Existen muchas maneras de amar...y de relacionarse también...
El amor es una expresión que significa aprecio, valor y que como todas los sentimientos que albergamos, sólo es posible saber que existe en nosotros o en  otros,  mediante  las  acciones, las  palabras,  los  detalles,  el  cuidado  y  el esmero. Por momentos confundimos el amor con la manera en que nos relacionamos con los demás y específicamente con nuestra pareja. Una cosa es el amor que  nos  tenemos  y  otra  muy
Hemos   sido   educados   en   la   idea   del   amor   romántico   como   aquella expresión  que se  atesora,  que  se  valora,  que  se  anhela,  que  se  busca encontrar en todos y cada uno de los encuentros con nuestra pareja.  Pero el romanticismo  es  sólo  una  manera,  pero  no  lo es  todo...  sí  nuestra  pareja siempre todos los días y a todas horas nos diera chocolates, nos cantara una canción,  nos  expresara  su  amor,  trajera  flores  y  estuviera  con  una  gran sonrisa  tratando  de  complacernos  y  escribiendo  poemas  para  nosotros,  tal vez, llegaría un momento de hastío, de saturación y de rechazo. Pero nos han vendido la idea o creencia de que si esto no sucede, la relación está en problemas y conflictos...
Pero  más  allá  de  ese  amor  que  es  una  fase  de  la  relación,  que  incluye  la seducción,    la sorpresa, el  enamoramiento,    la    brillantez de sentir la completud,  en  este  amor  que vamos  teniendo  por  el  otro,  también  se  van denotando  y  perfilando  las  diversas maneras en  las  que  las  parejas  se relacionan.   Pasan los días y se inicia un acoplamiento de gustos, intereses, también  disgustos,  rencillas  y  conflictos,  lo  esperado  en  cualquier  vínculo humano.  Y se van conformando entonces, las formas y maneras juntarse, de ligarse, de tratarse y de juntarse en todos los sentidos desde una plática hasta una relación sexual.
Existen un sinnúmero relaciones amorosas, existen diversos estudios sobre la pareja, en los que se ha podido observar algunos formas comunes, como las siguientes:
Relaciones de dependencia:
Ambos  miembros  de  la  pareja  se  apoyan, se  complementan,  generan proyectos  juntos,  el  problema  estriba  cuando  esta  dependencia  se  torna limitante para concebir acciones individuales, porque todo se encuentra en relación a la pareja. Cuando un miembro de la pareja cambia, crece o desea moverse el otro se descompone, pierde su confianza, se torna suspicaz y la relación obviamente se tensa, y se llena de conflictos...
 
Relaciones sofocantes:
En  este  tipo  de  vinculación  ambos  miembros  de  la  pareja  se  juran  amor eterno, y se hacen promesas de permanecer juntos hasta el resto de sus días, parece  más  bien,  un  tipo de  relación  adolescente. Las  frases  que  se identifican son: ¡ No puedo vivir sin ti ! Siempre te haré feliz. El encontrarse cerca es una experiencia espléndida, en general es una etapa, poco a poco los enamorados  van  cediendo  sus  espacios  y  cada  uno  va  a  su  individualidad. Cuando la relación es asfixiante ambos miembros de la pareja sienten que no pueden respirar, y su experiencia es de encontrarse atrapados. Además de que generalmente existen amenazas recurrentes de ¡ sí me dejas me mato !  El maltrato por supuesto no se deja esperar.
Relaciones de Admiración o de Pedestal.
Se refiere a los vínculos en el que un miembro de la pareja está colocado en una posición de admiración, de adulación, de adoración.  Todo lo que ese amado admirado haga está muy bien, no se le contradice, es un pequeño tirano que maneja la relación a su antojo.  El otro por supuesto necesita de alguien a quien adorar, no de una pareja para compartir.  Sí no valora a la pareja en general él no tiene nada que reconocerse a sí mismo, el valor lo tiene el otro.  La situación no es fácil para ninguno, el adorado tiene la obligación de cumplir un montón de expectativas y el que adora sólo ve en su pareja una imagen idealizada, que de entrada no existe.  Los problemas de comunicación no se dejan esperar.  Sí uno se encuentra arriba y otro abajo seguro no se ven, no se oyen, no se conocen y además no pueden intimar y ser cercanos.  Sus posiciones los alejan cada día más.
Relaciones Amo - Esclavo
Su nombre lo dice todo uno mando y el otro obedece en todos los aspectos, las  posiciones  se  rigidizan  y  ninguno  de  los  miembros  de  la  pareja  logran darse que ambos también dependen uno para ser mandado y otro para dar órdenes,  las  jerarquías  no  se  cambian,  los  roles  tampoco.  En  este  tipo  de relaciones más que la expresión del amor encontramos alegatos por el poder. Generalmente  una  gran  cantidad  de  energía  emocional  se  diluye  en  estas parejas, realmente para el amor queda muy poco espacio. Las batallas son interminables y la paz y cordialidad brilla por su ausencia.
 
Relaciones de Indiferencia:
Cada miembro de la pareja vive su propia vida.  No entablan comunicación, en general se acompañan en su soledad. Comparten un espacio físico juntos pero no una cualidad emocional ni de cercanía, ni de intimidad. Cohabitan en un mismo ambiente, pero existe un gran abandono al vínculo , al amor, al cuidado, es en fin una relación limitante puesto que ni se aman ni dejan de vivir juntos.
Relaciones Estables y Maduras
Cada  miembro  de  la  pareja  es  igual  frente  al  otro,  existen  conflictos,  en ocasiones muy serios, pero la manera de atacarlos es a través del diálogo, de los acuerdos, de la toma de decisiones compartidas.  Ambos miembros de la pareja tiene un peso específico que le es reconocido. Son capaces de contar con proyectos en pareja   y con intereses individuales sin que la relación se encuentre  en  riesgo. Incluso  pueden  intercambiar  roles  y  además,  por momentos juegan algunos papeles de las relaciones descritas anteriormente pero  sin  quedarse  polarizados  en  una  sola. Se  expresan  las  emociones  tal como  las  sienten  sin  temor,  sin  indiferencia,  en  general  comparten  su proyecto  de  vida. No  se  relacionan  con  una  media  naranja  sino  que  se acompañan desde el estar completos para acompañarse en el pasaje del viaje de la vida.  A ninguno le falta nada que su pareja tenga que reivindicar, se encuentran satisfechos consigo mismos y con la persona que son, por tanto pueden darse sin temor a la fusión.  La relación se refresca con frecuencia...
Como puede darse cuenta el amor y la relación en pareja no son lo mismo. Puedo  amar  a  alguien  intensamente  pero  la  relación  no  me  es  del  todo satisfactoria, o bien, puedo no querer tanto a mi pareja, pero es una relación que  es  constructiva  y  también  conveniente. Lo  que  deseo  subrayar,  es  la importancia de conocer :
¿ Cuáles son mis formas de amar ? Cuando amo a alguien cómo me relaciono ?
Esas maneras de relacionarme y de amar son constructivas o destructivas?
Entrar      en    contacto     con     mis     propias       maneras       y    formas       de    amar     y relacionarme,  es uno de los caminos para enderezar, terminar, poner un alto, y tal vez, contar con una relación gratificante para ambas partes.
Me encantaría que me escribiera y diera su opinión sobre la columna ... Gracias por leerme, mi misión e intención es la calidad de vida emocional... 
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