.
Algo apunto en su libreta, pero lo que a Niedere y a Claudia les pareció mal, fue el que los hostigara con la vista.
-ya entiendo, ¿pasaportes?-Dijo Walcot tribeth.
-si, claro.-menciono Claudia dándole ambos pasaportes.
-¿tiene algo que declarar señor Niedere wald wels?
-si, intentaron asaltarme…
-ummm, pero veo que no le hicieron mucho, es un hombre fuerte…
-eran dos hombres armados y una mujer…
Jefferson entonces noto encima del frente del auto un libro, lo tomo y reviso con detenimiento, luego lo hojeo y noto la fotografía de Niedere.
-“ESCAPE DE RIO “¿es suyo?
-si.
-es todo un bet seller, ¿Dónde puedo adquirir un ejemplar?
-no esta a la venta del publico, esa es solo una impresión de autor, el sistema me tiene vetado…
-es una verdadera lastima, pudo haber sido un autor muy cotizado en las ventas de ejemplares…
-tal vez, pero eso ya nunca lo sabremos.
De pronto, varias naves piraña sostuvieron el vuelo rasante en torno de la gente situada en las calles, una y otra vez les disparaban.
Walcot tribeth media como un metro y sesenta centímetros de estatura, regordete y de bigote, saco su pistola y se alejo del auto, mientras que Jefferson le insistía que volviese ya que las ráfagas desde arriba se hacían cada vez más certeras.
-¿Por qué no sube al auto Jefferson?-Menciono Niedere al echar a andar el sistema de ignición biotermico del viper.
-¿hay lugar para mi?
-claro, suba, atrás hay un asiento de emergencia.-menciono Niedere al hacer el asiento delantero un poco hacia el volante.
-¡abróchense el cinturón!-menciono claudia cuando comenzaba a moverse entre la multitud en el viper.
Al dejar atrás aquel lugar notaron una nave que venia en pos de ellos, el camino era recto, así que instalo el sistema de navegación aérea por medio de la nano computadora holográfica de abordo.
Al sostener la velocidad por un segundo, el velocímetro índico que iban a mil kilómetros por hora, enseguida, la transformación del viper fue instintiva y pasó de ser un auto a un híper avión ultra sónico. Al comenzar a desplegar sus alas, producto de las dos puertas, en ellas se llevaban sistemas de ataque-metralletas de grueso calibre- el sistema de misiles estaba saliendo en forma de nano plataforma sobre el techo, recubierto por la coraza de blindaje de titanio-los cuales al sentir la presencia de una nave piraña cerca, activo la defensa.
Ya a cielo abierto, comenzaron a ser atacados, sin hacer efecto en el viper y por eso Niedere inicio por arremeter también.
-¡nos disparan!, nos quieren derribar.-menciono con alarma Jefferson pero como para contradecirlo, el perro ladro un par de veces.
Sobrevolaron repentinamente los alrededores del monte tremblan, el cielo clareaba de un azul como nunca antes. Y por lo tanto Niedere disparo un misil que serpenteo el cielo repleto de aglomeradas nubes y al dar de lleno en la nave piraña, esta estallo.
Pero la cuestión seguía, dos de los que tripulaban la nave lograron salir en descenso llevando dos paracaídas robotizados, al advertir la situación Niedere menciono.
-¡toma los controles claudia!, voy a salir por ellos.
-bien Niedere.
Se volteo a donde Jefferson y le dijo ajustándose el paracaídas robotizado de ultra descenso.
-tú, vendrás conmigo, debajo del asiento esta el otro paracaídas, ¡tómalo y póntelo!
La caída libre fue sustancial, Jefferson y Niedere aumentaron la velocidad compactando el cuerpo, le hizo la indicación de que él se encargara de uno de ellos y al otro lo capturaría personalmente Niedere.
Estaban casi por llegar a la distancia en que debería abrir el paracaídas, por eso, cuando se encontró lo suficientemente cerca de su oponente, Niedere tomo la pistola de su cintura y disparo una red magnética, al dar justo en el cuerpo del individuo, quedo paralizado y capturado rápidamente.
-ese era Fernando…que trataba de zafarse de la red.
A pesar de la nevada, se podía ver a cierta distancia, Niedere se acerco y oprimió el botón de apertura del paracaídas robotizado de Fernando quien se veía atemorizado ya que si no se activaba el paracaídas, él se estrellaría contra el suelo.
Ahora todos comenzaron el descenso casi flotando, la cima de la montaña se encontraba al borde de los pies, de las botas automatizadas de Niedere se activo un retrocohete que le hizo aterrizar sin contra tiempo.
Fernando al caer, se había enredado en la red y no se podía liberar, por eso, Niedere tomo su cuchillo de hoja laser y cortó la red.
-¡ahora ponte de pie y date vuelta, voy a ponerte las cadenas!… ¡Jefferson, acá estamos! -menciono al notar que había caído cerca de ellos a unos cuantos metros, él había logrado capturar a pepe homero, su presa.
Los cuatro y el perro, comenzaron a caminar montaña abajo, de pronto, el viper paso por encima de ellos, les mostro que Claudia no había perdido detalle y comunicándose con Niedere a travez de sus lentes menciono.
-¡Niedere!, ya avise a las autoridades, solo tienen que ir al pueblo más próximo.
-bien Claudia, allá nos vemos.
Al llegar al primer paso, se encontraba una carretera, ahí había un conglomerado, Claudia hablaba con un par de policías que al notarlos llegar con los prisioneros, de inmediato se aproximaron.
-¡lévenselos, son todo suyos!-Menciono Niedere mientras caminaba a donde el viper.
-todo salio bien-dijo claudia.
-afortunadamente.
Jefferson venia con ellos pero al llegar al viper menciono.
-aquí nos separamos, deberías de pensar en unirte al servicio secreto británico Niedere.
-¡no!, eso no es lo mío, soy un deportista y nada mas, además soy del otro lado del río…
-comprendo, pero si alguna vez voy a la ciudad de México, te pediré que me muestres la ciudad…gracias, tendré en cuenta lo que me ayudaste…-Menciono Jefferson.
-no te ayude, solo sobreviví...


















































CAPITULO DIEZ Y SIETE


Eran las doce del día en la ciudad de Toronto; el timbre sono y heather abrió la puerta del penthouse y se dio cuenta de quien estaba ahí,
-¡Albert!
-hola heather, ¿y Niedere?
-esta en la terraza…
Heather cerro la puerta y Albert le presento a la persona que iba con el.
-ella es margarita, mi prometida…
-mucho gusto.-dijo heather.
Luego, todos fueron a la terraza en donde Niedere se encontraba al frente de su computadora revisando los asuntos más inmediatos.
Niedere lo noto llegar pero no se levanto, únicamente lo saludo desde donde se encontraba.
-¿como es que viniste hasta hoy?
-en cuanto me entere…
-de eso hace casi tres meses, ¿Dónde estuviste todo este tiempo Albert?
-bueno, tuve cosas que hacer, vine porque el licenciado me llamo, dijo que iba poner a la venta la casa, seguramente me darán mi parte…
-tu no tienes parte, todo es mío…y la casa no se vende…
-pero el licenciado dijo…
-ese licenciado no me representa a mi sino a ti, y lo único que obtendrás de mi será esa maleta que esta ahí, están todas tus cosas, no quiero volver a verte, eres un cobarde…
Niedere no quitaba la vista de la computadora laptop, mientras buscaba en ella la información necesaria le dijo a heather.
-¿amor?
-¿si?
-muéstrale el camino a este tipo, y cierra bien la puerta…
-pero no me puedes echar así de aquí, yo también soy hijo de Judith…
Entonces Niedere se levanto de su silla, se volvió y al verlos menciono con un aire de supremacía que ambos lo previeron.
-ambos son unos traidores, ¡lárguense de mi vista!
-pero de que hablas, no te hemos hecho nada.-dijo Albert.
En eso en la computadora se mostraron los datos que Niedere buscaba, así que al darse cuenta, tomo el monitor de la laptop y la mostró diciendo.
-¿ven a ese tipo?, se llama Gabriel…
Parecía que ambos habían perdido el color de su cara, pero eso Niedere lo supo en cuanto los vio que se tomaron de la mano con cierto nerviosismo.
-¿Qué quieres decir con esto?-Dijo Albert.
Pero Niedere entonces se mostró desafiante y más que nunca lo vio con violencia.
-si me llego a enterar de que tienes algo que ver con esto, te prometo que te mato Albert…
Albert perdió la compostura, se tomo la frente con la mano como si le estuviera dando un vuelco, pero entonces se alcanzo a acomodar la mano de la pared y como queriendo tomar aire dijo.
-¡no tienes pruebas!, así que mejor dame lo mío o…
-¿OH que?-Dijo Niedere retándolo, encarándolo con toda decisión.
-ni sabes de lo que soy capaz de hacer Niedere, es mejor que recapacites…
-de mi no obtendrás ni un centavo, ahora vete Albert, porque no descubras de lo soy que capaz de hacer…
Heather fue a donde la puerta, para terminar la conversación, Albert lo noto enseguida y margarita que había estado sin decirle nada a Niedere le dijo.
-te has hecho de dos enemigos muy difíciles, yo también soy capaz de matarte, Niedere.
-eso no lo dudo, ahora que ya te conozco, lastima que no regresaste con los otros...Pero sabré defenderme aun si eres mujer… y no dudare hacerte caer…además aun estamos casados, podría denunciarte.
-¿Quién te creería?, yo alegaría que me traicionaste.
-eso es mentira…
-las mentiras dichas mil veces se vuelven en verdades…
-una verdad a medias siempre es mentira…
-aun soy tu enemiga.
-creo que no tienes ese nivel, te falta clase...
Albert y margarita fueron hacia la salida del penthouse, vieron que heather tenía la puerta abierta y la vieron con furia, pero salieron de inmediato.
Heather enseguida cerró la puerta y escuchó que Niedere conversaba con alguien.
Avanzo a la terraza, se tomaba las manos y las frotaba con nerviosismo, estaba un poco alterada por el disgusto.
Niedere tenia la video conferencia y con la cámara tenia la conexión al satélite y apunto el detector de movimiento infrarrojo de distancia remota hacia la calle, justo en la entrada del edificio de apartamentos.
-¿Qué haces?-Dijo heather al ver aquello.
-veré lo que dicen, fíjate…
Niedere los vio salir del edificio y comenzó a captar el flujo de su conversación.
-“¡ese imbecil!”, No lo puedo creer que nos haya descubierto.-dijo margarita yendo hacia donde estaba la orilla de la acera cuando parecía que esperaban su transporte.
-¡no te preocupes, no sabe nada, solo especula, seguiremos con nuestro plan, bloquearemos las operaciones que el tenga!…
-¿Cómo?
-tengo amigos en el gobierno, le quitaremos hasta el ultimo centavo, nos repartiremos como lo planeamos.
Niedere y heather los vieron subir aun auto y alejarse, pero entonces comenzó a llover levemente.
-no puedo creerlo, que sea tan ruin…-dijo heather.
Niedere solo se limito a seguir con la computadora, estaba relacionando el nombre de Albert con el de Gabriel y obtuvo resultados magníficos.
Albert era un tipo de pelo reducido, de ojos negros, había vivido en París varios años.
Entonces heather parecía que había visto algo de importancia así que menciono.
-mira…
Era el logotipo de una casa de subastas de origen clandestino, donde se comercializaba todo tipos de obras de arte y en donde parecía que Albert era el dueño y que Gabriel acostumbraba a asistir a adquirir algunas obras.
-tienes una vista excelente amor…
Niedere entonces reviso mediante la alta resolución del video que estaban viendo y que habían obtenido de la vista desde el satélite ruso.
-mira aquí hay algo mas…-Dijo heather.
Era otro video tomado en las mismas zonas, pero esta vez Albert estaba llevando del brazo una obra de arte a un vehículo, en donde el dueño le estaba saludando de mano.
Niedere hizo un acercamiento y los vio claramente.
-es Albert y napoleón…
Habían una multiplicidad de escenas que había captado el satélite, pero este no tenia nombre ni se sabia quien lo había colocado por encima de las orbitas conocidas, de manera que el acceso era restringido, pero Niedere sabia como acceder a el.
Albert swietokrzski, decía el titulo en la puerta de la oficina que se encontraba en las instalaciones del centro de desarrollo artístico de la ciudad de Cracovia, en donde èl tenia la encomienda de restauración artística.
El satélite capto el interior de dicha oficina y tenia las imágenes de lo que parecía una conversación muy singular.
“-Adrián, toma esto, y llevalo al correo, quiero que llegue cuanto antes…
-si, enseguida señor.
Niedere acerco la resolución del video para notar de más cerca lo que tenia el entorno de la habitación, habían por ahí obras de gran calibre artístico, y una que estaba empacando Albert para enviarla a los estados unidos. En su escritorio se encontraba el timbre de correo…
La oficina tenía una gaveta con varios cajones cerrados con llave, pero Niedere busca con mucho afán algo que le pudiera decir como resolver la situación.
Heather también estaba revisándolo todo, y se dio cuenta de una fotografía que estaba sobre el escritorio de Albert, en ella estaba fotografiados Albert, Gabriel y una mujer.
-mira…-Dijo heather.
Niedere la miro con cuidado, le dio varios ángulos e incluso la acerco más y dijo.
-se llama victoria, es policía…
-revisa que hay de ella.-dijo heather.
Niedere se limito a revisar lo concerniente a ella y entonces también surgió una gama de videos suficientemente convincente.
Victoria había asistido a una iglesia en la periferia de Montreal, era de mañana cuando entro, se ubicó en una banca e hizo como los demás.
Mientras el sacerdote daba el servicio religioso, victoria se le acerco a otra mujer que se encontraba en la misma banca y discretamente le acerco un paquete.
-¿Qué es eso?-Dijo heather.
Niedere hizo un acercamiento.
-es una cajita de vidrio opaco…
-quiero ver el interior…
Niedere ajusto el sistema infrarrojo para captar el interior del paquete que estaba siendo tomado por las otras personas.
-ahora veremos que tiene…-Dijo Niedere.
El infrarrojo mostró el interior con toda claridad, se trataba de un cúmulo de microchips envasados en un empaque de estaño.
La otra mujer tenia el rostro cubierto por un velo, por eso no pudieron verle el rostro, ella se levanto cuando el sacerdote iba iniciar el siguiente paso clerical y fue a la salida con prisa.
Afuera de la iglesia, se encontraba un transporte nada sofisticado, era muy sencillo, pero en cuanto subió, de inmediato arranco.
Niedere entonces se puso a cavilar un instante, heather ya estaba tomando su directorio de placas de vehículos viejos y la estaba por revisar en la computadora que tenia a un costado y que servia de auxiliar.
Niedere se acerco a ver lo que heather y al notar lo que estaba en pantalla menciono.
-¿segura que es el numero de placa?
-si, la he cotejado, el vehículo pertenece a el museo de arte de Polonia…
Entonces Niedere le menciono heather.
-¿tienes abrigo para el frío?
-aja…

































