Si el tiempo fuera mío te diera eternidad. Si la luna fuera mía, te regalaría una noche, con estrellas y un ocaso como un cometa. Si las tormentas fueran mías, te diera sus relámpagos para que aclaren,  así sea por un instante, tus noches oscuras pero sin el ruido por que te asustan.
 
Lastima que el mar no fuera mío, sino la endulzara para saciar tu sed, verte flotar en las olas de su destino y llegar a un mundo
En el cual todo fuera mío y sin excusa te regalaría cada pedazo de mi ser.   
 
Acéptame todo, sin importar que sea nada, compláceme con tu mirada y me daré cuenta que solo vivo por tu amor, sin negarte nada te daría hasta el dolor de mi alma por que tu te mereces todo, mas la felicidad que me concedes y la alegría al verte.
 
El viento escapa de mis manos y como soy un simple mortal, solo te puedo regalar un suspiro, un rayo de luz que penetra por la ventana, me mira y se marcha, no me pregunta si desea estar junto a ti. Si pudiera darte todo, fueras la reina de mi mundo, bendita mujer que haces salir el sol entre las montañas y la línea que delimita al mundo en las moradas de mi deseo.