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  • País: Argentina
 
El personal trainer  Vamos, vamos, un esfuerzo más, un esfuerzo más, ¿qué pasa, ya estas cansado?, dale que faltan tres vasos, bien, bien, así, seguí así, vamos, vamos que falta menos, ¿ya estas boqueando?, seguro que durante el fin de semana el señor en vez de practicar anduvo tomando agua y acostándote temprano, dale viejo, ponele ganas que falta uno vaso de cerveza solo, dale, no aflojes, no aflojes ahora que falta un vasito solo, eso, tómatelo, tómatelo de un solo trago, bien, bien, muy bien, muy bien, te costo, te costo pero lo hiciste, de todas maneras hay que bajar los tiempos, toma aire, toma aire, que ahora vamos a hacer otro trabajo, uno de resistencia y velocidad, un trabajo súper seriado, vamos a trabajar sobre un circuito de tres estaciones, la primera estación es el baño, ahí entras te metes en un privado y te tomas una línea de merca, después vas a la barra y te tomas un Fernet con Coca Cola y de ahí derechito al reservado en donde te clavas un acido, ok, ¿entendiste?, bien, cuando digo tres arrancas, uno, dos y tres, ¡ahora!, vamos, vamos, bien, bien, cerra la puerta del privado, bien, muy bien, aspira, aspira bien aspirado, bien, bien aspirado, bien aspirado, así me gusta, una barbaridad, ahora vamos a la barra, eso, eso, a la barra, mas rápido, fondo blanco, fondo blanco de Fernet con Coca, bien, bien, ahora volando al reservado, bien, bien, ahora el acido, pónelo debajo de la lengua, eso, así, bien, así, dale que son dos repeticiones, de vuelta al baño, si, bien, bien, te dije que cerres la puerta, después te olvidas y te llevan en cana, vamos, vamos, a la barra, bien, bien, un poco más, dale, dale, un esfuerzo más, rápido, al reservado, el acido debajo de la lengua, así, así, bien, bien, una barbaridad, ahora no pares, no pares, seguí moviéndote, nos recuperamos bailando música tecno, bailamos música tecno en la pista, bailamos, bailamos, levanta la manos, eso, bien, salta como loco, bien, así, salta, salta, dale un poco más, ahora hacemos "pogo", hacemos "pogo", corremos y saltamos como un retardado para un lado, corremos y saltamos como un retardado para el otro, dale, dale, más fuerte, con ganas, bien, bien, no te olvides que hay varios recitales por delante, bien, muy bien, seguimos, seguimos corriendo y saltando para un lado y para el otro, no te olvides de hacerlo con los codos levantados y en punta, con cara de sacado, con cara de pelotudo, eso, muy bien, muy bien, muy bien esa cara de pelotudo, eso, bien, bien, ahora para terminar, otro ejercicio, seguí saltando, no pares, seguí saltando, dejamos todo en este ultimo trabajo, seguí bailando hasta que yo diga tres, ahí, en ese momento salís corriendo contra el muñeco ese con forma de patovica, primero lo escupís y después lo pateas en los huevos, de ahí, vas nuevamente a la barra, una vez ahí, prendes un pucho y te lo fumas, lo fumas bien rápido luego te tomas otro Fernet con Coca Cola, de ahí volves a la pista, te sacas la remera y empezas a bailar, a bailar saltando y corriendo revoleando la remera, y por último terminamos el ejercicio con un porro, dos o tres pitadas nomás, ok, ¿se entendió? , bien, bien, prepárate, uno, dos y tres !ya!, bien, bien, bien escupido, trata de apuntar a los ojos, bien, bien, bien pateado esos huevos, vamos, vamos a la barra, eso, muy bien, prendemos el