CAPITULO DIEZ Y OCHO


Las luces engalanaban el casino de Montreal, una mujer se situaba ante la mesa del bacará, embelezada con su triunfo, conjugaba con su vestido blanco perfectamente el humo de su costosa colilla, Niedere no se había dejado ver su juego, pero de un pertinaz movimiento de carta, se volvió a mi y su rostro quedo aturdida.
El que administraba la mesa se dirigió a ella con nerviosismo y le dijo atrayendo su atención.
-señora, ¿juega a se retira?
-¡OH si, una carta!- menciono volviéndose en si.
-¿toma algo señor?-menciono el camarero al llegar a Niedere y con atención tomo una copa de vodka y jugo un poco con la cereza.
El juego se torno frío, los participantes cuidaban cada vez que tiraban, en eso, el hombre detrás de la mesa dijo.
-¿cartas señora?
Ella se volvió a Niedere, le abordo con la vista de arriba a abajo y dijo.
-no, pago por ver.
El juego se había vuelto adulto, ella se levanto de la mesa y mostró su juego, enseguida todos ahí hicieron una exclamación.
-¡gane!
-bien, lo apuntare en su cuenta.-dijo el hombre que administraba la casa.
-¿me invitas algo Niedere?
-claro que si Denia.
De reojo Niedere los noto llegar, eran cinco hombres trajeados, uno de ellos parecía el jefe, estaban por subir a la suite, la escalera estaba muy solicitada; ambos tenían una copa en mano e iban muy juntos.
-¿Qué miras Niedere?
El se alegro un poco de que ella preguntase, bebió un poco para luego, al llegar al entorno del pasillo.
-¿aquellos tipos, los conoces?
-¿Quiénes?-Menciono Denia un poco titubeante y ya con el alcohol encima y si embargo no estaba ebria aun.
-aquéllos recién llegados, usan trajes caros y llevan portafolios.
Denia abría y entre cerraba los ojos, al detenerse al borde del varandal los noto y dijo divagante.
-¡ah, ellos!
-si, ¿Quiénes son?
-no te preocupes, son buenos muchachos; es pepe homero, Gerardo clemente, y napoleón Crowley, los otros dos son sus guardaespaldas, miguel Trujillo y enrique sevrés.
Los tres estaban vestidos como clérigos, con una cruz pendiendo de una cadena de plata sobre su pecho, con las manos entrelazadas y se comportaban como almas caritativas.
Niedere la tomo del brazo y siguieron caminando, el ascensor estaba ahí, al abrir sus puertas un cúmulo de gente inicio a salir.
-tu primero-menciono Niedere.
Los mismo que ellos, algunas personas entraron y cuando cerraron las puertas, Niedere se bebió el ultimo trago de aquella botella de vodka oso negro.
Al estar en la suite, Denia se tendió sobre la cama y se incorporo ligeramente colocando los codos sobre el colchón.
-¿Cómo sabes los nombres de esos tipos?-le menciono Niedere una vez que ubicó las dos copas vacías sobre una mesa.
-¿Por qué te interesa tanto?
-curiosidad…
Niedere se quito el saco del smoking y lo arrojo sobre el sofá, un par de pasos le llevaron hasta el borde de sus pies.
Se quito la corbata mientras Denia abrazaba sus caderas con sus piernas.
El cuerpo de Denia era frágil, con ello denotaba que era bailarina, la danza clásica era subyugante cuando ella la desarrollaba, casi siempre el teatro se lIenaba para verla al borde del suplicio.
-si te digo otros nombres, ¿me harías el amor?-dijo Denia.
-dirás el sexo; el amor lo hago sin apenas desnudarme, pero de todas maneras, me lo digas o no, te lo haré…
-sabia que dirías eso Niedere.-dijo Denia al apagar la luz y quedar a oscuras.
-son pedro, Richard, miguel, jacinto y Eric.
Al escuchar el último nombre el interés de Niedere se incremento y dijo.
-¿Qué sabes de Eric?
-¡que es mi hermano!
Después de lo que Denia le había dicho, Niedere caviló el asunto detenidamente, por eso salio de la suite luego de vestirse con otra ropa mas confortable, una playera de cuello ruso roja. Un par de pasos había dado cuando, en el pasillo un hombre pareció reconocer a Niedere, cuando metía su llave para abrir la puerta de su habitación, le miro a Niedere violentamente y le insulto; llevaba del brazo a una mujer que lo convenía en entrar.
-¡Tony no seas terco, entra al cuarto!
-no laura, tengo que arreglar un asunto con eso tipo.
Tony tenia en la mano un puñal que restallo con la luz eléctrica, sin esperar a nada, Niedere se fue contra èl dando pasos largos y veloces.
Cuando Niedere ataco le asesto a Tony una patada, Tony tiro la puñalada y se arrinconó cuando se dio cuenta de haber fallado, otra patada de Niedere a la zona blanda a Tony y le agarro el pie, cuestión que le hizo guardar el equilibrio con una sola pierna, por lo tanto Niedere lo comenzó a golpear en el rostro, a pesar de que Tony usaba lentes de fondo de botella y tenia el pelo lacio y un poco largo, le llegaba antes del hombro.
La sangre le comenzó a brotar del rostro de Tony, enseguida laura al tratar de defender a Tony, tomo a Niedere del cinturón con ambas manos y le proyecto hacia el interior de la habitación, ya dentro, Niedere continuo golpeando a Tony, ambos cayeron en la cama.
Niedere se situó encima de Tony, al golpearlo en repetidas ocasiones, las heridas se abrían con más a ahínco.
Laura sostenía una pistola en su mano y le apuntaba a Niedere con determinación, era la mesera del casino, aun vestía de uniforme y volviendo a tomar del cinturón de Niedere dijo.
-¡ya suéltalo o disparo!
Niedere se descuido un instante y así como estaba, Tony puso las plantas de sus pies sobre el pecho de Niedere y se aparto de èl, de esa manera bajaron de la cama.
Tony se precipito otra vez hacia Niedere, ambos se agarraron de la ropa, su playera roja era elástica, no se rompió, pero estaba manchada de la sangre de Tony.
Niedere dio a Tony un par de golpes con los puños, que se quejaba y ya aturdido simplemente se limito a resistir.
Laura disparo un par de ocasiones a Niedere, no obstante su mala puntería un jarrón se rompió.
-¡ya déjalo, suéltalo!-menciono Laura.
Niedere tomo a Tony de la ropa y con fuerza lo proyecto hacia atrás, con eso se aparto de Tony y dijo.
-¿suficiente?
Laura le apuntaba aun a Niedere, con el pulso vacilante le siguió con la vista hasta que salio de la habitación.
Los ruidos de los disparos propiciaron que acudieran con celeridad los vigilantes del casino hasta la habitación de Tony.
Laura no se resistió cuando la encontraron con la pistola en la mano Tony sangraba profusamente de la cara y su temperamento estaba desbordándose.
La policía estatal llego e hizo gala de toda su fuerza, laura y Tony fueron esposados de inmediato, Niedere los noto muy confundidos, se encontraba al pie de la escalera y el encargado de aquel arresto dirigiéndose a el menciono.
-¡estos pájaros de cuenta ya no harán mas daño, el señor Tony ángel será transferido a la prisión de alta peligrosidad de Hong kong y a laura será llevada a la prisión femenil!
-¡un momento!-Menciono Niedere.
Aquel instante lo pidió para tomar su teléfono celular, el cual era producto de la transformación de un billete de un peso mexicano antiguo.
Al realizar la comunicación iban caminando a la salida del casino, la seguridad era extrema y mucha de la gente ahí, estaba acercándose en torno suyo.
-un avión de la marina china estará en el aeropuerto de Montreal para llevarse a Tony repatriado.
-¡muy bien, el auto está listo, los escoltaremos allá!-dijo el policía estatal en jefe.
El pavimento de la autopista estaba húmedo, el tiempo en Montreal se había vuelto a enfriar, ligeramente comenzaba a caer la nieve, la avanzada era con precaución y en el transporte en el que iban entraba una corriente que enfriaba hasta los huesos.
Ángel comenzó a vociferar palabras muy virulentas, para ninguno parecía entender el idioma de los chinos; el mandarin.
Uno de los custodios era mujer y ella si comprendía el idioma, ella se llamaba shudi fong.
-¡èl no te dejara escapar ángel¡-dijo shudi con eficacia al referirse a Niedere, cuando sentado frente a Tony lo noto ansioso.
Ángel volvió a articular un par de frases emotivas, vio a Niedere con un decho suplicante.
-èl te entiende ángel, también sabe del idioma…-dijo shudi.
Shudi se quedo observando a Niedere un instante, era una mujer muy bella, tuvo la sensación de que quería encontrar algo en èl.
-¿como le doblegaste a ángel?
-digamos que tuve suerte.
A través de la ventanilla Niedere noto que estaban llegando al aeropuerto internacional de Montreal, el tiempo era indiferente y con notoriedad dijo shudi.
-tuviste buen mentor.-
El auto se detuvo y salieron abrigándose profusamente.
-me llamo Niedere.-menciono al acercarse al avión militar de la naval china.
-y yo soy shudi, de Shangai.
-un placer conocerte.-menciono mientras ángel era llevado abordo y la nieve caía con más ímpetu.
La nave imperial levanto el vuelo de manera furtiva, por ello Niedere fue a donde uno de los vehículos, para salir del aeropuerto.
Volvió a sonar su teléfono, saco el billete de una bolsa interior de su saco y accionando el mecanismo óptico, se transformo en teléfono celular.
-diga-menciono Niedere.
-soy Denia, ¿donde estas Niedere?, me estoy yendo del casino.
-¿te vas y a donde?
-tengo trabajo que hacer.
-eso dijiste la ultima vez.
-bueno, un pequeño cambio de planes, te hablo luego y te aviso a donde estoy, nos vemos mi amor.
-chao Denia.















































CAPITULO DIEZ Y NUEVE



SEÑAL SUPERNOVA


El lugar de descanso era Banff springs, en donde Niedere estaba sentado a la mesa del comedor cercano al filo de la nieve, abierto al aire libre, en forma de herradura. En eso, Jasón llego acompañado de un par de hombres más y se ubicaron en torno suyo.
-Niedere, ¿Cómo estas?-dijo Jasón.
-bien…
-el es sergio y èl es bladimir…
-¡que tal!-dijo bladimir.
-mucho gusto…-dijo Niedere.
-¿Qué toman?-dijo Niedere mientras llegaba a èl un niño con un guante de esquiador.
-algo ligero.-dijo Jasón.
Niedere entonces llamo al camarero con un ademán quien se encontraba en torno de la barra.
-¿señor?
-dime…
-¿es usted Niedere wald?
-si…
-¿me daria su autografo?
-claro...
El niño le dio el guante a Niedere así como también un bolígrafo y aguardo a que Niedere lo firmara.
-¿Cómo te llamas?
-me llamo blanik…
Niedere le firmo el guante con una dedicatoria especial que decía: para mi amigo blanik con afecto, de Niedere wald.
Entonces llego claudia y se sentó en el lugar que aun quedaba libre y viendo a el niño menciono.
-tengo sed…
Entonces blanik noto la firma en el guante y le dijo.
-gracias, es usted muy mable…
-es un placer…
En cuanto el niño se fue, Niedere volvió a lo suyo y viendo que ya estaba el camarero con ellos.
-yo quiero un refresco, una COCA COLA.-dijo claudia.
-yo naranjada…-dijo Niedere.
-nosotros también, naranjada.-dijo Jasón.
Entonces el camarero tomo las cartas de menús y aproximándose a donde estaba claudia dijo.
-¿Qué es eso?
-¿Qué?-dijo claudia.
El hecho es que había una extraña sombra sobre ellos que venia del cielo pero ellos aun no levantaban la vista.
-¿es un escorpión?-dijo Jasón.
Entonces se volvieron hacia arriba y notaron el sol que se estaba poniendo rojo, dentro se dibujaba una extraña figura amarilla.
-¡es un escorpión amarillo!-dijo bladimir.
El cielo comenzó a ponerse de color verde, haciendo que su calor llegara al filo de la montaña y por eso, se fue haciendo una densa bruma que al paso de los minutos, fue convirtiéndose en niebla abundante y espesa.
Se veían los recorridos de los trineos jalados por perros que estaban cerca, pero al adentrarse en el Bosque ya casi no había visibilidad.
Desde el restaurante, la gente había visto todo, pero la mayoría se había comenzado a levantarse de sus lugares para ir al sus hospedajes.
Entonces se escucho un grito en la cocina del restaurante.
-¡ahhhggg!, ¡déjeme!
Esa había sido la cocinera cuando un hombre la tenia del cuello amenazándola con el cuchillo de cortar carne.
De alguna manera se habían hecho de los utensilios de cocina y se habían metido sin ser vistos o tal vez con la anuencia de alguien.
Por eso, los vigilantes del lugar acudieron de inmediato sacando sus pistola y llevándolas por delante; era como cinco delincuentes que estaban alrededor del servicio de cocina, cuando se abrió la puerta el vigilante les dijo.
-tiren sus armas al suelo y dejen a los empleados…
Entonces unos de los delincuentes se movió hacia donde se encontraban la ollas de calentar y yendo a donde el regulador del gas rompió la válvula y comenzó a dispersarse por todo el lugar.
-¡se esta saliendo el gas!-dijeron en voz alta los vigilantes, de manera que la gente comenzó a precipitarse a la salida en lo que era como una estampida humana.
Desde su mesa, Niedere que no se había movido y los demás tampoco, se dieron cuenta de que estaba moviéndose la tierra, en lo que era ya el principio de un descomunal sismo que estaba partiendo la cima de la montaña y la nieve iba a comenzar a precipitarse en forma de avalancha.
Alguien grito dentro de la cocina.
-¡es Eduardo Neal!
Eso fue lo último que hubiera dicho la cocinera ya que Eduardo Neal le cortó el cuello y por lo tanto, un vigilante le acertó un disparo en pleno brazo, el sintiéndose herido soltó el cuerpo ya sin vida de la cocinera y se hizo de lado para colocarse detrás de la cocina de manera que se protegiera de lo que era una cruda balacera.
-¡mejor nos vamos¡-dijo Jasón a los demás cuando notaron que la nieve estaba siendo precipitada montaña abajo.
El estruendo comenzaba a incrementarse, el restaurante estaba siendo bruscamente sacudido, había histeria colectiva y fue cuando Eduardo Neal sacó de entre su bolsillo, un encendedor de mano, presiono la perilla de encendido y entonces la flama se expandió. Uno de los vigilantes saco su arma y le apunto a Eduardo cuando estaba sobre el suelo y aun alcanzo a asestarle una bala en la quijada.
El restaurante comenzó a derruirse con el fuego en todo el lugar, las ventanas destrozadas y las mesas fueron precipitadas afuera con todo y gente, la cocina había desaparecido quedando un tremendo hueco.
La avalancha se había desbordado, estaba alcanzando los lugares mas cercanos y fue cuando llego a lo que quedaba del restaurante tapándolo todo extinguiendo el fuego que se estaba creando.
Aun así el humo que comenzó a notarse se había apaciguado, había aun cierta bruma, sin embargo el cielo se torna en azul pero aun no clareaba, las naves comenzaron a rondar, para intentar buscar sobrevivientes entre la nieve.
Una nave de el imperio llego y se elevo por encima de el desastre, de ella salieron vehículos mas pequeños para luego dispersarse, los que habían bajado tenían palas robotizadas con las que estaban excavando, otros habían extendido robots de rescate montañoso que hacían a un lado lo visible de la nieve.
Ya estaba cayendo la tarde pero aunque el sol aun estaba en lo alto, ya se comenzaban a vislumbrar las primeras estrellas en el cielo, el frío se había encrudecido y aunque estaba nevando otra vez, la tierra se cimbro, lo que haría aun mas difícil el rescate, uno de los robots salio disparado al cielo cuando abrió un boquete en la nieve y se noto que abajo aun estaba surgiendo el fuego.
Por eso, hubo una explosión que hizo un boquete mas ancho, y estremeció el suelo cuando una nave ambulancia se levanto un tanto ya que la tierra se hizo como si fuera un tapete, los que estaban en tierra estuvieron apunto de caer, no obstante el que aun los que estaban debajo de la nieve intentaran alcanzar la superficie y por efecto tal que no pudieron lograrlo.
Una nave del noticiero internacional ya había llegado y se había dado a la tarea de desplegar sus cámaras a fin de tomar los pormenores del incidente. Desde el aire la reportera tomo su micrófono y ya enfocada, comenzó a narrar el flujo de los acontecimientos, mientras transmitía, otro estruendo se dejo sentir en lo alto de la montaña y ello hizo que lo ultimo que se había acumulado de nieve, comenzara a venirse abajo.
-el desastre aun no se termina, estamos transmitiendo desde la¡...
Aquello fue lo último que la reportera hubiera mencionado ya que una onda les llego a los de la nave y la movió abruptamente, haciendo que la transmisión se cayera.
A causa de ello, tuvo que llegar la nave aspiradora para hiciera a un lado la nieve, dicho transporte era descomunal, que de ella salieron tubos gruesos que tuvieron que propulsar aire comprimido, en cuestión de segundos, la nieve fue dando paso a lo que quedaba del restaurante.
Los droids fueron pasando para buscar la posible vida de las personas que estuvieran por ahí, tomaban lo destruido y lo hacían a un lado.
Había quienes dejaban sentir sus quejidos, andaban por en suelo titilando de frío, se les veía ciertamente ya los rasgos de una posible hipotermia.
Los droids comenzaron por atender a los heridos, estaban acomodanlos en las camillas que les estaban bajando desde la nave de rescate montañés.
A algunos, les estaban inyectando de manera que se revitalizaran, pero no sucedía de inmediato, en tanto se recuperaban, los estaban subiendo a las camillas que se sostenían en el aire mediante suspensión gravitacional.
Eran docenas de cadáveres, en lo que había sido de la cocina, se encontraban los cadáveres de los cinco maleantes que asaltaran el lugar, el cuerpo de Eduardo Neal estaba congelado, tenía aun en su Mano el puñal con que hiriera a la cocinera, los demás se encontraban con las entrañas destrozadas y el gas aun estaba en el ambiente, el droid dirigió su cámara al lugar y transmitió a la nave imperial.
En la televisión internacional se estaba dando la noticia, el rescate había sido rápido y eficaz, pero no todos los sobrevivientes estaban vivos y de los muertos aun no se sabía todo.
Solo estaban repitiendo una escena, que había causado gran estremecimiento, era que un hombre hubiera salido de entre las llamas llevando en brazos a una mujer que la había dejado sobre la nieve que aun estaba siendo removida.
El hombre no se le distinguía la cara y tanto a èl como a la mujer no les había pasado nada, ella no tenía un solo rasguño y de èl ya no se sabía ya que se había ido cuando la cámara se había bloqueado.















































