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LA NIÑA DE PRIMAVERA

Publicado en Dec 05, 2012

LA NIÑA DE PRIMAVERA

Primavera rebelde que enredas su pelo, entre rosas y aromas, de jazmines y espliego.
alegría temprana, campana de los vientos.
en ti nada esta quieto. En ti todo es proyecto.

Proyectos de cultivos. Proyectos de sembrados.
Proyectos de esa niña, que se ha enamorado,
de aquel galán moreno que la miró a los ojos.
el que sembró su senda de luz y de piropos.

Ella baja los ojos pero sigue mirando,
por si sigue sus pasos, aquel galán buen mozo.
Se hace la remolona y recoge una flor.
Más tarde la deshoja. ¡Está sí, está no!

Tiene magia en las manos y siempre dice sí,
y con disimulo mira, si el galán sigue allí.
El mozo la persigue. Le entregado una rosa.
La niña bonita apurada se sonroja.

Le ha besado la mano. Ahora la niña tiembla,
Ella no sabe por que, pero le da vergüenza.
El mozo se despide con un ¡Hasta mañana!
que a la niña bonita, le ha sonado a campanas.

Ha llegado a su casa y ha guardado la flor,
que será fiel testigo, de su primer amor.
Dormirá eternamente, guardada en aquel libro,
junto con el mechón de pelo de su primer hijo.

Y guardará recuerdos, y guardará suspiros,
y cartas con los besos de aquel amor prohibido.
De promesas fallidas. De aquel amor perdido.
Que fue su único amor, que fue su amor sin destino.

Que se fue lejos, muy lejos y que se llevo su amor.
Su inocencia y su alegría, y que jamás regresó
Vivió para aquel recuerdo, la niña de primavera.
Aquel amor que aún espera. La niña de primavera.

Del hijo que fue su vida. Del hijo que él le dio,
Por ese hijo maravilloso, que siempre fue de los dos.
No importa que él no esté. Le   ha dejado un buen regalo.
Mas grade que aquel amor. Mas grande que el desengaño.

Cuando ella mira a su hijo. Aun recuerda el primer beso.
Ese fue su primer amor, por él pago un alto precio.
Pero han pasados los años. Ahora ya tiene nietos.
Pero ella sigue pensando en el amor de aquel beso.

En aquella tarde de Mayo, debajo de los cerezos.
En aquellas margaritas, que ella siempre deshoja,
obligándolas a decir. Que sí.¡Qué su amor la amaba!

Siguió besando la rosa, que ya seca y sin olor,
le seguía recordando, aquel su primer amor.

Vivió para aquel recuerdo, aquel recuerdo de amor.
Que un día de primavera. Robó su primera flor.
la niña de primavera, sigue esperando a su amor

                                                                                   Antonia Rico.

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