Ciudad de Coca...

Leda decide darse una buena ducha mientras piensa en voz alta...

- Creo que ha llegado el momento... asi que estaré lo más limpia que pueda.

Entra al baño, abre la llave del agua caliente, se quita la ropa y queda completamente desnuda después de haber cerrado herméticamente la puerta de crital opaco que sólo permite ver su perfil pero no los detalles de su cuerpo porque tiene valores cristianos y es de las que piensan que sólo pueden ser vistas desnudas por el único hombre que aman. Es un monumento viviente y, para relajarse mientras se ducha, empieza a cantar a plena voz.

- ¡Sale el sol, nace la luz, me acerco a ti y te doy el beso de la despedida; pero no sufras pensando en mí, abre los ojos y mira... estoy siempre junto a tí, estoy siempre junto a tí, no es lo mío ninguna huída. Que si partí no fue por deseo que partí por necesidad; para ser un viajero, para ser un viajero que de pueblo en pueblo va sembrando gorriones grises, sembrando gorriones grises que hablan de amor y de paz. No llores más por tu hijo que se puso a caminar porque Dios así lo quiso, porque Dios así lo quiso, pero voy a regresar a darte un beso en la frente, a darte un beso en la frente antes del viaje final. Que si partí no fue por deseo que partí por necesidad; para ser un viajero, para ser un viajero que de pueblo en pueblo va, sembrando gorriones grises, sembrando gorriones grises que hablan de amor y de paz!

Termina de ducharse, cierra la llave del agua caliente, coge la bata que cuelga de la parte superior de la puerta de cristal opaco y cubre todo su cuerpo con la bata antes de salir fuera de la bañera. Busca un paquete de cigarrillos. Lo encuentra en la pequeña mesilla de noche, al lado de su computadora. Saca un cigarrillo. Lo enciende. Se acerca a la ventana y sigue hablando para sí misma.

- Más allá de un cristal.. ¿qué hay más allá de un cristal? ¿Posiblemente todo un mundo diferente? Posiblemente. Qizás más allá del cristal de una ventana se encuentre la mejor manera de vivir en paz. ¿Y qué manera puede ser esa? Estoy segura de que sólo sea amando. ¿Buscar gorriones? ¿Buscar gorriones con quiénes hablar? Recuerdo un poema que he leído hace muy pocos días. Lo vi en una cuartilla de papel que alguien me regaló cuando estaba en la Convención de Madrid. Es curioso que viniese firmado con las inciales JJ. ¿Será del mismo Jota Jota que he comenzado a conocer? Sé que me lo entregó un periodista que se hallaba en la Convención. ¿Quizás algún compañero de este tal Jota Jota? Podría ser. Seguro que es el mismo autor. Recuerdo el poema completo.

Y Leda Melo de Carvalho, todavía vestida solamente con su bata y descalza, empieza a recitar mientras sigue mirando hacia la calle desde la ventana que permanece cerrada.

- Siempre llega solitario, siempre marcha más allá... no se sabe de dónde viene, no se sabe a dónde va. Hay en sus ojos un silencio imposible de averiguar. No es tristeza ni es misterio, sólo es un distraído mirar. Camina lento y despacio como si no quisiera dañar las piedras de los caminos, el verde del vegetal... Le observo cuando descubro que vive en el ventanal de la esquina donde bebe y fuma allí sin hablar. Hoy le pregunté la hora... una sonrisa, no más, se ha perfilado en su boca sin poderme contestar. No tiene reloj ni tiempo, no tiene ningún lugar, y esconde en su silencio algún profundo soñar. Su patria es el Universo. No hay frontera en su caminar. Y he podido descubrirle que ama la Eternidad. Me ha regalado un verso antes de irse a andar... un verso que acaba diciendo "El Amor no morirá". Si le encuentras algún día no interrogues su Verdad. Quizás sólo busca gorriones... gorriones con quien hablar.

Después de recitar el poema se queda razonando mientras sigue fumando el cigarrillo.

- No es el trabajo lo que envilece, sino la falta de actitud. Lo dijo Hesíodo y es totalmente cierto. Así que me toca trabajar.