CAPITULO VEINTE

EL MISTERIO DE LAS VEGAS
En el pequeño auditorio se estaba dando una conferencia, el lugar se encontraba en las instalaciones de west point y presidía desde el estrado, tara.
-¡diga!-menciono tara refiriéndose a el hombre sentado en el asiento frontal.
-¡me llamo Ko sachsen, solo quiero tener el acceso a las instalaciones del desierto de las vegas!
-pero ahora no tenemos tiempo, debe hacer el tramite.
-ya lo hice.-dijo ko sachsen al mostrarle un documento, que tara tomo y leyó al momento.
-¿Por qué quiere ir ahí?
-soy el encargado de investigar de las instalaciones y de cierre, además de conocer del paradero del dueño…
Entonces tara le dijo a dos de sus sub alternos.
-tomen un vehículo y lleven a ko sachsen a las instalaciones… pero antes debe saber que las instalaciones fueron subastadas y obtenidas por el ejercito…
-¿Quién promovió eso?
-un tal Fernando, conocido vendedor de armamento…
-¡quiere decir un traficante y terrorista!
-eso esta por conocerse… y un tal Rudolph…
-otro terrorista…y hampón-dijo ko sachsen.
Blanca y Tifany salieron del auditorio con ko sachsen, enseguida fueron a donde se encontraba un jeep, dentro del taller.
-antes de usted nadie se había interesado en las instalaciones de Niedere en las vegas… ¿es algo personal?-dijo Tifany.
-no, es mas bien algo de interés comun…mire…
Tifany tomo la fotografía que situaba a Fernando y a ko sachsen en el interior del metro, dándose un abrazo, ante eso ella se sobresalto.
-¿entonces usted?…lo conoce…
-si, ese abrazo fue antes de me traicionara, si le sirve saber, Fernando trabaja para la CIA…es judío y pertenece a una secta satánica…el día que lo iba a matar, lo escondieron, es un cobarde, se siente héroe…pero asesino a muchos inocentes…
-¿y el día que lo encuentres?
-lo matare…
Entonces llegaron al taller en donde estaba el mecánico que al verlas de inmediato les abordo y dijo.
-¡que tal!
-¿Cómo estas oleg?
-bien…
-necesitamos un auto que sirva para llevarnos a las vegas…
-bueno, les daré un jeep…aquel…
ko sachsen se limito a ver desde donde se encontraba, noto el acento de oleg y le dijo.
-¿es usted francés?
Pero entonces blanca le dijo a ko sachsen.
-¡vamos ko sachsen, sube!
El jeep salio de west point, y tomo de inmediato el camino del aeropuerto.
Ko sacasen tomo su teléfono celular y se comunico con su base, así, le dijo quién le contesto.
-soy ko sachsen, prepárense para intervenir, y hay que atrapar a Fernando, el terrorista…
A Fernando y sus secuaces los tenían en pantalla bajando la imagen desde el satélite y la transmitieron hasta el teléfono celular de ko sachsen quien la noto.
Eran Fernando, y otros tipos jugando baraja en lo que se notaban las instalaciones clandestinas de su secta.
Era un tipo de edificio viejo, imbuido dentro de un callejón, que apenas se distinguía por ser sucio y en el los perros se quedaban al filo de las puertas, se notaban las ropas de las personas pendiendo de mecates en las azoteas.
Un misil tierra aire les estaba apuntando desde un porta aviones, por eso ko sachsen menciono.
-¡dispárenles!
Luego, ko sachsen doblo el teléfono dando por terminada la conferencia, desde donde estaba, se dio cuenta de que habían entrado al aeropuerto y se estaban acercando a el hangar del la armada que los llevaría a las vegas.
El jeep se detuvo al filo del hangar, ella bajo y enseguida ko sachsen, por consiguiente se dirigieron al avión que tenían a un costado.
-¿que te parece?-dijo Tifany.
-bien, ¿en cuanto tiempo llegaremos?
-rápido…
la escalera del avión estaba abajo, los tres estaban subiendo, dentro del hangar se veían algunos aviones llegando,ko sachsen se apresuro a entrar siguiendo a Tifany que se ubicó en el asiento frontal.
Tenían una pequeña sala, con una mesa en el centro, los asientos tenían visibilidad hacia el exterior por medio de las ventanillas.
Se abrocharon los cinturones y el aparato comenzó a moverse, salio lentamente del hangar y se dirigió a tomar la pista.
Una vez en posición, aumentó la velocidad de un momento a otro y entonces comenzó por elevarse tomando el rumbo, esa era la nave ultrasónica “tranquilidad”.
El cielo estaba despejado, la nave dio un recorrido por la costa, dejando ver los muchos lugares favorecedores que aun la naturaleza conservaba, como era costumbre y luego, viro y se dirigió hacia el desierto de nevada.
-¿tomas algo ko sachsen?-dijo Tifany.
-un jugo de naranja…
Al oír eso, blanca saco el carrito del barman y sirvió lo que le pedían, coloco los vasos sobre la charola y los llevo a la salita.
-¡adelante!-dijo ko sachsen para que Tifany tomara su vaso con jugo de naranja también, luego siguió èl y enseguida blanca tomo uno con refresco-COCA COLA.
-¡esta bueno!-dijo ko sachsen.
-es jugo natural, ¿quieren oír música?-dijo blanca.
-¿Qué nos vas a poner?-dijo Tifany.
-concierto de piano… ¿les parece?
-claro…
Blanca se dispuso a colocar el disco en el compartimiento, tomándolo de un estuche de una de las gavetas que estaban a un costado, ella los vio antes de colocarlo en el compartimiento, luego lo coloco e hizo funcionar mediante el control remoto del aparato.
-bueno, que lo disfruten, yo voy a descansar mientras llegamos.-dijo blanca al irse a descansar al camarote contiguo.
Tifany estaba en un asiento distinto, se paro y coloco el vaso de jugo sobre la mesita de centro, luego al volver a sentarse, lo hizo en el sillón de manera incidental dejándose caer a un costado en que ko sachsen estaba, se recargo sobre su hombro y lo miro con cierto placer.
Sachsen le rodeo con el brazo, se volteo a ella y se le acerco tanto como para rozar sus labios, que eran frescos y carnosos, que parecían desear ser tomados; ella se le acerco más aun y por fin se fundieron en un beso, que fue ligero, sus labios eran como dos pétalos, tan suaves como una gota de mar.
Ko sachsen la contemplo un instante, luego ella lo volvió a besar de una manera mas calida, luego ambos se apartaron como si desearan que aquello no terminara nunca y por tercera vez se besaron, pero ahora con mas deseo que la primera vez y con mas tiempo que la segunda.
Luego, ko sachsen se recargo sobre el sillón con cierto placenteramente y Tifany se le recargó sobre el pecho.
-eres tan bonita que podría incluso, casarme contigo._dijo ko sachsen.
-¿casarte?, pero si tu no eres de los que se casan.
-¿segura?
Tifany se incorporo un poco, luego se levanto y volvió a tomar el vaso de jugo, tomo un poco al tiempo que miraba que ko sachsen la veía sin disimulo y con cierta codicia.
-en todo caso, podríamos casarnos ahora mismo…
sachsen le indico con una mano a Tifany que se sentara junto de ella, ella dejo el vaso y fue con èl, al sentarse èl le dijo.
-¿no importa que sea pobre?
-¿lo eres?
-si…
-no, no importa…
Entonces ko sachsen la beso.
El avión llego a la base terrestre de las vegas, el hangar de la naval abrió la puerta seguido, la escalera se coloco para que los pasajeros bajasen, los tres se apresuraron a ir a donde el auto que les esperaba tenia la puerta abierta, al abordar, el auto comenzó a moverse no obstante que ni siquiera el capitán les hubiera dirigido la palabra.
Salieron del aeropuerto y tomaron de inmediato el camino del centro de la ciudad de las vegas, en tanto que ko sachsen recibía una llamada a su teléfono celular.
-diga…
-¿señor?
-si idelfonso, adelante.
-cumplimos su orden, ya realizamos la operación, estamos enviando a un contingente a revisar el lugar…
-bien, identifiquen a todos, que no quede nadie sin revisar, quiero sus nombres…
-enviaremos los cuerpos a la zona de contrainteligencia para la identificación personal…
-bien, ¿que noticias hay de eso?
-ninguna, lo hicimos con la discreción necesaria…
-bueno, infórmenme en cuanto tengan todo listo…
-si señor…
La conversación concluyo y ko sachsen guardo su teléfono celular en la bolsa de su saco, noto que ya llegaban al hotel la pequeña Venecia.
El auto se estaciono en la estrada del hotel, nadie bajo sino hasta que el empleado del hotel la hubo abierto, la primera en salir fue blanca, enseguida Tifany que espero a que ko sachsen saliese, èl al salir se acomodo junto a ella y la tomo de la mano y se encamino a la entrada.
-tenemos reservaciones-dijo Tifany.
Los tres entraron al hotel y de inmediato se acercaron a la recepción, ahí, el empleado de registro de huéspedes les dijo.
-¿Cuál es su nombre?
-Tifany…
El empleado busco en su registro el nombre y cuando lo encontró dijo.
-son dos suites especiales…
-si, gracias.-dijo Tifany.
Entonces el recepcionista toco su campanilla y llamo al botones.
-llevelos a su habitación…
-claro señor…por aquí…















































