Textale

Confesion.

Publicado en Apr 19, 2014

Me acuerdo, claro que me acuerdo. Me acuerdo de mirarte, muchas veces más de las que me gustaría admitir.
Y te quedaste, cosa rara, te quedaste aunque te fuiste. Así como en mi nostalgia quedó la espera, y es mis culpas el no haberte buscado. Como en mis dolores la ilusión rota, tu espalda cruzando de vereda, tu actitud evasiva. De la misma forma que en mis añoranzas tu risa, un roce, tu boca, el calor de tus manos sobre mis manos, y todo aquello que no me queda más que imaginar.
¿Y cómo negarlo? Quedó bronca. Por lo que fue, por mis elecciones, y por los caminos que tomaste.
Y una especial impotencia de no poder apagar esa vela en mi pecho, esa tenue esperanza de que la vida revise esta historia, que le pegue una miradita y se de cuenta que por distraída se olvidó de escribir un epílogo. Que de su tinta se dibujen las letras necesarias para que mis brazos te envuelvan, y fluyan con las lágrimas esas penas que cargamos, los desamores, las desesperanzas. Para decirte, como pueda, en un susurro: "Gracias. Gracias por enseñarme a crecer."

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