Se anuda del todo la bata, abandona la ventana y se acerca a su computadora, se sienta ante ella, la enciende al instante porque ella es capaz de encender al instante hasta al tipo más duro de la tasca más oscura de algún puerto en alguna ciudad perdida de la Tierra solamente con su precencia. Abre su Diario. Y comienza a escribrir.

- El dedo de Dios nos marca siempre el Camino; pero hay muchos seres humanos que no ven el dedo de Dios y por eso se equivocan de ruta en sus vidas. Me destapó nuevas áreas de mi inteligencia ese tal Jota Jota, y estoy pensando solamente en el Camino, en esa manera tan suya de ser. ¡Quién me iba a decir a mí que sería la elegida! Espero merecer siempre la pena si, a cambio de eso, se vuelca con su entusiasmo juvenil y logra concederme un reportaje único, inédito y tan interesante para valer mil euros en efectivo y otros cuatro mil dólares también en efectivo. Creo que no sabe especular porque no le interesa especular. Simplemente me dijo que lo haría y estoy totalmente convencida de que lo hará. Su poder de convicción es tan alto y tan grande que ha merecido la pena haberle conocido. Dejaré pasar el tiempo porque él me regaló mucho más tiempo del que yo pensaba. Me ha regalado mcuhísimo tiempo para pensar... y pensar bien. La única duda la despejará a tiempo porque estoy segura de que se está vaciando del todo en la búsqueda de razones suficientes con las que tanto ha gozado y sufrido a la vez. Me ha animado a ordenar mis ideas. Nadie hubiera manejado mejor esta tranquilidad que ahora tengo. ¿Qué era yo antes de conocerlo? Solamente una periodista de 24 años de edad, a punto de cumplir los 25, que había alcanzado ya la fama a nivel internacional y mundial. ¿Qué soy yo ahora? No sólo lo que era antes sino, también, una firme seguidora de él porque creo en lo que él me ha prometido. De sus capacidades, en todos los sentidos físicos y psiquicos, no tengo duda alguna. Acerca de sus capacidades o se cree o no se cree pero nunca se puede dudar. Eso es porque nunca deja a nadie indiferente. Y es que le considero diferente. De él se hablará mucho y se escribirá mucho de él. Como escribió un día Santiago Segurola: "Nace un mito, que deja un vacío inmenso, irresistible". Pero estoy pensando que no es que nazca un mito sino que, en el horizonte, se puede observar un contenido simbólico, una manera singular de ver y sentir el amor, una vertiginosa escalada hacia el éxito sin importarle para nada la fama. Yo buscaba, antes de conocerle, la fama... pero ahora busco, como hace él, solamente el éxito. Es algo que he aprendido mirándole de frente a los ojos. Se puede empezar desde cero y no desde diez como hacen muchos y muchas que, al final, han perdido la satisfacción de gozar el camino que existe desde el cero hasta alcanzar el diez. Y es que todos y todas deberiamos empezar a contar hasta diez antes de dedicarnos a escribir. ¿Él es un mito cerrado o es un círculo abierto? Un político dijo un día: "Para alcanzar tus sueños necesitas a tu lado a alguien que crea en ti más que en sí mismo". Doy por más que posible que eso es la Fe. Está en el lugar donde debe estar. Seguro que sí. Dentro del alma. Estoy segura de que la Fe puede ser eso: estar donde se debe estar y no en otro lugar para estar con quien se debe estar y no con otra persona distinta. No importa el lugar sino que importa la persona. Tener tanta Fe en lo que se camina... hasta encontrar a la persona soñada. Carmen quizás dude de que esté vivo y considere que lo más probable es que haya muerto... pero yo sigo pensando que me llegará ese reportaje a tiempo porque creo firmemente que está vivo y que ha encontado a la chica que mueve su Fe. Esa nativa que Carmen llama salvaje debe ser la que está siempre dentro de su corazón y por eso su mirada es tan sincera.

Leda está cansada, cierra su Diario y se deja caer sobre la cama...