Capítulo I

Recuerdo bien esa noche, los copos de hielo caían lentamente, aquellas hermosas auroras boreales estaban presentes, yo fumaba un cigarrillo y así mismo las observaba, estaba a punto de ser media noche lo sabía pues el frio comenzaba a calar en mi huesos, estaba consiente que pronto aparecerías, y vería de nuevo ese rostro tan bello y angelical, tan lleno de luz…

Pasaron varios minutos y mi paciencia comenzaba a agotarse, a decir verdad la paciencia nunca fue una de mis virtudes…Y encendí otro cigarrillo, cerré mis ojos por un momento y al respirar sentí tu aroma, pude sonreír y al abrir los ojos mis pensamientos eran los correctos tú estabas ahí, te acercaste para darme un beso, tomaste mi mano y caminamos por aquel lugar…llegamos a un lugar más escondido y sonreíste con ese toque seductor y malévolo que a decir verdad me volvía loca aún más por ti, tocaste mi rostro y con una voz dulce y delicada me dijiste…

-Te amo – Esas fueron tus palabras para darme un profundo beso, continuamos con caricias y ahora besabas lentamente mi cuello, yo definitivamente me dejaba llevar ante ti...Pero al sentir más tus bruscas caricias me sorprendí, comencé a sentir tus manos como hielo que hacían estremecer mi piel, y me hiciste mirarte fijamente a los ojos, aquellos que eran color esmeralda se tornaron rojos como el fuego y mostrando esos afilados y blancos colmillos que enterraste sádicamente  en mi yugular…Satisfacías tus deseos, saciabas aquellas ganar de beber mi sangre, el verme sufrir hacia que tus ganas de acabar conmigo y matarme fueran más rápidas…

Desperté con mi corazón acelerado, con lágrimas en mis ojos, nuevamente volvía a tener esas horribles pesadillas…Me levante de mi cama y cerré el ventanal de mi habitación, recorrí todo el largo pasillo para llegar a la cocina por un poco de agua...
-No deberías estar tan tarde fuera de tu habitación – Dijo esa voz grave que provenía de aquel chico de ojos verdes, tez aperlada, cabello despeinado color negro, y de estatura media…
-Tuve mis pesadillas…creo que no debería continuar con el tratamiento, esto me está enloqueciendo –tome un poco de agua-
-Sabes que debes continuarlo Sivel…no puedes dejar cuando ya llevas un muy buen resultado, esas pesadillas son por –Hizo un silencio profundo y suspiro – Porque aún no hemos terminado nuestro trabajo
-Pronto lo haremos, en fin tratare de dormir…descansa Markus
 
(Markus)
Temía por esas pesadillas de Sivel, ella se había vuelto tan débil, no quedaba nada de esa cazadora envidiable, que mataba sin temor alguno, podía acabar con lo que Cedrik nuestro jefe nos mandara…Y desde aquel día todo había cambiado todo por culpa de ese maldito ser…Ese que acabo con mi amada Sivel.
(Días después)
(Markus)
Nos dirigíamos a la mansión de Cedrik, mientras yo conducía, Sivel estaba callada mirando por la ventana el largo camino que teníamos que recorrer, todo el viaje ella se mantuvo así, ningún gesto hacia ella, era como si a mi lado fuera un muerto, tan solo podía observar que no era uno de ellos por su lenta respiración y su parpadear constante…
Habíamos llegado a la mansión, bajamos y nos recibieron dos hombres de nuestra organización…Ellos solo veían constantemente a Sivel mientras que ella agachaba su mirada sin mencionar ninguna palabra…Los hombres se detuvieron al llegar con Cedrik, el voltio y sonrió…
-Pensé que no volvería a verlos – Dijo el con cierto tono sarcástico - ¿Está todo bien? – Pregunto el…
-Si lo está – Interrumpí – Estoy fastidiada que todos pregunte si lo estoy…Ya no quiero lastima de nadie…
-Querida hija mía, llevo años en esto y jamás alguien me había decepcionado como tú, sabes quisiera poder matarte ahora mismo –Tomo una copa de vino – Pero no lo hare tengo una misión más para ti y espero que ahora si no me decepciones…
-Ella aún no está lista…Sivel dile que no lo harás tu aun…
-Estoy lista Markus…Y lo hare Cedrik esta vez créeme que no te defraudare
(Sivel)
Aunque mostrara seguridad, dentro de mi tenía miedo, y muchas dudas sobre si yo pudiera estar de nuevo frente a él, si yo tendría el valor de matarlo y hacer lo que él le hizo a mi familia y a mí misma…Pero estaba consiente que tenía que ponerle capítulo final a esa historia y pasara lo que pasara yo me iba a vengar…