Que grande que eres abuelo,
eres gigante a mi lado,
yo te miro para arriba,
con ojos hipnotizados.
Cuando yo sea como vos...
¿A mi lado aún estarás,
podremos jugar ajedrez,
o a las damas chinas quizás?
Miro fijo tus ojitos,
tu cabello gris, temblando
mi mano los acaricia
para poder despeinarlos...
Mi mano, tan pequeñita,
la tomas entre tus manos,
y entonces todo es sencillo,
entonces todo es verano.
Miras mi rostro pequeño,
curiosidad, yo te causo,
me haces cosquillas y besas,
abuelo...te quiero tanto.
Por eso es que soy tan feliz,
por que eres algo mágico...
si me tocas o me abrazas,
no hay tristezas, ni fracasos.
Ya llega pronto diciembre,
voy a ir volando a tus brazos,
para mí no sos un viejo,
para mí eres lo máximo,
y los surcos de tu rostro,
son experiencias del campo,
como un libro las guardaste
para no irlas olvidando.
Estás enfermo, yo lo sé,
desde acá, a mis tres años,
por eso toco tus fotos,
y a papá lo jodo tanto,
con que las pase en la compu,
y yo con besos las pago...
Y aunque ya no me puedas ver,
por tus glaucos ojos claros,
ni escucharme, mi abuelito,
por que yo, aún no hablo.
Con mi sonrisa te grito,
te amo, abuelo, te amo.