Los recuerdos abundan dentro de los momentos nocturnos que invaden a mis emociones, aunque a veces más bien sean las dudas de muchas cosas que un ser irreal pueda lograr... Encuentro a muchas chicas de Utopía, cuyas almas están vendidas a seres sin colores y sin olor, no tiene chiste ni chispa que las Utopianas busquen algo claro en donde no hay cloro, que busquen una nube donde no hay cielo, o que busquen un lago sin agua ni sol, aunque muchas veces la inspiración nace de una de ellas, cuya imagen se plasma en el lóbulo frontal como postick menta, y no se borra la imagen de esa chica, ¿será que se enamora de ellas? , ¿Será que solo se te pego un la cabeza como una idea amorfa con sentido de luz incandescente? ... no lo sé...pero sé que las membranas del motor del auto del destino sienten algo, fricción, calor, erosión, es algo inhumano que siente, piensa, se expresa y escribe.
Aun sin motivo para escribir, un bolígrafo se llena de tinta para rayar en un cielo sin lienzo, mostrando todo lo que un simple postick mental puede hacer en un rato creativo e inspirado. Tal vez divago con algunas palabras formales en el texto, pero es que lo formal se pierdo cuando el irreal resulta estar dentro de una realidad que no le corresponde, un holograma, un haz de luz, un esfera triangular, un corazón sin latidos, un cuadrado circular... un motivo, es el que se busca plasmar en el postick, un motivo que reanime el motor de un Cadillac, viejo y anticuado, romántico y tal vez poeta o solo aficionado, un aficionado que se oculta entre sus escritos para conseguir encontrar el postick del color, textura, sabor y olor adecuado para su locura.