CAPITULO VEINTIUNO

EL ESCOPION DORADO

Alguien llamo a la habitación de ko sachsen, èl se no presiono para abrir, lo hizo con cadencia al ir a la puerta, tenia un bocadillo en la boca que demoro en comer, para cuando llego a la entrada, la abrio y se vio con la figurilla de Tifany.
-¡hola!
-hola…
ko sachsen se ubicó al filo de la entrada seguía comiendo con cierta diversión, y tanto desparpajo que con la otra mano la tomo por el talle, la trajo hacia èl y la beso.
Luego, ella dijo dibujando sobre el pecho de ko sachsen algo que aun no se descifraba.
-¿entonces?
sachsen miro hacia adentro de la suite, dándose cuenta de que ella tenían algo en mente que èl ya lo adivinaba.
-¿deberás quieres pasar?
Ella entonces reviso desde donde se encontraba el interior de la suite, no encontrando a nadie dijo.
-¡estas solo!
-si…
-¿entonces?
la acaricio de la barbilla, tomo su mano beso a Tifany para entonces abrirle paso.
Al cerrarse la puerta Tifany se acomodo sobre el sillón de la salita, ko sachasen se le sentó en las piernas llevando En su Mano una botella de champagne, luego èl, se dispuso a abrirla.
-agítala un poco-dijo Tifany.
Sachsen la agito lo más que pudo y al descorcharla de inmediato broto la espuma sobre ambos.
-ah, cuidado, no tengo ropa que ponerme.-dijo Tifany al reír brevemente sobre todo porque ya èl la estaba besando.
Sachsen le dio a beber a Tifany desde la misma botella, ella se acerco a sus labios y bebió un poco, luego él bebió para entonces levantarse y jalándola le dijo.
-¿te parece que tomemos un baño?
-aja.
Ambos entraron al baño, ahí se encontraba un jacuzzi de buen tamaño, sachasen aventó la botella a la tina y se acerco al control de agua de la tina y encendió el baño de espuma.
-¿y la champagne?-dijo Tifany al notar que ya no había nada de beber.
-un momento.-dijo él quien abrió uno de los pequeños bodegones del baño en donde guardaban una cantidad de buenos vinos que disfrutarían mientras se bañaban.
-¿Qué prefieres?
Ella vio las botellas de vinos de excelente calidad y se alentó con el ansia de beberse alguno.
-un vino austriaco…
-buena elección, ¿en copa o así?
-prefiero una copa…
Èl tomo dos de las copas situadas dentro, tomo la botella y la comenzó a abrir quitándole el forro de la boca, luego se deshizo del encubrimiento de alambre para entonces tomar el corcho y abrirla.
Tifany se había metido a la tina vestida, entonces comenzó a quitarse la ropa bajo el agua, de repente comenzaba a tirar a la distancia alguna prenda, primero fue su blusa, luego su falda que cayó sobre la repisa de vinos y por ultimo sus zapatos.
Ella llamo a sachsen con un dedo muy melosamente, èl se le acerco con las copas en mano, tomo una y se la llevo a la boca.
-ummm, que rico.
Èl dejo su copa al filo del jacuzzi y comenzó a desvestirse pero no había apenas terminado de desabrochar un botón cuando dijo.
-no, espera, entra así…
Entró con ropa, y ella fue desvistiéndolo con suavidad, de vez en cuando le besaba mientras èl ya le acariciaba el pelo y luego pasaba sus labios sobre su cuello.
La ropa de èl fue a caer al piso, ella se apodero de sus labios y lo jalo hacia adentro del agua que sabía a champagne y espumeaba el shampoo que había colocado, el aire estaba desmitificándolo todo; entonces salieron a la superficie.
Entonces la música se instalo en automático y comenzaron a escuchar una vieja canción a ritmo de bolero, de esas que se cantaban en algún bar como a eso de las doce de la noche; la cantante cantaba en idioma alemán, su voz era cadenciosa, tersa y apremiante. Ella se concentro en la letra un instante y luego dijo.
-¿conoces la canción?
-si…
-es hermosa…la he escuchado solo dos ocasiones, además de esta, ¿Cómo se llama?
-…”anochece en el Danubio”
Y entonces el locutor salio al aire una vez que la canción termino y dijo.
-“del autor Albert von grazVon, anochecer en el Danubio, interpretada por la cantante francesa vari…”
sachsen y Tifany salieron por la mañana junto con blanca a bordo del auto, no demoraron mucho en llegar a la zona del desierto de nevada, se detuvieron frente a un claro en que no se visualizaban ni vegetación, ni edificaciones ni congestionamientos de personas.
-aquí es…-dijo Tifany al bajar del auto.
Enseguida se dirigieron a la entrada, no se notaba, pero blanca rasco con su pie sobre el suelo y descubrió un cuadro que tenia una cadena y aun lado un tablero electrónico, oprimió un par botones y la puerta se abrió en forma corrediza.
-vamos-dijo Tifany al ver en perspectiva que dentro estaba oscuro.
Se acerco a un apagador inalámbrico de pared y seguramente un censor de movimiento les impidió la entrada, pero entonces blanca pulso en el tablero de pared una clave digital y entonces la puerta invisible dejo de impedirles el paso.
Era un bunker extenso, habían decenas de naves nunca antes vistas, eran como salidas de un idea imaginaria, las armas estaban guardadas en gavetas transparentes y cerradas bajo llave.
Había también un centro de ultra comunicaciones con decenas de monitores virtuales, también había una bóveda que seguramente servia como un nano telescopio que era controlado desde ahí.
-¡esto es fantástico!-dijo ko sachsen.
-Niedere era el hombre mas rico del mundo.-dijo Tifany.
-¡lastima que haya muerto¡-dijo blanca.
sachsen comenzó a revisar lugar por lugar y se encontró con lo que seguramente seria una nave de combate o caza, se subió a su cabina por la escala lateral, la abrió por conducto de un censor de movimiento y se situó en el asiento del piloto.
-¿ustedes conocieron a Niedere?-menciono ko sachsen desde la cabina del nano caza de un solo piloto.
-yo no.-dijo Tifany.
-yo si-dijo blanca.
Sachsen se sentó y comenzó a ver todo lo que tenia el caza interiormente, noto en el tablero un compartimiento que se abrió cuando èl pulso uno de los botones.
-¡OH!, miren, un reloj.
Ellas se acercaron con curiosidad al caza, notaron el reloj que ko sachsen tenia jugueteándolo y entonces èl hizo el intento de que alguna se lo pusiera.
-¿se lo quieren medir?
Ellas no aceptaron.
-¡no!
-¿Cómo?, un reloj tan costoso ¿lo desdeñan?
-mejor mídetelo tú ko sachsen…
sachsen previo cierto miedo en ellas, acto seguido tomo el reloj y se lo ciño a su mano e instantáneamente el reloj pareció cobrar vida ya que comenzó a parpadear de inmediato y además parecía haberse fusionado con su cuerpo.
sachsen movía la mano y enseguida el caza comenzó a mover su nariz de ave pelicana y se dio cuenta de que el reloj era quien lo controlaba.
-muchachas, será mejor que se vayan, avisen que ya encontramos esto, me quedare para revisar mas detalladamente y haré un informe, hagan todos los tramites necesarios, estas instalaciones las voy a expropiar…
El bunker era conocido como la cueva del oso, estaba ubicada a cien metros bajo tierra, sostenida por una estructura de titanio y tenía solo una entrada por la que habían llegado.
Ellas estaban haciendo un informe acerca de cómo habían encontrado las instalaciones e incluso estaban tomando fotografías de cada lugar, en eso parecía como si estuviera ocurriendo un movimiento telúrico ya que la el lugar se movía de un lugar a otro ligeramente. Pero no ocurrió nada grave ya que al parecer la cueva del oso estaba acondicionada con pilotes y gatos hidráulicos de movimiento oscilatorio y rotatorio.
-¡ya paso!, ¿están bien?-dijo ko sachsen.
-¡is!…-mencionaron ambas cuando parecía que habían concluido su revisión y estaban por irse.
-¿entonces que ko sachsen?
-estaré aquí todo el día…
-bueno, te esperaremos en el hotel, pero no tienes como irte…
sachsen dio un rápido vistazo a el lugar y se encontró con lo que parecía ser un auto, aunque no de modelo reciente y tampoco muy cuidado, pero seguramente le funcionaria.
-me iré en eso…
Ellas se volvieron adonde le indico y notaron el Ferrari rojo que estaba algo empolvado.
-bueno, pero ¿tendrá combustible?
-seguramente, pero si no lo tuviera, ahí hay unos barriles de combustible…
Los barriles se encontraban a un lado del auto, se notaban algo sucios como si alguien recientemente hubiera obtenido de ellos el combustible necesario para alimentar a uno de tantos vehículos por ahí.
Ellas quedaron conformes y avanzaron otra vez entre tanto aparato para despedirse de ko sachsen.
-¿seguro que no quieres irte con nosotras?
-será interesante ver lo que se tiene aquí, seguramente les encontrare alguna utilidad…
-no creo, esto ya tiene mucho tiempo de no servir…
-ustedes quieren desanimarme…
Ambas se vieron la una la otra y estuvieron de acuerdo en que debían de irse, además ko sachsen tenía la autoridad de estar ahí de manera oficial.
-de acuerdo, blanca, nos vamos.-dijo Tifany.
Tifany entonces subió a el caza por la parte de afuera y se despidió de ko sachsen con un beso.
-tu y yo aun tenemos una charla por delante…
-claro-dijo ko sachsen dándole un beso a Tifany.
Ella bajo entonces del caza y blanca le alargo la mano a ko sachsen, al estrechársela aprovecho de darle un apretón con cierto afecto y le dijo.
-cuídate…
sachsen asintió con la cabeza y aflojo el apretón de mano, blanca entonces tomo sus cosas y le dijo a Tifany.
-lista, vamonos.
Ambas llevaron sus cosa en la mano y siguieron el camino a la salida, el lugar tenia poca iluminación por eso no se veía bien a unos metros, entre tanta cosas se dieron prisa en salir, al aproximarse a la puerta, Tifany apretó el sistema de vigilancia y la puerta invisible les cedió el paso, ella aun se volvió a ver el interior, pero al fondo no se veía nada dado el contraste de luz.
Ante ella la puerta exterior cerro, subieron al ascensor en el que habían llegado, accionaron el mecanismo, dejando que el ascensor les guiara hasta la superficie.
El avance era lento, a los lados se notaban los contornos de la construcción de titanio y soplando el oxigeno de una instalación exterior.
Al llegar arriba, ambas salieron del ascensor y este volvió a regresar al tiempo que cerraba la entrada de la cueva en forma hermética.
Pero entonces la entrada comenzó a hundirse con lo cual se produjo un gran estremecimiento de tierra, ambas tuvieron que subir al vehículo deprisa para no ser alcanzadas por el movimiento de tierra que se estaba tragando todo a su paso en un radio de cien metros.
La tolvanera no se hizo esperar, ella detuvo el auto mas adelante, una vez que se sintieron a salvo, bajaron y presenciaron el hecho.
Quedo una hondonada por eso se noto que la cueva del oso había sido tragada y con eso ko sachsen que se encontraba dentro.
Ambas estaban atónitas, no daban crédito a lo ocurrido, tenían el semblante polveado, Tifany entonces noto otro estremecimiento de tierra con lo cual se tambalearon en su lugar y era que la arena del desierto de nevada se estaba volviendo a acomodar quedando parejo tal que si no hubiera existido nada ahí.
-ya no quedo nada.-dijo blanca.
-hay que avisar-dijo Tifany.
Ambas subieron a su auto, tragaron saliva y entonces se pusieron en camino tomando por la carretera que en esos momentos no estaba demasiado transitada.
El moviendo había sido en circulo, el bunker se había girado completamente, de manera que la entrada quedara del lado opuesto, haciendo con ello que no se pudiera acceder, ello le convino a ko sachsen que aun se encontraba dentro y con todo el arsenal intacto y trepado en la cabina del nano caza.
sachsen abrió otro de los compartimentos del nano caza que se ubicaba en el lado posterior de su brazo derecho y extrajo de ahí una cajita de cuarzo, esto lo hizo curiosear, al abrirla, se dio cuenta de que había ahí un envoltorio, lo tomo y lo fue abriendo dándose cuenta de que cada vez era mas extenso, hasta que llego a su tamaño natural, era de color amarillo y era de un material desconocido por la ciencia hasta entonces.
Lo coloco en el frente de la nave y noto que el reloj se había alargado en todo su brazo y luego en todo su cuerpo formando así una armadura flexible de color oro, que lo cubrió de pies a cabeza, entonces la cabina cerro y la tela se elevo automáticamente cayendo sobre el nano caza cubriéndolo y haciéndolo ver del mismo color.
sachsen en su asiento sintió un chicotazo que lo hizo adherirse mas, entonces un tipo de metamorfosis lo permeo haciéndolo adquirir una personalidad distinta por eso al concluir con lujo de fuerza viéndose poderoso dijo.
-¡ja,ja,ja,ja,ja,ja,ja!...el escorpion ha vuelto...


















