"Informe"
Publicado en Oct 16, 2010
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¿Qué es un espíritu cultivado?
Es el que puede mirar las cosas desde muchos puntos de vista.
Henry F. Amiel


Íbamos caminando, eran como las tres de la mañana, caminando por el borde de la carretera, en subida por el borde del cerro, ningún auto se iba a detener, además no pasaban muchos y los que pasaban ni siquiera se percataban de que íbamos caminando por el borde.
-Mira, guatón, ahí viene un hueón sin luces.
.Viene súper lento.
¡Hácele de’o poh guatón ooh!
La camioneta paso lentamente delante de nosotros, las luces, como dije, iban apagadas, siguió su camino, con el guatón la seguimos con la vista, llegó a la curva pero no dobló, siguió derecho, se subió al bandejón y cayo de costado hacia el canal, que corre junto a la subida, la camioneta quedo metida en el canal, con el costado del conductor levantado, por lo que al tratar de salir, el conductor sólo lograba mover la rueda delantera de la camioneta, hacia delante y hacia atrás.
- ¿Que onda el loco?
- No se, quiere sacar la camioneta, imposible men.
- ¿A lo mejor se pego en la cabeza y no cacha que onda?
Seguimos subiendo, ahora hacia la camioneta, la cual aún movía su rueda hacia delante y hacia atrás.

Jorge y yo… estábamos en un mirador, ese que queda después de la segunda curva, hay un camino escondido hacia la derecha, por ahí subes y llegas a un plano, lindo, por sobre de la carretera, se ve el lado norte de la ciudad, toda, toda, ahí estábamos Jorge y yo, tomándonos algo.
- ¡Mira, Jorge, mira!
- ¿Qué cosa, hueona?
- Allí abajo.
- ¿Qué poh?
- Allá, unos tipos subiendo por la carretera.
- ¿Dónde? ¡Estás loca!, ya te curaste, ya.
- No, mira, en serio y haciendo dedo, jajajaja.
- Los vi, está que les para esa camioneta, jajajaja.
- Y va con las luces apagadas, el muy hueveta.
- Uuuu, mira, cacha, se subió al bandejón, se cayó al canal.
- Aaah, no. Seguro, seguro que hizo cagar la camioneta.
La camioneta había sobrepasado el bandejón y había quedado atrapada en el canal de desagüe, los caminantes fueron hacia la camioneta, la cual intentaba salir, pero sólo movía la rueda delantera.

Esa noche como iba ya tarde, tome la carretera que va por detrás del cerro, para llegar más rápido a mi casa, voy tranquilamente, cuando en la segunda curva me encuentro con dos jóvenes que transitaban por el medio de la calle, haciéndome perder el control del vehiculo, subiéndome al bandejón y terminando atrapado en un canal que corre por el costado de la carretera, al no poder salir y no saber las intenciones de los jóvenes lo cuales se me acercaron al vehiculo, opte por llamar a asistencia.
- ¿Alo, Gustavo, gustaviito? Alo, alo, alo.
- ¿Javier, eres tú? ¿Que onda primo?, tan tarde, estaba acostado.
- ¡Tuve un azidente hueón!
- ¿Qué pasó? ¿Estas bien? ¡Tai curao, hueón!
- Tome pocazo hueón. PO-CA-ZO, ¿Me escuchaste? PO-CA-ZO
- Ya hueón, si te escuche, pero dime, ¿Dónde estas?
- Estoy en la subida de la Pirámide, no puedo mover está huea.
- Quédate ahí, no te muevas.
- Mucha gracias, primito, mucha mucha gracia.
- Ya ahueonao, quédate ahí, chao
- PO-CA-ZO.

Cuando llegamos a la camioneta, aún el chofer intentaba moverla, obviamente sin resultados, nos acercamos con el guatón.
- ¡Alo!, amigo, ¿Estas bien?
- Hey, amigo ¿Todo bien?
El chofer atino solamente a apagar la camioneta y cruzar los brazos por sobre el manubrio y apoyo su cabeza.
- Hey, por lo menos llame a alguien, para que te ayuden.
- Ya guatón, sería, ta’ curao el loco, vamos.
Nosotros después de eso, nos dispusimos a continuar nuestro camino.

Los dos tipos llegaron al costado de la camioneta, el chofer continuaba en el interior de la camioneta y todavía intentaba sacar la camioneta sin resultados, algo le dijeron, pero el tipo ni siquiera se digno a contestar, después siguieron su camino.
-¿Qué onda el loco? Se fue derechito al canal, ni freno ni na’.
- No cacho, pa’mi que va cura’o
- Mira, recién apago el motor, la voladita del loco.
- ¿Y los minos que iban caminando?
- Ahí van, algo le dijeron, pero caminaron nomás.
-El otro todavía ni se baja de la camioneta.
- Está, re borracho, yo cacho.
-¡Ay! Conmigo…jajajajajaja
- Loca, jajajajaja

Javier siempre se mete en estos problemas, más encima, llama tarde el hueón, ojala encuentre a mi tío.
- Alo, ¿Tío?, disculpa la hora, habla Gustavo.
- Hola hijo, no te preocupes, ¿Paso algo?
- Pucha tío, me acaba de llamar Javier, tuvo un accidente, pero está bien, está en la subida de la Pirámide.
- Ya, no te preocupes, ahora mismo mando a alguien para allá.
- Gracias tío, te pasaste.
- Saludos a mi hermana
- De su parte tío, ¿Cuándo va a venir?
- El domingo puede ser que aparezca a almorzar, dile a mi hermana que haga una cazuelita de gallina.
- Ya tío, lo esperamos el domingo.
- Nos vemos sobrino, adiós
- adiós tío y gracias.