faso, fumamos el faso, dale, así, así, dale, bien, bien, bien, ahora tomamos el Fernet con Coca Cola, bien, bien, impresionante, vamos a la pista, sacamos la remera, bien, bien, saltamos, saltamos, corremos, bien, bien, ahora nos sentamos y prendemos el caño, prendemos el porro, fumamos un poco, otro poco, aguantamos el humo en los pulmones antes de exhalarlo, bien, una más, una pitada más, bien, bien, ahora si recuperamos, recuperamos, anda relajándote que por hoy vamos terminando, seguimos recuperando, sentadito, sentadito recuperamos, recuperamos, bien, bien, muy pero muy bien, la verdad que el entrenamiento de hoy fue muy bueno, excelente, pero sabes que con esto solo no alcanza, tenes que cuidarte, nada de yogurt ni de leche con cereales, ni agua mineral y menos que menos ensalada de frutas, evita las caminatas, ¿estas haciendo la dieta que te di?, no me mires con esa cara de pelotudo, te dije que esa cara es para bailar tecno, seguí la dieta, es importante, tres paquetes de cigarrillos por día, seis litros de cerveza, dos Fernet de tres cuartos, porro, merca y ácidos cada media hora, es importante que la sigas  la dieta, mira que nos quedan quince días nomás, en dos semanas te vas a la costa y no llegamos, no llegamos, ponete las pilas, te lo digo en serio, a menos que quieras dar vergüenza y repetir lo del año pasado, a menos que quieras volver a quedar tirado en la calle dado vuelta antes de las cinco de la mañana como el año pasado, a menos que quieras volver  a vomitar por ahí antes de llegar al boliche como el año pasado, ¿te acordás como te cargaban tus amigos? ¿queres volver a ser el hazmerreír? nos pusimos un objetivo hace unos meses atrás, ¿cuál era el objetivo?, ¿cuál era el objetivo?, si señor, si señor, llegar al "after", llegar al "after", pero si no te cuidas no llegamos, no llegamos, mira que este año el "after" arranca a las ocho, no a las siete como el año pasado, es más tarde, hay que estar muy entrenado para llegar, por eso hace falta seguir la dieta, por eso tenes que hacer la dieta que te di, bueno, terminamos por hoy, anda a tu casa, te espero mañana a la misma hora, y cuídate, cuídate mucho, que sino,  no llegamos al objetivo, no llegamos al "after", si no te cuidas, te lo digo en serio, no llegamos al "after".
El personal trainer
Autor: tuqui  363 Lecturas
MedinaMedina era uno de esos pibes cuya forma de ser, contrastaba con su imagen, limpio, prolijo, bien peinado, su guardapolvo, el más blanco y el menos arrugado, siempre lucia impecable, además, era muy inteligente, uno de los mejores de la clase, la maestra lo quería mucho, era su preferido, hasta la directora, la malvada señorita Rosita lo adoraba, cada vez que lo veía, le acariciaba tiernamente su lacia cabellera.Pero la verdad era que Medina era un atorrante de muy mal carácter, un engreído mal llevado, pero por sobre todas las cosas, un chico extremadamente violento. Era el líder indiscutido, sus decisiones jamás podían ser cuestionadas, menos aún rechazadas, un día, Pereyra no acepto su propuesta de jugar a los "penales" proponiendo en su lugar jugar a la "popa", terminado el pobre Pereyra cayendo desde un segundo piso.Núñez y Godoy eran sus laderos, caminaban a su costado un paso por detrás, contar algo sobre estos bandidos significaría escribir un manual de cómo ser un perfecto chupaculo, hacían todo lo que Medina les pedía en forma inmediata y