La violencia causa silencio; causa lágrimas y despertar.
Mi conciencia no puede con ello, no hace más que gemir y llorar.
Con sus armas, bombas y pistolas
pretenden instaurar la paz.
No somos más que carne de picar,
para un ejército grande, con el que poder arrasar.
La inteligencia la emplean para bombas nucleares;
¿dónde está la justicia?
Si con sus armas pretenden un mundo mejor,
no existe mejor arma que nuestros labios.
Levantémonos, y no permitamos
que nos usen como piezas de ajedrez.
La vida no es un tablero, aunque así quieran hacérnoslo saber.
¿Por qué?
¿Por qué solo piensan en sus ideales,
y no en las familias que destrozarán? 
Las personas no les importan nada,
solo su orgullo y su forma de pensar.