No era tan tarde, aún estaba en el precinto cuando sonó mi celular, era mi sobrino Gustavo, me contó del accidente y llamé en seguida a Ortega.
- Alo, Ortega.
- Dígame mi subcomisario.
- Dirígete a la subida de la Pirámide, hubo un accidente, está mi sobrino Javier, sácalo de ahí, antes de que lleguen los pacos. ¿Entendiste?
- Si mi suhcomisario, a su orden mi suhcomisario.

Justo cuando me llamaron por lo del sobrino del comisario Gómez, andaba en el sector, así que le sirvió al huevoncito que yo anduviera por ahí.
- Alo ¿Ortega?
- ¿Quién habla?
- El subcomisario
- ¿Cuál?
- El subcomisario Gómez
- ¿El de bigotito?
- Ese es Gonzáles, pues hombre, ¡Enchúfese!
- Disculpe, dígame subcomisario ¿En que le puedo ayudarle?
- Mira recién en la subida de la Pirámide, hubo un accidente, está mi sobrino, sáquelo de ahí y lo lleva para la casa, se hace cargo de la camioneta y lo que haya pasado, eso.
- Yo me encargo subcomisario, no se preocupe. Adiós.
- Adiós.
Como andaba cerca, llame a Rojas y a Marambio para que nos encontramos en el inicio de la subida y llegar al sitio del suceso los tres juntos, en menos de cinco minutos estábamos subiendo, al llegar el sobrinito estaba aún en el interior del vehiculo. Llegamos y nos estacionamos sobre el bandejón y prendimos las balizas.

No habíamos avanzado cien metros cuando de la nada aparecieron los ratis con balizas y todo el atado, acto seguido desde el cerro la chorrera de autos, bajaron y se acomodaron en la subida, mientras bajaban, nos acercamos a una camioneta con dos tipos.
-Acá la hacemos guatón, busca una camioneta.
- Mira allá hay una con dos tipos, parece que se van.
- Ya apúrate entonces y pon car’e cansa’o
- Buenas noches amigos, nos pueden llevar hasta arriba.
- Si no fuera mucha la molestia.
- Nos vamos atrás, piolita.
- Vamos hasta l mirador de arriba no más. ¿Les sirve?
- Si, bacán, gracias. Súbete guatón.

Nos bajamos de los vehículos y nos acercamos a la camioneta accidentada, bajamos al conductor, en evidente estado de ebriedad, en eso estábamos cuando empezaron a aparecer aproximadamente veinte vehículos, desde un mirador clandestino en el cerro la Pirámide, dentro de los vehículos se divisaban solamente personas de genero masculino.
- Mira Rojas son puros mariconcitos.
- Mira los hueones maracos.
- ¿Ese de ahí no es tu hijo, marambio?
- No hablís huevadas Rojas, ¿Querí?
- Ya déjense de leseras, metan a ese hueón al auto, Marambio te quedas, espera a la grúa, si llegan los pacos, que no hueveen. Nos vemos mañana.
- Chao Marambio.
- De ahí conversamos Rojas
- Ya, córtenla, parecen marido y mujer los hueones, y vó Rojas, lleva a ese hueón pa’ su casa.
- Si, señor.
- Cambio y fuera. Nos vemos mañana.
- Nos vemos.

Estábamos aplicando un güirito cuando aparecen tres autos y se suben al bandejón.
- Mira, parece que el hueón llamo a la asistencia. ¿Nos vamos?
- No, pa’qué, ¡No pasa ná!
- Hey, prendieron balizas, ¡Son ratis!, vamonos mejor., Jorge.
- No vaya a estar tu viejo por ahí
- Si, ya súbete, nos vamos.
- Si, mejor.
Bajamos y nos estacionamos a un costado de la carretera, junto los demás vehículos que estaban en el mirador, para ver en realidad que hacíamos.
- ¿Qué hacemos?
- Pucha, vamos al otro mirador, terminamos el güiro y vemos que hacemos. ¿Te parece?
- Si, me parece, ¿Vamos?
- Vam..
- Buenas noches, disculpen, ¿Nos pueden llevar?
- Nos vamos atrás, si es que no hay drama.
- Nosotros vamos hasta el mirador de más arriba. ¿Les sirve?
- Si, por supuesto, vale muchas gracias.

Nos bajamos en la entrada del mirador, Nos pusimos a caminar hacia la avenida principal, de ahí tomamos una micro para la casa, había sido una noche muy larga y muy loca.
- Nos dejas por acá, porfa.
- Vale, gracias
- Vale.
- La voladita guatón
- ¿De donde habrá salido tanto rati, hueón?
- ¿Y todo el hueonaje que apareció del cerro.?
- Rara la huea, pero bueno hay cosas que nunca sabremos.
- ¿Cómo que no?, habría que investigar.
- ¡Ay! Guatón, quien se va a dar la paja de investigar, hueón, por favor. ¿Quién?

Fin de informe de causa Nº 372143 de fecha 27-10-45 a las 03:15 a.m., se niega la petición de seguro al señor Javier Gómez Valdés, C.I. Nº 95.435.279-6, nacido el 08/09/26, causa de rechazo, notorio estado de ebriedad. Se le sube la prima del seguro en un 25% quedando esta en $295, semestrales, pagaderos en dólares chilenos. Se le notifica además la revocación de su permiso de transito por seis meses a contar de la fecha del accidente.
NOTIFIQUESE Y ARCHIVESE.

Ernesto de Pablo Gonsaya Melidoteno
Investigador de Seguros
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Descripción

Informe

Palabras Clave: Puntos de vista informe cuento

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Ficcin


Creditos: Alonso Jorquera Garca


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