CAPITULO VEINTIDOS


EL TEMPLO DE LA ESTRELLA DEL SUR


La nano nave en la que se encontraba sachsen se llamaba “flamingo dorado”, era una de las que tenían mas potencia y alcance de ruta, estaba predestinada a realizar viajes intergalácticos, pero eso a ko sachsen no lo tenia del todo convencido, así que se decidió a realizar una prueba.
Los droides de última generación se estaban encargando del control de navegación, las consolas estaban siendo activadas para el viaje, en el control de vuelo estaba Jasón el droides.
-cuenta regresiva para despegue de flamingo…-dijo Jasón.
El flamingo fue colocado mediante un carro robot sobre la plataforma, que se encontraba en el centro de la base subterránea, los cables que lo sujetaban eran invisibles, tan solo vistos por sistema de calor mediante termo grafía.
A un costado de la nave se encontraba la cabina de trajes espaciales, donde le estaba ajustando el suyo a sachsen, ahí estaba patricia wouk, diestra en nano tecnología que revisaba el casco de fusión corpórea de sachasen.
El casco era aerodinámico, de color rojo, se ajustaba ergonómicamente al contorno de la cabeza humana mediante el tablero interno del flamingo o del reloj que tenía sachsen, desde ahí controlaba todo, temperatura corporal, nivel de oxigenación, capacidad de gravitaciones extra terrenas y control dimencional.
El casco se fusionaba con la cabeza una vez el movimiento del flamingo estuviera en marcha, tenia una caratula hibrida de nano cristales de plasma blindados, en donde se difuminaban los distintos escenarios en imágenes virtuales de los alrededores en donde se encontrara la nave.
El casco también se ajustaba con el traje espacial de sachsen, al estar unidos servían como una armadura espacial que le brindaba la protección total a él dentro y fuera del flamingo.
El traje también se fusionaba con el cuerpo humano, estaba controlado desde el reloj que sachsen tenia en su muñeca izquierda, una vez puesto era hermético.
Los zapatos eran de color negro, muy suaves y ligeros, de tal manera que todo lo que componía la protección del cuerpo humano no rebasaba mas allá de los once gramos de peso.
Otro de los droides comenzó a vestir a sacase dentro de la cabina que estaba aun costado de la plataforma circular, dentro no habían bacterias, todo estaba debidamente saneado, el oxigeno era puro.
Elizabeth mul, era la encargada de revisar las adecuaciones generales del flamingo, ella contaba con un sequito de droides que revisaban todo de manera minuciosa no dejando ningún detalle al azar.
El flamingo era de color dorado, tenía un recubrimiento a los laos de color naranja y el frente era tal y como las facciones del pájaro en cuestión, sus alas eran muy ligeras y resistentes a la fricción solar, no se abrían completamente sino que se guardaban dentro de su cuerpo para hacer el vuelo más veloz y eficiente.
Mientras eso sucedía, en el palco principal de lanzamientos, botie se encontraba monitoreando los trabajos de preparación, a su lado estaba Boris.
-parece que todo marcha a la perfección…-dijo Boris.
-así parece… ¿Nicole?-menciono botie a la subalterna que se encontraba revisando la estructura molecular del cuerpo de sachsen y buscando que todo estuviera en orden.
-diga señora…
-¿encontraste algo?
-nada señora, sachsen esta bien…
El rumbo estaba fijado, iría a la constelación de acuario, el mapa cartesiano del universo, indicaba ahí un sistema solar el cual tenia quince planetas que nunca se habian explorado.
El mapa virtual del universo se encontraba dando vueltas, lucio lo estaba revisando, pretendiendo encontrar el punto exacto en donde enviarían a sachasen.
Lucio vio al palco y con un movimiento de cabeza les indico que todo estaba bien, entonces era uno mas de los pasos aquí estaban acercando a sachasen a su promisoria aventura por el espacio.
El domo subterráneo de la base oso negro que se ubicaba dentro de océano pacifico a una profundidad de unos dos kilómetros, tenia plasmado el logotipo de la base, era un oso negro levantando en sus manos el universo que se erguía de color rojo. la instalación estaba situada dentro de la micro ciudad mejor conocida como la estrella del sur y su base oso negro era considerado como su templo de la ciencia, dados sus dimensionas arquitectónicas, compuesta por paredes verticales y ovales, semicirculares conectada entre si mediante caminos transparentes tubulares. Con enormes rascacielos de metal de vidrio, era u tipo hibrido de material no conocido en la superficie terrena. Con andenes de naves que llegaban de todas zonas del orbe, donde llegaban las naves nodrizas que se instalaban conectándose mediante caminos tubulares translucidos, en donde circulaban pequeñas nano naves de dos pasajeros quienes viajaban a una velocidad superior a la de la luz.
Nicole se acerco a la plataforma de despegue, tomando nota de los sucesos, sachsen estaba en camino de abordar, al verla se le acerco.
-no hay nada de que preocuparse, estas funcionando bien, al ciento por ciento…-dijo Nicole.
-¿preocuparse?, en lo absoluto, ¿tu lo estas?
-si, porque quiero que vuelvas conmigo tal y como te estas llendo…
Sachsen llevaba el casco de pequeñas dimensiones bajo su brazo, lo coloco sobre la escalera que estaba a un costado, entonces miro a Nicole con firmeza y le dijo.
-…somos amigos ¿no?
-si…
-bien, pero tu preocupación no es solo de amigos…
-soy profesional…
-en ese caso salúdame a tu novio y cuídate, de ahora en adelante las cosas no serán como ahora…
-de todas maneras espero que regreses…
-ten cuidado Nicole, no siempre estaré cerca de ti para ayudarte o salvarte de algo…toma la responsabilidad de tu vida cuanto antes…
Nicole entonces se acerco a sachsen y le dio un beso en la mejilla y le dijo.
-esto es por nuestra amistad que espero nunca termine…
-…bueno…
Entonces sachsen tomo su casco y se dejo guiar por thoshiro, se coloco sobre la rampa automatizada y comenzaron a subir al flamingo que tenia una altura de unos cinco metros de altura y unos veinte metros de longitud; al quedar frente a la entrada, sachasen siguió a thoshiro quien entro al flamingo y de inmediato se dispuso a revisarlo, sachsen entonces se dio a la tarea de revisar el interior de la nave de forma oval y con alas de tracción aerodinámica.
Los compañeros que sachasen llevaría consigo era tres droides, creado con lo ultimo de la inteligencia artificial y que eran de salidos de las fabricas de las industrias mexicanas de ultra tecnología llamadas “mextronic”.
Uno de los droides se llamaba Jasón, otro era Sandro que tenia funciones medicas y lee, quien fungía como segundo oficial de a bordo.
Los droides estaba hechos de titanio y tenía una durabilidad de cinco mil años, eran de color rojo, tenían cuatro dedos y sus facciones eran refinadas, no tenían orejas tan solo tres orificios de cada lado y su boca era regular, de ojos amarillos y violetas.
Lee se coloco en su lugar, cuando thoshiro ya había terminado de revisar los controladores remotos y manuales de la nave, vio a sachsen que estaba reclinado en el sillón intermedio del flamingo aguardando el tiempo para entonces comenzar el viaje.
-¿sachasen?-dijo thoshiro.
-dime-dijo sachsen sin levantar la vista y aun sin abrir los ojos.
-todo esta listo, puedes tomar tu lugar al frente del flamingo…
-bueno…
Sachsen entonces se levanto y fue a la cabina de control, thoshiro lo siguió, acomodo su asiento y se ubicó en él, thoshiro entonces le acomodo los cinturones de seguridad magnéticos y pulso el botón del sistema de navegación virtual.
-¿como vas lee?-dijo sachsen.
-bien señor, navegaremos con un ligero movimiento hacia el sur, usaremos el sistema hibrido de despegue…
El sistema hibrido de despegue consistía en tornar la nave como una bola de fuego, para liberar la tracción por efecto de la gravedad y la atracción del centro de la tierra, de esa manera consumiría menos combustible que lo acostumbrado.
El efecto seria mediante un vaciado de nitrógeno líquido extrapolado negativamente para no condensarse ni fusionarse con el agua. Lo que mojaría las paredes extensa de la nave sin tocarlas por efecto de compresión del aire que irrigaría el sistema de navegación ultrasensible y oxidando el gas con el oxigeno del mar una vez activado.
Entonces thoshiro hizo el último apunte y dijo.
-bueno, me parece que es todo, nos vemos sachasen…que el espirito del samurái vaya contigo…
-gracias thoshiro…
Thoshiro entonces salió del flamingo seguido por los demás que hicieron los últimos ajustes para el vuelo; una vez afuera, cerraron la puerta en automático quedando la nave flamingo dorado cerrada herméticamente.
-sistema hibrido activado-dijo lee
-secuencia de despegue iniciada-dijo Jasón.
Entonces el flamingo se ubicó en referencia a su Angulo de despegue, en automático la plataforma se fue moviendo según se le necesitara a modo de que estuviera debidamente acomodada.
-secuencia en nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres…-dijo joe Salvatore desde la torre de control de lanzamientos.
-dos, uno, despegando…dijo sachsen cuando el flamingo inicio el camino, se sintieron cómodos ya que se movía ligeramente con un nano motor de nano partículas.
El domo de la base oso negro se abrió y la nave flamingo fue tomando altitud acuática desde la plataforma movible en sentido vertical mediante los propulsores.
Luego ya fuera del mar, se proyecto hacia el perímetro de la ciudad; Acapulco era una ciudad inmensa, la manzana principal tenía en su haber un conjunto de rascacielos que tenían la forma de un octágono, eran ocho torres de unos cien pisos, cada edificio era de color distinto, pero había uno más alto que los demás y tenia unos ciento cincuenta pisos.
El flamingo pasó por el centro de la ciudad a una altura baja, por eso cuando se dio cuenta de que habían ciertos transportes de navegación rondando la zona ya era demasiado tarde.
La navegación civil usaba transportes de dos pasajeros que circulaban a una altura razonablemente baja por eso el flamingo tuvo que virar cuando casi se toca con un transporte.
-¡ah!, ¿Qué esto?
Ko sachsen no tenia la certeza del tiempo actual, tuvo que ver el marcador de tiempo que estaba en el tablero de la consola de navegación cuando nunca había dado importancia a eso.
Año 2040…
-¡2040!, vaya, ¿Dónde he estado tanto tiempo?
Pero ese no era el año, algo había brincoteado en el tablero y la fecha se estaba ajustando.
-¡2140!
Sachasen dirigió la nave cerca de las playa, ahí se encontraba cientos de bañistas asoleándose y bronceándose, parecían hormiguitas desde lo alto que se movían al ritmo del agua, que era azul y como nunca antes se veían las playas limpias, sin macula.
En uno de los muelles se encontraban cientos de pequeñas naves que flotaban al ritmo del mar, ya no eran las embarcaciones de antaño que desafiaban las aguas flotando, no, estas ya eran tan distintas que a sachasen le pareció estar en otro mundo.
Los yates que él se conocía ya no eran de tal forma, sino que en su lugar se encontraban algunas naves nodriza que después sabría de ellas, las habían de diversos colores y tamaños en las que habían diversas actividades además de las acuáticas que se tenían previstas para esos días.
Los hoteles que se notaban eran enormes torres de doscientos pisos, enclavados sobre plataformas hidráulicas, estaban a lo largo de las distintas playas pero también dentro del mar.
Entonces tuvo que subir el flamingo de manera pronta, para no verse envuelto en una colisión de último momento y por un instante quedar varado tan solo para ajustarse a las circunstancias.
Estuvo flotando detrás de las nubes con el sistema furtivo que lo hizo desaparecer de todo sonar o radar del área.
Tomo el espejo y se contemplo por un instante, con sus dedos recorría la piel que era muy joven, pero esa cara no le era conocida.
El reloj de 64 nano teclas que usaban la fusión del alfabeto griego y el maya, y que tenia alrededor de su muñeca, comenzó a parpadear, apretó uno de los botones y se inicio el sistema virtual holográfico de búsqueda de identidad en pantalla de plasma que se torno en color azul, ello se conecto con la consola de comunicaciones del flamingo para entonces hacerse visible una serie de eventos de lo que parecían ser sus vidas pasadas.
En un instante vio pasar todo acontecimiento de los últimos doscientos años, dándose cuenta de todo lo que había conseguido y la manera en que lo volvería a recuperar.
-¡maldita sea!, ¡esto es otra de mis reencarnaciones!, ¡no puedo creerlo!
Era evidente lo que le estaba sucediendo, por eso se acomodo contra el respaldo y como el flamingo podía controlarse mediante ondas neuronales, dio la orden para asumir las coordenadas prefijadas.
El flamingo entonces se elevo en vertical rompiendo la barrera del sonido unas cien veces saliendo de la atmósfera terrestre en un instante.
Desde donde todo se veía en perspectiva, el mundo había avanzado demasiado bruscamente que ya ni siquiera se veían orbitando los cientos de aparatos de satélites de todo tipo, en su lugar cuatro ciudades artificiales que flotaban en torno a la tierra, y lo sorprendente era ver que todas ellas tenían una bandera hasta el momento desconocidas para Ko sachsen.
Cientos de vehículos entraban y salían de la tierra, los había de todo tipo, desde naves nodriza con bandera roja, hasta vehículos de transporte particular que iban y venían a su antojo.
Había un control de acceso de la tierra, se trataba de una docena de torres que se enclavaban sobre plataformas espaciales desde las cuales se monitoreaba a las naves de entrada y la salida. Pero no vieron a el flamingo, porque el se dio cuenta de que una patrulla espacial se le había acercado y ni siquiera lo importunaron.
-¡no me vieron!-se dijo para si.
Cuando el flamingo comenzó por avanzar entre el transito espacial se acerco a las diversas naves de gran envergadura, había una de ellas que le llamo fuertemente la atención, era enorme de las que se denominaban como macro nodrizas, de color dorado, que al pasar por debajo de ella, vio de cuanto estaba constituida.
























CAPITULO VEINTITRÉS


LA ALIANZA INTER ESTELAR


Aun no digería bien a bien su pasado, por eso el flamingo salio en un instante con rumbo conocido, usando el ultra hiper impulso, la nave fue colocada en el ángulo incidente tal dimensional.
Mientras viajaba coloco de nuevo el retro historial y fue reconociendo una cosa a la vez cada uno de los acontecimientos de sus vidas pasadas.
El semblante lo tenia inexpresivo, solo veía a la distancia el mundo que ya se acercaba y volviéndose a todos lados se vio completamente solo y un ralo escalofrío en su piel.
Veía todo en la perspectiva de lo que veía en su entorno, fue en el sistema solar rux, era todo muy luminoso, siete soles rondaban el firmamento, la consola de navegación hizo un rápido reconocimiento y ayo el lugar adecuado en el cual podría guarecerse alómenos un tiempo.
En aquel planeta en el que estaba intentando entrar, todo parecía estar en calma, la nave misma el acercase a la atmósfera fue por un efecto de atracción del que no quiso safarse, el flamingo fue guiado hasta el centro del planeta QUX, en donde se encontraba un densa cordillera con cientos de picos montañosos, que se notaban nevados, pero la nieve no era de color blanco, sino azul.
El flamingo se acerco a el pico mas alto que media unos quince kilómetros de altura, ahí se encontraba una hondonada que tenia bosques amarillos a su alrededor y un gran lago de agua de amarilla en donde no había peces ni nada parecido.
A la orilla de ese lago se encontraba un templo de estilo bizantino de enormes cúpulas y un gran pozo donde resaltaban tres fuentes a su costado en forma rectangular.
El flamingo descendió sobre el frente del templo pero se quedo varado a unos cincuenta metros, de la zona lateral se abrió una compuerta y de ella salio un transporte de menos envergadura que se aproximo a la entrada del templo.
Esa nave era el colibrí que abrió su cubierta y bajo sachsen Ko, una vez toco tierra, avanzo hacia la entrada a donde un hombre vestido de blanco le aguardaba.
-¡hola sachsen, sabia que tenias que venir a conocerte mas!
-¿Quién eres tu?
-soy tu memoria…
El hombre le indico que entrase, sacase de inmediato entro, poco a poco se vio con la atmosfera interna donde abundaban los sonidos tenues.
Sachsen contemplo su entorno por un instante, luego su anfitrión le dijo.
-mi predecesor me dio ciertas indicaciones, soy AL AISHEM, este palacio es tuyo…
AISHEM lo guio hasta el centro del palacio, ahí se encontraba un gran salón, con finos y candiles de piedras preciosas que reflejaban la luz como prismas; un contingente de guerreros estaba haciendo fila en torno a èl.
-ellos son los representantes de tus diez legiones de guerreros coyote, cada una tiene en su haber a un millón de hombres, están aquí para darte la bienvenida.
Sachsen levanto el brazo en manifestación de saludo y desde donde estaban, todos le saludaron diciendo.
-¡los que están contigo ahora lo estarán por siempre!
Sachsen estaba en superior, donde había un palco para desde ahí disfrutar del evento de bienvenida que consistía en un deleite de danzas, bebidas y aromas; las muchas bailarinas se dieron cita, iniciando con un saludo a el recién llegado y luego se dirigieron a realizar su primer baile.
AISHEM hizo venir a una mujer de entre las que estaban por bailar, tenia un velo en el rostro, pero era tan graciosa al caminar que sachsen la vio y enseguida se intereso en ella, AISHEM de inmediato lo noto y cuando ella estuvo a un paso le dijo.
-natasha, acompañaras a sachsen desde hoy en adelante.
-como ordene…
Pero entonces sachsen le allanó la frase.
-no, yo te lo pido si es tu gusto…
-siendo así, serás mi señor de hoy adelante, por mi propio gusto y parecer…
Entonces la tomo de la mano y ella lo guio; fueron a travez de los pasillos hacia el ala norte del palacio que reunía otros palacetes de menor tamaño pero mucho mas lujosos.
Eran cuatro palacetes mas, uno de ellos se encontraba diseñado sobre una pequeña lomita, desde la cual se veían los demás lugares.
Una gran fuente de intensas aguas que subían al tener el sol rojo en el cenit, dibujándose en ellas las siluetas del sol que pasaban por ahí.
Natasha se acerco y tomo agua con su mano derecha, el mostro a èl y dijo.
-esta es la fuente de los sueños, quien meta su mano y saque agua, tendrá felicidad eterna…
El entonces quiso meter la mano, pero ella le impidió diciéndole.
-no, solo la de la mujer debe meterse…de otra manera el destino se tornara en contra de ambos.
El ya no metió la mano, en su lugar, acaricio el mentón de natasha.
-eres hermosa…
Ella se levanto del quicio de la fuente y guio a sachsen al interior, en su camino se mostraban jardines verdes y azules, ella lo jalo con firmeza porque él se quería detener a contemplar la naturaleza que lo embriagaba.
El lugar era intenso y extenso, la salita tenia mullidos cojines sobre el suelo, telones que se abrían y mujeres que soplaban con sus plumas de aves gigantes y hombres que les llevaban viandas para su contentamiento.
-¡salgan todos! Sachsen y yo queremos intimidad…-dijo natasha a todos.
Al oírla salieron haciendo caravanas a diestra y siniestra y cuando el último de ellos iba a la salida de la misma manera, èl se le acerco y le dijo.
-esta será la última vez que te inclines a algún hombre, de hoy en adelante me harás el saludo de frente y de pie…
-como diga…
Ella entonces salió, cerrando la puerta, luego natasha se dirigió a donde se encontraba una enorme charola con comida.
Sachsen fue a conocer los alrededores del palacio, se acerco a una ventana cubierta de cortinas de seda o almenos eso parecía, la abrió y vio como entraba la luz del sol de un azul turquesa.
Se volvió a ella y la vio comenzar a comer, sonriéndole apenas discretamente tal y como a èl le gustaban las mujeres hermosas, natasha le invito a comer mostrándole algo de comida.
El se acerco y tomo lo que ella le ofrecía de su mano, se sentó a su lado y le dijo.
-este palacio es digno de una princesa…
-dirás que es digno de alguien de tu nivel…
Ella bajo la vista sencillamente como pretendiendo indicarle a èl la magnitud de su naturaleza, pero èl le levanto la cara con su mano tomándola de su mentón y viéndola a los ojos.
-entonces tú serás mi princesa…
-aunque sea de Bizancio…
-…no eres menos que otras, pero si serás como ninguna…
Entonces sachsen la beso tan inspiradoramente que una vez que se desapartaron, se levanto del suelo y la llevo de la mano hacia la alcoba imperial que ya les habían preparado.
Caminaron descalzos, el suelo estaba hecho de un fino material desconocido a los de la tierra, brillante y a la vez no se enfriaba sin embargo tampoco se calentaba y no tuvieron el riesgo de resbalarse.
La alcoba imperial estaba dispuesta, tenían viandas a los lados, no había cama, pero si estaba el suelo forrado de mullidos cojines que flotaban a unos centímetros del suelo. Sachasen se sentó al filo, y tuvo en cuenta que no se hundía.
-esto es fantástico…
-natasha tomo un cantarito que estaba a un costado, era de oro, de el sirvió vino de gran calidad que le acerco a sachsen.
-toma, es vino de la vid azul…
Él lo tomó y no lo llevo a sus labios, espero un poco y lo paso por su nariz, quería saber de su olor tal y como lo decían los doctos catadores de vinos desde la antigüedad.
-¿Qué, no te gusta?-dijo natasha al ver que sachsen no lo estaba tomando.
El entonces le tomo de la mano y la acerco a èl y le dijo.
-la buenas cosas hay que disfrutarlas aun antes de que sean nuestras…
Entonces sachsen lo llevo a sus labios y bebió apenas con un roce.
-¿Qué tal?
-es excelente…
-ya lo creo, es puro…sin alcohol…
Sachsen dejo sobre el mueble el envase y le dijo a natasha.
-sabes…no estaré mucho aquí…tengo cosas que hacer…
-lo se, pero a donde tu vayas, yo iré también…
Entonces se besaron…luego, èl le puso la mano en el lienzo que la cubría, se lo aparto dejando entrever su hombro…
A un costado se prendieron en hilera las velas de distintos colores y en distinto tamaño de manera ascendente hacia la mitad y descendente hacia la otra mitad; al unisonó, se dejo sentir el aroma de incienso que brotaba de una fuente pequeña de dentro de la alcoba, emergían colores en vapor que comenzaron a embriagar los sentidos.
Natasha lo beso con suavidad mientras èl le pasaba una mano por el hombro de manera que el abrazo hizo que se acercaran lo más posible.
Entonces, ambos se levantaron y ya de pie, él soltó la amarra de la ropa de ella dejando que el vestido cayera al suelo, luego, ella hizo lo mismo con la ropa de èl…
Natasha era una mujer hermosa, la suavidad de su piel la estaba conociendo lentamente sachsen quien tocaba ligeramente su seno con la punta de su dedo, ella comenzó a sentir una sensación eléctrica que le recorría palmo a palmo, entonces se acerco más a él y rodeándole el cuello con sus brazos dijo.
-así… siempre seré tuya…
Las puertas ahí eran de cristal, por fuera no se veía hacia el interior, el timbre sonó, natasha apenas se movió en el lecho, estaba sobre el pecho de sachasen quien se movió y alcanzo a escuchar que alguien estaba detrás de la puerta.
-¿escuchas?-dijo ella.
-sí, ¿Quién será?
Entonces el se levanto y ayándose vestido apenas por un insignificante pantaloncillo corto, se coloco sus zapatos de ligero andar y dijo al colocarse un manto blanco en su cuerpo.
-veré quien es…
El andar de sachsen era ligero pero rápido y silencioso, se allego a la puerta de inmediato, abrió y se encontró con un par de mujeres que les llevaban comida.
El les hizo lugar a modo de que pudieran entrar, al pasar, el sintió un ligero aroma que emanaba entre las dos, las siguió con la vista desde la entrada, de ahí no se movió, noto donde colocaban las charolas de oro para luego aromatizar la estancia con esencias ligeras que colocaron el entorno predilecto de natasha.
Entonces al verlo a la puerta, ambas se dispusieron a irse, no sin antes colocar la ropa nueva sobre la salita mullida, luego se acercaron a la puerta y dedicándole un saludo con la vista al salir, se despidieron.
Natasha ya se había levantado para cuando sachasen se volvió, ella estaba abriendo las cortinas de la estancia, eran grandes pero impedían que la luz solar entrase completamente, ya que tenían un filtro que impedía entrar los rayos ultravioleta.
-quiero bañarme…-dijo ella al tomar la ropa y encaminarse al jardín en donde se situaba un baño al aire libre donde una pequeña bajada de agua llegaba hasta la orilla.
Natasha salio del palacio y se encontró tonel jardín por el que avanzo llevando un par de esclavas detrás, las cuales le servirían ya que cargaban lo necesario para su recurrente baño.
Sachsen la vio desde el cuadro de la puerta, se detuvo ahí desde donde contemplo todo en su derredor, entonces noto que natasha le hizo la seña para que fuera a tomar el baño con ella. El se movió in prisa, avanzo viendo a natasha ser desvestida por sus dos esclavas dentro de la piscina, al unisonó le estaban iniciando a untar una sustancia viscosa de color amarillo por todo el cuerpo.
Natasha esta provista de un traje de baño de color azul, el agua de la piscina le llegaba al cuello en su parte más profunda, se veía como el agua llegaba nueva a cada instante, se sentía un ralo acaloramiento producto del vaivén.
Otras dos esclavas llegaron de detrás de sachsen llevando consigo lo necesario para lo que seria el baño, colocaron todo a un costado de la piscina y tomaron a sachasen llevándolo de la mano hacia el interior del agua; ambas estaban desnudas, tenían hermosos cuerpos bronceados y sin macula en la piel.
Hicieron que sachasen se recostara sobre el agua, al hacerlo quedo flotando, lo que a él le pareció extraordinario; él estaba provisto de un pantaloncillo corto en color blanco que se tiño de color azul al situarse en cenit el sol azul.
-señor, tu cuerpo esta muy tenso, debemos curarlo…-dijo kova una de las esclavas.
-¿Qué tengo?-dijo sachsen cuando el agua le llegaba hasta la barbilla.
-fatiga crepuscular de la mente, tu cuerpo no se ha sublimado en su capacidad total, debemos de activar tu sexto sentido…estas ocupando solamente el diez por ciento de tu capacidad neuronal…
-es lo acostumbrado en los humanos…con esa capacidad me considera un genio.
-allá tal vez, pero entre los nuestros, deberás tener el cien por ciento de capacidad neuronal, de otra manera no funcionaran los planes que se tienen para ti…
Del agua se formo una pantalla liquida situada a un costado de èl en su parte superior, entonces el cuerpo de sachasen se puso rígido cuando kova toco su frente con los dedos de la mano derecha, su vista quedo inerte viendo siempre el cielo, sus ojos entonces tomaron un impaz sin parpadeos.
La otra esclava se llamaba wola, tomo con la palma de su mano un poco de agua, la cerro y esta se torno roja, ubicándola en las plantas de los pies de sachsen que de inmediato fue teñido con el agua que recorrió su cuerpo por encima y debajo.
Extrañamente su pelo se había tornado de color dorado y su cuerpo rojizo, pero entonces kova tomo otro tanto de agua en su mano y al cerrarla esta se torno de color azul, al colocarla sobre la cara de sachsen sus ojos se tornaron del mismo color, ósea, azules de un tono turquesa.
Wola dejo caer en la parte superior de la cabeza de sachsen un chorrito de agua que al penetrar en el interior formo un tubito liquido que lo conecto con la pantalla que estaba funcionando.
Los pensamientos de sachasen se convertían en ondas neuronales que al pasar por el tubito liquido se tornaban de distintos colores y llegando a la pantalla se formaban imágenes de sus ideas interiores a las que èl estaba accediendo ya que sus ojos estaban fijos sobre ello
El tubito liquido era de múltiples tonalidades, ahí lo llamaban KALEDIOSCOPIO CERO, ya que por fuera era de color del hielo. Sus paredes eran firmes y pulidas tanto que los pensamientos se reflejaban en ellas…
Wola y kova se vieron a la cara y no parecían conformes, ya que los pensamientos de sachsen estaban entrecortados, al llegar a la pantalla no se distinguían, así que tuvieron que comenzar a reajustar su mente.
-su transmisor neuro celular no esta al nivel requerido... -dijo kova.
El agua de la piscina era del color del hielo, su temperatura ascendía a los cien grados bajo cero-temperatura terrestre- al roer el aire se enfriaba mas, pero permanecía liquida y atenuante al cuerpo humano que se movía ajeno de bacterias del ambiente.
















































