Horas presas de este crudo anonimato,
pluma férrea que maldice la amargura
que construyen los relatos.
La mentira se desliza condenando en
titulares y la fe se desmorona
o se destruye si se cumplen los
presagios.
Veo desinformación, monopolio predador
que va rengueando y las ovejas a merced
de timoratos o hábiles titiriteros sin
poder argumentar,
masticando el producido del maltrato.
Horas tensas de ensoñada absolución,
estrategias naufragando por las venas
de otras sangres tan presentes,
rebosantes en un mundo que aun
espera la verdad.
Caen mantos protegiendo impunidad,
yabranadas de poder,
fin de fiesta, luz desvela por otra
resurrección.
Gritos, voces, golosinas de colores,
un sabor de frutas frescas,
agua pura desafiando
el calor de la opresión.
Las primicias, privilegios,
la impaciencia del motín.
Horas crudas de un dolor
en cuentagotas mientras
crece y se diploma otro país.