AMARGO ATARDECER.-
Te has vuelto en otra de mis necesidades, en una mas, quizás en la mas importantepuesto a que no tengo otras, pues he dejado claro que ya no me importa la realidad, el oficio, el libro del día, el poema mañanero y el pastel de la tía Isabel. Esto no es como cuando tengo hambre, como cuando desayuno en la tarde, mas puede que tenga parentesco en las incontrolables ansias.
Tampoco es cuando ladro de sed, y bebo leche al ocaso mas recio, pero puede que sea igual de mortal si no bebo los ocho vasos necesarios de tu sonrisa liquida que aderezada con luna me hacen sentir un no se que, y me hace vibrar no se como, me arde no se donde, y me llena de quien sabe cuanto.
¿Quien diablos eres?
No reconozco tu humanidad tras el antifaz que luce tu aura, no doy con el adjetivo, con uno endiabladamente preciso como para saber si existe una teoría de lo que eres en el diccionario, tampoco puedes ser como ningún día del almanaque, o como algún paisaje llevado al óleo en manos de la insanidad mas versátil, no conozco alguna constelación de trazos certeros como el vendaval que tus caderas tatúan al aire.
Muero de celos tan solo de imaginarme que el viento acaricia tu cabello en múltiples sabores millones de idiomas...muero, ardo, me consumo en odio...pues en estas tardes de verano el viento es sucio, y los celos me consumen al intuir que el ni siquiera te pide permiso y con perspicuo cinismo embalsama tu carne a su prosaica brisa, muero, ardo, me consumo en odio... por tu marina silueta, por ti...por lo que seas...pues adoro la transparencia de tus ojos en mi humanidad dibujada a la puesta de sol...pero idolatro imaginarlos plasmados en algo mas mientras un olor, una palabra, o alguna grosería haga que me estornudes en un recuerdo... Pues me gustan, me gustas en todas tus poses...fases lunares, eres una mina de letras para cualquiera que sepa escribir, y que habido al pacto nocturno de la conjugación sepa describirte cual dulcísimo ensueño húmeda Sirena, aunque seas el sigilo del misterio, el murmullo del deseo.
¿Quien diablos eres? ¿Por que tú no eres como los demás diceres? ¿Por que te necesita más, cada vez más esta pluma? ¿Por que ella no pudo decirte lo que debió en aquel dulce amanecer, porque no venció al vértigo del despertar diario?¿Acaso será por que no fue como cualquier despertar, que yo nunca he tenido algún otro dulce amanecer?
Me enferma saber que la tarde en mi cuaderno lleno de sal no termina, pues a estas horas tú no te has cansado aun, el día ni siquiera ha comenzado en tus ojos, y me enclaustro sin motivo en adivinar por donde caminas, y a que hora sonríes, por que razón respiras y con que ganas lo disfrutas.
¿Que color eres?
Yo me he vestido últimamente de la naranja duda del adiós del sol, de la puesta póstuma, de la cercana despedida, del ocaso cruel. A esas horas estoy bebiendo te, y me imagino que tu te acalorizas, huyo constantemente a estas horas de mi, vago en círculos con moderada velocidad, escapo de mis deseos de esta forma tan visceral, no soporto lo salado de mis hojas, y me marea estar amordazado por la tinta envenenada no de inspiración sino de lo que conozco y no reconozco y que no me explico y que no existe y que me atormenta y que necesito y que deseo y que me alegra y que me mata y que me revive y que me vuelve a matar y me regurgita de ti...¿Pues, en realidad no se quien eres? conozco tu nombre, y el bautizo que te dio mi otro yo haya cuando humano era, además del color de tu piel, el calibre de tus ojos, y la magia de tus labios que empapan las palabras que dices y las que alucino quisiera dijeses...que me dijeses. Y le grito a tus poemas que no se exalten que no piensen que estoy loco, pues yo no soy así, ellos los locos no saben nada...y yo...yo tampoco...ignoro todo, desde que me leíste ignoro todo, perdí mi verdadero nombre hace años, pero lo anote por ahí en algún papel limpio, pero ahora lo he ensuciado y quebrado...se humedeció con todo el mar, con tu compañía, y con el ocaso fiel oyente de mis celos, mis quejas, y sastre de mis dudas. Se que no existe un adjetivo, uno endiabladamente exacto, ni tampoco puedes ser como cuando tengo hambre mas puede que tenga parentesco con las insoportables ansias, tampoco cuando ladre sed...mas si lo mortífero, tampoco algún día en especial del almanaque...ni un paisaje...ni talvez un poema uno de elite uno profesional, no, a los grandes se les paso tu existencia por la altanera técnica...pero sabes...puede que no tengan que ver aquellas letras de oro de todos los grandes...pues podría ser que si estés en algún poema...si es posible...en uno apócrifo...escrito por cuatro locos por cuatro pseudos escritores locos...si... después de todo si es probable, si hay algo, algo que no me pesa como este rancio y amargo atardecer nublado de dudas y celos marrón, pues eres tu o es aquel...la semejanza lírica de este juglar, de este hibrido juglar muerto...pues si, tu eres ese adjetivo, tu eres la hora errónea en la que me levanto y no tengo hambre pero desayuno como si lo fuera, si eres un paisaje llevado al óleo, si eres un poema y un día...eres todos los días...puesto a que esta descripción que te otorgo pasa siempre...si...tu lo eres...ahora ya se quien eres...y no me importa la incoherencia de esta prosa de crónica faz con el nombre erróneo...pues lo que importa mi bella Sirena es que tengas algo para quitarte ese antifaz y descubrir que si existes en mi, y en mi diccionario...pues tu eres...si...si...UN DULCE AMANECER...y que puede también este bochornoso atardecer de mis ojos que escribe esto que aborrecerás cuando te describa tu salada noche...y en cuanto a la constelación no existes ahí puesto a que le hacen falta colores a todas las que conozco, y si no la encontré es que no existe, le falta luz...pues tu y yo somos fuego...mi hermosa leo de garras y piernas afiladas...
                                                                                                                                
hoz leudnadez
                                                                                                                                 hunahau mictlantecuhtli
daimnuz ziedeat
20/abr/09