Y acá estoy, al lado de tu cuerpo, vacío...sin alma. Me pregunto porque la vida es tan injusta? Porque cuando estas feliz te arrebatan lo que mas quieres?  Esperanza? No, no creo en ello, esta vida no tiene sentido si no la vivo contigo, el cielo celeste, perfecto, en el que vivíamos, poco a poco empezó a nublarse.
Ya no recuerdo el día en el que el brillo de tu mirada se fué apagando.. Tu cálida y hermosa sonrisa se fué desvaneciendo, tu amor hacia mi, ya no era el mismo, ya no estaba esa llama como el primer día, te volviste sombrío y oscuro, y a pesar de ello, seguí a tu lado, fiel como un perro a su dueño.  Me estaba ahogando en ese pozo, quería tratar de correr, salir a la superficie pero al mismo tiempo, no quería dejarlo nunca.  Yo sabía que a pesar de los golpes, palabras violentas y amenazas vacías, tú me amabas como yo a ti.
Creo que nadie entendera nuestra forma de amarnos; yo una maldita masoquista porque a pesar de estar quemándome, me gusta de la forma en la que duele, y tú, siempre serás mi héroe, el hombre al cual me entregué en cuerpo y alma.
Somos unos malditos psicópatas, nuestro amor es una hermosa locura, cada momento nos vamos destruyendo más y más, no importa cuantos cuchillos nos clavemos en la espalda, siempre nos protegeremos el uno al otro.