El sonido de ese bandoneon de repente me recuerda donde estoy, lo que soy,lo que he sido, lo que deje de ser y lo que sigo siendo.
Te necesitaba, vaya si te necesitaba!  El corazon no miente, y afortunadamente me hiciste bien.  Trato de engañar a la razon, una lucha constante en mi..  ires y venires tratando de convencerme de que no pasara lo inevitable, de que esta vez no sera igual. Juro no involucrarme, pero tambaleo …y no puedo vencerla, ataca con dardos llenos de dolor, de recuerdos, de angustias, de desesperacion que no quisiera volver a sentir nunca.  Mi Buenos Aires querido, y tantas veces odiado vuelve a jugar conmigo, me da vueltas, y ese tango, ese tango que acompaño tantas noches de dolor inaguantable llega a mi nuevamente como un presagio.  Amargura,  futura soledad y dolor inconsolable. Me gusta enredarme en las notas de ese bandoneon, y jugar con ellas,  asi como me gusta enredarme en lo  que al final termina siendo una maraña imposible de descifrar.  Como te odio tango! Y como te amo cuando terminas siendo el unico compa;ero. Circulo vicioso del cual no podemos salir.
Finalmente logro callar la conciencia y dormir , caigo en un letargo que deseo no termine nunca. Me envuelven tus brazos y no quisiera salir de alli jamas.  Esa tibieza aplaca el invierno crudo que ya llega. Me hace sentir segura y protegida. 
 
Diankita