efectiva.Un 17 de agosto, el salón de actos de la escuela lucia celeste y blanco por doquier, banderas y escarapelas adornaban el lugar, yo estaba sentado en la primera fila, con mi discurso en la mano, ese día había sido elegido para hablar del libertador, a mi lado, se ubicaba Medina, junto a él, Núñez y Godoy.Ya se había cantado el "himno", los pelotudos de segundo habían bailado un "gato" y la vieja de música acompañada por el coro de séptimo, había entonado la marcha de "San Lorenzo", mi turno se aproximaba.La malvada señorita Rosita anuncio mi nombre, un tanto nervioso subí al escenario, atrás mío venia Medina, en su carácter de encargado de sonido en todas las ceremonias de la escuela. Su función era la de acomodar el micrófono, colocarlo a la altura del orador, yo me pare frente al micrófono a una distancia prudencial, dejándole a Medina espacio suficiente para que cumpliera su tarea, luego, cuando entendí que había terminado me acerque, él se demoro un poco ajustando un tornillo mariposa, yo aproveche ese instante para releer en voz baja mi discurso el cual tenia escrito en letras grandes y negras para facilitar mi lectura y evitar de esa manera equivocaciones.El silencio había ganado el salón a la espera de mi disertación, yo tome un poco de aire tratando de juntar fuerzas para comenzar, pero cuando me predisponía a hacerlo, justo, justo, en el preciso momento en el cual yo iba a empezar a hablar, Medina que aun se mantenía firme y en forma sospechosa a mi lado susurra en mi oído, "momento mudo y paralítico, el que habla o se mueve la liga".Automáticamente, me invadió el recuerdo del tanito Giordano tirado durante un recreo en el piso, desangrándose, con fracturas de todo tipo a lo largo y ancho de su cuerpo producto de los golpes de Núñez con su infaltable bate de béisbol, de los cadenazos de Godoy, y de las patadas de Medina, paliza recibida por el tanito por haber alcanzado la meta en ultimo lugar, en concepto de castigo por haber reaccionado tardíamente al grito de Medina de "el ultimo que toca la pared la liga". El miedo se apodero de mi, reaccionando sin emitir sonido ni provocando movimiento alguno, juro que si Medina hubiese gritado momento sordo, no hubiese siquiera percibido los murmullos que se empezaban a escuchar en la sala producto de la incertidumbre generada por mi actitud.Pasaban los segundos y yo me mantenía en mi postura, segundos que se transformaron en minutos, los cuales para mi parecieron siglos, hasta que por fin Medina que era un flor de delincuente, pero un chico con códigos, entendió que yo había superado la prueba dándola por finalizada diciendo en forma disimulada por lo bajo, "tiempo".Me costo otros segundos recuperarme, no me fue fácil volver a relajarme, una vez más tranquilo, sentí la palma de la mano de Medina apoyarse en mi hombro acompañando la maniobra con una cínica sonrisa, disfrutando el momento, aprovechándose el muy desgraciado de la situación, a sabiendas de la ignorancia del auditorio que no entendía el mensaje, impresionándolos con su hipocresía, engañándolos, haciéndoles creer que su arrumaco, que poner su palma sobre mi hombro era un gesto de apoyo y de aliento, y yo, sin alternativa alguna, sin posibilidad de evitar su embate, no tuve más remedio que agachar la cabeza y dejarme "coger", como lo hacen los "marcianos", por Medina, ante todo el publico presente.                   