CAPITULO VEINTICUATRO

LA LUNA DE SEVILLA


El lugar estaba atestado de lugareños, en el frente había un escenario en el cual se encontraban diversas mujeres quienes entretenían a los hombres haciendo bailes diversos, pero la plenitud de la noche estaba por venir, cuando carmen hizo acto de presencia todos se silenciaron, era una diva conocida, de ojos azules, cuerpo atlético como de un metro setenta y pelo corto.
Tomo el micrófono y se dispuso a entonar una de sus mejores canciones, la melodía seria:” ave ligera”, compuesta por Albert von graz, quien se encontraba ahí, justo en el lugar de predilección y a quien le enviaron el reflector para saludar a su interprete.
Albert von graz se levanto y saludo levantando la mano derecha, la multitud lo reconoció con un sonoro aplauso de bienvenida, entonces el reflector se dirigió al frente del escenario en donde se encontraba carmen ya lista, provista de un vestido de noche en color negro, con los labios sedosos y brillantes, su talle era genuino.
Carmen tenia un anillo de diamantes en su dedo índice de la mano derecha, en la izquierda, el argolla matrimonial que refulgía con los destellos, sus oídos lucían sus aretes de oro de veinticuatro quilates con incrustaciones de diamantes en color agua marina, rarezas de todos conocidas, que tenían un valor incalculablemente alto.
El lugar era exquisitamente lujoso, con decorados magistrales, los candelabros incrustados en los techos fueron apagados, en su lugar, velas artificiales estaban sobre las mesas de dos personas, la mesa de Albert von graz estaba con un lugar vacio, como aguardando el cenit del evento, él vestía de etiqueta, de corbata de moño y una argolla matrimonial, siempre sobrio, nada llamativo tenia un reloj de oro en su mano izquierda acompañado de un anillo con incrustaciones de ópalo azul, otra rareza…
Carmen se dispuso a aguardar el compas musical de manera que iniciara la entonación de la canción sin embargo no le fue posible, ya que en ese instante, alguien salto al escenario y se apodero de ella sujetándole fuertemente y amagándola con una pistola sobre su pecho.
Las luces entonces se prendieron y se pudo ver al tipo que estaba con las facciones distorsionadas de furia.
-¡alto!, ¡no se me acerquen o la mato!
Entonces una guardia de la seguridad se hizo sentir al entrar al lugar y apuntarle a la cabeza al tipo que para entonces no se sabía quien era, los asistentes no se movieron de sus lugares ya que si lo hacían tal vez resultarían heridos.
Los laser de los rifles de los francotiradores ya estaban sobre el tipo, el jefe de la policía civil de la localidad llego y entro apuntándole al tipo que vestía de e smoking y tenía un acendrado acento ingles.
-¡Gerardo clemente!, tira el arma, no tienes escapatoria, estas rodeado.
Gerardo clemente se volvió en su entorno y noto que efectivamente no tenia salida, por eso metió su mano a su bolsillo y saco una granada y la levanto diciendo.
-¡ábranme paso o hare estallar la granada…!
-no Gerardo, tira tu arma y deja la granada sobre el suelo, no escaparas, eres un espía ingles…
Al oír eso, Gerardo clemente sintió que estaba acabado, ya que ahí la mayoría de los asistentes eran del orden nazi e incluso todos llevaban una cinta en su brazo que los identificaba.
Gerardo veía hacia todos lados con desesperación buscando la manera en que escaparía pero otra vez el jefe de la policía volvió a decir pero esta vez con más ahincó.
-¿entonces que Gerardo?, ¿te entregaras?...no puedes salir de aquí, se te busca por terrorismo, genocidio y prácticas satánicas…
Gerardo clemente tenía un anillo en su mano izquierda, era con una piedra de color negro que refulgía con la luz que parecía tener vida.
-ese anillo es la prueba que tenemos de tu pacto con el mal, entrégate Gerardo, ya no podrás engañarnos…
Era el año de 1939, once de la noche en punto según el reloj mas cercano de la localidad que en ese instante hacia sonar sus timbales y que llegaron a donde el cabaret de lujo.
Entonces Gerardo clemente se puso frio levanto su pistola y apunto al jefe de la policía, en ese momento carmen aprovecho para deshacerse de Gerardo asestándole un punta pie en la espinilla, el al sentir el golpe la soltó pero se volvió rápidamente y cuando Carmen ya se veía a salvo, se oyó un disparo.
El vestido de carmen estaba roto a la altura de su pecho, la bala le había traspasado el corazón, al caer, se comenzó a regar la sangre que emanaba de su cuerpo, entonces Gerardo disparo una segunda vez a carmen ya en el suelo, la segunda bala le dio en el estomago, justo cuando otra bala le rompió la oreja a Gerardo proveniente de las mesas.
Albert von Graz le había disparado a Gerardo que ya sangraba, y le apuntaba a la cabeza justo cuando la granada cayó al suelo, entonces el jefe de la policía ordeno.
-¡salgan todos, va a explotar la granada!
Albert von graz le disparo a Gerardo otra vez y le acertó en el brazo derecho, èl se tambaleo pero no cayo, entonces ya la gente comenzaba a salir, entonces un vehículo entro rompiéndolo todo, destruyendo la entrada principal y abriéndole la salida a Gerardo, el tipo que conducía le dijo.
-¡vamos Gerardo, sube al auto!
El conductor era el sacristán de la iglesia de Londres que evidentemente hablaba en idioma ingles ya estaba esperando que Gerardo entrase al vehículo justo cuando Albert von Graz estaba disparándoles tratando de acabar con ambos, a Gerardo le alcanzo otra bala, esta vez le transpaso la mano con la que empuñaba la pistola, como pudo Gerardo subió al vehículo y entonces se escucho un sonido, era la granada que estaba haciendo contacto con su detonador.
Albert von graz tuvo que correr en sentido contrario buscando el cuerpo de carmen que estaba en el suelo, pero entonces la onda expansiva de la granada se dejo sentir en el interior, el techo del lugar se levanto y de las ventanas salieron sendas ráfagas de fuego colisionándolo todo.
Albert von graz estaba sobre el cuerpo de marla como cubriéndolo a él, aun no le alcanzaba el fuego pero una vez que el aire se detuvo, se regreso al interior, cuando èl se dio cuenta de que estaba apunto de ser abrazado por las llamas, miro a todos lados buscando por donde salir o almenos donde guarecerse de lo que estaba por venir, pero no hayo nada, así que apretó una de las teclas de su reloj en el modo de defensa y un alo lo cubrió haciendo que el fuego no lo dañara.
Estaba en medio del infierno mismo y pretendiendo que disminuyeran las enormes llamas, que cedieron cuando ya del lugar no quedo nada en pie, ya que lo último que tenia por reventarse, se hizo trizas.
Un instante después que el fuego se evaporo y solamente quedara el humo y hedor de la debacle, Albert von Graz así mismo, se levanto y noto que a su alrededor solo había destrucción, pero entonces Carmen alcanzo a balbucear algo que para èl resultaba vital.
-¡Albert von graz!...
Èl se agacho hasta donde ella que trabajosamente le estaba pretendiendo decir algo, se le acerco a sus labios para escucharla.
-¿porque nos pasa esto mi amor?...
-no se…-dijo Albert von Graz atrayéndola hacia él cuando ya las sirenas de ambulancias sonaban a la distancia.
-abrázame fuerte, tengo frio… ¡Albert von graz!...-dijo ella sujetándolo de las mangas de su saco con desesperación.
Albert von Graz solo la veía no podía hacer nada, la gente apenas se estaba atreviendo a acercárseles pero no obstante, el jefe de la policía atrajo hacia si a sus hombres que de inmediato se acercaron.
-¡ayúdenlos!
Entonces carmen se sujeto con mas fuerza de lo acostumbrado y le dijo a Albert von graz.
-mi amor...dime que no me olvidaras…
-no carmen, nunca te olvidare…-dijo él besándola en los labios pero en ese instante, marla murió repentinamente.
La policía comenzó por acercarse a el interior del lugar, el jefe de ellos vio que Albert von graz se levantaba aun tenia su pistola en la mano, veía a todos lados, el humo era denso pero rápidamente fue disipándose, fue por eso que el jefe de la policía le dijo a Albert von graz.
_ ¿tienes permiso para portar arma?
Entonces Albert von graz saco de su bolsillo una identificación que se la mostro al jefe de la policía diciéndole al mismo tiempo.
-contra inteligencia naval…de Dinamarca…
El jefe de la policía vio sus datos de cerca y dijo.
-¿contra almirante?
-si…
-¿conocías al que les disparo?
-antes dígame ¿porque le persiguió hasta aquí y puso en riesgo la vida de todos?
-se nos escapo, alguien le ayudo en el camino a prisión… ¿sabe quien era?
-si…Gerardo clemente era el padre de carmen…
En eso rápidamente llego una comitiva de droides con una camilla, la colocaron a un costado y subieron el cuerpo de marla con delicadeza, tapándolo con un lienzo de color amarillo hasta la cara, luego avanzaron con ella hasta la ambulancia aérea que se encontraba afuera del lugar semidestruido.
El jefe de la policía se llamaba Isabel gol, quien le regreso la identificación a Albert von Graz que tomándola la guardo en el bolsillo interior de su saco.
-¿y entonces?-dijo Albert von graz.
-nada, por ahora Gerardo escapo.-dijo Isabel.
Entonces Albert von graz se guardo su pistola entre su ropa y dijo.
-sabe Isabel…si encuentro primero a Gerardo clemente lo matare…
-y usted será juzgado según la ley inglesa…
-solo que yo no respondo a esa ley…
-pero esa ley si lo hará…
-ya veo, así que después de todo, los ingleses siguen protegiendo a la mafia…
-¡no señor Albert von graz!, usted no ha entendido bien, Inglaterra es la mafia…y por lo tanto esta detenido hasta que se aclare esta situación…
-en ese caso, tendré que detenerla a usted y los que la siguen, este ya es un asunto de seguridad nacional, tomare las riendas desde este instante…pero Inglaterra no es la mafia como usted dice, es solo una facción de la mafia.
-…pero yo soy la policía…
-y yo soy aquí el que manda…y tendré que detener entonces a toda Inglaterra.
-no podrá…
-ya lo veremos…
por eso mismo llegaron hasta ellos un grupo de seguridad de la marina que de inmediato tomaron posiciones e hicieron un par de barricadas en torno del cabaret, cercaron la entrada y salida con costales de arena bajados de un camión que se encontraba cerca, fue de prisa, tanto que Isabel se estremeció al ver tanta eficiencia.
-no puedo creer esto, no estamos en guerra…
-ahora ya es una guerra y nada ni nadie puede detenerla…-dijo Albert von graz quien ordeno que se llevaran a Isabel al cuartel general donde seria interrogada.
-coronel, lleve a Isabel como prisionera de guerra al cuartel…será interrogada…
-pero no me puede hacer esto…los míos lo sabrán y vendrán por mi…
-me parece bien, entonces que vengan…coronel, llévesela…
-esto no se quedara así, se levantaran las religiones en todo el mundo, solo a nosotros obedecen, ustedes no ganaran esta guerra…-dijo Isabel quien se negaba a ser llevada.
-veámoslo de esta manera, yo en lo personal soy NOSTICO…
-los nósticos son judíos, por lo tanto son nuestros…
-se equivoca Isabel, los nósticos tenemos un origen en los primeros días de la humanidad, venimos de la ciudad ALFA, no somos judíos y tenemos una antigüedad en la tierra de cinco millones de años, por lo tanto todo esto nos pertenece…
-para eso tendran que pelear…
-eso haremos entonces…
-aun no se como pudo sobrevivir a esta catástrofe, pero lo averiguare y entonces…
-eso me suena a amenaza, y usted no esta en condiciones de amenazar al jefe supremo de la alianza…
Entonces el coronel se llevo jalando a Isabel del brazo, aquello ya se había prolongando demasiado, cuestión que estaba resultando una falta de respeto a el rango que ostentaba Albert von graz.
-a estos ingleses hay que enseñarlos a respetar a un ser humano por lo que es y no por lo que tiene…-alcanzo a decir Albert von graz aun cuando el mayor estaba a un costado con un par de documentos.
Las naves se estaban acercando al lugar, sobre volaban a baja altura echando sus reflectores al centro del incendio que ya había sido reducido a una cortina de humo que se estaba disipando con rapidez.
Por tierra estaban llegando una doce de vehículos militares de la fracción blindada, portando cañones anti aéreos en los techos con mirillas telescópicas y de disparos láser.
Otros tenían cañones en las partes delanteras de los vehículos, que disparaban a una velocidad de metralleta, esos eran mas pequeños pero que servían de todo terreno y tan solo llevaban a dos ocupantes.
Los droides habían colocado ya las barricadas y habían ubicado la vigilancia en los alrededores, ya solo podrían pasar por ahí los que tenían autorización, de otra manera serian detenidos y llevados a prisión so pena de transgredir el orden comun.
-Inglaterra tiene ansias de fama…-dijo el mayor.
-pero yo solo tengo ansias de justicia…-dijo Albert von graz.
Los droides entonces se dieron a la tarea de renovar el interior ya que seria tomado para ser cuartel, así que la gente que estaba por ahí y que se habían salvado de la catástrofe se le estaba auxiliando cuando les servían en los primeros auxilios los paramédicos.
A otros se les estaba subiendo a las naves de transporte aéreo para llevarlos a un refugio en donde se les llevaría a sus destinos correspondientes.
Carmen aun estaba en la ambulancia en donde los droides la atendían, uno de esos droides se le acerco con cautela a Albert von graz y le dijo.
-señor, tiene que ver esto, es algo importante…
-vamos…
Albert von Graz camino a la parte de afuera del cabaret o de lo que quedaba de eso, ahí se encontraba la ambulancia, dentro con las puertas cerradas estaba carmen sobre la camilla, Albert von graz entro y vio como un par de droides se encontraban auxiliándola.
-¿Qué sucede?
Entonces unos de los droides se acerco al cuerpo de marla y tomándole de la parte de la barbilla, le jalo la piel hacia arriba quitándole así lo que parecía ser una máscara de piel.
Albert von Graz entonces reconoció a la que estaba en el lugar de lo que parecía ser otra persona, pero no era carmen.
-nadra…-dijo apenas Albert von graz al ver de cerca el cuerpo inerte de la mujer que él reconoció y que decía ser nada.
-¿sabia usted esto señor Albert von graz?-dijo el droides.
-si, yo mismo la maquille…
Por lo tanto, los aparatos de monitoreo del cuerpo de nadra dieron parte y según eso ella estaba aun viva.
-¿entonces que hacemos señor?, ella aun esta viva…
-¿Quién mas sabe de esto?
-solo nosotros señor…
-bien sandro, haremos algo por nadra nairds, cambiaremos su nombre y daremos por muerta a marla raí, ¿de acuerdo?
_si señor, lo que usted diga…






















































