bien podría decirse que era el señor más estúpido que haya conocido. sí, era todo un señor, pero no podía con su cara de estúpido y/o de imbécil; es difícil distinguirlos en estos días. tiene unas manos sólidas y rasposas, como de tipo que trabaja en la construcción de edificios, y quizá sea porque trabaja en la construcción de edificios. no le tengo miedo. un suicida no le tiene miedo a nada.
después de que él negó que ella saliera, pues no pude sino acelerar la camioneta e irme. mientras manejaba sentía coraje, pero también veía la luna y esa ambivalencia hizo despertar un sentimiento extraño en mí. también es cierto que mientras más complicadas tenga las cosas, más se me antojan. por el momento sólo sé que las cosas no se quedarán así. incluso puedo casarme con su hija, solamente para joderlo.

todo se ha quedado en situación inerte. eso no me agrada. me agrada el movimiento como principio de existencia del sér. creo que la existencia precede a la esencia, pero no sólo eso, creo que el movimiento precede a la esencia. existencia-movimiento-fenomenología-esencia. quizá después explique bien la teoria; ahora sólo quiero decir que el movimiento se ha truncado. me he "quedado inmóvil al borde del camino" como dice Benedetti. en todo caso, quisiera "estar al lado del camino fumando el humo mientras todo pasa" como dice Fito, pero lo cierto es que nada pasa, todo se queda conmigo, se expande en mis entrañas y sé que algún día el mundo explotará dentro de mí, pero mientras eso pasa, que el mundo se detenga en mi cuerpo, duele mucho.