Medina
Autor: tuqui  308 Lecturas
PlagioEn mi carácter de historiador y critico, pero por sobre todas las cosas, de amante del séptimo arte, me veo obligado a hacer publico, el engaño, la mentira, la estafa moral incurrida por un joven director local, que sin escrúpulo alguno, hizo propia una idea ajena, consumando uno de los peores pecados que se pueda llegar a realizar dentro del mundo artístico, el plagio. El cine, la técnica que consiste en proyectar fotogramas de forma rápida y sucesiva para instaurar la impresión de movimiento, utilizado para recrear aventuras, dramas, comedias, entretenimientos, documentales, informes periodísticos, entre otras manifestaciones artísticas, se ve mutilado, golpeado, por estos estafadores de la originalidad.Recuerdo mucho tiempo atrás, cuando cursaba el primer año en licenciatura del cine, un prestigioso profesor nos contaba como un famoso director de cine japonés, copiaba guiones de antiguas escrituras egipcias, circunstancia que él hallaba totalmente repudiable. Durante un curso que tome en la ciudad de Dallas sobre la transformación del cine después de la segunda guerra mundial, uno de los oradores informaba a los presentes, que los relatos de combatientes sobrevivientes, fueron utilizados para importantes realizaciones bélicas, pero que este caso no era comprendido dentro de lo que ellos consideraban plagio, alegando que estas narraciones no habían sido utilizadas anteriormente, tampoco les correspondía a los soldados, dueños de los relatos, regalía alguna.El único personaje de peso internacional del cine al que se le conoce una dura postura en contra de estos ataques a la propiedad intelectual, es el famoso director polaco, Román Polanski, manifestando en una oportunidad, que estos estafadores debían ser tratados en el código penal como ladrones y o delincuentes proponiendo penas de hasta veinte años, para todo aquel que incurra en este tipo de delitos. Un experto en "plagiologia", el frances, Jac Dion, contaba en una de sus tesis que los "plagiólogos" frecuentemente usan la práctica de recurrir a viejas películas ya en el olvido, tratando de encontrar en ellas algo para copiar sin ser descubiertos. Esta técnica, es bastante popular dentro de algunos grupos de cineastas mediocres sin ideas propias, la técnica que por cierto utilizo el joven director local al que hago referencia al realizar su ultimo film, la  coproducción húngaro argentina denominada, "Calientes, insaciablemente calientes".Desde el inicio mismo encontré gran similitud de argumentos entre esta cinta y la película italiana de la década del cincuenta, "La bambina fogosa".La única diferencia que hallé entre ambos films, mínima por cierto, fue, que, en la realización nacional, actúan en el parte de la orgía dos travestis y un enano, en tanto que en la obra cumbre mediterránea, solo un travesti y la misma cantidad de enanos. Pero lo que me saco de quicio, debo reconocer, fue la escena en la que la protagonista del film, se masturba en la ducha del baño, escena igualita, igualita a la protagonizada por Sophie Evans en "Sexo virtual".Y ni hablar de la secuencia final, en donde la secretaria tiene a orillas del mar, sexo oral, anal y vaginal con un hombre de color, igual, totalmente igual a la escena de Julia Taylor en la millonaria súper producción de Private, "Esclavas de la penetración".Por ultimo y para evitar innecesarias suspicacias, aclaro que esta critica,  no tiene ningún animo de revancha para contra el joven director local por no haberme permitido ingresar al set de filmación, negándome de esa manera participar y conocer de cerca, el back stage de esta pésima propuesta cinematográfica.   
Plagio
Autor: tuqui  333 Lecturas
