Buenas tardes, y gracias por asistir a este modesto evento. Quisiera decir unas palabras, compartir una reflexión personal con todos ustedes. Haber llegado hasta aquí ha supuesto un esfuerzo mucho más que académico, diríase que ha sido la parte fácil de todo esto. Llegué al instituto escondiéndome del mundo, y lo pasé mal. Ahora que salgo, soy yo quien busca al mundo, con ganas de aprender, de conocer, de viajar... Es cierto que me siguen faltando organización y constancia, pero me he librado de mis nubes negras de la infancia, y siento que soy capaz de sobreponerme a cualquier cosa que venga. Ardo en deseos de enfrentarme al porvenir. Y eso es lo mejor que tenemos los jóvenes.

En estos años el IES Jordi de Sant Jordi ha cambiado mucho, y todos nosotros hemos cambiado con él, o mejor dicho, lo hemos hecho cambiar, porque el instituto no ha evolucionado por sí sólo, somos nosotros quienes hacemos nuestro instituto, sobre todo profesores y alumnos, pero también padres y el resto de trabajadores del centro. No en vano ha sido calificado como un centro de éxito, es un espacio donde se reinan el respeto y la convivencia. En realidad es mucho más que eso, y es nuestro.

Lo que quiero decir, es que el hecho de que el Jordi sea un lugar mejor es gracias a todos vosotros. Me siento muy orgulloso de haber estudiado aquí, y mucho más, me siento realmente afortunado. A algunas personas aquí presentes les debo lo indecible. y siempre les estaré agradecido. Este centro vosotros siempre contará con mi apoyo cuando sea preciso, tampoco pienso perder el contacto con muchos de vosotros. Me habéis enseñado buena parte de lo que sé, así que ahora yo os digo gracias, gracias por soñar un instituto mejor, un centro de estudio para todos, que escucha a los alumnos, escucha a todos sus trabajadores, gracias por unir tantas sonrisas a pesar de las dificultades. Hoy es un gran día, ¡así que vamos a celebrarlo!