Cuando me arrepiento
 
Puede que fuera el clima tan cálido de aquella noche adolescente. Puede que ni siquiera hubiera razón de peso aparente. Puede que el sábado anterior hubiera tenido consecuencias en el presente. Sonaba música de príncipes azules pero no parecía importarme. Era más bien un momento ideal para ver por fin que ella era la única salida inteligente, mientras otros caminos no eran más que atajos que caminan hacia la nada. No lo sé. Pero sí sé que las flores, esta en especial, me estaba volviendo un poco más demente cada día, cada noche, cada amanecer despierto. Qué cierto es el amor cuando me arrepiento.
 
Qué alevosía traicionar la fauna y la flora sin antes decirte, que me he equivocado. La verdad. Ahora que ya sabes lo que es cierto, me despierto, vierto agua en aceite y se mezcla mientras le advierto al óleo que no haga malas compañías. Qué me dirías si supieras la verdad, dichosa suerte. Solo quiero verte. No me digas que no lo pasas bien conmigo, aunque lo que te digo te duele.
 
Mi chica. Nunca he estado tan en duda entre el bien y el mal. Miento. Conozco bien el camino de lo aprobado y de lo suspendido, mas presiento que he decidido tan mal como para sincerarme. Quitarme de encima el peso. O bien no tan en exceso, quitarme la otra carga que supone regar dos flores a la vez de forma atenta y delicada, con un ritmo lento.
 
Karma. Sí, tu ríete. Insiste en la idea y mañana estarás triste. Qué situación más fea y preciosa al instante. Delante de mí veo al juez corrigiendo el mal provecho de mi talante.
 
Yo soy ese.
 
Weird Fishes Arpeggi.  La primera canción del año. Antaño solía soñar con mujeres a mi lado sentadas en escaño. Es extraño que adopte composturas tan opuestas, si restas que me gustan tanto las dos como tú el calor que me prestas. Crestas, llanuras. Llano. Crestas, llanuras. Llano. Derrente una llanura y después una montaña. Tras ella aguarda otro collado. Claro que pongo mal a mi único enemigo. Ella es más de lo que siempre he querido, mas decido alejarme tal vez sin propósitos para ver lo que se siente uno tan creído. Yo soy ese.
 
Acábate ya. No has causado más que problemas.