CampanaMe voy a permitir utilizar la sección "cartas de los lectores" de su diario, para denunciar un acto de discriminación ocurrido ante mi persona, días atrás.Mi intención es poner en manifiesto, el proceder de una empresa de transporte de pasajeros, muy famosa y prestigiosa, con nombre francés, que, por ignorancia o desinterés, marca grandes diferencias entre sus pasajeros, sin importarle en lo más mínimo las secuelas que su proceder puedan llegar a dejar en personas sensibles, como por ejemplo, yo.Resulta que la semana pasada tenia que viajar nuevamente a la localidad de Campana, digo nuevamente ya que no era la primera vez que iba, sino la tercera, siempre con la misma empresa.El día anterior, me comunique con la compañía, con la intención de preguntarles si contaban con un servicio directo, "Rosario-Campana", encontrándome con el primer acto racista de esta empresa cuando la gerente me contesto "no, no tenemos". Le pregunte a que se debía la falta de una línea directa entre ambas ciudades respondiéndome, con un tonito de esos que se usan para insinuar a alguien que es un pesado, que como las estadísticas marcaban que no mas de tres pasajeros por semana viajan de Rosario a Campana, no había coches exclusivos que hagan ese trayecto, lo cual me pareció una mera excusa ya que no encontré en su explicación razón suficiente. Al otro día me presente en la estación de ómnibus Mariano Moreno media hora antes de la partida del micro, el coche se presento a horario con un cartelito que anunciaba como destino final del mismo, "Retiro", la estación de nuestra capital, la cual, fue, es, y será, al igual que sus ciudadanos, los popularmente conocidos "porteños", los dueños absolutos de todos los privilegios habidos en nuestro bendito país.Una vez que el colectivo se puso en marcha me dirigí hacia la cabina de los chóferes para exigirles que la película que iban a pasar, no la pusieran a la altura del peaje de Arroyo Seco como suelen hacer, ya que como yo me bajaba en Campana, no iba poder terminar de verla. En ese momento me enfrento ante el segundo acto discriminatorio, cuando uno de esos sujetos que se hacen llamar conductores de larga distancia y no son más que meros colectiveros comunes y corrientes, me mira con cara de esas que suelen usarse cuando alguien quiere insinuar algo como... "¿que esta diciendo este pelotudo?", de todas maneras el colectivero converso unos segundos con su compañero y me contesto que no había ningún problema, que cuando terminaban de cargar los pasajeros que subían en Boulevard Oroño, la ponían.Regrese a mi asiento pero al poco, un momento antes que la función comenzara, me dirigí nuevamente a la cabina de los colectiveros a plantearle mi segunda petición, la cual se transformo, en el tercer acto discriminatoria para con quien les escribe.En esa ocasión el que me recibió fue el otro chofer, que era un poco mas gordo y simpático, al verme me pregunta "¿que necesita, ahora?", con ese "ahora" como diciendo, "como te gusta romper las pelotas", de todas maneras, yo seguí focalizado en mi demanda por lo tanto no le di importancia a su mala predisposición, lo mire fijo a los ojos y le dije que no quería bajarme en la colectora de Campana, que quería que el ómnibus ingresara a la ciudad y me dejaran en la estación, como lo hacían con los que iban a Retiro, ya que yo no era una bolsa de basura que la tiraban por el camino como si nada.El gordo, el colectivero, me corto el rostro señalándome que la parada es en la colectora y que ahí debía bajarme.Mordiendo bronca volví a mi lugar ya que había entendido que hubiera sido imposible hacerle cambiar de parecer y además, porque la película empezaba.La cosa que cuando la película transitaba el desenlace final, se escucha al gordo gritar por el micrófono "Campana", habíamos llegado.Me acerque por tercera vez a la cabina y les explique a los colectiveros que yo no iba a abandonar de ninguna manera el colectivo hasta que la película no terminase, que no iba a perderme el final, que estaba cansado de los privilegios que tenían los que iban a retiro que siempre podían ver las películas en su totalidad .Trataron de convencerme pero no pudieron, así que la dupla mafiosa, los sicarios de la empresa, no tuvieron más remedio que estacionar por la colectora el coche y esperar que yo vea los últimos minutos de la cinta cinematográfica.Muy bien no la pude ver, ya que entre las puteadas de los otros pasajeros y los bocinazos de los autos y camiones que no entendían que hacíamos ahí estacionados, no pude escuchar mucho.Una vez terminada la película descendí del colectivo, terminando de esa manera mi pesadilla.Ahora bien, me pregunto y les pregunto, ¿somos los pasajeros con destino a Campana de segunda categoría para esta empresa?, ¿tienen los pasajeros a Retiro coronita?, ¿son los pasajeros a Retiros, pasajeros VIP que pueden ver las películas enteras? y por último ¿hasta cuando, hasta cuando?