CAPITULO VEINTICINCO


CONTRA ANUBIS


La flota de guerra estaba encima del desierto de Arizona, había cruzado la línea limítrofe entre México y los estados unidos, la nave principal tenia la bandera plasmada en su frente-verde, blanco y rojo.-, encima estaba el control principal en donde estaba el contra almirante.
-¿señor?
-diga general
-esta todo listo, usted dirá cuando atacamos…
-en cuanto ellos inicien
-eso puede durar semanas...
-ellos están ansiosos por combatir…
-el contra almirante entonces vio su reloj y noto que faltaban cinco minutos para las diez de la noche.
-es casi seguro que ataquen a las diez de la noche…haga que desciendan los vehículos terrestres…
La flota estaba copando los costados de las fronteras, al oeste, se encontraba un cumulo de naves que esperaban la orden de atacar, al este otras tantas se habían ubicado como un abanico y al norte por la frontera de cañada también habían otras tantas.
Se decía que la flota TOLTECA acabaría la guerra en cinco minutos ganándola, con ello obtendrían la rendición de Inglaterra y sus colonias pasarían al poder de la republica imperial.
Encima de esas naves, se encontraba la nave imperial en donde el emperador trazaba los planes de guerra con los que ganaría totalmente.
-¿ya recibimos mensajes?-dijo el emperador.
-no señor, pero captamos que las naves barbarás se están reuniendo detrás de las líneas de los estados, al borde del Misisipi…
-entonces no les queda mucho terreno por cubrir…que se de la orden de que una nave nodriza baje para cubrir el Misisipi…
-si señor…
En la pantalla virtual se estaban anteponiendo las imágenes provenientes de la ciudad de Washington, en donde el presidente de los estados unidos de norte americe-estados anglo sajones- estaba retirando la bandera de las barras y las estrellas y estaban disponiéndose a guardarla en una cajita de madera que parecía como una urna donde se guardaban los restos moratorios de alguna persona.
Luego de eso, fueron al cementerio de la casa blanca con una escolta de la guardia anglo que marchaba a paso redoblado guardando la compostura pertinente.
Los asistentes que se habían dado cita, eran el conglomerado de el congreso y senado, así como los representantes de el ejercito, armada de los estados anglosajones americanos y fuerza aérea, que para ese entonces habían dejado de volar sus naves en el espacio aéreo de la zona.
Las trompetas sonaban en tono de luto, avanzaban lentamente, las mujeres cubrían sus rostros con velos negros y secaban sus lágrimas con pañuelos blancos que agolpaban en su pecho, las nubes sostenían su inmensidad movidas por los vientos que avizoraban tormentas eléctricas.
Comenzó a caer una ligera llovizna, que hizo surgir a los paraguas de entre la gente, al entrar al cementerio acondicionado para la tarea en cuestión, se hicieron sentir doce cañonazos de salvas que la guardia hizo sonar como rubrica.
Entonces llegaron a la cripta que sostenía un monumento que encima tenia la efigie de la estatua de la libertad sosteniendo un libro en su mano derecha de la ley y en su mano izquierda, un báculo de hierro, en su cabeza estaba una corona de laureles con la leyenda “democracia”.
Se abrió la cripta con las puertas automatizadas, y el presidente comenzó a bajar las escaleras rumbo del sótano en donde se encontraba el nicho en que seria guardada la bandera, detrás de él, iban los doce miembros del senado y mas atrás, los otros doce miembros del congreso, al ritmo de los tambores el presidente bajo, a su lado iban los guardias del imperio anglo-sajón que en ese instante estaba cayendo.
El presidente se veía alterado, con la cabeza gacha y el semblante frio, tanto como un tempano; al situarse frente al nicho donde estaba una placa de oro de veinticuatro quilates, uno de los guardias abrió el lugar con la combinación de una caja fuerte.
El presidente espero a que sus sub alternos estuvieran en torno del nicho, entonces se acerco y deposito la bandera dentro, luego se hizo para atrás y un guardia cerro de la misma forma que la abrió.
Entonces Gerardo clemente hizo los honores sacerdotales a la bandera, entonando una oración al cielo seguido de un acompañamiento de un coro de negros y una orquesta de Sajonia.
Entonces el sacerdote hizo bendecir el lugar con agua bendita para luego hacer que el señor presidente se quitara la banda pectoral que tenia de los colores de la bandera y la colocara encima del nicho. Con ello se hizo cumplir la reglamentación concerniente a la abdicación de los estados anglos ante el representante de la republica imperial que ya estaba afuera de la cripta y que los esperaría para apresar al señor presidente y su sequito de servidores.
El señor presidente a sabiendas de eso, tomo aire y vio la salida de la cripta, entonces sin voltear comenzó por avanzar, los demás lo siguieron detrás, cuando llego al primer escalón, comenzó a subir y lentamente ya vislumbraba a ciertas facciones de los rostros enemigos que estaban ahí.
En primer lugar se trataba del almirante de la intifada de la zona norte para asuntos del orden común, Néstor midi, que al notar al presidente hizo la indicación a una guardia imperial que lo detuviera.
-esta bien, no me resistiré, ¿dónde van a matarme?
Sin responder, los guardias lo sujetaron y esposaron, entonces lo escoltaron al interior de la casa blanca, los demás al salir ya habían sido detenidos, seguían la misma suerte del señor presidente, era como una procesión de desarraigados de entes que no merecían más que la peor de las condenas y eso parecía que obtendrían. Su orden había caducado, en su lugar estaría lo nuevo que las mayorías seguían desde hacia tiempo y que parecía a todos convencer sin presión ni hostigamientos.
Ahora se situaba encima del capitolio una nave nodriza de la republica imperial dejando salir de ella a cientos de naves de guerra, para controlar los cielos de posibles intromisiones de los estados anglos sajones que aun no entregaban el poder.
Una de esas naves era de los controles terrestres que ubicó un puesto a la entrada justamente del capitolio, cercando la instalación de manera que nadie entrase, ahí se ubicaban los droides, que vigilaban, pero dentro del capitolio ya se encontraban muy nerviosos, todos y cada uno de los senadores y diputados que se habían reunido luego de la debacle del imperio anglo-sajón-americano.
Decenas de naves caza se apoderaron de los cielos de Washington, volaban cerca del capitolio como calibrando las fuerzas que se podrían aun encontrar encubiertas, pero para eso, dejaron sentir su metralla y poderío de ataque, cuando hicieron fuego contra el capitolio desde todos los frentes.
Del capitolio comenzaron a salir las guardias de los senadores que se resistían a una intromisión de los droides de la republica imperial, aquellos guardias eran altos y musculosos, llevaban armaduras de color bronce y con el sol reflejaban la luz, pero los droides se esperaban eso, e hicieron funcionar su status de visión óptica avanzada, disipando con ello los efectos de los reflejos para entonces atacar masivamente por tierra el capitolio.
Comenzó la verdadera batalla que se habían negado a sostener los estados anglo sajones, los droides llevaban en sus manos espadas láser con las que estaban haciendo pedazos a las guardias sajonas, los droides llevaban en su otra mano un escudo de plata que también reflejaba la luz y que al darle en los ojos a los guardias sajones les cegaban temporalmente pero que servia para derrotarlos progresivamente.
Las afueras del capitolio se estaban inundando de sangre, con cuerpos sin cabeza o cortados por la cintura y con espadas introducidas en pleno pecho o las manos cercenadas y sangrándoles.
Aquella andanada era dirigida por el comandante Ernesto Corinto, quien bajó de su nave fantasma mediante un vehículo de reconocimiento blindado y se situó al borde de la entrada del capitolio, al notar que de la guardia de los senadores ya no quedaba nada menciono.
-¡ataquen el capitolio, quiero que los que están dentro salgan o mueran ahí!
-a la orden comandante-respondió el capitán de misión Ramiro peli ni.
Por eso, la nave de Ernesto subió a encontrarse con la nave fantasma que se situaba encima del jardín del capitolio y de la que salieron cientos de naves caza.
Pero entonces los senadores aun tenían otro as bajo la manga e hicieron salir de la zona cercana a un escuadrón mortal aéreo para defender la instalación, era cazas diablo de muy rudimentaria fabricación que se disponían a combatir a los cazas de la republica imperial pero que al sucederse la batalla fueron cayendo vertiginosamente e incluso unos se estrellaron encima del edificio del capitolio, al colisionarse, abrieron un boquete en el techo por donde los cazas apache entraron y se dieron a la tarea de triturar todo lo que se ponía ante sus ojos.
Al ver eso, los que se encontraban por ahí iniciaron a tratar de defenderse como podían, utilizando incluso rifles de alto poder pero de nada sirvió, los cazas apache dieron en los blancos precisos, entraban y salían del lugar tan rápido que ni siquiera pudieron alcanzarles una sola bala.
Los senadores que estaban por ahí comenzaron a salir por la puerta principal encontrándose con los droides de la republica imperial, quien al verlos, comenzó a dispararles a quema ropa a los senadores.
Los que estaban aun dentro no se animaron a salir de la instalación ya que de todas maneras morirían, querían hacerlo a su modo y para eso tomaron una pistola y se dispararon en la cabeza terminando así con su vida; pero los demás que aun querían vivir estaban sacando pequeñas banderitas blancas buscando con eso que los droides se apiadaran de su vida.
Pero los droides no sabían nada de eso y al verlos levantarse, dispararon contra los senadores que tenían una gorra de color azul y tenían un escudo que era descifrado como maligno.
Algunos de los que eran diputados, se habían pertrechado dentro del capitolio, ahí disparaban con rifles, metralletas y todo lo que se les llegara a su mano, de esa manera, los droides que ya habían avanzado hacia dentro, los enfrentaron, rociando todo lo que vieron a su alcance con metralla láser.
Algunos droides cayeron pero se volvieron a levantar y arremetieron con mas crudeza contra los que quedaban, algunos de los diputados alcanzaron por arrojar algunas granadas de fuerza expansiva hacia los droides pero al explotar solo hicieron un poco de ruido pero a los droides no les significo nada ya que estaban fabricados de material blindado.
Se escuchaban los quejidos de los senadores y diputados también como se arrastraban por el suelo queriendo no ser alcanzados por la metralla de los droides, pero ya estaban copados, los droides estaban usando lanza llamas, el lugar estaba siendo quemado completamente.
-bien…-dijo desde la nave imperial el emperador de la republica luego de ver lo que había acontecido en el capitolio.
-señor, ¿que hacemos?
-que la flota imperial se extienda en todo el territorio, apartar de hoy la tierra es libre…
Comenzó a llover, en síntoma inequívoco de una nueva era, cuando las nubes se juntaron, las naves de la republica imperial se metieron ellas impidiendo ser vistas a la luz del día.














































