Acedia
Publicado en Feb 25, 2015
![]() ![]() Hola otra vez, eres tú
ese yo al que no quiero recordar el que me despierta cuando no hay luz aquel al que quisiera olvidar. Eres mi espejo, en el cuello una lágrima que escurre hasta el pecho en busca de olvido se absorve en la piel, los órganos y el ánima alcanza la memoria los anhelos y hasta lo prohibido. Y no es que no quiera verte nunca ni otra vez es sólo que cuando vienes sacas lo peor de mi ese que no quiero ser ni una vez ni dos ni tres porque me hace ahogar en ríos turbulentos carmesí. Yo quiero crecer, dejar de ser raíz alcanzar el cielo como un gran árbol fuerte pero no puedo, no me dejas ser feliz me hundes en abismos cuando tengo que verte. Y no es culpa tuya, no pediste existir no serías así de no ser por quiénes te hicieron, un espectro oscuro y frío sin ganas de reír un alma que dañaron, un corazón al que hirieron. Pero no estoy dispuesto de igual manera a pagarte no soy vengativo y sé que muy solo has estado yo te abrazaré , te cobijaré y lograré amarte porque eres parte de mi y sólo estás lastimado. Si no puede cuidarte la vida por ser como eres yo te brindaré pasteles de cereza, eres yo y yo soy tú y no existen mas seres que puedan entender esta propia tristeza. |
Mara Vallejo D.-
Somos conscientes de las internas modificaciones, algunas previenen, otras dejan libre el pensar y se produce entonces, el alivio o choque con el ¡YO! .
El texto compartido ha sido bien descrito, me ha gustado, amigo mío.
María