Mi mente retorna borrosa a aquel tiempo.Incluso hoy, donde ya no debo esconderme, siento que me persiguen.Me acorralan en una pared, donde me apuntan con sus dedos, como algo anormal.Ser diferente es malo, todo deben saberlo ya.Mi mente recuerda aquel momento de mi otra vida, donde yo fui muerta.Cada milimetro de mi sangre reclama por sus vidas, las vidas de ellas, durante la eternidad.Y sé que estoy dispuesta a correr el riesgo, tal como aquella vez lo hice.No quise ser normal,No quiero obligada,Y jamás seré sometida. Siento que la cabeza me estallará de tanta informacion.Los recuerdos de mi vida pasada me atormentan.Entonces, finalmente veo la salida a mi mente.Y entonces, con suavidad, mis recuerdos fluyen con suavidad nuevamente.Ahora recuerdo bien aquella época, donde las mujeres eran simbolo del mal.Aquella era donde yo misma viví con mi familia.Aquel lugar donde yo rompí las reglas.Aquel lugar donde, por pensar por mi misma, me mandaron a quemar...En una hoguera. 

Camino por aquella vereda, que hace tres años me recuerda con pasos frecuentes.Junto a su delgada línea de cemento, una hermosa fuente de agua se da lugar.Una fuente que es espejo de mis aventuras y tristezas. Un espejo de mi alma.Y sin embargo, hoy, este espejo se vé distinto. Se vé brillante, se vé real. Me acerco a este y lo observo detenidamente.¿Qué es lo raro en el, que no puedo ver?Mi mente da vueltas, pero al no encontrar la solucion, decido volver a mi hogar.Los misterios son inútiles de resolver, sobretodo si la mente no se encuentra dispuesta.Cuando llega la noche, con su manto bordado en sueños y pesadillas, me abarca por completo la sensacion de que algo olvidé.Escucho semidormida el ruido del agua al correr, y la respuesta viene a mi en un sueño.Yo jamás ví diferente la fuente, sino su forma de ser. Esta siempre en el mismo sitio, pero en constante movimiento. El agua fluye libre y encarcelada. Al fin, descubro lo nuevo, lo diferente.Las contrariedades de mi fuente son iguales que la vida. Compleja, pero simple. Feliz y triste. Buena y mala. La vida es de acuerdo a lo que cada uno elija, de acuerdo al agua que fluya, de acuerdo a la intensidad que se le dé.Finalmente, mi mente descanza con tranquilidad, arrullada por un flujo de agua suave que creo oir desde mi ventana.

Puedo oírlo en el viento, el agua, la tierra.Lo siento correr por mis venas, como mi misma sangre, por mi piel...Escucho un goteo, ¡Aquella lluvia me desconcentra tanto!Siento una ráfaga de aire heladoextiendo mis brazos y se transforman en alas.No siento más el viento... Yo soy el viento.Y puedo volar, aunque no del todo libre aun.Sigo escucho aquella pequeña lluvia intermitente, que no me deja en paz. Mis oídos, claro al fin, me dan una perspectiva nueva, diferente.Creía que era lluvia, pero ahora lo dudo nuevamente.Es un llanto, y muy fuerte...Mis sentimientos se entremezclanpor los llantos del mundo terrenal, y el sonido de mis alas al volar.El viento se vuelve turbulento, pero... ¿No era yo el viento?Nuevamente, las dudas me asaltan, no puedo controlar mi mente.Sobrevuelo el océano, el hielo eterno, y las arenas calurosas.Recorro el mundo entero, buscando aquel llanto,aquel grito desgarrador que me impide ser feliz.¿Porque no puedo ser el viento y solo volar?Mientras lloro nuevamente, vuelo.Vuelo con rapidez y busco con desesperacion aquellas lagrimas que gritan mi nombre.La veo. Aquella mujer llora junto a un cuerpo conocido...El mio...Me reconozco y me siento helada. Cierro mis ojos y me desvanezco.Antes era el viento... Ahora soy quien era nuevamente.La mujer me mira maravillada, con sus ojos húmedos.Yo le sonrío levemente. Despues de tal carrera, estaba agotada.Suavemente la consuelo. Despues de todo, ella se preocupó por mi.No le guardo rencor, ella me dió la vida.Cuando ambas nos tranquilizamos, beso su mejilla.Al fin no oigo más aquel llanto tan doloroso...Mi madre dejó de sufrir por mi...