Campana
Autor: tuqui  386 Lecturas
Yo no doy notas   Mira, te aclaro que no tengo para nada algo en contra tuyo, al contrario, pareces un buen pibe  y ese con la filmadora también, pero yo no hablo con el periodismo, yo no doy notas. Entiendo que sea tu laburo, pero vos compréndeme a mi, tome una decisión tiempo atrás, la cual creo me beneficio, porque mas de una vez los reporteros radiales, gráficos y o televisivos interpretan las cosas a su conveniencia, para después generar las polémicas y los únicos perjudicados somos nosotros, mientras ustedes, aumentan el rating. Debes de entender también, que esta en todo mi derecho no hacer declaraciones a la prensa, y ojo que no soy como otros que dicen que no hablan y después te enteras que con los medios rosarinos no lo hacen, pero viene Telefe y hay que sacarles el micrófono de la boca porque no paran de hablar. No señor, yo no le respondo a nadie, sin hacer diferencias, ni que vengan los de "Intrusos en el espectáculo" o los del "Discovery Chanel", ni a la "BBC" de Londres, en más, ni a la "MTV" le doy notas, a nadie. Porque lo mío es pura convicción. Y no te creas que es una decisión fácil de mantener, pero creo a riesgo de equivocarme, que es lo mejor para mi. Ya van a ser como veintinueve años desde que me decidí, recuerdo que estaba en quinto grado, tenía diez años. En plena clase de Aritmética, mientras todos mis compañeritos escuchaban a la maestra, me decía a mi mismo, "yo no voy a dar notas, yo no voy a hablar con el periodismo". Y a partir de ese mismo instante hasta el día de hoy, me mantengo en mi postura. Paso mucho tiempo desde aquel glorioso día, como unos doce años, si señor, yo tenia unos veintidós mas o menos cuando tuve mi bautismo de fuego, que a esa altura ya pensaba, nunca me ocurriría. Estaba tomando un café con leche en la esquina de Moreno y 27 de Febrero, no había nadie más que el mozo y yo. Era de madrugada, por eso el bar vacío y la calle también cuando de repente se escucha, ¡bumm! Un colectivo se la repone a un Renault 12, los dos volcaron, imagínate el desastre que fue. No va que a los diez minutos cae el bigotudo ese de canal tres y como yo era el único testigo, debido a que en el momento del impacto el mozo estaba en la cocina, me quiso reportear. Me encaro y me pregunto como había sido el choque y yo en uno de los momentos mas tensos de mi vida, en el cual se ponían a prueba todos mis principios y bajo una gran presión, lo mire y le dije "yo no hablo con el periodismo, yo no doy notas". El tipo insistió e insistió, pero yo aunque me moría  por salir en un flash informativo en el programa "De 12 a 14", le dije que no y que no. Y no fue la única vez, la otra oportunidad fue hace dos veranos atrás, calcúlale quince años después de la primera. Yo estaba fuera de ritmo, ya que como no me hacían reportajes no tenía la posibilidad de saber como andaba, pero reaccione en una forma increíble, de la cual me enorgullezco hasta el día de hoy. Viste que para los 15 de Enero de todos los años como es el cambio de temporada turística se hacen esas notas en las terminales de ómnibus donde se le pregunta a la gente a donde va y con quien, bien,  yo estaba sentado para irme solo a La Falda y viene uno de esos noteros y me pregunta a donde iba. Esa vez ni lo mire, pero muy amablemente le conteste, "yo no hablo con el periodismo, yo no doy notas". Recuerdo que el tipo me recago a puteadas y se fue. Se quedo hablando con una vieja que le contaba que se iba a Corrientes a visitar a su cuñada. Y ahora venís vos y deseas saber si hace mucho que espero el trole y si es verdad que últimamente el servicio viene demorado, lamentablemente, yo no hablo con el periodismo, yo no doy notas y ahora si me dejas tranquilo, voy a seguir esperando el trole, porque hace treinta y cinco años atrás decidí, que yo taxi, no tomo.  
Yo no doy notas
Autor: tuqui  449 Lecturas

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