CAPITULO VEINTISEIS




LA CASA DEL LAGO


CIUDAD DE MEXICO…


A eso de las ocho de la noche, cuando la luna refulgía con su resplandor en torno del bosque y el viento soplaba en torno de las aguas verdosas y la lluvia comenzó a ser más densa, el Ferrari gris se estaciono frente a la verja y le dijo al vigilante de la entrada cuando la ventanilla bajo el vidrio en automático.
-¿ya llegaron todos?
-usted es el ultimo señor Alex…
-bien, ¿llegó ella?
-si, esta con los demás invitados…
-¿tienes en mente lo previsto?
-será como usted lo ordeno señor…
La verja se abrió y abrió el paso para que entrase el auto, enseguida el conductor hizo avanzar el vehículo que con la sutileza de un ave siguió hasta el estacionamiento. Luego Alex apago el motor y abrió la puerta quitando las llaves del swich de encendido, entonces bajo por su lado izquierdo y volviéndose en su entorno reviso que todo estuviera bien para luego cerrar la puerta del auto.
Así como iba caminando se encontró con una ligera corriente de aire fresco que lo cubrió haciendo que las ojos de los arboles se guiaran hacia el lago como de costumbre.
Los arboles eran vistosos, de muchos colores y que además hacían juego con las aguas cercanas donde había una casca de agua limpia y cristalina en por la que circulaban alguna variedad de peces que desembocan en el agua.
A la entrada de la casa ya le aguardaba el mayordomo, quien notándolo le tomó el portafolio y le dijo.
-la reunión aun no empieza señor…
-¿a no y porque no?
-le aguardaban sus invitados…
Apenas entraron en la casa, la orquesta entono unos compas de bienvenida dando con eso el principio de la reunión.
Entonces comenzaron a distribuirse las bebidas a todos, con sendos bocadillos y otros se encargaron de hacer los arreglos del motivo de la reunión, la música comenzó a disgregarse más con otro tipo de sonidos y entonces Alex saludo a los que le quedaban cerca pero de manera rápida y complaciente, ya que así se dirigió rumbo al nivel superior ya que tenia que cambiarse de ropa para ajustarse a la reunión que ya empezaba.
Basil su mayordomo le siguió por la escalera ancha y de escalones de madera preciosa, los pasos no se escuchaban y tenía un barandal de cromo de oro.
-señor, en su habitación esta su ropa ya dispuesta, ¿tomara un baño?
-si, enseguida estaré con la recepción…
Basil entro primero a la habitación y dejo el portafolio guardado en el closet, enseguida Alex ya entraba pero entonces estaba sonando su teléfono celular que tenia dentro del portafolio pero no lo escucho, sin embargo en su reloj se inserto el aviso ya que la luz parpadeo en amarillo sobre la caratula, seguido de un mensaje en letra liquida.
-basil...
-diga señor…
Vuelve a sacar mi portafolio del closet, parece que tengo una llamada, tengo que contestar.
Basil volvió a sacar del closet el portafolio d Alex, abriendo la puerto con la llave que el tenia y que era la única que Alex le había dado, el portafolios estaba al fondo del lugar, lo tomo y le dijo.
-señor…
-o si basil…
Alex tomo los portafolios y lo abrió con la llave láser que emergió de su reloj, desde luego descifro la clave y se abrió, ahí estaba el teléfono, Alex lo tomo y contesto.
-“señor…estamos encima de la casa, ¿que hacemos?”
-nada, solo vigilen, no queremos que se modifique en nada en flujo de los acontecimientos…
-“como diga señor…”
Alex le dijo a basil una vez que termino la comunicación telefónica y coloco el aparato otra vez dentro del portafolios y hubo cerrado.
-guárdalo…
En eso, llamaron a la puerta un par de ocasiones, basil se dio prisa en guardar el portafolio y enseguida fue para abrir.
Al apartar la puerta se encontró con la figurilla de otro de los empleados de Alex quien le dijo.
-¿el señor?
-aquí esta…
-tengo que algo que decirle…es importante…
Entonces Alex que había alcanzado a escuchar menciono a basil apenas.
-¿Qué pasa basil?
-nada señor, es Brian, dice que quiere hablarle…
-déjalo que entre…
Brian entro cuando basil abrió aun más la puerta, se notaba algo ansioso, pero también se veía que era curioso.
-señor, tiene que venir conmigo, ha llegado alguien que quiere conocerlo…
-¿Quién es?
-no se lo puedo decir señor, me lo prohibió, dijo que quería verlo ahora mismo…
-¿Dónde esta?
-en el jardín, cerca de la alberca…
-eso casi a la orilla del lago…
-así es señor…
Alex se vio de pronto ante algo inesperado, así que no dudo en decirle a Brian cuando se quito la corbata que tenia en el cuello y que arrojo al suelo.
-esta bien, vamos…
Ambos salieron de la habitación, pero no fueron por la escalera para ir por la entrada principal del jardín, sino que tomaron la puerta trasera para evitar ser vistos por los invitados que ya se estaban divirtiendo.
Alex siguió por donde Brian iba, bajaron la escalera trasera y llegaron al jardín, caminaron todo el rededor y atravesaron la piscina que se encontraba a media iluminación, ya que no se tenia previsto que la fiesta se extendiera hasta ahí.
Alex se dio cuenta de donde estaba la persona que lo requería pero ante el reflejo de la luz le fue imposible saber quién era, así que aguardo a que llegaran hasta donde se encontraba, cuestión que fue rápida, pero unos pasos antes, la alcanzo a distinguir, pero ella se encontraba de espaldas a ellos y no le vio la cara, pero se notaba que tenia una copa en la mano que no había tenido que beber toda.
Brian fue el primero en acercarse hasta donde se encontraba ella, Alex se quedo un par de pasos atrás y fue Brian quien le toco el hombro diciéndole.
-señora, el señor Alex esta aquí, tal y como usted me lo pidió…
Ella se volvió en el acto y viéndole la cara a Brian le dijo.
-¿no vas a presentarnos?
-claro que si…
Brian le hizo la indicación a Alex de que se podía acercar, él de inmediato avanzo a ellos y se coloco de lado de modo que la tuviera de frente y viéndola como él quería.
-señor Alex, ella es la señora Denise badén…señora Denise, él es el señor Alex BVLGARI…
-un placer conocerla señora…-dijo Alex al tiempo que le tomaba de la mano le dio un beso ligeramente, ella por su lado le dijo.
-mucho gusto señor BVLGARI, tenia muchas ganas de conocerlo, es usted tan famoso, guapo, inteligente y muy refinado…
-favor que usted me hace señora Denise, es usted muy hermosa…
Entonces Brian se sintió como el tercero en discordia y por lo tanto les dijo.
-bueno, me alegra que ya se conozcan o mejor aun, los dejo para que terminen de conocerse…con su permiso señor Alex…señora…
-adelante Brian, fuiste muy amable…-dijo Denise, Alex solo movió la cabeza.
Ambos siguieron con la vista a Brian que llegando a doblar la esquina de la piscina ya no se vio, por eso, Alex tomo del brazo a Denise y le dijo.
-no tenia idea de que estabas aquí…
Ella no dijo mas, pero le abofeteo el rostro a Alex una vez y le dijo entonces.
-te odio y me das asco…
-si, a veces produzco ese efecto en las personas…
Pero entonces Alex la atrajo hacia èl con fuerza y la beso con violencia, tanto que ella incluso no se resistió, pero luego, se apartaron.
-¿quieres conocer mi habitación?-dijo Alex.
-…sí… ¿y para qué?, ¿tal vez para hacernos el amor hasta el amanecer…?
-tal vez…
Entonces Denise tomo la otra copa que tenia sobre el quicio de un barandal de la jardinera interior y le dijo a Alex.
-toma, brindemos, esta noche es mágica…
Alex tomo la copa y llevándosela a la boca bebió al tiempo que Denise hacia lo propio.
Ella se le acerco, lo beso con pasión y luego le dijo rodeándole el cuello con sus brazos.
-siempre estarás en mi vida, siempre te voy a querer Alex…
Luego de eso, ambos se tomaron de la mano, el la abrazo con el otro brazo y ella se recargo sobre su pecho mientras caminaban hacia dentro de la casa, de la misma manera, entraron por donde Alex había salido, no querían que los invitados se dieran cuenta de que estarían en privado y tampoco querían dar explicaciones, lo suyo era algo intimo, y de nadie mas, al menos así lo habían decidió.
Alex subió detrás de ella por la escalera trasera cuidando de que no hubiera nadie por ahí, con sigilo avanzaron por el pasillo superior de la casa y fueron hacia el otra lado de las habitaciones, con cierta prisa abrieron la puerta de la habitación de Alex y entraron casi cayéndose al tiempo que reían divertidos, él cerró la puerta con un movimiento rápido, pero la puerta cerro y se alcanzo a escuchar, pero eso a ellos ya no les importo.
Alex cayo sobre la cama y Denise sobre él, comenzó a desabotonarle la camisa blanca poniéndole las manos sobre el pecho desnudo que estaba marcado por los músculos que se notaban fuertes y prominentes, èl era delgado, pero demasiado musculoso, tanto que cuando Denise le quito la camisa, abrió la boca de sorpresa y admiración y le dijo.
-¡oh que hermoso cuerpo tienes Alex!
Y entonces comenzó a besarlo con desesperación, èl por eso, le tomo del cabello y lo comenzó a acariciar, era sedoso y olía fresco como a girasoles, tanto le gusto que se detuvo un instante en su aroma.
El le bajo las mangas de èl vestido negro de Denise y la acerco a ella por el cuello y comenzó a besarla, ya se les notaba la sofocación y fue que èl le dijo.
-tu cuerpo es exquisito…
Ella se mostro ante èl desnuda, ambos estaban abrazados prodigándose las mil y un caricias, èl sobre ella, le besaba fervientemente los senos cuando ella comenzaba a gemir…
Luego bajo al abdomen y seguido continuo hasta su monte de Venus donde hayo la caja de pandora que al abrir hizo salir las dimensiones ocultas de ella.
-¡ámame más mi amor!-decía ella apenas con algo del aliento que le quedaba ya que se retorcía de placer en el lecho…
El sexo de él, estaba álgido, palpitante tanto como una banana, ella al verlo erecto se acerco y lo toco como si fuera a pelar de la casca con ambas manos, entonces se acerco y con sus labios lo comenzó a besar como si fuera un caramelo se lo llevaba a los labios y con la maestría de una profesional, se lo metia ala boca haciendo con la lengua de vez en cuando un parpadeo.
-me gusta tu verga Alex…quiero que te vengas dentro de mi panocha…-dijo Denise.
Entonces el la separo y llendo por entre las piernas de ella, se acomodo, y lentamente fue penetrando la cavidad sexual de Denise que al sentir que estaba siendo horadada, comenzó a contonearse para hacer la sensación mas placentera.
-así, mételo todo Alex…-decía ella apoderándose de los labios de èl apenas se acercaba.
Así transcurrió el tiempo probando las un mil, posiciones eróticas que ambos tenían en cuenta dados sus conocimientos en las artes amatorias del oriente.
En eso, cuando casi estaban a punto de irse a dormir, ella tuvo la atención de ir para la puerta en donde sono el timbre, al abrirla, se dio cuenta de que la persona que estaba detrás era de ambos conocida.
-hola Denise, ¿puedo entrar?
-claro Ingrid, entra…
Ingrid era la senadora que había llegado luego de que ambos y que no había reparado en su asistencia, por eso cuando Alex la vio dijo.
-¿como estas Ingrid?
-bien, veo que están muy relajados...
-si, nos hemos tomado un tiempo de asueto...
Entonces ella quitándose el vestido blanco que tenía dejo entrever sus contornos y que solo llevaba puesta la ropa interior.
-¿puedo participar de este modo de diversión?
Sin pensarlo un instante, Denise le dijo.
-sí, dos mujeres son mejor que una…entonces Ingrid le tomo del cuello a Denise y se fundieron en un beso, mientras se sobaban los pechos, Alex se acerco e hizo que Ingrid abriera sus piernas y por detrás la Penetro. En eso, se abrió la puerta, y se dejo ver la silueta que sostenía una botella de champagne y dos copas, y usaba un gran vestido azul, era una mujer bellísima.
-¿puedo participar Alex?
Alex la observo desde donde se encontraba y le dijo.
-si Tifany, pero antes cierra la puerta…
Tifany cerró la puerta, luego dejo el champagne sobre la mesa de centro y fue a reunirse con Denise en la cama quien se encontraba debajo de las piernas de Ingrid, se encontraba lengüeteándole el clítoris de manera que tuviera una excitación más abundante.
Tifany de inmediato tomo su lugar, le toco la panocha a Denise quien al sentir su mano sobándole por encima se extremísimo y comenzó a jadear.
Entonces Tifany se quito el vestido y dejo al descubierto su cuerpo torneado, con esos pechos vigorizantes que aun se mantenían erguidos, entonces se quito la tanga del mismo color y se mostro tal cual era, tenia el pubis rasurado y se le veían los labios vaginales completamente delineados, estaban que relucían de deseo.
Tifany comenzó a mamarle la panocha a Denise dándole dedo de vez en cuando, entonces Alex se quito de donde estaba, y se acomodo entre las piernas de Tifany, coloco su miembro a la entrada de su panocha y la penetro con suavidad y destreza, Tifany comenzó a moverse y relajarse de manera que comenzó a jadear ligeramente al unisonó con Denise quien se mostraba ya cerca de clímax.
-oh si, así, ¡cógeme duro!-decía Tifany a Alex con voz enronquecida.
Ingrid se coloco encima de la boca de Denise quien al verla de inmediato le coloco la lengua entre los labios vaginales y comenzó a mamarle.

Era de mañana cuando Alex abrió la ventana de la cornisa, tenía el torso desnudo y llevaba tan solo un pantaloncillo corto, volvió la cara al interior de la habitación y noto que Denise se estaba poniendo una de sus camisas rojas que le cubría la zona baja de la cintura, entonces Alex fue al interior de la alcoba y viendo a Denise, fue a su closet, ahí busco un poco y saco un estuche y le dijo.
-mira…
Él abrió el estuche y ahí estaban dos relojes, uno de mujer y el otro de hombre, ambos del mismo estilo y color.
-¿te gusta?-dijo Alex.
-es muy hermoso…
-toma, este es el que te elegí…
Èl le se lo coloco en la muñeca izquierda, lucia llamativo y muy caro, pero además en su caratula se notaban diversas imágenes tridimensionales, era como si una densa atmosfera se hubiera colocado ahí dentro.
Alex entonces se vistió con una camisa blanca que tomo de uno de sus cajones mientras que Denise seguía admirando el reloj que tenia en mano y que se disponía a usar pero para eso le dijo a Alex.
-¿Cómo se usa esto?











































































 
 
7
 
Página 1 / 1
Foto del autor jorge alejandro suarez garcia
Textos Publicados: 8
Miembro desde: Mar 07, 2009
0 Comentarios 797 Lecturas Favorito 0 veces
Descripción

NOVELA DE CIENCIA FICCION-THRILLER-

Palabras Clave: FLUX

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Ficcin


Creditos: JORGE ALEJANDRO SUAREZ GARCIA

Derechos de Autor: JORGE ALEJANDRO SUAREZ GARCIA

Enlace: nickvanderflux@hotmail.com


Comentarios (0)add comment
menos espacio | mas espacio

Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.

busy