Entre Sombras y Reflejos de Arco Iris
    El hombre como lo hacía usualmente desde hace un tiempo, despertaba por las noches deambulaba por la casa, en penumbras solo algunas lámparas de escasa luz que alumbraban los corredores de la enorme vivienda, allí estaba tomando conciencia de él mismo. Y ahí estaba  queriendo perpetuar el tiempo, enfrascado en sus recuerdos escuchando música, un tema que le  refleja el amor perdido pero al mismo tiempo lo que espera, claro desde su interior muy interno ya que esta desolado, vencido y lo que no se da cuenta que tiene en su poder el cambiar ese estado agonizante que siente, pero no lo ve, no sabe como salir de ese aljibe que se a metido, se dejo llevar por esa oscuridad de aquel pozo y por más que grite nadie lo escuchara solo su propio eco, el mismo se lo impuso así metiéndose tan adentro que olvido el ¡allá! el fuera, donde esta el mundo, la vida.
   Ni si quiera todo lo que posee lo llena, buscó su soledad para encontrarse, pero no era esa la solución y ahora entre las tinieblas no puede vislumbrar el camino de regreso a su propia vida.
   Los golpes recibidos lo han convertido en una persona insensible, mal humorada y bajos esos golpes se justifica en lo que se a convertido, se esconde de él mismo sin asumir los nuevos desafíos, le teme a los cambios, sin embargo ahí  esta gritando con su sonido mudo, desde aquel pozo que él mismo se ha enquistado.
   Cree que todo esta en su contra, se siente atacado en todo y solo lo que hay en su contra son sus propios pensamientos lo cual los entretejió en una maraña de negatividades, sin permitir que entre ni un solo dejo de luz. Encerrado en su propio cuerpo, victima de su mente, de esa mente que lo encarcela, que oprime por su propio pensamiento, le da espasmos virtuales de placer en un ejercicio retórico con violencia, esa mente que no quiere que la pongan a trabajar, que no quiere moverse hacia un umbral mas placentero del conocimiento, de la interacción con otras personas, al intercambio de opiniones, a la expansión de horizontes multifuncionales, una mente que únicamente traza una línea entre lo elemental y el espacio cósmico que no lo deja salir de esa zona de confort, que él mismo se impuesto, que no se atreve a pensar mas allá de sus propios paradigmas.
   La vida lo ha llamado a ser y hacer algo dentro de su existencia, tomando contacto con ese llamado de aviso  que su cuerpo le ha dado, si su sangre se ha infectado de ese vil virus, que nadie quiere nombrar, que hace sentir a las personas diminutas e insignificantes, compulsado al enfrentamiento hacia la marginación a una población que desgarra, que castiga por sus criticas.
   Esta haciendo catarsis con todo su descriptivo discurso de la propia voz interior donde se abruma con malos pensamientos... Se pregunta:
¿Cómo es que esto, ha podido pasar?
¿Cómo es posible que sienta este enorme desconsuelo?
¿Por qué lo tengo que vivir, por qué a mí?
   y al mismo tiempo, se pregunta:
¿Por qué no a mí?
   Para este momento sus lagrimas han caído sobre su rostro, el temor lo ha superado.
Está en este mundo pero sus sentidos no lo palpan, todo es abstracto se está dejando llevar por el pantano de la tristeza y un sentimiento de agonía como si estuviera muerto en vida. Sin permitirse ver que siempre hay dos caminos para tomar en las decisiones de la vida.
 
    Frente a esta situación deprimido y angustiado, una voz de su inconciente le habla, diciendo que puede  haber una salida de ese monstruo que lo acecha,  que busque en sus íntimos recuerdos de sus enseñanzas, es solo traer ese archivo a su memoria donde le enseñaron que cuando  tiren limones, haga limonada, es  buscar la forma de sacarle el mejor partido a la situación, mirando que por mas mal que sea una experiencia siempre hay una enseñanza detrás de esa experiencia.
   De pronto se extrémese porque advierte  una sombra en esa habitación a media luz, una voz como muy alejada  de su naturaleza le esta hablando. Entra en pánico sin entender lo que esta sucediendo, su rostro transmutado de espanto y casi sin habla  pregunta:
 -    ¿Quién es usted y que hace en mi casa?
 -    Yo... - dijo con una voz muy pacífica.
 -    Soy yo, la que estabas buscando.
 -    Yo no buscaba a nadie - expreso tartamudeando.
 -    Si me buscaba, no con tu mente pero si con tu ser.
 -    ¿Dime acaso no deambulas todas las noche en busca de los porqué de los sucesos?
   Permaneció en silencio, como que ya nada le asombraba aquella presencia, solo con su pensamiento puesto en esa pregunta y sin encontrar repuesta contesto:
•-         ¿Y tú sabes el porqué?
•-         Es lo que elegiste vivir en este mundo.
•-         No entiendo, lo que decís
•-         Has buscado las repuestas equivocadas, ve a tu esencia, tu corazón te guiara.
•-         Creo que ya no corre sangre en el.
•-         Habré tu mente, yo te guiare para encontrar el camino.
   Sentado en el sillón, todavía en silencio en su mente, sonando la música de los recuerdos, siente como que las horas han pasado, convencido que ya iba amanecer, da un salto y en dos pasos mira por la ventana mirando por un segundo y en ese instante se da cuenta que solo ha pasado a penas unos minutos desde que se puso a deambular por la  vivienda.
   Ya no era aquel hombre que solo estaba en el fondo del pantano, había experimentado una señal, que no sabia si era real o solo un sueño.
   Pero si estaba seguro que sentía una nueva sensación, de a ver estado en la oscuridad, una hendidura había logrado que pasara un rayo de luz dejando un arco iris en su alma.
     
Autor: José Manuel Palet
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